Era un trabajo mas

Un robo, un matrimonio que no debia estar ahi.

Era un trabajo mas, como tantos otros que habían hecho, su vida siempre transcurrió por los bajos fondos, y en esa escuela hay pocas oportunidades. En aquella ocasión habían elegido una casa de una zona residencial que no tenia alarma visible, así que se colaron por detrás y forzando la cerradura se dedicaron a lo que mejor sabían hacer.

"Gero" el cabecilla, los guiaba, aparte de su mala leche tenia alma de líder y los demás le seguían ciegamente, nunca los dejaba tirados y era legal, sus colegas, eran estudiantes de su misma universidad, y aunque en alguna ocasión, debido a estancias en hoteles carcelarios, se separaban, sus andanzas siempre les llevaban a juntarse.

Andaban en su tarea, cuando oyeron abrirse la puerta del garaje, y allí se dirigieron los cuatro. Cuando los dueños entraron por la puerta se encontraron atrapados, encañonados por dos pistolas.

"al suelo y sin rechistar" dijo gero

El miedo les hizo tirarse al suelo

"llévense lo que quieran pero no nos hagan daño" dijo el marido

El matrimonio rondaba la cuarentena, y aquello aunque inesperado ilumino la sonrisa de todos que vieron una oportunidad para pasarlo bien aparte del robo.

"traédmelo" dijo gero

Moro y Negro lo cogieron de los brazos llevándolo hasta donde estaba su jefe y nene se sentó encima del culo de ella inmovilizándola, después le agarro del pelo mientras la apuntaba con una pistola. Ella soltó un grito que hizo que el marido intentara soltarse en el momento que gero le propino dos puñetazos en el estomago que lo dejo sin aire.

"creo que sabes quien manda ¿No?"

"como te llamas"

"luis"

"bien ahora desnúdate cabrón"

Luis nunca se había visto en esa situación, era un hombre normal, con un trabajo normal y solo la suerte le había dado esa casa y esa mujer, así que bajo la mirada y empezó a despojarse de la ropa, cuando acabo le ataron los pies y las manos con cinta americana.

"y a esa jaca que tienes la contentas con esa mierda de polla que tienes?"

Todos rieron la ocurrencia.

"por favor no fff..." la cinta americana también tapo su boca y lo tumbaron en el suelo.

"estas cómodo nene?"

"buff, no veas el culazo tan blandito que tiene"

"a ver señora, de pie, y por su bien espero que no nos de problemas porque le aseguro que le pasara lo mismo que a su marido"

Gero se acerco a ella y la miro de arriba abajo, ella llevaba una camisa blanca con un pañuelo y una falda por las rodillas.

"dame el pañuelo"

Se lo quito y se lo dio, el lo plegó en una tira, se puso detrás de ella y le vendo los ojos.

"dime, quien manda aquí"

"por favor, no nos hagan nada"

Gero le soltó un guantazo

"quien?"

"usted" dijo ella entre sollozos

"como te llamas"

"luisa"

"Edad"

"35"

"y el pichacorta que esta en el suelo"

"41"

"quítate el sujetador sin quitarte la camisa, como lo hacéis las mujeres decentes"

Luisa se quedo quieta, y gero le dio otro guantazo, dio media vuelta y se dirigió a luis y le propino un puñetazo en el estomago.

"vas a colaborar o sigo"

Ella se saco la camisa de la falda, desabrocho el sujetador y lo saco por delante, y volvió a meterse la camisa en la falda.

"Muy bien, ves, si cuando quieres lo haces muy bien, dime, cuantas veces a la semana te folla este picha floja?"

"una o dos" dijo ella

"que desperdicio de mujer, dime que llevas debajo de esa falda, bragas, tanga, medias? "

"solo bragas"

"quítatelas"

Esta vez no dudo y metió las manos sin levantas mucho la falda, y con un movimiento rápido se las bajo dejándolas caer, y se las dio. Gero las cojió y se las puso a luis en la boca diciéndole que así tendría a su mujer mas cerca.

"Bien nena, es viernes, y no quiero sorpresas, esperáis a alguien? Y te aviso como venga alguien que no esperemos nos lo cargamos sin mas, así que piensa lo que me vas a decir"

"Hoy no"

"y el fin de semana?"

"mi hermano viene a comer"

"solo?"

Luisa le cambio la cara, había jugado con que eso les ahuyentaría y ahora no sabia que decir.

"Mira nena, me vas a decir exactamente quien viene, y si por un casual no me dices la verdad, vosotros y los que vengan lo pasareis muy mal"

"el , su mujer y las niñas"

Gero tomo uno de sus pechos sopesándolo, después el otro, su otra mano bajo hasta el culo mareándolo por encima de la falda

"y tu cuñada esta tan buena como tu?"

Mientras mantenía silencio por la incomoda pregunta, la mano de delante paso a desabrochar unos cuantos botones de la camisa, y se deslizo dentro de ella, empezando a jugar con sus pezones, sus manos ásperas apretaban sin pudor sus pechos.

"sígueme" dijo amarrándola del pezón con fuerza, ella andaba para mantener lejos el dolo que le producía el tiron, pero al ir con los ojos vendados no se atrevía a ir muy deprisa así que cuando paro el pezón estaba muy dolorido. Entonces tiro hacia abajo para que se arrodillara.

"ahora busca la pollita de tu marido y mámasela hasta que se corra, tenéis cinco minutos, si en ese tiempo no veo leche se la corto."

Luisa no se demoro a tientas encontró la pierna y subió hasta encontrarla y se la metió en la boca, masajeándola con la mano.

"sin manos, bonita, trabaja solo con la boca"

Al principio luis no reaccionaba y de los nervios se le escapo varias veces de la boca provocando las risas de tan peligroso grupo, el lenguaje vulgar tampoco ayudaba a quien se veía en una situación así por primera vez en su vida. Poco a poco el pene de luis fue adquiriendo dureza y casi de pronto exploto en la boca de luisa que se encontró con semen dentro de su boca también por primera vez, provocándole arcadas.

Gero y los demás rieron con ganas de la escena, mientras luisa tosía y el pene de luis embadurnado de semen empequeñecía de nuevo. Mientras aun tosía la agarro del pelo y la arrastro hasta ponerla a horcadas en la cabeza de luis.

"ahora maricon te voy a quitar las bragas y lo único que quiero que saques de tu boca es la lengua para comerle el coño a tu mujer, espero por tu bien que le devuelvas lo mismo que te ha dado ella, así que esmérate capullo"

Le quito las bragas y levanto la falda. El coño de luisa estaba a unos centímetros de su boca, ella se movió lo suficiente para que empezara, y gero dejo caer la falda tapando la cara de luis. La respiración de luisa y el ruido de la comida de coño fueron el acompañamiento perfecto para que los cuatro fueran desnudándose, todos estaban excitados con el espectáculo y pensaban plasmarlo con sus juguetes. No era la primera vez que jugaban con sus victimas y cada vez lo hacían mejor.

La lengua de luis empezaba hacer su efecto. La boca de luisa empezaba a abrirse buscando aire y su cuerpo se agitaba, moro y negro se acercaron, abrieron los botones de la blusa y con delicadeza posaron sus leguas en cada uno de los pezones que ya empezaban a mostrarse en todo su esplendor, aquello pillo desprevenida a luisa que soltó el primer gemido y fueron continuos cuando nene apoyando su cara en la barriga de luis levanto su falda y empezó a lamerle y mordisquearle las nalgas.

"contéstame nena, te gusta" dijo gero susurrándolo al oído

Su marido estaba atado y había sido golpeado, ella forzada , y sin embargo su cuerpo se estaba descontrolando. Y llego lo inevitable, un latigazo de placer la recorrió haciendo que su sexo se estremeciera en la boca de luis y sus gemidos ya descontrolados inundaban la casa.

"creo que esta putita necesita mas, seguid"

Las lenguas de los pechos fueron sustituidas por bocas que devoraban sus pechos mientras luis seguía haciendo su trabajo en el húmedo coño de su mujer, tenia que esforzarse en que su mujer no fuera golpeada como lo había sido el , y un segundo orgasmo de luisa inundo su boca con los jugos del placer.

Todas las bocas se retiraron y luisa quedo exhausta, su coño mojado descansaba sobre la boca de su marido, gero se puso delante de ella y le pidió abrir la boca, y sin preámbulos le metió su polla.

"esta es de verdad no como la del marica de tu marido, así que sácale lustre, nena"

Le dieron arcadas pero las contuvo como pudo y empezó a mamarla, aquel pene no era lo que conocía, la de su marido le cabía entera en la boca, pero esta se la llenaba e intuía que había mas fuera ya que sus labios no tocaban a gero. Tenia un sabor fuerte, acostumbrada a la limpieza, aquella precisamente no brillaba en eso, tenia un sabor acido y fuerte.

"joder luis, no veas como la mama tu señora, venga, métela mas adentro que te cabe"

Luisa puso las manos sobre gero para medir la distancia y fue introduciendo mas pero llegaba un momento que le daban arcadas y retrocedía. Luis, desde debajo de la falda oía a su mujer como chupaba y vio también como empezaba a rozar su sexo con su boca, no podía creer que su mujer estuviera disfrutando, pero cuando al rato volvía a sentir otra ración de jugos en su cara, no le quedo ninguna duda.

Gero bajo la mano y la volvió a agarrar del pezón levantándolo hacia arriba, ya conocía la señal así que como pudo se incorporo, la saco de su marido, y la arrastro unos pasos. Se sentó en una silla delante de ella y con sus manos en su culo la llevo hacia el haciéndole abrir las piernas.

"ahora te vas a clavar tu solita, así que venga, haz los deberes"

Luisa busco la polla y levantando su falda la coloco en la entrada de su ardiente coño y fue sentándose, aquella monstruosidad se abría paso dentro de ella y no solo iba rompiéndola físicamente sino se que mente no pudo mas y le sobrevino otro orgasmo, mas brutal que los anteriores, quedándose paralizada por la vergüenza.

Gero la copio de los hombros y la bajo, ensartándola entera y arrancando un gemido intenso, le llevo las manos a la silla y con sus manos en su culo empezó a moverla.

"joder que estrecha y caliente esta puta, sin duda de las mejores chicos" dijo entre las risas de los demás. Luisa ya no necesitaba la guía de gero y se movía rítmicamente, viéndolo, gero utilizo sus manos para sobarle los pechos y martirizarle los pezones, cosa que, aceleraba el movimiento de ella.

"Ahora quiero que te la ensartes toda y muevas las caderas, quiero que me la exprimas bien zorra"

"por favor no te corras dentro" suplico luisa

Gero agarro los pezones y empezó a clavarle las uñas

"donde quieres que me corra?"

"por favor"

Apretó más y luisa empezó a mover las caderas, un orgasmo como nunca había sentido la invadió y el rugido de gero anuncio su orgasmo, sintiendo dentro de ella como la ardiente leche la llenaba con latigazos secos, su cuerpo no respondía y cayó sobre gero respirando entrecortadamente.

"joder que ganas tenia, la tenias muerta de hambre luis" dijo riéndose gero

"levanta zorra que no soy tu almohada, ahora te vas a arrodillar, te vas a quitar la venda de los ojos y me vas a limpiar la polla con mucho esmero"

Luisa hizo lo que le pidió, al principio estuvo a punto de vomitar ya que el pene estaba embadurnado de flujos y semen, pero poco a poco con su lengua y con su boca acabo el trabajo. Tenia la esperanza que todo acabara ahí.