Entre primos sigue andando el juego
Este relato al principio lo pensé como una segunda parte de Entre primos anda el juego, pero realmente no es una segunda parte sino más bien un suma y sigue.
En “Entre primos anda el juego” relato mi relación asombrosa por inesperada entre Estrella, la prima de mi madre y yo. Ella, con 32 años, madre de dos niñas, Estrellita de 10 años y Auxiliadora (Auxi) de 8 años, que sospechaba que su marido tenía una amante, digamos que estaba falta de cariño y de algo mas; y por el otro lado yo un joven con 17 años que quería comerse el mundo, que le habían enseñado que el sexo no entendía de edad, ni de estado civil, ni de nacionalidad o raza, ni posición económica, ni …, por lo tanto lo que le faltaba a Estrella a mi me sobraba. Una relación que tenía que haber sido aquí te pillo aquí te mato , duro cinco años.
Este relato comienza cinco años después de finalizar esta relación entre Estrella y yo, mi madre me envió una carta comunicándome que la hija mayor de Estrella se casaba a principios de julio, y que nos habían invitado a la boda. Durante un tiempo estuve pensando si era prudente ir a la boda, el que mi madre no pudiera ir a la boda me hizo decidirme a ir.
Principios de julio, viernes, eran las ocho de la tarde cuando llegue a la casa de Estrella, llame a la puerta y me abrió ella, mi sorpresa fue mayúscula, con 42 años se conservaba muy bien, mejor dicho requeté bien, estaba como para abrirle las piernas y metérsela, pareció que ella me leyó la cara pues dijo “Estrellita está terminando de ducharse” y con voz más floja dijo “Y de lo nuestro chitón, nadie debe enterarse” y yo como si tuviera una cremallera en la boca hice la simbología de cerrarla. Nos sentamos, y comenzamos a hablar de los años que no nos veíamos, no pudimos hablar mucho pues salió Estrellita, “Quien era” y Estrella dijo “Es, recuerdas al primo …” no la dejo terminar abrazándose a mi dijo “Claro que me acuerdo” y se separo, solo llevaba encima una toalla que le cubría desde los pechos hasta los muslos, ya no tenía aquellos 17 años de fogosidad, tenia 27 era más tranquilo, pero si al ver a Estrella me había excitado algo, al ver aquella muñeca de 20 con solo la toalla, se me estaba poniendo bien dura, y más cuando en un movimiento raro se le cayó la toalla, fue un segundo o menos, pero aquella visión se le habría levantado a un muerto, dio un gritito y se la volvió a colocar delante, y caminando hacia tras se fue hacia su habitación, Estrella me miro y dijo “Cuidado con lo que piensas” y dije “no he pensado nada” ella sonrió y dijo “recuerda que te conozco, que fueron cinco años, y se leerte la cara” sonreí y le dije “Vale tienes razón, pero sabes mi lema, nada sucede si de dos uno no quiere” ella me contesto “Siendo su madre y conociéndote, quiero lo mejor para ella, y mañana se casa” la mire y le dije “mañana se casara” ella me contesto “eso espero, lo nuestro ya paso y fue bonito mientras duro, no hagas que me arrepienta” en eso salió Estrellita ya vestida, aunque posiblemente el vestido cubría menos que la toalla, un vestido ajustado de rayas rojas y blancas que iba desde por encima de los pechos hasta menos de medio muslo, marcando las braguitas tipo tanga y el pecho (pues no llevaba sujetador), y dijo “de que te tienes que arrepentir” y Estrella dijo “de nada cosas mías”, y Estrellita dijo “bueno tu sabrás” y dirigiéndose a mi me dijo “Te vienes, te voy a enseñar mi piso” y sin esperar respuesta le dijo a su madre “si llama Miguel, le dices que estoy de despedida de soltera con mi primo” y cogiéndome del brazo me arrastro a la puerta de salida, ya saliendo se volvió y acercándose a su madre le dijo algo al oído, lo que hizo que Estrella se quedase asombrada, mientras nosotros nos íbamos.
Ya en su coche al sentarse Estrellita se le subió un poco la falda, aunque solo fue un poco al ser tan corta dejo ver su tanga blanco. Me estaba poniendo a tono la muñequita, de reojo no dejaba de mirar, y tras un cuarto de hora dijo “Estamos llegando, te gusta lo que ves … ” que si me gustaba, me encantaba, unos segundos de indecisión que me podían delatar pero ella matizo “… de la ciudad, ha cambiado desde que tu venias por aquí, hace ya … cinco años” mecánicamente dije “Más o menos, fue cuando …” no me dejo terminar pues dijo “aquí es, en el segundo” paro y subimos, me estuvo enseñando el piso y por último se detuvo en el dormitorio, ella estaba de espaldas a la cama frente con frente conmigo, y dijo “¿cuando has dicho que fue la última vez que viniste?” la mire y dije “no lo he dicho, fue …” no me dejo terminar, ella se cogió el vestido desde abajo y tiro hacia arriba quedando semidesnuda solo con el tanga y dijo “Si, …fue la última vez que te tirastes a mi madre” la mire, se me había puesto dura de pronto pero sabía que tenía que contenerme “será mejor que te tapes” ella sonrió y dijo “ no te preocupes por mi madre, antes de salir de casa le dije al oído – que después de hacerlo contigo compartiríamos vivencias” ya más sereno le pregunte “como sabes lo de tu madre y yo” ella se termino de desnudar y se acerco a mi tocándome el paquete y dijo “Veo que no pierdes facultades; la primera vez que vi tu polla estaba en la boca de mi madre, recuerdas aquella primera vez …” claro que la recordaba, la primera vez que lo hicimos por un calentón, me la cogió me la acaricio y la chupo y antes de tumbarse a mi lado fue cuando cerró la puerta, ella prosiguió “… por tu expresión lo recuerdas, os volví a ver aquellos días que te quedabas en casa y mi padre no estaba y te metías en la cama con ella, creía que era un juego, con los años comprendí lo que era, el día que recibimos tu comunicado de que venias a la boda me excite, y aquella noche haciéndolo con Miguel solo pensaba en ti, y te puedo asegurar que tuve uno de los mejores orgasmos de mi vida” la mire a los ojos, sentía su cuerpo desnudo pegado a mí y le dije “y ahora que” ella se abrazo a mi me beso y me dijo “Tu qué crees, debes cumplir” dije “Como quieres que cumpla” sonrió y se dirigió a la cama, se sentó y dijo “me gustaría que me hicieras lo mismo que a mi madre aquella vez”, me acerque a ella, me baje la cremallera y me saque la polla, ya estaba tiesa y le conteste “intentare que sea lo más parecido, sino en el continente si en el contenido” puse mi polla frente a su boca, y de su boca escapo un “gracias” justo antes de metérsela. La estuvo lamiendo lentamente, para separase de mi y tumbarse en la cama, y dijo “Fóllame, quiero sentirte dentro”, mire a su entrepierna, a aquel coñito totalmente depilado, ella intuyo lo que miraba y dijo “A Miguel le gusta sin pelos” me acerque a ella, acaricie sus muslos por la parte interior y dije “Y a mí, también” ella sonrió se abrió de piernas, acaricie su clítoris con el dedo índice en forma de círculos, para seguidamente acariciar sus labios vaginales, ella gemía, y gimió mas al sentir mi lengua acariciar su clítoris, me pedía que se la metiera, y cuando vi que estaba excitada me arrodille encima de la cama, abriéndole mas la piernas, me situé entre ellas, la cogí por debajo de las nalgas, enfrente mi polla a su vagina, y se la metí, dio un grito, dijo “Sigue he llegado, tengo ….” Su boca se lleno de jadeos, yo seguí, y ella no paro de gemir y jadear, tras unos minutos de calma volvió a decir “Otra, Dios mío otra, no es posible, y ¿Tu?” le dije “Tranquila, ya llegare, ahora disfruta” Saque la polla y me deje caer junto a ella, pero seguí acariciando sus pezones, y su clítoris, ella siguió excitada, se puso encima mío y cabalgo, quería dejarse caer hacia tras pero yo le apretaba los pezones, dijo “si, no puede ser” sonreí y dije “Otra vez” y ella con voz entrecortada dijo “Pero si no he paradooooooooo” y volvió a alcanzar otro orgasmo, dejándose caer sobre mi yo seguí con movimientos pélvicos para un minuto después eyacular, y al sentir como salía mi leche, grito como si de un mini-orgasmo se tratara. Se dejo caer junto a mí, y me dijo “creo comprender a mi madre”. Nos vestimos y la lleve a casa de su madre. La deje en la puerta y me marche al hotel.
Al día siguiente me despertó el teléfono interior del hotel, lo cogí, desde recepción me dijeron que había una mujer en recepción que me buscaba, dije que subiera, no sabía quién podía ser. Resulto ser Estrella, paso a dentro y me dijo “Lo pasastes bien ayer con mi hija” “No me puedes culpar de lo que sucedió, yo me resistí, pero tu hija …” dijo “Lo sé, me lo conto ella, con pelos y señales” yo mecánicamente repetí “… con pelos…” ella se enfado y dijo “no te burles …” estaba muy cerca de mí, yo solo llevaba un pantalón de pijama corto sin nada debajo, la cogí por la cintura y la atraje hacia mí, y la bese al separarse me miro como sorprendida y dijo “Has pensado que tengo 42 años” le cogí la mano y la metió por debajo del pantalón, haciendo que cogiera mi polla y le dije “Tú crees que esta sabe de edad” y contesto “está muy gorda, recuerdas la primera vez” claro que lo recordaba, ella saco mi polla y comenzó a acariciarla y a chuparla, dijo “sabes yo también estoy excitada” , hice que se tumbara en la cama, y lentamente le desabroche los botones de la blusa, para terminar abriéndola dejando al descubierto el sujetador, se lo baje y aparecieron sus pezones que estaban duros, pidiendo guerra, agarre su pecho izquierdo con ambas manos, y acerque mi boca a su pezón, chupándolo y mordisqueándolo, poco después repetí la operación con el pecho derecho, pero dejando mi mano derecha que juguetease con su pezón izquierdo, y mi mano izquierda fue hacia abajo buscando su entrepierna, primero una leve caricia por encima del pantalón para que ella se abriera de piernas, después metí mi mano por debajo del pantalón, y de sus bragas, acaricie su vello púbico, y mis dedos llegaron a su raja, estaba realmente húmeda, y acariciarle el clítoris, ella cerro las piernas, y levemente las abría y volvía a cerrarlas, la desnude, le quite la blusa y el sujetador, los pantalones y sus bragas, me quite el pantalón del pijama, me quede mirando su cuerpo, ella mientras con una mano se acariciaba los pechos y con la otra el clítoris. Me acerque a ella mis manos volvían a acariciar sus pezones, mi mano izquierda nuevamente bajo a su entrepierna, haciendo que volviera a abrirse de piernas, y volví a acariciar su clítoris, e introducirle uno o dos dedos en su vagina. Sus gemidos iban en aumento me dijo “métemela, quiero sentir tu polla otra vez”, no le hice caso y seguí pellizcando sus pezones, pasando mi dedo alrededor de su clítoris e introduciéndolo en su vagina. Poco después sentí que su excitación llegaba al máximo, y pare, me separe de ella, me deje caer encima entre sus piernas, quedando su coño frente a mi polla, y lentamente mientras seguía acariciando su clítoris se la metí, no llego a gritar porque se mordió los labios y a cada envestida mía, un gemido, cada vez más fuertes, y en un instante se tenso para quedar totalmente relajada, mire su cara de placer absoluto, había llegado al orgasmo, me sonrió, una sonrisa suave, pero yo seguía empujando, volvió a jadear y gemir, seguía con el mete-saca, sentía que estaba a punto de llegar, quería retenerme pero ella me dijo “no pares, que estoy a punto de llegar …” y llego ella y llegue yo, sentí como mi leche inundaba su vagina. Me deje caer junto a ella y me dijo “Sigues siendo un buen amante, pensándolo bien me alegra que ayer lo hicieras con Estrellita” se levanto, se vistió y cuando salía por la puerta me dijo “A las 2 te espero en la ceremonia”.
Y a las 2 estuve en la ceremonia, pero eso será otro relato.