Entre mi hermanastro y yo VII

El rio y tan solo dio un pequeño empujón haciendo que entrara dentro de mi al menos 1cm más, pero esa era todo. Ese repentino cambio me hizo casi que gritar, ya que me llego por sorpresa y lo que había pensado antes era verdad, esto cada vez se hacía más grueso y podía adivinar que quedaba mucho trecho por entrar aun.

-¡Por favor, métemela toda, por lo que más quieras! ¡POR FAVOR!

-¿Estás segura de eso?

-¡SI, SI, SI!

-¿Podrás aguantarlo?

-¡ESPERO QUE NO PUEDA!

-Bien, aquí lo tienes. Todo.

Sentí cuando empujó su pelvis hacia mí y pude sentir sus testículos chocando con la parte baja de mis partes intimas, en ese instante solté un grito de dolor, el cabrón me había acostumbrado a abrírmela lentamente, pero ahora que tenia esos 17,5cm dentro de mi me hizo gritar al principio de dolor, ya que él empezó unas embestidas fuertes, no veloces, pero si muy fuertes, me lo sacaba todo y luego de un solo empujón me la llegaba hasta el fondo, cada vez que hacia esto yo gritaba y sentía como casi me desmayaba, así duramos unos minutos en los que yo estaba sintiendo el climax, ya mis gritos no eran de dolor, ya esa fase había pasado, puedo decir ahora que mi vagina e estiro lo suficiente, estaba llegando a mi tope cuando sentí que él me levantaba las piernas y me las ponía sobre sus hombros y dijo:

-Esta te gustara Isa, te gustara.

Y de una me la metió nuevamente, esta posición logro que me penetrara más profundamente y vaya que sentí la diferencia dentro de mí, estaba en el cielo y ahora con esta posición el había agarrado más soltura y le habia agregado velocidad a esos movimientos fuertes, el de una manera impresionante siempre la sacaba hasta el glande para introducirla nuevamente, nunca era ni más ni menos lo que sacaba, y con ese gran miembro viril me hizo llegar al orgasmo que tanto había esperado y aguantado.

Fue el mejor que he tenido en mi vida hasta ahora, me hizo sentir un calambre caliente por todo mi cuerpo llegando hasta mi pelvis donde exploto una gran sensación de placidez y de éxtasis haciéndome perder la cordura, sentí que casi me desmayaba, pero en ese instante él bajo su espalda de modo que ahora tenía su cara frente a la mía y me beso. Aun así no se detenía, él seguía con su fuerte y veloz movimiento de caderas cuando finalmente luego del beso me quito el tapaojos y pude observarlo, a pesar de que solo habían pasado como máximo unos 15 minutos, fue como si no lo hubiera visto en años, se veía muy diferente ahora, tenía todo su cabello revuelto bombeando al mismo ritmo que sus caderas, su expresión era muy diferente ahora, tenía los ojos casi en blanco y se mordía el labio inferior, mientras que su hábil y esculpido cuerpo me taladraba hasta lo más profundo de mi ser.

En unos pocos minutos yo estaba de nuevo sintiendo ese escalofrío en la medula que me avisaba de mi próximo orgasmo, cuando sentí que su respiración aumentaba y ahora tenia los ojos completamente en blanco del gusto y le dije:

-Espera unos segundos … no te corras aun … espérame.

El debido al éxtasis que estaba poseyendo su cuerpo echó su cuello hacia atrás bruscamente y exhalo un pequeño grito que podía ser un gemido profundo y esta vez había bajado la velocidad pero ahora me penetraba mucho más fuerte, incluso me dolía y hacia que yo me moviera en la cama, seguía penetrándome bruscamente cuando nuevamente volvió con gran velocidad a penetrarme, ahora era mucho más veloz que nunca e igual de fuerte, la cama se movía a nuestro ritmo chocando contra la pared repetidamente, ya yo sentía el orgasmo allí mismo en la puntita y el dijo:

-¡YA!

Y ambos tuvimos un sonoro orgasmo juntos, fue una experiencia increíble ya que en ese momento sentí como él me la metía con mucha fuerza dentro y seguía pujando hacia dentro aunque ya no quedara más, sentí sus palpitaciones, sentí un cambio de tamaño y luego de sus contorciones sentí el gusto caliente de sus entrañas, se estaba vaciando, era increíble la cantidad que salía de allí y entraba en mi, gritábamos al unisonó y lo último que recuerdo fue sentir un ultimo empujón de parte de él cuando soltó su ultimo chorro bien adentro de mi cuando caí dormida (eso o me desmaye del gusto…)

Desperté estando entre sabanas, lo primero que pensé fue en todo lo que sucedió ayer, en cómo me había corrido y como él se corrió junto a mí en mi segundo orgasmo, sentí como una sensación de deberle a él un orgasmo más por hacerme todo aquello, así que me dispuse a darme la vuelta para despertarlo y darle su recompensa, pero al lado de mi no estaba él, no había nada más que sabanas, abrí los ojos y me di cuenta que estaba en mi habitación, estaba en mi cama arropada con mis sabanas y tenia puesta mi pijama, como si nada hubiera pasado anoche. ¿O es que realmente nada sucedió anoche?...

Me levante y escuche el sonido del televisor en el piso de abajo y lo que eran las voces de mamá y Gerardo que charlaban en el salón de la televisión. Salí de mi habitación y encontré a Andrés sentado en su computadora y volteo apenas salí de mi habitación y me hizo señas para que me acercara. No entendía que estaba pasando.

-Cierra la puerta.

-De acuerdo, ¿pero qué está pasando?

-Nada, ayer pensé que te habías desmayado luego de que …

-Sí, lo recuerdo, pero no me desmaye. –Sentí como mis mejillas se ruborizaban- solo estaba … Eso no importa ahora.

No podía darle el gusto de que supiera todo lo que disfrute ayer con él.

-Si claro… al principio me asuste y pensé que algo te había sucedido, pero luego me di cuenta que estabas cansada y te quedaste dormida, así que te lleve a la cama y cuando mamá y papá llegaron les dije que estabas enferma y te habías ido a dormir.

-¿Dormí todo este tiempo?

-Si señorita, son las 12:30am, desde las 3 estas dormida.

-Espera, ¿Por qué están todos aquí hoy en casa?

-De hecho como estabas mal mamá se quedo en casa para ver que te sucedía cuando despertaras, papá pidió el día libre también y parece que si tú no me despiertas para ir a clases nadie lo hace. Así que todos estamos aquí.

-Entonces debería irme ya y decirle a mamá que estoy bien, no quiero que piense que estoy mal y tampoco deberíamos estar aquí ahora, podrían sospechar de lo que hicimos Andrés, eso esta …

-Si lo sé, “está mal”, somos hermanos y no deberíamos blablablá, pero lo que sucedió ayer –Esta vez el se levanto de su silla y se acerco a mi viéndome con esos ojos que me derretían llenos de deseo y desesperación- me dejo en claro que Isa si rompe las reglas, y cuando lo hace, lo disfruta en grande.

¿Qué le había sucedido al Andrés que conocía? Andrés era un chico tímido y respetuoso, el nunca me habría hablado así ¿Qué le sucedía?

-Mira Andrés ayer solo me deje llevar por las tentaciones y me arrepiento de eso, y júralo, eso nunca volverá  a pasar, así que date una buena ducha de agua fría para que baje esto. Y le di un pequeño golpe con mis dedos al bulto que marcaba su pantalón de pijama haciéndolo tener una pequeña arcada por el repentino tacto a su miembro. Y dicho esto salí de su habitación dispuesta a no volver a entrar salvo que YO necesite algo.

Al bajar me encontré con mamá terminando de preparar el almuerzo, y luego de un millón de preguntes hice entender a mi mamá que estaba bien y que no se preocupara, luego de comer Gerardo tuvo que ir a su trabajo ya que tenía una reunión de último momento y era urgente, así que nos quedaba toda una tarde solos con mamá.

-Ay hija ¿estas bien?¿te gusto la sopa?

-Si mamá, por enésima vez, estoy bien. Gracias.

-Si mamá quedo muy sabrosa tu sopa. –Dijo Andrés como de manera desafiante.

- Mamá –Dije en tono como de posesión para competir con Andrés y para hacerlo sufrir dije- Ya que tenemos toda la tarde libre ¿Qué te parece si nos vamos de compras?

-¡AY SI! ¡QUE ESTUPENDA IDEA!

-No, yo no me apunto.

-No seas así Andrew, ven con nosotras de compras, tú también necesitas ropa nueva.

-Si Andrew ven con nosotras –Pude notar por su expresión que me había salido con las mías y que había ganado esta vez.

No sé que me sucedía, ni porque esas ganas de querer desafiarlo en todo, de hecho hice una pequeña carrera que mamá no noto con él para ver quien llegaba primero al auto y nuevamente gane yo.

Y así empezamos a competir estúpidamente por todo, parecíamos niños, incluso peleábamos por ir al lado de mamá y hablar con ella.

Pero todo subió a otro nivel cuando entramos a una tienda masculina donde vendían ropa moderna y donde en cada espacio vacío habían publicidades de chicos muy varoniles y esculpidos usando ropa muy ligera que dejaban ver todos su dotes, Andrés nos pillo a mamá y a mi mirando a aquellos hombres tan perfectos y dijo:

-Eso me recuerda cuando yo hice mi publicidad con Levis, salvo que yo no tenía camisa y estaba en el lejano oriente.

-Deja la envidia Andrés nadie te cree.

-De hecho si, tu papá me comento algo de eso, tú hiciste muchas otras propagandas ¿no es así?

-Sí, la mayoría de catalogos, fue solo unas oportunidades que mi papá consiguió para mi.

-Vamos no te creo ni un poquito.

-¿Con  que si eh? Ya veremos.

Tomo un pantalón jean ajustado y una camisa de cuadros y se fue a los vestidores, y como dije anteriormente, fue aquí cuando todo llego a otro nivel, ya que ahora queríamos competir por quien lucía mas provocativo, y él realmente me gano ya que salió con esos ajustados jeans azules que hacían que todo quedara en su lugar, haciendo más grande sus atributos y aquella camisa de cuadros arremangada haciendo que sus bíceps se vieran mucho más apretados en la tela queriendo salir y por supuesto, no llevaba los botones colocados así que se podía ver todo su “six pack” perfectamente marcado y tonificado. Salió con su cabello despeinado y dijo:

-¿Ahora si me crees? Soy igual que esos chicos.

Y esta vez imitó la pose que uno de ellos tenía haciendo ver aun más sus dotes. Este chico era un dios griego. Las pocas chicas que estaban en la tienda ahora lo miraban descaradamente mientras que sus novios algunos molestos y otros entretenidos lo ignoraban.

Pero él había conseguido lo que quería, provocarme. Y mamá decidió comprarle aquel atuendo por lo bien que le quedaba, mamá me estaba molestando con sus comentarios elogiando su físico e insinuándome cosas sobre él, yo lamentablemente no pude competir con él ya que ya eran alrededor de las 4 y ya habíamos gastado mucho, así que volvimos a casa.

En el estacionamiento cuando Andrés dejaba la mayoría de las bolsas en el maletero y yo colocaba una pequeña que llevaba me dijo casi susurrando para que mamá no escuchara y dijo:

-Hey límpiate aquí, te quedo baba.

Yo como una tonta caí en la broma y me limpie el sucio inexistente, mientras el cerraba el maletero y se reía de su “broma” mientras entraba al auto. Era un engreído. Y ahora me había molestado con su jueguito.

Luego de cenar y de que mamá y papá fueran a su habitación, Andrés entro a la mía y me dijo:

-Aun te queda un poquito aquí.

-Callate, solo caí en una broma.

-Pero caíste porque sabias que podías tener baba en tu boca.

-No te creas la gran cosa.

-Vamos Isa, tu sabes que te gusto lo que viste.

-¡Ya cállate y vete de aquí no quiero …

Vaya que este chico sabía como hacer callar a una mujer, ya que de repente me planto un beso profundo, y luego dijo en un susurro muy picaron y erótico:

-Admítelo.

Intente de besarlo nuevamente pero él me lo impidió y dijo:

-Admítelo.

-Lo admito, me tienes loca desde que te vi.

-Tú también, lo que hicimos ayer fue mi sueño echo realidad.

-Aun no he terminado contigo, te debo una aun.

Y luego de susurrar esto, volví a besarlo mientras le bajaba su mono de liga del pijama y lo dejaba caer al piso y dije:

-Mantén el silencio.

Y lentamente fui bajando hasta quedar agachada frente a su slip color cyan.

Continuara…

Realmente lamento no poder hacer mis relatos más largo, siempre leo sus peticiones pero lo que realmente sucede que una hora me toma a mi escribir unos míseros 10 minutos, y realmente estoy falta de tiempo para hacer los relatos, así que no desesperen que lentamente terminaremos esta aventura.

Además, me gusta dejarles la imaginación activada al final de mis relatos para provocarlos.

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