Encuentro entre Verónica y Gustavo 2 Parte

Llegue a Plaza Julio Cortaza  en Palermo Soho  que es un barrio de Buenos Aires, en el viaje me divierto mucho, ya que el chofer del Uber no dejaba de tirarse lances y yo de provocarlo cruzando las piernas y acomodándome la falda que el proejaba y las miraba por el espejo retrovisor del auto me gusta exhibirme.  Cuando llegamos me dejo su tarjeta para que lo llamara para el regreso.

Me dejo en la calle Serrano y Honduras abone el viaje y me baje mire hacia la plaza mientras un grupo de chicos que estaban en la puerta de una cervecería me dirijan sus miradas y comentarios aun no veía a Gustavo.

Crucé la calle y al llegar a las veradas de la plaza lo vi el me reconoció era un chico de 1.80 de altura lindo morocho pelo largo ondulado vestía con una remera entallada al cuerpo que era delgado linda cola y facciones me gusto, nos pusimos a charlar y caminando llegamos a un resto bar donde nos pedimos unos compas mientras chalamos mientras esperamos la comida, - una amena conversación el me pidió que le contara mi historia se la conté y que si bien  yo me sentía bien y feliz con mi transformación había sido duro no tener contacto con mi familia que me había repudiad por mi condición transexual  y que si bien estaba económicamente bien me preocupara el futuro si bien mis ahorros los estaba invirtiendo  en bienes inmuebles y que había retomados los estudios para terminar la secundaria y después poder estudiar abogacía, por el momento no quería involúcrame en ninguna relación sentimental.

Luego de terminar de comer y seguir charlando nos fuimos a una disco bar a continuar la noche. Ahí nos pusimos a bailar cosa que me encanta, empezó a sonar Sobredosis de Romeo Santos, Gustavo me tomo de la cintura y empezamos a bailar y llevándonos por la música y la evolución del baile nos fuimos poniendo cachondos al terminar de sonar nos besamos y sin decirnos dando con solo tocarnos salimos de la disco rumbo a un albergue transitorios asi se llaman en Argentina los moteles, hotel al paso, reservados etc.

Llegamos luego de caminar unas cuadras en las que fuimos besándonos con algunas paradas para magrear hasta que llegamos al albergue estábamos que ambos deseamos tener sexo

Llegamos a la habitación cuando entramos a los segundos mi falda y blusa ya no estaban en mi cuerpo, la excitación de Gustavo se notaba en su pantalón,

Baje su zipper y salto su verga y comencé a besarla y chuparla mientras es se quitaba la camisa y los pantalones cayeron al piso

Al rato cambiamos de posición he iniciamos un 69, que nos puso en órbita a los dos yo estaba excitada y cosa extraña en mí ya que soy pasiva empecé a tomar un rol activo jugando con mis dedos en el culo de Gustavo a lo que el respondía dejándose hacer y pidiéndome que introdujera mis dedos en su ano con lo cual para facilitar la penetración tome gel lubricante de mi cartera y unte mis dedos y empecé a jugar en su ano con delicadeza ya que no quería lastimarlo con mis uñas, siguiendo ese juego un rato hasta que Gustavo me pide que lo penetre, si bien me encontraba dura para poder asegurar la penetración ya que me conozco no me dura mucho me tome un viagra flash, que siempre llevo en mi cartera para mis clientes además de los preservativos y el gel.

Gustavo me esperaba al borde de la cama en la posición del perrito y comencé a penetrarlo pese al lubricante y que mi verga no es de gran tamaño logre penetrarlo, pero el grado de excitación que tenía termine bastante rápido además me gusta más dar que recibir y quedamos tendidos en la cama, Yo quería recibir la verga de Gustavo así que comencé a tocarlo y a besarla cuando vi que estaba dura y erguida me monte sobre el y me la introduje al sentirla empecé a gemir de placer hasta que sentí la erupción de su semen en mi interior-

Terminamos esa noche agotados y satisfechos espero que pronto se repita