Entre amigos. II
...seguía paseando con su trompa de elefante al aire y mis ojos estaban como platos pero me toco disimular y hacer como si nada, al rato se volvió a sentar y se quito el bóxer...
A C O S A D O
Juan ya se había marchado y en mi casa todo era de cierta forma patético, estaba muy aburrido y no quería ir a dormir, me dispuse a hacer algo con mi vida y fui directo a la computadora y abrí todas mis redes sociales. Facebook me parecía más de lo mismo, tenía una gran cantidad de amigos pero casi nunca ponía estados y cuando lo hacía eran pedazos de canciones que siempre venían acompañados por comentarios de varios de mis compañeros de clase.
Este día no era la excepción así que busque en google la letra de una de mis canciones favoritas del momento y lo puse, rápidamente ya tenía una conversación con Fernando sobre lo extraño de mi estado y entonces amanecíamos hablando de una gran cantidad de cosas desde música hasta las razones por las cuales discutimos y al final, me hacia prometer que no volvería a pasar. Los demás días todo continúo de forma tranquila, creo que logre superar lo que me paso en pocos días, me mate a mí mismo con muchas actividades escolares y una que otra que hacía por gusto.
Ya era viernes y mi semana de clases se supone que terminaría hoy, no sé que tendría que hacer el fin de semana pero quería que el viernes terminara lo más rápido posible, me levante como todas las mañanas y me prepare para ir a clases, para mi suerte, volví a ver a Juan en la mañana. Llegue temprano a clases y como siempre me disponía a sentarme donde siempre lo hago pero alguien se me adelanto, ya que los puesto que guardo estaban ocupados, vi el bolso para ver si era Fernando pero no era su bolso, no tenía ni idea de quien agarro todos esos puestos.
Luego de escuchar el timbre y no ver desde la ventana a ninguno de mi salón, subo mi mirada y veo a Fernando riendo, haciéndome señas de que suba. Nuevamente olvide que los viernes vemos clases en el último piso, cuando me dispongo a salir del salón veo que entran varias personas, todas son de quinto años y entre ellos una chica que se me queda viendo y me saluda con un beso y un abrazo, como si me conociera de toda la vida y más atrás veo entrar a Juan junto con varios de sus amigos, la chica me pregunta por mi padre y luego me dice que le diga a mi padre que la ayude pero ignoro lo que me dice y salgo lo más rápido que puedo del salón.
Cuando subo a mi verdadero piso de clases, Fernando me paro antes de entrar y me quito el bolso, se llevo con él y lo puso en un puesto que guardo para mí, antes de volver a salir del salón, me dijo algo que de cierta forma se escucho muy raro y todos mis compañeros lo notaron.
Hoy no te escapas, me tienes que pagar todo lo que soporte ayer por ti
Mis primeras horas de clase fueron normales, el profesor dicto todo y luego mando unas actividades para la próxima clase, salimos a desayunar como de costumbre esperaba ir junto a Estefanía y Marisol a desayunar pero esta vez Fernando acomodo todo en su bolso y luego guardo mis cosas también y me tomo del brazo.
-Vamos Héctor, me debes un desayuno. Hoy solo vas a ser para mí.-
-Que te pasa? Eso suena muy raro.- Mis amigas se comenzaron a reír
-No me importa. Apúrate y ven conmigo rápido.
-Está bien, espera.
Cuando llegamos a Ruffy’s pensé que desayunaríamos allí pero no, estaba lleno de chicos de quinto año y no quedaba ni una mesa, Fernando me seguía arrastrando hasta que llegamos a una panadería cercana al liceo y luego fuimos a la caja a pedir todo lo que comeríamos, tenían unas pequeñas mesas y nos sentamos.
Junto a la mesa de nosotros se encontraba la mesa de la chica que le gustaba a Fernando, y con ella varias de sus amigas, una de las amigas de ella se me quedo viendo de forma rara durante todo el tiempo que estuvimos desayunando. Fernando no paraba de lazarle miradas y guiños a la chica y luego de un rato, cuando terminamos de comer, él fue hasta su mesa y la saludo con un beso en la mejilla, ella claramente estaba sonrojada y sus amigas se pusieron a reír y comentar.
No creo que lo que sentía al verlo besar a la chica eran celos o algo parecido, Fernando era mi amigo y creo que la relación de amigos que teníamos era genial tal cual como estaba pero esa espinita dentro de mi no me dejaba tranquilo por lo que me levante y le hice saber que ya era hora de irnos. Cuando nos marchábamos, se acerco una de las chicas de la otra mesa y me pidió mi número de teléfono, intente hacerme el loco pero la chica seguía insistiendo y no me dejaba tranquilo, Fernando me ayudo a salir de esa situación y le dijo que estábamos apurados y que no podíamos llegar tarde a lo que la chica lo miro feo y se fue con sus amigas.
Entramos a clases nuevamente y todo estaba tranquilo o eso pensé yo pero Fernando estaba delante de mí y me pidió que mirara al balcón del segundo piso, que alguien tiene rato allí viéndonos, mire de reojo y allí estaba la chica que le gusta, lo ignoro y luego me dice que mire bien que esta otra persona y es cuando me doy cuenta que estaba la chica esa nuevamente y viéndome fijamente, lo mire enojado y le dije que me sentía acosado y el solo dijo que no me preocupara que la ignorara y así me dejaría tranquilo.
Salimos de clases y teníamos dos horas libres antes de volver, algunos volvían a sus casas porque vivían cerca pero otros como yo, nos quedábamos a esperar que se hiciera la hora, Fernando desapareció al salir de clases así que me fui a caminar con Marisol y Estefanía al frente del liceo. Mi sorpresa fue grande al verlo con la chica que le gustaba sentado en el frente y con ellos las amigas de ella, la chica esa que me acosaba se dio cuenta que estábamos sentados cerca y se levanto, trate de convencer a mis amigas de ir a otro lugar pero ellas no quisieron, la chica esa se me acerco y entonces le pidió a mis amigas que se marcharan.
-Héctor no? Fernando me dijo tu nombre.
-Sí, mucho gusto.- * Extendí mi mano y puse una sonrisa muy falsa*
-Un gusto, Andrea. Eres algo así como el mejor amigo de Fernando no?
-Se podría decir que sí, solo tenemos un par de meses conociéndonos.
-Mañana queríamos ir juntos a uno de sus juegos, tu vas? Ella me miro esperando una respuesta
-No tenía ni idea, creo que no.
-Es una lástima, me encantaría que fueras.
La chica rápidamente siguió sacándome conversación pero solo le dije pocas palabras y la cortaba, no quería nada con ella, me sentía un chico gay acosado por una chica y menor que yo, no podía ser peor. Fernando se acerco a nosotros me dijo nuevamente que mañana tendría un juego de futbol importante e invito a “TODOS”, entonces era seguro que yo tendría que ir a ese juego y yo no podía falta por el hecho de que él me mataría luego, acepte ir pero mis amigas no podían así que estaba totalmente solo y ni loco me sentaría con Dayana y sus amigas y menos con la acosadora de Andrea.
Luego de un rato las chicas se marcharon y solo quede con mis amigas y Fernando, este ultimo me pidió muchas veces que me sentara junto a la chica esa y su amiga acosadora pero a todas sus peticiones mi respuesta era la misma, ni loco estaría en el mismo lugar de ellas.
Un sábado que no era como cualquier otro, me levante tarde, comí tarde y salí a caminar un rato para despejar mi mente y vi a algunos amigos por allí, compre unos panes, volviendo a casa note que colocaron un gimnasio cerca, pensé en ir pero la idea simplemente se dio como un chiste, llegue a casa y antes de entrar pude ver como Juan estaba en el estacionamiento jugando futbol con varios vecinos, trate de ignorarlo pero noto que lo observaba y me saludo así que entre súper rápido a mi casa.
El juego era a las cuatro de la tarde y ya eran las tres y punto, Fernando me había mandado un mensaje para pedirme que pasara por su casa buscando unas cosas en mi camino al estadio en dónde jugarían y trate de bañarme y vestirme lo más rápido posible para poder estar a tiempo.
Al llegar lo llame y me indico que se encontraba en los vestidores, que entrara, que no tenía que pedir permiso ni nada y así lo hice, me dirigí directo a los vestidores, mis ojos parecían platos y mi mandíbula casi se desprende y cae al piso, los chicos más guapos que he visto en mi vida y sin camisa, algunos solo en bóxers caminando como si nada.
No a vi a Fernando entre todos esos chicos pero uno de ellos se me acerco, era el único que tenia camisa y me dijo que no podía estar allí, le dije que buscaba a Fernando y el chico me indico que estaba por los casilleros cambiándose, camine a los casilleros y allí estaba sentado sobre una silla, vistiendo solo una especie de bóxer tipo interior de color verde que tenía un elefante con una trompa enroscada en la parte donde se encontraba su miembro. Desde lejos lo pude detallar bien, me sentía todo un pervertido pero inmediatamente se tapo con algo cuando noto mi presencia y me pregunto por las cosas que me pidió, abrí mi bolso para enseñárselas todas pero el solo me pidió los zapatos.
-Won! Me asustaste! Esas cosas no se hacen.- Ponía su mano sobre su corazón de forma dramática
-Qué? Tienes miedo que te vea desnudo? Que bolas! Me sentía incomodo pero no se lo podía demostrar
-Yo? Para nada! Si ya compartimos todo, que me veas desnudo no es nada.- Entonces se quito la toalla y actúa de lo más normal
-Ahh, yo pensé… Como te tapaste y todo eso, me pregunto qué hacías… le dije insinuando algo en broma
-Yo? Una paja mano! hizo señas con las manos como si se masturbara
-Sabes que esas cosas no se hacen antes de o un juego, verdad? Les quita fuerza a los jugadores.-
-Puede ser pero es broma mano, yo no hago esas cosas. Bueno, a menos que las quieras hacer conmigo. Se acerco a mí y me aleje un poco
-Siempre tienes que ser así? Todo pervertido?
-Tú fuiste el que me insinuó cosas y te pone molesto porque te sigo la corriente? Comenzó a reírse- Sabia que el Héctor ese que le gusta hablar de sexo esta en algún lugar dentro de ti.-
-Olvídalo! Mejor me voy así te dejo para que continúes con tus cosas… Envolví mi manos e hice señas como de masturbación
-Está pendiente del partido, uno de esos goles es para ti.
-No lo quiero … cuando dije eso, llego el mismo chico que me dijo donde estaba Fernando y le dijo que se apurara, el lo llamo y me lo presento, su nombre era Daniel y hoy no podría jugar porque se lastimo la pierna hace algunas horas**
Fernando seguía paseando con su trompa de elefante al aire y mis ojos estaban como platos pero disimule e hice como si nada, al rato se volvió a sentar y se quito el bóxer, lo vi correr a las duchas y el chico, Daniel, continuaba mirándome hasta que me pregunto si me quedaría a ver el partido, le dije que sí y él me invito a sentarnos juntos.
El juego tenía ya casi treinta minutos, en la primera parte estaban empatados uno a uno, Fernando estaba en la banca y súper enojado, se le notaba en la cara, cuando les metieron ese gol en el minuto once, casi le da algo. No lo podíamos creer, todos maldecimos en el momento que le metieron el gol, estaba concentrado en el juego hasta que escucho la voz de mi acompañante preguntándome algo...
-Son muy buenos amigos? Te he visto en la mayoría de sus juegos de un tiempo para acá.
-Ahh… De quien? Fernando? Con todo ese chantaje emocional que me monta, si no vengo me mata. No soy muy amigo de los deportes.
-El siempre obliga a sus amigos a venir, lo hace sentir bien. Daniel comenzó a reír, ya me sentía más cómodo y esto es extraño pero me parecía linda
-Si? No soy el único fanático aquí? Bueno, creo que estoy yo y su futura novia. Daniel abrió los ojos algo impresionado, sus ojos eran lindos, marrones pero llamaban la atención
-Ya son novios? Si está empatado con la chica esa de tercer año?
-Eso creo… El me la presento como su amiga. Daniel me volvió a sonreír y quede encantado nuevamente, tenía que sacar eso de mi cabeza, se me iban a ver las plumas si seguía sonriéndome
-Y tú tienes novia? Algo complicado? Peor es nada? Un culito? Quizás eres… Viudo? Instantáneamente mi risa se escucho muy fuerte, Daniel aparte de ser lindo, era muy gracioso
-Nada de eso, estoy soltero y creo que estoy siendo acosado. El me miro algo intrigado
-Soltero y acosado? Quien? Cómo? Dijo él con mucha curiosidad, y solo pude señalarle a la chica, Andrea, desde nuestros lugares la podíamos ver muy bien Te acosa esa chica? Cuando tiempo tiene haciéndolo?
-Apenas lo note hace algunos días, no tengo idea.
-Y porque no le pides que deje de hacerlo? O miéntele, dile que tienes novia o que eres gay o algo por el estilo?
-No quiero hablarle de nuevo, sería peor.
-Pero inténtalo, no pierdes nada.
-Y que se supone que le voy a decir? Hey, no quiero que me molestes más? Hice seña con mis dedos para hacer énfasis en la última parte
-Yo tengo un plan y no tendrías que decir nada.
-Que plan es ese? Como voy a hacer para que me deje tranquilo sin hablarle?
-Puedo fingir que soy tu novio justo en este momento y hacemos cosas como sostenernos las manos y que se yo y que ella vea. Quieres? Daniel dijo muy seguro
-No puedo pedirte que hagas eso por mí, solo tenemos casi que una hora conociéndonos.
-Sería algo divertido no crees? No te preocupes, es solo fingido. me seguía pareciendo algo incomodo pero el insistió tanto que termine aceptando
- Gracias, es un poco raro que un chico como tú se ofrezca para algo así…
-Un chico como yo? Que tengo? dijo en un tono indignado pero calmado
-No me malinterpretes. Hablaba de que eres agraciado, estas en forma, puede que sea raro si nos ve alguien que te conoce y más si estamos agarrados de la mano y te ofreces como si nada.
-Agraciado es algo bueno? No? Lo que sea por ayudar a un amigo y por de tomarte de la mano público es algo normal, tampoco es la gran cosa y si hablan, que mas.
-Quería decir guapo pero pensé que sonaría muy raro, olvida todo ese plan tuyo, mejor vamos a concentrarnos en el partido.
-Héctor, te intimide? Confía en mí, con mi ayuda resolverás ese problema que tienes. Daniel me ofreció la mano como si fuera una promesa La primera parte está por terminar, acompáñame a los vestidores, podemos ayudar a repartir el agua y todo eso.
Bajamos juntos a los vestíbulos y ayude a Daniel a llenar los vasos con agua para los chicos que estaban a punto de llegar cansados de la cancha, escuchamos el silbato y supimos que la primera mitad había terminado, poco a poco comenzaron a entrar varios de los chicos y cumplí mi tarea de darle un vaso con agua a cada uno y unas palabra de aliento a todos. Fernando se acerco y le daba apoyo a sus compañeros, luego comenzaron a hablar de estrategias pero no tenía ni idea, Daniel se acerco y me alejo de ellos para que quitara mi cara de “no sé nada” y entre ellos comenzaron a reírse de mí.
Salí de los vestuarios y afuera estaba Andrea la acosadora con la chica que le gustaba a mi amigo, al rato Fernando salió y el la saludo con un beso en la boca y Andrea seguía mirándome con sus grandes ojos y yo simplemente trataba de ignorarla hasta que Fernando me llamo. Me acerque a dónde estaba mi amigo y me dijo que me sentara junto a la acosadora y su amiga en la otra mitad y que ahora saldría como delantero, luego nos recordó que estuviéramos atentos debido a que los primeros goles eran para nosotros.
Fernando me volvió a presentar a la chica que le gusta y ella me miro con cara de asco, le respondió con una sonrisa y tan solo extendí la mano para saludar, le respondí lo mas hipócrita que pude y entre nuevamente a los vestuarios.
El descanso termino y los dos equipos salieron nuevamente al campo de juego, ayude a subir a Daniel hasta nuestros lugares pero ahora acompañados por la novia de Fernando y su amiga la acosadora. Comenzó el partido y realmente el idiota promete lo que cumple, en el minuto cincuenta y cinco anoto su primer gol y señalo a nuestros lugares, luego en el minuto setenta y tres anoto su segundo gol y volvió a señalar a nuestros lugares, la chica estaba contenta con los goles de Fernando pero mi cara era normal, tranquila y él lo noto porque hizo un gesto de molestia cuando nuestras miradas se cruzaron un momento.
Daniel seguía a mi lado y me paso su teléfono con algo escrito Vas a querer mi ayuda con lo de la chica? Para comenzar ahora mismo a ayudarte? Yo asentí ligeramente y el tomo su teléfono de mis manos y lo guardo en su bolsillo, de un momento suavemente tomo mi mano y la entrelazo con la suya, ya entrelazadas las coloco sobre su rodilla donde se pudiera ver a simple vista. Ya teníamos un rato con las manos agarradas y mis manos sudaban como nunca en la vida por lo nervioso que estaba, él noto claramente y me lo pregunto, me puse totalmente rojo y luego me pidió que no le respondiera, que mi cara lo decía claramente.
El juego continuaba y no tenía ni idea si la chica se dio cuenta de que teníamos las manos agarradas pero todo lo que pensaba desapareció por un instante, Fernando metió otro gol, todos saltamos de la emoción gritando, lo veíamos correr por toda la cancha y luego señalar al cielo.
El juego termino y seguíamos arriba sentados viendo como les entregaban una copa, Fernando la sostuvo luego de ser levantado por sus compañeros y a mi lado seguía Daniel sosteniendo mi mano, su mano era muy cálida y no nos separamos ni de la emoción del gol.
No sé desde hace cuanto tiempo pero estaba perdido del mundo pensando en la mano de Daniel junto a la mía y no me percate de que la novia de Fernando junto con la acosadora estaban abajo esperándolo y Daniel y yo seguíamos parados, de un momento a otro él me miro y lo solté, baje lo más rápido que pude al campo y Fernando estaba abrazando a las chicas, luego cuando me vio fue directo a hacer lo mismo conmigo pero Daniel se metió en el medio y lo abrazo.
Casi por un momento olvide que Daniel seguía a mi lado y peor, casi olvide que él era parte del equipo de Fernando, luego de eso sus compañeros lo mojaron con algo como agua y le pasaron la copa, a pesar de que él se quejo un poco por el dolor en su pierna, al poco tiempo estaba saltando de la emoción con sus compañeros.
Me aleje un poco de ellos y me senté en las gradas a verlos celebrar, una señora se me acerco y me pido que la ayudara a bajar las escaleras y eso hice, cuando llegamos abajo Fernando corrió a donde estábamos y abrazo fuertemente a la señora era su abuela y luego me dio un fuerte abrazo a mí, le pedía que me soltara y no lo hacía, se sentía bien abrazarlo, estaba caliente y todo sudado pero no me molestaba, solo me hablo al odio.
Gracias por ir a cada juego, eres mi fan número uno y te mereces cada gol que metí hoy y en cada partido que estuviste apoyándome, eres como mi amuleto de la suerte. Luego me dio un beso en la frente y corrió a los vestidores junto a los demás jugadores
Daniel se acerco, traía un vaso en la mano y bebía algo, me ofreció un poco pero pase y luego se me acerco un poco más para decirme que la chica nos estaba viendo, entonces tomo mi mano nuevamente y la entrelazo con la suya, antes de que me diera cuenta me arrastro hasta los vestidores. Entramos y al momento de escuchar a los chicos hablar me soltó, si antes estaba algo impresionado cuando entre a los vestidores, ahora era una cosa diferente, los jugadores estaban desnudos corriendo por todas partes, jugando entre ellos lanzándose agua fría y otros tratando de bañarse para luego irse.
Fernando se estaba bañando por lo cual camine hasta el lugar donde lo encontré cuando llegue y espere que apareciera para darle la ropa que le traje pero apareció fue otra persona, era Daniel, me dijo que él también se bañaría para cambiarse e irse a celebrar con los chicos y se paró a mi lado un momento antes de pedirme que le sostuviera su bolso por un momento.
Mientras esperaba, Daniel se quito primero la camisa, así que pude ver su pecho definido junto con sus abdominales y sus brazos bien formados, el no era cuadrado como Fernando, Daniel era más esbelto por así decirlo pero tenía espalda ancha. Daniel se quería lucir frente a mí y se puso a hacer cosas raras con sus brazos como para marcar más sus músculos, luego se desabrocho el jean que traía puesto y se sentó para tratar de quitárselo.
Daniel comenzó a quejarse del dolor que sentía en su pierna pero igual intento quitarse el pantalón, luego con algo de vergüenza me pidió que lo ayudara y bajara su pantalón, se paro frente a mí y yo seguía sentado, y poco a poco baje su pantalón, hasta que quedo solo en bóxer Tenia bóxers verdes con carritos, era tierno sus piernas estaban bien y eso era gracias al futbol, se sentó y termino de sacarse los pantalones, se levanto nuevamente y se veía súper sexy solo en bóxer, hizo como un gesto para quitárselos pero se quedo pensando un momento, y hablo.
-Sería muy raro de mi parte que te pida algo en este momento?
-Depende de lo que sea? Dije algo nervioso
- Es algo raro Héctor, necesito tu ayuda para quitarme el bóxer. Me podrías ayudar como lo hiciste con los pantalones?
-Eh… Se… Sería muy raro, enserio no puedes solo?
-No puedo Héctor, me duele mucho mi pierna. Puso sus manos sobre su pierna y se quejo
-Para mí no es normal… Si… Si te duele mucho… Está bien.
-Héctor, solo tienes que poner tus manos en la elástica del bóxer y cuando yo me tape con el paño lo jalas hasta mis tobillos. No es algo muy difícil. Puedes hacerlo?
-Ehh… Esto... Ps… Está bien, solo lo voy a hacer porque realmente estas mal de una pierna Daniel pero ni se te ocurra decir nunca esto.
-Nunca, eso muere conmigo.
-Está bien.
Puse mis manos donde me indico que lo hiciera, se bajo un poquito su bóxer y pude ver que tenía algo de vello púbico, luego se notaba que el vello que se dirigía a su ombligo fue rasurado. El solo dijo que estaba listo y baje mis manos hasta sus rodillas de forma rápida pero igual pude ver un poco su pene que estaba dormido, Daniel era blanco pero tenias rasgos árabes muy lindos, su pene era un poco más oscuro que su tono de piel, termine de bajar el bóxer hasta el suelo y él se apoyo en mi espalda para sacar sus pies.
Cuando me levante seguía con su bóxer guindando en mi mano y el solo se limito a preguntarme si vi algo de mas a lo que le respondí que no y le entregue su ropa interior, hice una broma sobre los carritos en sus bóxer y le dije que me parecía tierno a lo cual el me dijo siguiendo la broma que podría enseñarme desde trenes hasta aviones, tomo un jabón en su mano y dijo que volvería en un rato.
Luego de ese incomodo y algo excitante situación apareció Fernando, saque todo lo que traje y se vistió rápido, salió a buscar a la chica y dijo que me esperaría afuera, me menciono que hablo con Daniel en las regaderas y que saldríamos los cinco a comer, le pregunte a quienes se refería y entonces note que también incluía a su nueva novia y a su amiga acosadora.
Ya tenía ganas de irme a casa y se lo hice saber para intentar salir de esa situación incómoda pero entonces uso su chantaje emocional en mi contra y no me quedo más opción que quedarme y al rato Daniel salió. Mi corazón se acelero de repente cuando lo vi, Daniel venia con su toalla colgando de su hombro y solo tenía un bóxer gris con trenes, me pregunto si me gustaba lo que veía pero se dio cuenta de lo que pregunto se escuchaba muy raro y luego aclaro que se refería al diseño del bóxer y no a otra cosa, me puse rojo de la vergüenza y le dije que eran geniales, cuando me dio la espalda para sacar algunas cosas de su bolso tenía un poco de sangre en ella.
Alarmado puse mi mano sobre la herida que tenía Daniel en su espalda y el rápidamente chillo e hizo gesto de dolor, me dijo que se lastimo poniéndose el bóxer en las regaderas y que le dolía, saco un poco de crema de su bolso y me pido que se la colocara en la espalda. Intente limpiar su herida con su toalla mojada y luego le puse la crema, se quejo un poco pero luego dijo que sentía algo frio, le ayude a ponerse la camisa y los pantalones, el mismo se puso sus zapatos y saco una colonia de su bolso * 212 VIP Men - Carolina Herrera* se la coloco y luego me coloco un poco cuando estaba desprevenido, dijo que fue para marcar su territorio, solté unas cuantas risas y salimos de los vestuarios.
Llegamos a nuestro destino, un famoso centro comercial de mi ciudad y caminábamos los cinco juntos, adelante Fernando con una chica a cada lado y detrás de ellos Daniel y yo hablando, dijimos que comeríamos pizza y así fue, de postre Fernando comió junto con las chicas helado mientras que Daniel y yo preferimos los churros con chocolate. Luego de comer, caminamos por todo el centro comercial y Fernando fue con su novia a comprarle algo mientras que Daniel, la acosadora y yo estábamos viendo unos libros, Daniel me dijo que lo siguiera un momento y eso hice.
Caminamos fuera del centro comercial a un balcón se que encuentra en el estacionamiento y que casi siempre está solo, el me recostó de la baranda del balcón y se paro frente a mí hablando en voz baja ¿Nos siguió verdad? Al final del pasillo estaba ella parada viendo justo a donde estábamos nosotros ¿nos está viendo bien? le dije que no, él me tomo por la cintura de repente, me pego a su cuerpo, pego sus labios de los míos suavemente y nos dimos un suave y tierno beso, el sin dejar de besarme y con los ojos cerrados medio roto nuestros cuerpos para que ella a lo lejos pudiera ver bien como nos besábamos, luego de unos segundo se separo de mi, tomo mi mano, la chica se quedo viéndonos y luego se alejo.
mi corazón latía como loco, no podía decir nada, parecía un tomate, estaba allí parado junto a Daniel sin decir nada y el tampoco lo hacía, solo me pidió que lo siguiera nuevamente
Muchas gracias por leer, espero que les guste. (Para los que les gusta los relatos con sexo, pronto van a tener de eso y más de lo que esperan) VALOREN Y COMENTEN. Gracias.