Entre colegas

Aitor y su amigo Jacobo se pajean juntos mientras faltan a clases en el internado

A los que me conocen de mi ultimo relato les reucerdo que me llamo Aitor Mido 1.84 y peso 86 kilos, soy blanco, de pelo castaño y ojos verdes. Tengo una polla sin circuncidar de 18cm. En ese entonces, cuando ocurre lo que describo a continuacion, tenia muy buen cuerpo algo definido por la gimnasia y el fut que practicaba. Ademas, tenia 18 años. Esto me pasó con mi amigo Jacobo, el mide 1.7, tenia muy buen cuerpo tambien, sin sobre estilizar ni nada, era rubio y tenia ojos azules. Era mitad aleman, lo que explica sus rasgos tan nordicos. Es de Madrid.

Aquel verano mis padres deciden enviarme a un internado al Canada dizque para mejorar el ingles. El primer dia, me levanto sin conocer a absolutamente nadie salvo dos colegas con los que andaba. Algunos estaban jugando ping pong en el area social de la residencia estudiantil, y decidimos pasar el rato conversando no mas. Habia un chico que me llamaba la atencion. Asumí que era de Estados Unidos, estaba sentado sobre una mesa vestido de polo con unos shorts desde los cuales sobresalian unas bellas piernas con vello rubio. En una se voltea y nos pregunto, en perfecto español, “ya saben que haran hoy?”, y es asi como descubrimos que se llamaba Jacobo y que era español al igual que nosotros.

Pasa el tiempo, y Jacobo y yo hemos entablado una relación de madre, aunque me mostrase un poco timido con el. Comiamos juntos, hablabamos de tias, de politica, de todo. Teniamos cierta camaraderia que venia de ser de los pocos hispanoparlantes del sitio, jaja, pues hasta entre tios a veces uno se da ligeramente al chisme.

Teniamos clases por la mañana, luego almuerzo, y luego una ultima tanda de clases que empezaba a las 2pm antes de tener la tarde libre. Yo casi siempre me la pasaba en mi cuerto esa hora despues del almuerzo pues me gustaba recostarme en mi cama a usar el ordi.

Ese dia veo que a eso de las 12:45 alguien toca a mi puerta. Era Jacobo. Me sorprendo al verlo, a lo que el, con su carismatica sonrisa llena de dientes blancos me pregunta “Que estas haciendo?”.

“Yo, pues reposando” - Le repondo

“Puedo pasar”- Me pregunta

“Pues claro tio, jaja, no tienes ni que preguntar.

Nos pasamos todo el rato haciendo payasadas y viendo videos de Youtube en el ordi. En eso dan la 1:50 y yo le digo “Oye tio, ya esta tarde, tenemos que ir a clases”.

Jacobo me dice “No vayamos vamos a quedarnos aqui”.

“Vale” le replico.

En eso, toma mi ordi y mirandome con una sonrisa, entra a una pagina web porno y pone un video.

Yo me rio y le digo “joder tio, jaja, para eso te querias quedar”

Me mira y me dice “tiene unas tetas de madre”

“jaja, si, tiene unas tetas que Dios se las bendiga”

Sucede, pues, que me estoy excitando un poco y al ver el entrepierna de Jacobo veo que esta en la misma situacion.

Mi cabeza empieza dar mil vueltas, pues en ese entonces, no tenia nada de experiencia con chicos. Sin embargo, ya sabia que me gustaban y fantaseaba mucho con experiementar. En eso, me arriesgo, y le digo a Jacobo “Joder tio, estoy a mil”.

“Jaja, si yo tambien, mira” y se marca el contorno de la entrepierna con el pantalon delatando una buen pedazo de polla bajo sus pantalones.

Yo le digo para atras “estoy que pudiese hacerme una paja aqui mismito jaja”.

“Bueno, pues nos la hacemos los dos” dice

a lo que yo digo “vale”.

En eso se desabotona sus shorts y se baja el zipper, liberando una carnosa polla rosada sin circundiar de unos 16cm. Estaba de madre, rodeada de un poco de vello pubico negro que contrastaba con sus demas vellos rubios.

Yo me saco la mia y solo dice “joder, menuda polla que te gastas”, cosa que me provoca risa.

Duramos unos diez minutos pajeandonos cuando me animo a decirle “Joder, conozco algunos tios que se la hacen a mano cruzada”...

El inocentemente me dice “lo intentamos?”

asi, sostengo su carnosa verga y el sostiene la mia, baja el prepucio con seguridad, y hago lo mismo con la del.

Y estabamos asi, pajeandonos entre colegas, cuando de pronto dice “joder, me vengo, me vengo” y se viene con largos chorros de semen en mi mano. Yo tambien me vengo copiosamente. Me mira y me dice, “oye, esto no sale de aqui” a lo que le respondo “tranquilo, para que son los colegas”.

Al otro dia, me dice, “oye, Aitor, piensas que lo que hemos hecho es de maricas” a lo que respondo “para nada, tio, los antiguos militares lo hacian”.

Mas tarde, os hablare sobre como evolucionó el verano del internado mi relación con Jacobo.