Encuentro de lo mas cosmopolita

En encuetro entre distintas culturas acabo uniendo todas.

Nos habíamos marchado de la casa de Roberts para cambiarnos de ropa en nuestro hotel, y  seguir con alguna ruta por la isla pues los días se iban a cavando de estas inesperadas calientes vacaciones, con la duda de saber si habíamos acertado con la invitación a ese encentro con los amigos de Roberts, pero el morbo superaba al temor y los dos aunque lo hablamos durante toda la tarde y noche no lo descartamos, pero esa inquietud nos creaba por lo menos a mí un hormigueo en la barriga que no se me quito hasta la llamada a la mañana siguiente de nuestro amigo el francés.

Sonó  el móvil lo cogí yo y Robert como siempre tan educado después de los buenos días y preguntar como estábamos, dijo: esta todo arreglado hable con Hansen y Anna y la idea les pareció maravillosa pues están deseando conocer gente nueva y liberal como ellos, dijo paso a recogeros en una hora si estas listos pues ellos me llamaron que iban a salir ya de casa hacia la mía y tardarían eso más o menos pues paraban a comprar un par de cosas para comer.

Con una puntualidad exquisita Roberts nos recogió en su TT y nos llevó a casa, nos dijo tranquilos que son buena gente aunque y tienen larga experiencia en encuentros con parejas y grupos, son los dos algo bisex y como veréis nada tímidos, y además se cuidan mucho no aparenta sus edades, y lo mejor calientes, calientes,  esto último lo dijo riéndose y en tono morboso, ah una cosa vosotros como  conmigo y no se corten para nada.

La espera en casa de Roberts fue corta y asesorados por el los recibimos como dios nos trajo al mundo, tocaron a la puerta y nuestro amigo fue a recibirlos, rápidamente ella le dio un abrazo a Robert de esos que las manos no se cortan tocando de todo, y otro a él pero menos efusivo, rápidamente nos dijo que nos presentara con un castellano muy bueno pero con ese acento alemán, para describirlos rapidito os diré que él era alto un poco menos musculoso que Roberts con pelo plateado y ella de mi estatura cuerpo delgado y también pelo plateado, muy guapa ella y aparentaba ciertamente menos edad, se presentaron como Hansen y Anna.

Nos presentó  ellos no tardaron nada en ponerse cómodos, o sea desnudos, se les veía sueltos en el tema, nosotros rápidamente nos fijamos que Hansen estaba también muy bien equipado, no tenía la longitud de Roberts su aparato pero si un grosor exquisito y sobre todo lo que destacaba esa la enorme cabeza que tenía ese hermano pequeño que colgaba de su cuerpo, rápidamente me dio un repaso visual  como viendo por donde empezaría a meter ese monstruito que tenía, y a mi marido le hizo un amago de darle la mano engañándolo y cogiendo su polla entre risas, ella aunque tenía los pechos algo caídos y no demasiados grandes, al ser delgada la hacía atractiva.

La rotura del hielo duro una media hora más o menos, y fue Hansen que la inicio cuando yo estaba en la barra americana  preparando unas copas, se me pego por  la espalda con su enorme pollon colgado por el peso de esa cabeza y aunque medio relajado, sentí su carne en mi trasero cuando me dijo, está linda mujer necesita que le ayude a preparar las copas, y pasando su mano por debajo de mis brazos mojo un dedo en la copa y me lo puso en mi boca diciendo esto se cata así primero, yo lo chupe pero él no lo sacaba de mi boca y entonces me desate y lo chupe como si fuese un caramelo.

Rápidamente sentí como aquello intentaba crecer apoyado sobre mi trasero, la imagen no pasó desapercibida para todos que sentado en unos taburetes veían la escena, y como esperando a ver lo que sucedía, continuaron como espectadores un rato, el alemán empezó entonces a acariciarme los pechos a la vez que me besaba en la nuca y su mano bajo rápidamente a mi sexo, me giro para que vieran como me acariciaba y vi que mi marido se le había puesto dura y enorme, viendo aquello, Anna alargo las manos acaricio la de Roberts y la de mi esposo que los tenía cerca, le dijo que dureza tienes ya  y bajándose del taburete empezó a darle una soberana chupada a mi esposo por el rabo y los huevos, mientras Roberts la tomo por detrás y le restregaba su pollon ya casi duro por su trasero, ella al ser delgada la polla de Robert ya de por si grande, parecía inmensa.

A Hansen, su rabo no tardo nada en crecerle, sus dedos ya hacía rato me habían perforado mi mojado chochito, y que el sacaba y cambiando de mano se los chupaba saboreándolos como dulces, eso me ponía ardiendo, puso su mano sobre mi cabeza y me dijo, baja y lubrifica a este que lo está deseando y mientras piensa por donde quieres que te lo meta, que Roberts me dijo te abrió todos los caminos.

Uff esas palabras me encendieron y me tire como una loca a por esa enorme y rosada cabeza que a pesar de los años lucia lisa y suave, adornadas con dos bolas ya algo colgando y afeitadas  , solo tenía pelo a parte del pecho  piernas y brazos, sobre la polla, se había dejado ahí un mechón amplio, me di cuenta que de cabeza superaba algo a la de Roberts aunque el conjunto la de Roberts era más larga y más venosa, la introduje en mi boca que casi la llenaba toda, os digo que esa cabeza era impresionante.

Anna estaba dedicada al caramelo nuevo de mi marido, chupándolo mientras ya Roberts le estaba danto alguna embestida con su rabo, lo sacaba lo ponía a veces junto al de mi marido para que los chupara los dos y volvía a meterla otra vez por detrás pero en su chochito, una de las veces se me acerco y la puso junto a la de Hansen para que las besara las dos y las chupara una a una, diciéndome ves que buenos amigos tengo.

Al alemán se le veía con ganas ya de penetrarme y tomándome me acerco a unos de los sofás que había en la sala justo al lado de la barra, y me dijo ¿por dónde cariño comienzo?. Yo como sumisa le dije por delante que esa cabeza es muy gorda para atrás,  se sentó en el sofá estirando las piernas y tomando la polla con la mano dijo siéntate aquí cariño, me fui sentando lentamente mientras aquel monstruo cabezón entraba en mi mojado coño, no sin soltar un pequeño quejido de placer al recibir in mi interior aquella salchicha alemana, que todos miraron con lujuria, yo cabalgaba como si la vida me fuese en el empeño disfrutando con aquel rabo entrando y saliendo mientras el devoraba y pellizcaba mis pezones y a veces dándome palmadas sobre mi trasero.

El aguante de Hansen era impresionante y le regale un orgasmo descomunal que agradeció con un morreo de lujo, gire la cabeza y vi que Robert tenia ensartada a Anna por detrás embistiendo con una fuerza que le hacía tragarse todo el rabo de mi esposo con las embestidas, a la vez que mi marido le tenía sujetos los colgados pechos, este me miraba como yo cabalgaba sobre aquel pollon, así estuvimos unos minutos, cuando comenzaron los cambios, Roberts la saco del trasero de Anna y se dirigió a mi pido sustituir a Hansen , este acepto y ahora me había tumbado sobre el sofá con un cojín sobre mi bajo vientre, y me estaba penetrando por mi coño pero tumbado sobre mi espalda, volví a sentir y recordar que aquella polla era la reina de la fiesta.

Anna había invitado a que Paco la follase por delante apoyada sobre el taburete que este a la vez estaba apoyado sobre la barra para no caer hacia atrás, las piernas de la alemana aquella estaban abiertas mostrando su coñito amplio para tan delgado cuerpo, con los brazos sobre los hombros de paco pidiéndole que la hiciera gozar, paco no cesaba en las embestidas y como también la tiene gruesa y se mueve bien a ella le encantaba. Intente levantar un poco la cabeza buscando a Hansen y ver que hacía, cuando vi que había tomado la vaselina que Roberts tenia y la estaba untando por su enorme cabeza y rabo, yo temí que viniera hacia mí y pidiera follarme por mi encogido trasero, pero cuál fue mi sorpresa al mirar otra vez.

Pues se dirigió  y se puso en la espalda de Paco, juntado su rabo en su trasero, este sorprendido, intento moverse pero Anna le dijo, cariño por favor deja a mi marido veras que esto aunque creo que es nuevo para ti al final va ser bueno, paco media asustado y ante mi sorpresa se quedó quieto un segundo, Hansen ya tenía algún dedo dentro de su trasero untándolo de vaselina, y diciendo en tono irónico , a mi esposo, umm veo que si eres virgen por aquí algo estrecho sí parece pero veras como dilata y no te duele.

La escena era el centro de atención aunque Robert no cejaba de follarme, pero todos estábamos mirando mientras Anna empezó a besarlo para relajarlo, Hansen hizo un amago pero vio que necesitaba más vaselina, pues mi esposo intentaba ponerse de puntillas eludiendo aquel pollon, puso un pegote sobre la cabeza y lo extendió levemente, con sus rodillas abrió los muslos de paco y agachándose un poco pues era más alto que paco puso ahora esa enorme cabeza sobre el agujero de paco que había dilatado un poco y con una mano en la polla y otra sobre el hombro de paco, fue ensartándolo.

No le veía la cara pues estaba de perfil a mí pero su rostro tenía que reflejar pánico, por sus gemidos de dolor, aunque Anna no paraba de besarlo y tranquilizarlo, pero Hansen ya había metido la cabeza y parte de su gruesa polla, espero un poco a que se tranquilizara y moviéndose iba haciendo hueco hasta tenerla entera dentro, entonces se pegó más a el y dijo sigue mi ritmo que follas también a mi mujer, y comenzó un mete y saca con  aquel dragón de cómodo, que todos los presentes sentíamos como si fuese a nosotros, Paco en un minuto ya había dejado de gemir de dolor y aunque un poco tenso aun ya se dejaba llevar por las embestidas del alemán que lo estaba desflorando y bien, a la vez la polla de paco entraba en el coño de Anna que agradecía las fuetes embestidas, y en unos minutos se puso a gritar como una loca regalándole a mi esposo un orgasmos que le hizo tranquilizar a la vez este en pocos segundo se corrió también dentro de ella.

El alemán ahora tenía a mi marido fuertemente abrazado dando golpes fuertes e intensos con una respiración tan fuerte que parecía iba a tener un infarto, puso su cabeza sobre su nuca hablandole  en alemán a la vez que empezó a soltarle leche dentro de ese culo desvirgado  y que ahora mi marido agradecía con gemidos de placer, duro medio minutos esas embestidas de descarga, cuando la saco toda aun dura con algunas gotas de leche sobre la cabeza, hizo   el ruido del descorche de una botella de vino, Paco quedo apoyado sobre las rodillas de Anna recuperando de esa tremenda cogida, y con su culo goteando parte de aquella leche espesa alemana.

Robert había seguido taladrándome a mí, viendo aquel espectáculo, y cuando acelero un poco sin poder aguantar empecé a gritar de placer por el tremendo orgasmo que estaba teniendo, él dijo cariño me voy acorrer contigo a la vez y forzó el ritmo fallándome mas fuerte con embestidas que movían el sofá, ahora éramos nosotros el centro de atención, cuando Roberts soltó dentro de mi sus fuertes ráfagas de espesas leche en mi inundado coño que estaba abierto como un flor ante la tremenda follada que está recibiendo.

Anna se bajó del taburete y cuando Robert se giró de lado y yo me puse boca arriba se arrodillo y empezó a chuparle la polla, limpiándola y diciéndole recupérate pronto que te quiero dentro de mí, después se acercó a mi sexo que rezumaba leche  y con una maestría envidiable comenzó a comer mi seta limpiando y absorbiendo todos los jugos que se derraban por ella, Roberts mientras me besada como la tarde esa de playa, eran besos de enamorado, no de lujuria, yo respondía igualmente y más con el repaso que estaba recibiendo abajo.

Aquello no acabo allí, todo lo contrario,  estaba comenzando una orgia que nos hizo cambiar todos los esquemas que teníamos del sexo, aunque eso si aderezada en ellos por unas pastillitas azules que había traído Hansen y que nosotras agradecimos, pero eso será otro día cuando os lo cuente..