Encuentro poco casual

Un joven estaba sentado en un baño del centro comercial cuando una voz proveniente del cubiculo de a lado le pedía le pasara papel higiénico; era una voz ronca que lo sorprendió completamente, jalo papel del contenedor y se lo paso por debajo de la pared divisoria que permitía ver los tenis del individuo solicitante. Ambos se mantuvieron en sus respectivos cubiculos por mientras atendían sus necesidades fisiológicas y casi simultáneamente salieron de ellos para lavarse las manos; el de voz ronca miraba asombrado a quien le había ayudado en su penosa situación ya que no le era común ver a un albino quien al sentirse observado tímidamente bajaba su cabeza sin mencionar palabra alguna. El de voz ronca tomo papel del contenedor para compartirlo con el albino y así secarse sus manos.

Me llamo Diego- dijo el de voz ronca

Saúl, mucho gusto- dijo el albino con un tono de voz bajo

Que harás mas al rato?

Voy a ver que hay en los cines

Te acompaño yo también voy para allá

Durante el trayecto a los cines ubicados en el centro comercial conversaron sobre sus gustos y aficiones; casi tenían la misma edad, Saúl era muy tímido así que Diego dirigía la charla. Por la claridad de la piel de Saúl este vestía ropa de esa misma tonalidad para que no fuese tan perceptible su condición albina pero al ir caminando junto a Diego quien por su tipo de ropa se mostraba su piel morena; era peculiar verlos juntos pues además de contrastar en el color de piel y ropa, sus cabelleras eran opuestas; la de Diego era rizada y abundante en cambio la de Saúl era lisa con un corte estilo ejecutivo, como el centro comercial era techado Saúl podía exponer su piel sin ninguna molestia de los rayos del sol trayendo puesto una playera sin mangas y unas bermudas dejando a la vista del medio muslo al tobillo. Diego traía un short de lycra y una sudadera de algodón que le cubría la zona pélvica.

Revisaron la cartelera de los cines y compraron boletos ingresando a una sala; cuando se apagaron las luces Diego estiro sus brazos y los coloco sobre el respaldo de los asientos quedando su brazo izquierdo en los hombros de Saúl que no le molesto, en algunas ocasiones sus piernas se rozaban entre si mientras miraban la película.

Mas tarde, ambos salieron de la sala comentando la película cuando se les acerco un joven con modales femeninos.

Milagro que te encuentro- dijo el joven con voz delgada y chillona- Jamas volviste a llamarme; acaso no te gusto como cogimos después de conocernos en los sanitarios?

Eso lo tratamos luego- dijo Diego al ver a Saúl alejarse unos pasos de ellos

Eres como todos; nomás le rompen a uno el culo y no se vuelven a acordar de uno- grito el joven siendo escuchado por Saúl quien aceleraba el paso pero Diego lo alcanzo

Déjame explicarte- dijo Diego sin lograr que Saúl se detuviera

No tienes nada que decirme; allá tu vida, respeto las costumbres de los demás

Solo déjame darte mi versión

Para que?

Para que tomes una decisión acertada- dijo Diego logrando que Saúl se detuviera- Es cierto que tengo sexo con hombres pero no practico la penetración por eso ese tipo esta molesto conmigo ya que quería que se lo hiciera así

Eso es todo?

Lo sucedido en el baño fue cierto; no lo hice con planes de conquista para contigo, espera…me agradas y quisiera contar con tu amistad

Saúl se había vuelto desconfiado debido a las burlas recibidas por los demás por ser albino pero también porque había sido victima de una violación por parte de un maestro cuando estuvo en la secundaria; se había sentido muy a gusto con Diego conviviendo y tampoco quería perder su amistad pero la preferencia sexual de Diego le preocupaba, no creyendo en la sinceridad de este. Diego al notar el silencio de Saúl se alejo y aquel joven se acerco a Saúl.

De la que te libre, guapo- dijo el joven al oído y siguió a Diego quien no se daba cuenta de ello pues en su mente maldecía el momento en que ese joven evidencio su preferencia sexual ante Saúl

Saúl continuo su camino y observo como Diego discutía con aquel joven causándole remordimiento por rechazar a Diego; observo como el joven se alejo de Diego después de haberle dado una bofetada, Saúl se acerco a el.

Estas bien?- pregunto Saúl

Si, no me rasguño, verdad?- dijo Diego

No, solo traes roja la mejilla, eres un vanidoso!

No es eso, lo que pasa es que los rasguños en la cara dejan marca y no quiero que los demás se mofen de mi

Ojala las burlas hacia mi fueran así de simples

Te invito un café

Ya tengo que irme pues el servicio de transporte publico esta próximo a concluir

Yo te llevo a tu casa; anda, no me dejes solo después de esta escena de celos de telenovela cursi

Saúl acepto la invitación y ambos se dirigieron a una cafetería donde reanudaron su conversación que había sido interrumpida por aquel joven.

Mas tarde, el vehículo de Diego se estacionaba en la cochera de la casa donde vivía Saúl; la cual estaba ubicada en un pequeño condominio horizontal.

Me permites pasar a tu baño?- pregunto Diego- Tanto café ha alborotado mi vejiga- comento sonriendo

Ambos bajaron del vehículo para ingresar a la casa; Diego se dirigió al baño mientras Saúl fue a la sala para encender el aparato de sonido, la melodía era del agrado de Diego quien imaginaba a Saúl bailando solo en la sala pero cuando salio del baño observo a Saúl sentado en el sofá escuchando la música.

Como estas sentado mientras esa música suena?- pregunto Diego acercándose a Saúl moviendo su cuerpo al ritmo de la melodía

No se bailar- respondió Saúl tímidamente

Pues no me iré hasta enseñarte como mover el cuerpo

Diego le fue dando instrucciones a Saúl que comenzaba a disfrutar de la danza como nunca pues por su albinismo se había mantenido relegado de la vida social; Saúl tenia algunas amigas con quienes asistía a las fiestas organizadas por la empresa donde trabajaba pero con ellas solo bailaba abrazado evitando pisar los pies de ellas, Diego no le enseñaba mas pasos a Saúl hasta ver que los dominaba. La música había sido el ingrediente idóneo para que sus cuerpos sudaran al máximo despojándose Diego de su sudadera y Saúl de su playera.

Ahora te mostrare unos pasos cachondos para que provoques a las viejas- dijo Diego quien movió su cuerpo seductoramente pasando sus manos por su torso y zona genital; jalaba su short de lycra afirmando su bulto pélvico- Haber demuéstrame de lo que eres capaz, semental

Saúl se había logrado desinhibir completamente así que repitió los movimientos que hizo Diego bajando el zipper de su bermuda y metiendo por ahí sus manos; las exclamaciones de Diego motivaban a Saúl para continuar moviéndose seductoramente, aquel estaba abstraído no solo por la blancura de aquella piel sino por como estaba marcado ese cuerpo que estaba cubierto por un fino vello blanco. Saúl seguía moviendo se cuerpo sin importarle que su pene erecto saliera por la abertura del cierre, Diego al ver el tamaño de aquel pene se arrodillo y metió sus manos por las piernas de la bermuda acariciando el trasero de aquel mientras sus ojos no dejaban de observar ese pene erecto completamente blanco y con un glande de color rosa.

Vaya fierro que te cargas, amigo!- exclamo Diego- No me explico como tus amigas no lo gozan

Por temor a quedar embarazadas y tener un hijo albino- respondió Saúl

Para eso existen los preservativos y condones!

Lo se pero recuerda que no son completamente seguros

Te molestaría tener un hijo albino?

A mi no aunque se que su vida no seria tan sencilla

Pero si tienes fajes con ellas?

Eso si pero no practico la penetración

Que tal te la maman?

No penetro la boca tampoco

A poco temen quedar embarazadas por la boca?

Quizá no les agrada el sabor del semen

Me encantaría degustarlo

En la mente de Saúl vinieron las escenas de violación de la que fue varias veces victima por aquel maestro de secundaria así que se trato de alejar pero como los brazos de Diego estaban dentro de su bermuda se lo impedía.

Disculpas por mi atrevimiento- dijo Diego comprendiendo la reacción de Saúl

Perdóname a mi; no tengo algo en contra tuya- dijo Saúl sin revelar sus recuerdos

Te reitero que lo sucedido en el baño contigo fue circunstancial; jamás lo hice con la intención de tener sexo contigo, en verdad no había papel higiénico

Eso me ha quedado claro y me he sentido muy a gusto contigo conversando y ahora bailando

Del pene de Saúl brotaba lubricante el cual se desplazaba por el tronco de aquel y Diego observaba.

Tu palo requiere atención- dijo Diego mirando a los ojos de Saúl, los labios de aquel estaban a unos milímetros de distancia del pene de Saúl- Pero te respeto- continuo sacando lentamente sus brazos de las bermudas acariciando sus manos la parte trasera de aquellas piernas blancas y bien delineadas

Saúl estaba confundido pues su cuerpo estaba disfrutando de esas caricias y exigía ser atendido pero su mente lo bloqueaba para tomar una decisión.

Lo siento- balbuceo Saúl mirando a Diego que seguía arrodillado

Yo también; tienes una verga envidiable y mira que te lo dice alguien que ya ha visto bastantes, no te asustes no soy un promiscuo- comento Diego sonriendo- Será mejor que me retire- dijo levantando su pierna izquierda y apoyándola en su pie

Saúl sabia que al irse Diego tendría que masturbarse para liberar esa tensión en su pene así que sin pensarlo mas sus manos se posaron en la cabeza de Diego para acercarlo a su pene erecto y húmedo por el lubricante y sudor; Diego no hablo para con su lengua acariciar aquel pene y saborear ese lubricante, el paso de esa lengua alertaba el sistema nervioso de Saúl provocándole un gozo inmenso incrementando su respiración. Saúl inhalaba profundamente y exhalaba lentamente mientras los labios y la lengua de Diego atendían aquel pene color leche que se expandía conforme era acariciado por aquellos; Diego no creía poder metérselo en su boca debido a su tamaño aun cuando la abriera lo mas que pudiera así que pasaba su lengua por el orificio del pene y besaba el glande, a Diego le excitaba saber el placer que Saúl estaba sintiendo así que no necesitaba que su cuerpo fuese atendido. Su short de lycra estaba humedecido por el lubricante que salía de su pene oculto en aquella prenda. Las piernas de Saúl se debilitaban pero no quería interrumpir a Diego quien desabrocho la bermuda cayendo esta al suelo; ambos se movieron al sofá sentándose Saúl con las piernas separadas y entre ellas Diego se colocaba para ahora lamer toda la zona genital de aquel completamente, su lengua acariciaba cada centímetro de piel y en ocasiones se detenía en las ingles así como debajo de los testículos. Para Saúl esta experiencia era completamente opuesta a lo que había vivido en las violaciones de su maestro de secundaria pues Diego buscaba el gozo en aquel y no en el suyo propio; observaba como Diego se compenetraba en su cuerpo con su rostro sumergido y sus manos acariciando su torso, Saúl no pudo contenerse mas así que eyaculo estrepitosamente cayendo su semen en cuello y mejillas de el mientras Diego pasaba sus labios por el tronco de aquel pene y esos testículos aun cargados de lefa. Ambos quedaron callados recuperando la normalidad en su respiración.

He sido algo egoísta contigo- comento Saúl

Para nada mi shorts esta completamente húmedo de mi semen- menciono Diego- Me encanta tu verga y podría disfrutarla eternamente hasta podría decir que quisiera sentirla en mi culo

Jamas lo haría- titubeo Saúl

Tienes condones?- pregunto Diego y Saúl movió su cabeza negando- En la cajuela de mi auto traigo una maleta con ropa y quizá traiga algunos

Vas a viajar?

No, esa maleta la uso para cuando voy al club a hacer ejercicio

Yo voy por ella sirve que te das un baño pues ha de ser incomodo traer el short húmedo

Bastante pero valió la pena

Diego se metió en la regadera mientras Saúl salio de la casa para obtener dicha maleta; el condominio horizontal lucia tranquilo pues ya era de madrugada así que Saúl trato de no hacer ruido regresando a su casa con la maleta estando Diego aun en el baño, Saúl le dejo la maleta sobre el lavabo y se quito el semen que traía en el cuello y torso con una toalla.

Mas tarde, Diego y Saúl bebían cerveza mientras la música seguía sonando; ambos bailaban al ritmo de la melodía hasta quedar exhaustos. Saúl se acostó en el sofá y Diego se arrodillo ante el besando su cuerpo poniendo especial atención en el cuello, tetillas y muslos; cubrió el pene de Saúl con un condón lubricado poniéndose algo de este en su ano con sus dedos para facilitar el ingreso de aquel. Diego se sentó sobre Saúl colocando su trasero sobre la zona genital; el pene de Saúl estaba erguido y expandido siendo apresado por las manos de este mientras Diego con sus manos separaba sus glúteos hasta sentir el glande en la entrada de su orificio anal. Las piernas de Diego estaban dobladas y apoyado con sus rodillas fue dejando que lentamente ingresara el pene de Saúl en su ano el cual dejaría de ser virgen; el lubricante del condón facilitaba aquella faena a pesar de lo estrecho del ano y el grosor del pene. Estando el pene completamente inmerso en aquella cavidad Diego sentía como latía dentro de el aprisionándolo con sus esfínteres; Saúl disfrutaba demasiado pues ahora su cuerpo no era usado sino complacido, posteriormente el cuerpo de Diego se movió de manera circular quedando de manera perpendicular con respecto al cuerpo de Saúl. Estando en esa posición Diego se levantaba un poco para liberar la mitad de aquel pene y después volverlo a ingresar completamente; ese vaivén lo repetía conforme el ritmo de la música, como ambos ya habían eyaculado sus cuerpos podían prolongar su danza sensual, luego el cuerpo de Diego se recostó sobre el de Saúl para luego moverse ambos y quedar colocados de manera lateral. El trasero de Diego se movia de manera circular y lateral para después Saúl continuar el ritmo moviendo su pelvis sacando parte de su pene para volverlo a ingresar; las mejillas de ambos se rozaban entre si y sus manos acariciaban sus cuerpos, Saúl fue incrementando la velocidad de sus embestidas y pareciera como si quisiera vengarse en Diego por las violaciones perpetradas por su maestro de secundaria. Aunque para Diego el placer se estaba convirtiendo en dolor no interrumpió a Saúl, al contrario lo motivaba a hacerlo con mas fuerza sintiendo un ardor en su ano que recorría toda su espina dorsal hasta llegar a su nuca; como Diego no practicaba la penetración se estaba dando cuenta del placer que no proporcionaba a sus amantes. Diego cubrió su pene con un condón para no ensuciar el sofá con su semen mientras sus esfínteres se dilataban cada vez mas; Saúl abrazo a Diego fuertemente hasta sentir como su semen llenaba el condón, Diego sentía los latidos del corazón de aquel y quiso besarlo en la boca pero no le fue permitido. Eso no le afecto a Diego pues habían practicado otras cosas más satisfactorias; así se quedaron ambos cuerpos juntos hasta que los rayos del sol ingresaron en la casa.

Ninguno de los dos despertó hasta que tocaron a la puerta siendo el vigilante del condominio iniciando su turno; Saúl se levanto rápidamente pasando primero al baño y poniéndose la bermuda antes de abrir la puerta pero por la prisa no subió el cierre.

Disculpe la molestia- dijo sarcásticamente el vigilante al notar que Saúl se había despertado recientemente- Solo estoy corroborando el vehículo estacionado en su vivienda

Es de un familiar, un tío lejano- respondió Saúl bostezando

Solo firme este documento para seguir con el reglamento del condominio

Saúl se apoyo en la puerta para firmar dicho documento mientras los ojos del vigilante no dejaban de mirar su cuerpo semidesnudo ya que es la primera vez que observaba a Saúl con poca ropa; pero lo atrajo mas ver como se asomaba el glande por la abertura de la bermuda, así que decidió conversar un poco mas.

Si su tío se quedara con usted por un buen tiempo, le pido que nos regale una copia de su identificación- comento el vigilante- Usted entiende que simplemente hago mi trabajo- comento teniendo sus ojos fijos en aquella bermuda con el cierre abajo permitiendo que saliera parte del pene

Solo esta de paso y entiendo su labor; por eso elegí vivir en este condominio- comento Saúl regresándole el documento

Por cierto, que paso con su automóvil?

Esta en la agencia en su mantenimiento preventivo

Bueno, no lo interrumpo mas y agradezco su atención

Que tenga buena jornada- dijo Saúl para luego cerrar la puerta y sentir a Diego detrás de el

Así que soy tu tío, eh!- dijo Diego provocando cosquillas en Saúl- Venga para acá mi sobrinito por decirme viejito- menciono continuando con las cosquillas

Detente que el vigilante puede estar aun cerca- menciono Saúl entre carcajadas

Quizá lo espantaste con tu trompa de elefante- dijo Diego mostrándole a Saúl que su pene estaba casi afuera de la bermuda

Ambos se alejaron de la puerta para dirigirse a la cocina y tomar algo de jugo; sus estómagos exigían alimento así que se bañaron y salieron de la casa para comer en el centro comercial donde se habían conocido.

Espero no llegue otro sicótico amante tuyo a arruinarnos la comida- dijo Saúl bromeando

Que opinarías si te dijera que por ti soy capaz de dejar mi vida donjuanesca?- pregunto Diego seriamente

Que vas demasiado rápido; a penas llevamos un día de conocernos, además no esta en mis planes una relación con alguien de mi mismo sexo

Para mi ha sido como un siglo; hemos conversado de tal manera que siento que se lo suficiente de ti, no lo piensas así de mi?

Hemos tratado temas generales; aun siento que no nos conocemos lo suficiente, además te prefiero mas como amigo

Cuales son tus objetivos?

Me gustaría tener una familia con una mujer que acepte el riesgo de mi albinismo

Diego dio un trago a su bebida y se quedo callado continuando con su alimentación; Saúl cambio de tema pero Diego solo respondía brevemente, Diego estaba viviendo en carne propia la indiferencia que aplicaba e sus amantes cuando estos buscaban una relación formal y duradera con el. Después de comer ambos se dirigieron al estacionamiento donde estaba el vehículo de Diego.

Te llevo a tu casa, sobrino?- pregunto Diego seriamente

No, tío; me regresare en transporte publico- respondió Saúl fingiendo la voz como infante

Ojala me permitieras seguir conviviendo contigo

Sabes mi teléfono y tienes mi correo electrónico

Cada día Diego le enviaba un mail a Saúl deseándole buena jornada; ambos salían a bailar a un salón donde Saúl conoció a una chica trigueña ya que su habilidad como bailarín se había hecho notoria en aquel lugar, hasta ella y el habían participado en algunos concursos organizados por la administración del salón. Diego veía como Saúl se iba enamorando de ella disminuyendo sus oportunidades por tenerlo a el como pareja; solo se consolaba saboreando el pene de Saúl cuando aquella mujer no iba a la casa de este.

Tiempo después, Diego leía un mail de Saúl informándole que pronto seria papa e invitándole a celebrar la noticia pero aquel se negó excusando mucho trabajo; Diego había dejado sus encuentros ocasionales en los baños públicos para volverse más casero. Por mail Diego se enteraba del avance en el embarazo de la trigueña aquella quien ya era formalmente la esposa de Saúl; ellos lucían como una pareja feliz y los traumas de violación en Saúl habían sido superados.

Después de un intento de aborto accidental, el ginecólogo les sugirió reposo completo para no poner en riesgo la salud de la mama y del bebe; su actividad sexual tuvieron que interrumpirla abruptamente. La convivencia entre Diego y Saúl también había disminuido así como la comunicación entre ellos vía telefónica o email.

Una noche Saúl salio de la recamara dejando a su esposa completamente dormida pues había tomado bastante te relajante; como aun no era medianoche salio de la casa para entrar a su auto y sacar de ahí unos CDs de música cuando se acerco el vigilante preguntando por la salud de la esposa de Saúl.

Problemas para dormir con este calor?- pregunto el vigilante

Algo- respondió Saúl quedándose sentado en el auto pues solo traía puesto un bóxer y no quería que el vigilante se diese cuenta

Mi turno esta por concluir así que al rato me quitare las protecciones; usted si que anda muy fresco

Solo venia por unos CDs a mi auto por lo que no vi necesidad de vestirme completamente

El vigilante abrió la puerta del auto y se arrodillo viendo el cuerpo casi desnudo de Saúl.

Que paso, señor? Le recuerdo lo estricto que es el reglamento en este condominio- dijo el vigilante

Vamos, discúlpeme por esta vez; no lo volveré a hacer- suplico Saúl

Yo lo cubro en su regreso a su casa

Ambos se dirigieron a la entrada de la casa; Saúl estaba por abrir la puerta cuando sintió la mano del vigilante acariciando su pecho.

Su piel se siente como me lo imaginaba- dijo el vigilante mientras acariciaba las tetillas de Saúl- Pocas veces lo veo tan sexy; me dejaría ver su verga?

Saúl no se molesto por el atrevimiento del vigilante pues temía que lo amonestara por no cumplir con el reglamento del condominio así que ambos entraron a la casa para dirigirse a la sala sentándose Saúl en el sofá y el vigilante arrodillándose saco el pene del bóxer para luego pasar su lengua por ella; debido a la falta de actividad sexual con su esposa Saúl disfrutaba de ello pero no se parecía a como Diego se lo había hecho hace tiempo, el vigilante no solo saboreo el pene de Saúl sino también el semen expulsado de este.

Si vuelve a salir así; solo hágalo cuando sea mi turno, eh!- menciono el vigilante guiñándole a Saúl- Se nota que su pistola esta demasiado cargada y eso no es bueno.

Solo fui por unos CDs pues como no podía dormir decidí hacer ejercicio- comento Saúl sin moverse del sofá

Tiene aparatos en su casa?

Saúl se levanto y le mostró el cuarto donde tenía una bicicleta estacionaria, una caminadora, varias pesas de mano, un aparato con el que ejercitaba los brazos y una banca donde levantaba las pesas sujetadas por un tubo.

Tiene todo un gimnasio aquí- comento el vigilante- En la empresa nos exigen hacer ejercicio pero yo no uso pesas y prefiero hacerlo al aire libre; disculpe por mi torpeza pues imagino que usted lo hace aquí por el daño que le causan los rayos solares

No hay problema- dijo Saúl dándole unas palmadas en la espalda- Estas no son de tantos kilos pues no busco incremento en músculo solo firmeza

Acaso lo hace con su verga?- dijo el vigilante y ambos se rieron

Bajemos el volumen pues no se vaya a despertar mi esposa

Disculpe; pues no lo interrumpo para que se ponga a ejercitar el cuerpo

Creo que ya no será necesario pues ya estoy sintiendo sueño

Si gusto lo ayudo a que le de mas

El vigilante por el radio se comunico con su compañero quien le informo que ya había llegado su relevo.

Creo que puedo seguir un rato mas con usted; bueno si usted quiere- dijo el vigilante quitándose el chaleco protector mientras Saúl tenia en sus manos unas pesas ejercitando sus brazos

Que tal si te enseño como usar las pesas- sugirió Saúl

El vigilante se quito la camisa quedándose en camiseta atlética y se coloco cerca de Saúl quedando su espalda cerca del pecho de este para que este le pasara las pesas que estaba usando.

No se te vayan a caer que mi esposa se puede espantar por el ruido- susurro Saúl al oído del vigilante y le paso lentamente cada una de las pesas

No tiene unas mas livianas?- pregunto el vigilante al sentir la tensión en sus brazos por el peso

No tenses los brazos deja que se vayan acostumbrando a ellas- aconsejo Saúl mientras sus dedos pasaban por los hombro y brazos de aquel

El vigilante pudo con esa carga y luego apoyado con sus pies levantaba su cuerpo frotándose su trasero con el pene de Saúl que estaba erecto mientras sus brazos seguían siendo acariciado por las manos de este; después movió su cuerpo para quedar frente a frente y así frotarse ambos bultos pélvicos mientras los labios y lengua del vigilante atendían el torso de Saúl.

Creo que me están comenzando a gustar sus pesas y sus.... pezones- dijo el vigilante sonriendo y se arrodillo para dejar las pesas en el suelo y volver a succionar a aquel pene- Cuando me he ejercitado con mis compañeros siempre he tenido la fantasía de tener sexo mientras mejoramos nuestros cuerpos

Saúl se sentó en el aparato para ejercitar los brazos con sus piernas separadas para que el vigilante se colocara entre ellas y pudiese continuar atendiendo su pene; los músculos del torso y brazos de Saúl se expandían haciendo realidad la fantasía del vigilante, después se recostó en la banca para cargar las pesas sujetas de un tubo mientras el trasero del vigilante era penetrado por su pene enfundado en un condón; el vigilante cabalgaba con mas fuerza teniendo Saúl que dejar de ejercitarse para levantar su torso y abrazar a aquel, sus manos jalaron la camiseta atlética por los hombros hacia abajo de tal manera que inmovilizaban los brazos de aquel. El vigilante se movió quedando perpendicular al cuerpo de Saúl; los dedos de este se introducían también en su ano dilatando mas su orificio anal, unos ingresaban por entre los glúteos y otros por debajo de los testículos mientras la camiseta iba cayendo cubriendo la zona genital y los brazos se liberaban para colocarse sobre los hombros de este acariciándose sus mejillas pero sin tocarse sus labios. En esa posición estuvieron hasta que la camisa quedo humedecida por el semen del vigilante y el de Saúl atrapado en el condón.

Ahora si dormirá como un oso invernando- dijo el vigilante sin sacarse aun el pene de Saúl del trasero

Vaya que ambos necesitábamos esto- comento Saúl sintiendo como el sudor recorría su cuerpo

Lastima que no siempre este asignado a este condominio pues aun le faltan meses de abstinencia y mire que por mi lo haríamos tantas veces quiera usted; su verga me encanto desde esa vez que la vi cuando su tío estuvo de visita

En las noches mi esposa bebe un te que le provoca mucho sueño así que podemos aprovechar tu asignación a este condominio

Pero también rolamos turno

A poco quisieras diario hacerlo? Debemos dejar que nuestros cuerpos se recuperen

Hablare con mi superior para que no me cambie de condominio

Pasaron los días y en una de esas noches en que el vigilante no estaba en turno vespertino; Saúl encendió su computadora para revisar su correspondencia con la esperanza de encontrar alguno de Diego, mientras ingresaba a su buzón se puso a ver las fotos que tenia guardadas y encontró unas que le tomo su esposa posando desnudo, como no encontró mail de Diego le envió uno insertando un par de fotos y poniendo como asunto RECUERDAME AUNQUE NO SEA TU GANSITO. Luego Saúl se puso a bailar mientras escuchaba la música en su reproductor personal hasta sentirse completamente agotado durmiendo en el sofá.

Luego, Diego entro a un cybercafe pues andaba de viaje; abrió el mail de Saúl desplegándose sus fotos las cuales al verlas causo gracia a Diego. Mando imprimir las fotos y al recogerlas el encargado del cybercafe se las entrego sonriéndole; en el reverso de las hojas este había anotado su teléfono y dirección de correo.

Ojala nos comuniquemos pronto- dijo el encargado haciendo el ademán con su mano cerca de su cara

Mas tarde el encargado y Diego estaban en su cuarto de hotel desnudos sobre la cama después de haber tenido un faje intenso; sus cuerpos aun estaban transpirados y agotados pero para Diego nada superaba lo experimentado con Saúl, se dieron un baño juntos y después el encargado del cybercafe se retiro. Diego volvió a la cama mirando las fotos de Saúl decidiendo encontrase con el al termino de su viaje.

Días después Saúl y su esposa salían del consultorio cuando sonó su celular llamándole Diego; Saúl al escuchar su voz estaba emocionado no pudiéndolo ocultar ante su esposa quien se adelanto al elevador, ellos se pusieron de acuerdo en verse para comer. Ambos estaban nerviosos por su reencuentro así que no sabían si abrazarse o solo saludarse de mano al verse en el restaurante.

Como va el embarazo?- pregunto Diego

Muy bien, son dos y están en muy buena salud aunque mi esposa tiene que estar en reposo completo- respondió Saúl emocionado de volver a ver a Diego

Te felicito!

Gracias a ti se están cumpliendo mis planes pues tu me llevaste a ese salón donde conocí a Gabriela

Fue un placer

Por que te mantuviste tan distante? Era necesario enviarte fotos de mi desnudo?

No quise arruinar esta etapa tuya de romanticismo. Si supieras cuantas veces me he masturbado viendo tus fotos

Cambiemos de tema que ahorita estoy en abstinencia- mintió Saúl pues la noche anterior había estado con el vigilante

Pues para eso están los amigos

Ambos se rieron y continuaron conversando mientras consumían sus alimentos; a partir de ese día estuvieron conviviendo diariamente. Cuando las amigas de la esposa de Saúl le organizaron un baby shower en casa de la pareja, Diego y Saúl estuvieron en el apartamento de aquel bailando al ritmo de la música; poco a poco se fueron despojando de la ropa hasta quedar completamente desnudos. Se recostaron en la alfombra abrazándose y acariciándose; se dejaron llevar por la pasión besándose en las mejillas, hombros, pechos y abdomen mientras sus genitales se frotaban entre si. No necesitaron penetrarse para eyacular.

Saúl llamo a su casa para saber como seguía la fiesta y su esposa le comento que aun estaban sus amigas en la casa así que Saúl se acerco a Diego para chuparle las tetillas mientras sus dedos acariciaban el orificio anal de este; estando Diego boca abajo y con las piernas separadas quedo dispuesto para recibir el pene de Saúl, las embestidas eran intensas gozando ambos.

Saúl se sentó en el sofá agotado y Diego se acerco a el tomando sus piernas y colocándolas sobre sus hombros para lamer el orifico anal de Saúl así como sus testículos; ambos estaban extenuados pero tenían que aprovechar esta oportunidad pues no sabían cuando habría otra de estar juntos a solas, sus gemidos se entre cortaban con su respiración intensa. Las piernas de Saúl se fueron elevando mientras Diego acercaba su cara a la de Saúl para besarse en la boca e introducirse alternadamente sus lenguas; enfundo su pene erecto con un condón y sus dedos dilataban el orificio anal de Saúl hasta que su pene ingreso parcialmente, lentamente fue ingresando en el ano el cual no había sido penetrado desde las violaciones por el maestro de secundaria. Saúl había superado sus traumas así que ahora gozaba del sexo anal aplicado por Diego quien incrementaba sus embestidas mientras besaba el cuello de Saúl y sus manos pellizcaban las tetillas; ambos expresaban su placer con frases vulgares hasta que sus penes volvieron a eyacular.

Sus cuerpos estaban débiles de tanta actividad metiéndose en el jacuzzi descansando sus espaldas en los extremos y sus piernas intercaladas; cuando los rayos del sol se ocultaron dando inicio la noche, salieron del jacuzzi secándose sus cuerpos para vestirse.

Diego se conformo con tener sexo solo con Saúl aunque fuese esporádico sin enterarse que lo hacia también con el vigilante cuando este estaba asignado al condominio y Gabriela jamás lo descubrió pues también la complacía sexualmente; el corazón de Saúl quedo compartido por el cariño a sus hijos, esposa y Diego después de la muerte del vigilante en un tiroteo en un asalto bancario, Diego se hizo cargo de la familia de Saúl en reciprocidad estando Saúl eternamente agradecido cuando sufrió una embolia imposibilitando la manutención de su familia. Gabriela lo amaba tanto que lo motivaba a seguir con su terapia logrando recuperarse parcialmente. Los hijos no padecieron de albinismo y siempre respetaron a su padre y a Diego a quien lo veían como un tío.