Engañada por las apariencias… menudo madurito

Quien me iba a decir que semejante maduro tenía eso entre las piernas… mostrando un aguante más digno de un joven semental que de un hombre de su edad… mmm.

Engañada por las apariencias… menudo madurito (Dura penetración Anal)

Mirad me presentare antes de nada… no quisiera pecar de maleducada, por lo que me presentare… me llamo Susana y me considero una ardiente sevillana que a pesar de tener 26 primaveras y ser géminis… tengo novio, no lo digo porque fuera algo malo pero si para haceros saber que el próximo mes de septiembre pasare por la vicaría y quizás muy a pesar mío… os dejare.

Como sabéis de mí… soy muy morbosa, me atrae el sexo con desconocido y si son maduros aun mas… buscando la morbosidad en sitios públicos, en los transportes urbanos, los metros y cercanías, los Pub de intercambios, me gusta dejarme hacer tanto a chicos como a chicas, ya que me cuesta decir "no". Aquellos contactos que me piden sexo solo por el hecho de hacerlo, os debo de refrescar la memoria al haceros saber que no me entrego de la misma manera, pues pierdo todo ese deseo por el morbo y lo desconocido.

Pero os debo confesar algo… tengo un defecto, me viene con facilidad por lo que creo que ya habéis adivinado… que soy multiorgasmica. También so debo decir que soy una sin vergüenza integral, muy simpática, fiestera, bastante loca... Vamos una chica con la que se puede pasar un buen rato, obviamente algo más de 15 minutos. Soy consciente que por mi forma de vestir me hace más destacable para ser manoseada, aunque no soy ni fetichista, ni exhibicionista, simplemente me gusta vestir de esta manera.

Me considero una adicta al sexo y sobre todo al morbo, me seduce enormemente el sexo esporádico y si es con desconocidos mejor que mejor y por supuesto con desconocidas, pero lo que más me vuelve loca es que me tomen por la fuerza eso si… siempre que sea previamente acordado. De mí quien me conoce sabe como soy realmente, los chicos o chicas que han tenido la suerte de haber estado conmigo íntimamente, dicen de mí que soy realmente ardiente, que soy un volcán. Si a esto unimos la morbosidad, que me atraen los sitios públicos y la idea de calentar al personal es un cóctel explosivo. Pero eso sí… lo que más odio es ser abordada por extraños aun a pesar que hayamos estado juntos, pues considero mi vida personal privada… no deseo que nadie haga público mi familia mi doble vida, pues como géminis que soy os debo de recordar que mi vida privada me pertenece… bueno creo que lo he dejado claro.

No os imagináis lo mal que me pongo al recordar mis experiencias… mmm, el solo recordarla me hace estremecerme de una manera no imaginada por ninguno de vosotros pues logro aumentar todas mis expectativas… aaahhh, como haceros llegar las sensaciones que tengo… tanto que no puedo evitar introducir mis manos entre mis muslos… ooohhh.

Teniendo la imperiosa necesidad de masturbarme... aaahhh, el sentir de como mis dedos rozan mis sensibles labios vaginales... uuummm, por no omitir el dedazo que comienzo sobre mi ardiente vulva... ooohhh, comenzando con la yema de mi dedo corazón en circulo y alternando de arriba hacia abajo sobre mi vulva... aaahhh, hasta hacerme estremecer y tener que cerrar mis muslos ante los tremendos orgasmos que voy sintiendo... ooohhh.

Mientras me estremezco... no puedo remediar llorar de placer, alternando mi respiración agitada con los espasmos... ooohhh, perdiendo a veces el sentido del tremendo orgasmo que me hace perder el control de mí misma, teniendo que sacar las fuerzas de donde ignoro tenerla… de mi fuerza de voluntad (joder, no me caigo porque Dios no quiere).

Me ocurrió hace algo más de tres semanas largas… para daros más detalle me ocurrió un jueves sobre las 15:45 horas de la tarde, pero creo que antes de comenzar con mi confesión sería mejor poneros en antecedentes… vale. Comenzare por deciros que a lo sucedido ese día no deje que mi novio me practicara sexo anal y su actitud me llevo a confesárselo, no quise decirle palabra alguna de lo que me sucedió quedándome guardada para mí lo sucedido… sobre todo el dolor.

Bueno comenzare… lo que a continuación os voy a confesar, os diré que a una semana de aquel día no tuve más remedio que confesárselo a mi novio y no me quedo mas remedio si no fuera por su insistencia a practicar sexo anal. Mi chico no acababa por comprender mi negación a practicarlo más aun sabiendo que soy una adicta a tal práctica, pero cuando le confesé lo ocurrido le sentó fatal... no por ser un cornudo consentido, pues yo soy de la misma naturaleza pero de menor índole (joder, por cada uno de sus infidelidades... yo he tenido al menos cinco).

Me hizo saber que su malestar no era por la infidelidad, sino por la poca confianza que he mostrado y que últimamente le estoy  demostrando, haciéndome saber si realmente deseo contraer matrimonio con él y si habría aunque fuera una remota casualidad que yo dejare atrás esta vida tan libertina que llevo, preguntándome en plan severo si mis promesas no se quedaran en el tintero como tantas veces le he prometido.

Aun recuerdo el rostro de mi novio abatido cuando me confiesa... "que tras haber escuchado mis explicaciones primero y después mis excusas", duda de que pudiéramos cumplir nuestro compromiso, siendo el que ahora duda y hasta piensa en posponerlo a modo de que sea yo quien de una muestra de que puedo cambiar.

Bueno comenzare… esa noche trasnoche y el motivo no fue por que estuviera follando ni mucho menos chateando con algún chico o chica, sino meditando por las palabras de mi novio y la consecuencia no fue otra que quedarme dormida… llegando tarde a la oficina. Ese día fue muy pesado en la oficina y aunque deseaba inicialmente hacer alguna que otra locura como un admirador me tentaba, no tuve más remedio que contenerme al menos momentáneamente. Pero gracias a unos compañeros el día no se me hizo tan pesado… pues tuvo su compensación, agradecí a un compañero en los aseos de la planta inferior la ayuda al papeleo… satisfaciéndole en todo lo que pude y más tarde a una compañera, mi agradecimiento no fue ir tan lejos… pues nosotras nos podíamos apañar en los aseos de nuestra propia planta… mmm, ambos fueron maravillosos.

Bueno… pero tras salir de la oficina y teniendo en mente la promesa que le hice a mi novio… finalmente me acerque, más por saciar mi curiosidad de que me podría acontecer ese momento y por otro lado por venganza hacia mi novio. Tras entrar por la entrada de acceso a los aparcamientos de la torre de Triana, tome el acceso de la derecha dirigiéndome hacia un hueco donde tras continuar por la carretera accedes a la zona de sexo esporádico o zona de cruissing, donde por más que siempre digan que salen del armario aun mas del 75% ven a una chica y van a por ella… en mi caso a por mí.

Nada mas parar mi coche a un lado de la carretera junto a unos árboles un vehículo me pito en  repetidas veces haciéndome llamar la atención, no era más que uno de mis viejos amigos el cual según parece nada mas reconocer mi coche, conducía a gran velocidad a modo de alcanzarme. Tras bajar de su vehículo y se acerco al mío con rapidez abrió mi puerta y sin mediar palabra me puso su grande en la boca… mmm,

Comencé a masturbársela y acerque mi boca comenzando a chupársela… comencé por chupar su grande… mmm, entrando y saliendo de mi boca mientras que con una mano la tenía tomada por su tronco… mientras con la otra mano magreaba sus testículos… ooohhh. Dirigió una de sus manos hacia mis senos… comenzando a acariciármelo mientras su otra mano me acariciaba mi  nuca… aaahhh.

Ooohhh… me alerto de su pronta llegada si continuaba con tal dedicación y en vez de detenerme, levante su tronco y comencé a lamer entre sus testículos y su orificio… aaahhh, soltando su tronco y sin manos tragarme su polla hasta sentirla muy dentro… ooohhh.

  • “No Susana… no, no quiero correrme aun… ooohhh, Dios… Susana, deseaba follarte”, me exclamaba mientras los chorros de su néctar llenaban mi boca.

Mientras relamía hasta la última gota no dejaba de agradecerme el gesto y sobre todo lamentaba no haberme follado, pero me ofrecía quedar otro día… dejando la puerta abierta a modo de poder desplazarnos a otro lugar, donde pudiéramos estar más a cubierto y por qué no cubiertos por una sabana. El precisamente sabe que no me van las camas… pues me pone estos lugares, tras arreglar sus ropas nos despedimos con un tierno beso y hasta otra.

No paso mucho tiempo hasta que me encontré a otro amigo… siendo esta más que rápida… fue veloz, pues nada mas introducir mi mano en el interior de sus pantalones… se corrió, tras excusarse y pedirme perdón por su comportamiento… alegando que se la estaba masturbando mientras espiaba a una pareja. Pero a raíz de esta comenzó mi tercer encuentro, estaba despidiéndome de mi viejo amigo... este no dejaba de manosearme el culo, sabiendo bien que estábamos siendo observados.

Tras marcharse mi amigo me encamine hacia mi coche que estaba a unos metros, llegue... abrí y me metí, espere unos minutos a modo de ver si alguno se acercara. Como ya conozco el gallinero tuve razón un mercedes azul marino se acerco, me hice la despistada mientras el coche pasaba cerca de mi vehículo y su conductor me miraba, tras pasar de largo dio una vuelta y en esta ocasión detuvo su vehículo detrás.

Paro el motor y se bajo del coche... mientras lo miraba desde el espejo retrovisor hasta que se detuvo a la altura de mi puerta, llamo mi  atención mediantes toques en el cristal provenientes de sus nudillos.

  • "Hola estas sola o esperas a alguien", me pregunto.
  • "Espero a un amigo... pero viendo la hora, quizás este no aparezca", le conteste.
  • "Mira no quisiera meter la pata... pero cuanto cobras y que servicios realizas", me pregunto nuevamente sin pelos en la lengua.
  • "Como... yo no soy ninguna puta", le conteste incrédula y sorprendida por su pregunta.

Este se disculpo rápidamente al tiempo que me explicaba su error y que era debido, me explico que me vio salir del interior de otro vehículo y despedirme de un hombre que por la edad podría ser mi padre, llegando a pensar que le he hecho algún servicio. Claro está acertaba en todo pero la verdad es que no me daba la gana darle la razón, escondiendo el bulto de manera de darle otra explicación... obviamente menos creíble.

Me invito a estar juntos mientras me acariciaba el culo, me hice de rogar y sus comentarios graciosos me hicieron reír, mientras con su mano derecha me acariciaba mi espalda... dibujando con la yema de sus dedos... mmm (joder, me daba escalofríos… uuummm), ascendía hasta mi cuello y descendía hasta mis nalgas. Para entonces ya recargaba su cuerpo sobre el mío a modo de besar mi cuello... ooohhh, jugueteaba con los lóbulos de mis orejas con sus labios y al tiempo que con su mano izquierda acariciaba con la amplitud mis senos... uuuhhh, intentaba besarme... cosa que rehuía e intentaba explicarle por mi parte que no me gustaba besar.

Los coches pasaban cada vez más con insistencia por lo que nos pusimos por detrás de su vehículo, estando tapados por el coche por delante y por la loma de tierra (paralela a la vía del tren) por detrás. Tomo mi mano conduciéndola hacia su entrepierna... la note dura pero no erecta, baje la cremallera y tras introducir mi mano... saque de su interior su miembro semiflácido... mmm.

Comenzándosela a masturbar... ascendiendo y descendiendo mi mano por ese maduro miembro, aun recuerdo como este hombre manifestaba su placer de forma alarmante... e incluso parecía que estuviera sufriendo más que gozando. Mientras le pajeaba y al mismo tiempo alternaba con magrearle sus testículos, este había introducido ya su mano por debajo de mi vestido y jugueteaba con mi encharcado coñito... ooohhh. Me suplico que me arrodillara y se la chupara, ofreciéndomela toda para mi disfrute... me dijo.

  • "Agáchate y disfruta... tuya es, enséñame lo que sabes hacer", me pidió.

Me arrodille y en crucillas... tome su miembro con mi mano, la sentía vibrar y comencé por lamer su grande... mmm, levante su tronco y descendí entre suaves besos hasta sus genitales e incluso entre estos y su orificio anal... escuchándolo nuevamente gemir alto. Tras magrear sus testículos primero y chupárselos después, comencé a introducírmelo dentro de mi boca como pude... teniendo todo el cuidado posible... mmm. Su gran mano en mi nuca evitaba que me pudiera retirar e incluso me obligaba a tragar mas, cuando me introduje su grande en la boca... tantee con la yema de mi lengua su dureza, pues poco a poco fue tomando forma... dándome cuenta que me costaría tragármela... aaahhh.

Su polla era más gruesa de lo que había pensado... mmm, cuando intente introducírmela en la boca... torpemente por mi parte roce con mis dientes y como consecuencia, recibí un golpe en mi cabeza al tiempo que una reprimenda... haciéndome saber que tuviera más cuidado (imagino que eso os duele enormemente, pero no pude evitarlo). Abrí todo lo que pude la boca e incluso me dolía a mi misma la mandíbula mas parecía que la iba a desencajar pues me crujió y me costó cerrarla. Pero nuevamente me pasó y fue por culpa del cansancio que otra cosa, pero en esta ocasión en vez de ser un golpe en la cabeza fue un golpe en la cara... cosa que no me gusto demasiado.

Comencé otra vez pero solo me introducía un par de dedos mas después de su grande al tiempo que lo masturbaba... mmm, mientras con mi otra mano no dejaba de hacerme a mi misma un dedo... aaahhh. Su polla estaba totalmente erecta... dura como una piedra y eso que me confesó que se había corrido una primera vez, gemía cada vez mas rápido y seguidamente, su tono era alto y la presión de su mano en mi nuca me hacía presagiar su pronto venida... mmm. En no más de unos minutos tres chorros caliente de semen llenaron mi boca y por la presión de su mano a modo de evitar retirarme, acabe por tragar... continuando mi labor dándole placer y dándome cuenta que a pesar de su abundante corrida, esta aun continuaba erecta y dura.

  • "Quiero follarte... me dejarías", me pidió.
  • "Tú no te escapas hoy sin follarme, quieto sentir ese grueso y duro tronco dentro... uuummm", le conteste.

Me sugirió hacerlo en la parte trasera de su vehículo, que me tendiera sobre el asiento trasero... ya sea boca arriba o boca abajo, eso lo dejaba a mi parecer. Claro está le dije que si... pero que debía de ponerse un preservativo, pues a desconocidos no me gusta que me follen sin él... claro esta mentí, obviamente no puso objeción alguna... solo la aclaración que él no tenía.

  • "Pero yo no tengo ninguno", me dijo.
  • "No te preocupes... yo sí, soy una chica precavida y suelo traer de todo", le conteste.
  • "Que sueles traer... es más por curiosidad", me pregunto.
  • "Suelo traer preservativos, toallitas húmedas, pañuelos de papel y lubricantes", le respondí.
  • "Veo que vienes preparada para todo", me dijo.
  • "Una curiosidad... lubricante para que", me dijo preguntándome de nuevo.
  • "El lubricante los suelo usar a veces por las pollas muy gruesas... suelo utilizarlo, cuando desean penetrarme analmente y me cuesta... mmm", le conteste.

Por su cara de sorpresa y de incrédulo, me dio la sensación que este no ha practicado el sexo anal. Invitándole a ello tras sugerírselo de forma cómica y picara... mmm.

  • "Te gusta que te follen por detrás... entonces te gusta más que por delante", me pregunto.

Claro está sin dejar de masturbarlo, le hice saber que yo al menos soy adicta al sexo anal y que incluso disfruto más que vaginalmente. Por su cara me dio a entender Pero que no soy la única (joder, que no soy un bicho raro), pues conozco muchas que al igual que yo les gusta tanto... analmente o más que por su coñito... vaginalmente.

Abrió la puerta trasera de su coche y me pidió que me sentara, tras sentarme y el arrodillarse al tiempo que separaba mis muslos... mmm, subió mi vestido con una de sus manos... mientras con la otra bajaba mis braguitas, acto seguido hundió su rostro en mi ingle... ooohhh.

Aun recuerdo cuando le di el preservativo pues sorprendida me quede al observar cómo le costaba colocárselo e incluso este me dijo que le oprimía mucho su grande, pero finalmente se lo puso. Con su gran polla en mano se inclino apoyando sus rodillas en el asiento al tiempo que su grande me penetraba... ooohhh. Cogió mis piernas y se las coloco sobre sus hombros... aaahhh, incluso a pesar de estar bien lubricada me molestaba un poco, comenzó a penetrarme muy despacio... muy despacio al tiempo que me preguntaba... "te gusta".

  • "Si... si... uuuffff", le contestaba mientras me agarraba a algo a modo de aguantar el dolor... mmm.

Cuando se dejo caer... me agobie, no porque ese engendro estuviera completamente dentro de mi... sino por el poco espacio, no padezco claustrofobia pero tenía miedo por el escaso espacio y agobiada por que no podía moverme... mmm, como poderos explicar las sensaciones que tuve en minutos al tener el cuerpo de este hombre encima… de sentirme encajonada entre el respaldar y los asientos delanteros... estaba “misin”.

Su pesado cuerpo sobre mi... me agobiaba y eso que estaba gozando, pero sentía como me faltaba el aire. Le tuve que pedir que fuera más lento... que no había prisa... aaahhh... uuuffff... aaahhh, sentía como sus genitales golpeaba mi pubis una vez tras otras... eran penetraciones completas... uuummm, pero a pesar de estar empapada sentía como su grueso tronco me rozaba mis paredes vaginales y a pesar de sentir molestias más que dolor, continuaba gozando y teniendo orgasmos... aaahhh.

Sus manos acariciaban mi cuerpo... en especial mis senos y cuello, mientras besaba y lamia mi cuello y oreja... ooohhh. Llego a tirar de mi vestido hacia arriba... sacándomelo por el cuello y dejarme en sujetador y medias, no tuve más remedio que pedirle hacerlo de otra manera pues me sentía angustiada (Joder y encima refunfuñando… parecía que encima el viejo se había molestado y todo). Aun recuerdo su maniobra al salir del coche, como al tiempo que levantaba su pesado cuerpo del mío y regulaba hacia atrás… sentía su miembro salir de mi escocido y dolorido orificio vaginal... ooohhh, preguntándome...

  • "Vamos a ver... como prefieres que te folle, pensé que tenias más resistencia... obviamente me equivoque contigo, no eres puta", me soltó.

Mientras el viejo se sentaba sobre el asiento trasero... hacia fuera... mmm, alargo sus brazos hasta posar sus manos en mi cintura y hacerme atraer hacia el... mmm. Retrocedí hasta golpearme con sus rodillas... el mismo me hizo separar mis piernas mediante palmadas, tomando su miembro con una de sus manos al tiempo que tomaba mi mano... me dijo.

  • "Siéntate tu sobre ella y se tu misma la que te la introduzca", me soltó nuevamente.

Claro esta probé su sugerencia y tras pasar mi pierna izquierda sobre sus piernas, yo misma una vez tome su miembro comencé a restregarme su grande sobre mi orificio vaginal, mientras el viejo magreaba con ambas manos mis senos sobre mi vestido... aaahhh.

Poco a poco me estuvo entrando... ooohhh, marcando yo misma las pautas... aaahhh. Coloque mi mano izquierda sobre el techo del coche mientras la derecha me sujetaba al marco de la puerta... uuummm, disfrutaba de cada centímetro y más aun después de tenerla toda dentro... ooohhh. No dejaba de resoplar y jadear... llegando a arquear mi espalda hacia atrás, sentir esa vergota dibujar sobre mis paredes vaginales... sintiendo un escalofrió... uuummm. No precisamente porque volvió a quitarme el vestido, sino por los orgasmo que tuve... aaahhh.

  • "Desearía penetrarte desde atrás, me dejas", me pidió.

Obviamente dude mas ante tal grosor pero me prometió que ante algún síntoma de dolor por mi parte o queja alguna… me la sacaría, mientras me colocaba el vestido nuevamente y en esta ocasión no me puse el sujetador, me incline sobre el asiento trasero... apoyando solo mi pierna flexionada y ofreciéndole una vista de mis nalgas privilegiadas, mientras le comentaba...

  • "Penétrame… pero hazlo despacio, no me seas bestia y demuéstrame lo macho que eres”, le solté.

Joder… fue bestial cuando tras colocar su grande en mi orificio anal… comenzó a apretar… ooohhh.

  • “Despacio… despacio”, le decía.

Siseándome me mandaba a callar y me rogaba que me tranquilizara… mientras presionaba y sentía su grande introducirse en mi orificio… uuuyyy. Lo más difícil según el ya estaba conseguido… por lo que comenzó a moverse muy despacio, sujetándome con ambas manos mi cintura y hasta hubo momentos en que olía hasta a goma quemada y claro esta... eso era el preservativo, empujaba y solo me introdujo su grande... ooohhh, despacio... despacio. Llego a sugerirme que le echara lubricante sobre su polla y en mi orificio, gran idea tuvo y tras darle el bote... El mismo me lo echo... ooohhh, me introdujo primero un dedo... continuo con dos y finalizo con tres al mismo tiempo que yo, me masturbaba... aaahhh.

Tras embadurnarse el mismo su polla... comenzó nuevamente a intentar penetrarme, poco a poco su grande entraba... a pesar del dolor que sentía... disfrutaba, no penséis que soy masoquista pero una polla de tal diámetro pocas veces la veo. Me pidió un último esfuerzo... que aguantara un poco más, pues deseaba tener toda su polla dentro de mi (coño, eso fue lo que me rompió)

En su último esfuerzo no solo rompió el preservativo… sino algo dentro de mí, aunque también es verdad que tras rasgarse este… su polla entro en mi orificio anal totalmente y sin impedimento alguno… aaahhh, comenzando a embestirme muy duramente… cada una de sus penetraciones fue muy dolorosas pero al mismo tiempo muy disfrutada. No me pidáis que os lo explique pues hasta yo misma lo ignoro como accedí a continuar a pesar del tremendo dolor… aaahhh, claro está que se que os cuesta comprenderlo… pero no os sabría decir el goce que sentí en cada una de sus embestidas… aaahhh… ooohhh… aaahhh… uuummm, tras esas endiabladas embestidas donde sentía sus testículos golpear mis nalgas… aaayyy.

Por fin llego su orgasmo tan alarmante como otros, tras correrse dentro de mí y no sacarla hasta que no soltó la última gota, por fin la saco y por lo que vi… estaba tan dura como me la introdujo con la única nota, que en esta ocasión su polla estaba embadurnada entre mierda y sangre, sugiriéndome que debía de tener hemorroides interna… cosa que me extraño, porque yo que sepa nunca he tenido hemorroides.

He tenido que ir a mí medico el cual tras hacerme una analítica y eliminar cualquier sospecha de infección alguna por mi parte, este me ha confirmado que tengo hemorroides internas y fisuras… estas se hayan producido por una mala indigestión o motivo de estrés, mientras que las fisuras ha sido por algo que me he introducido muy grueso. El médico me hizo saber que tal afección se considerada normal (según sus palabras… banal), haciéndome saber que estas pueden ser muy molesta y hasta dolorosa.

Aconsejándome dejar el sexo anal por un tiempo… más hasta que no se me cure las  hemorroides, ya que me podrían ocasionar mucho dolor y hasta sangrado… pero si mi insistencia es muy grande, me aconsejo que al menos tenga mucha lubricación. Pero bueno mis queridos lectores y lectoras no me enrollo más, hasta aquí llego mi confesión, de esta ardiente Sevillana que debe de marcharse hasta otra nueva confesión... pero si queréis saber más de mí, ya sabéis mandarme vuestro emails a…

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