Encuentro al perfecto sugar daddy

Por fin encuentro al perfecto sugar daddy y me desvirga.

Este es mi relato, lo primero me voy a presentar soy un chico normal, buen cuerpo mido 1.8m y peso unos 78 kg. Os voy a contar una historia basada en hechos reales.

Todo empezó en una mañana cuando tenía 18 años, estaba estudiando anatomía en mi habitación, y como de costumbre estaba muy cachondo, demasiado. Ya saben cómo es la adolescencia y las hormonas, que se disparan después de dos días sin hacerse una paja. Así que decidí descargarme una aplicación xxx que la utilizaba para ligar con algunos chicos.

Después de unas cuantas horas hablando y ligando, di con uno espectacular: se llamaba Alberto tenía 27 años, era peludo y le gustaba el sexo duro, es decir, dejarte el culo abierto. Además era de mi ciudad, asi que nos podríamos ver con frecuencia si nos apeteciera.

Estuvimos hablando unos 4 días y como nos llevamos bien, decidimos quedar, él era alguien especial no habíamos pasado ninguna foto, tanto de su polla como de mi culo, algo muy raro.

3 días después:

Puff que nervios en un día le veré y probablemente me desvirgue. En ese momento pensé en todo lo que tenía que hacer para prepararme para ese encuentro tan especial. Así que como soy la hostia de olvidadizo me hice hasta una lista para que no se me olvida se nada, aunque eran 4 cosas.

¡Importante!:

Depilarme el culo.

Depilarme la polla.

Limpiarme.

Comprar condones.

Yo no me suelo depilar la polla porque me gusta los pelos, pero le pregunté que le gustaba, me dijo que le gustaba depilados, así que decidí darle una sorpresa depilandome todas mis partes.

Una vez hecha la lista me puse a ello y empecé por depilarme el culo, por cierto, muy difícil, pero al final no me corté. Después la polla y finalmente me fui a comprar condones por lo que surgiera.

Al día siguiente:

Estaba muy nervioso. A las 17 habíamos quedado y a las 15 ya me estaba preparando, me duché me vestí y aunque termine pronto, salí de casa.

Había quedado con él que me venía a buscar mi pueblo, así que le dije que me esperase en la parada del bus.

Cuando llegué yo, no había nadie, solo vi un BMW x6 acercarse, uno de mis coches favoritos, me llamó la atención, pero no se me pasó por la cabeza que fuera él. Cada vez se acercaba más y más hasta que vi que era él. Ohh dios mío además de guapo era rico!! Un perfecto sugar daddy.

Llamé a la puerta abrió, yo todo nervioso abrí la puerta.

-Hola- dije tímidamente

-Hola. ¿Qué tal?  - dijo con una voz extremadamente grave.

-Bien jajaj un poco nervioso-Le sincere cómo me sentía.

-No te preocupes-Me dijo- te trataré con cuidado.

Después nos fuimos a un restaurante normalito a comer. Todo iba con normalidad, pero todavía no nos habíamos ni besado ni nada. Yo seguía nervioso jaja pero bueno.

Cuando terminamos le dije

-Tengo que ir al baño- dije esperando que viniese para verle el rabo, pues todavía no nos habíamos pasado fotos.

-Vale-dijo sin importarle.

Decepcionado me fui al baño tranquilo y me puse a mear, había un chico que la verdad estaba muy bueno, pero pasé. No iba a zorrear en una cita. Pero de repente entra otro chico.

Mire rápidamente pensando que era Alberto  pero muy a mi pesar no era Alberto, era un chico muy atractivo, que le conocía porque habíamos hablado alguna vez por insta, Javi, era tan atractivo que se me corto el meado, tenía un pollón y mientras meaba se pelo la polla, yo creo que para que se la viese y me pusiera cachondo. La verdad que tenía buena pinta y me habría encantado chupársela, pero estaba en ese momento con Alberto.

  • Que tal? - me dijo.

  • Bien y tú? - Le dije.

  • ¿Bien jaja, que haces aquí?

-Estoy con un chico jeje- le dije.

-Ah no meas?

-Eh ya he acabado jaja - Le dije echando la última mirada a su enorme polla blanda- bueno me voy que ya he acabado- dije nervioso.

Me lavé y salí para volver a encontrarme con Alberto.

Cuando llegué Alberto ya había pagado, le dije que le daba la mitad, pero me dijo que no que ya se lo pagaría de otra forma, esa frase me puso cachondísimo. Salimos del restaurante y nos metimos en su coche, todavía no me creía que estuviese montado en mi coche favorito.

-Dónde vamos? - le dije.

-Tú dónde quieres ir? - con tono juguetón

-No sé.

-Te parece que vayamos a mi casa y pasamos la tarde? - me guiño el ojo.

-Vale, pero...

-No te preocupes - me interrumpió- si no te sientes cómodo en algún momento dímelo y paro y si quieres te llevo a casa.

Durante el camino me empezó a tocar la pierna y algunas veces el paquete. Yo tenía la polla a reventar porque además de que me puse los pantalones que más apretados me quedaban y que mejor culo me hacía, estaba embaladisimo.

Cuando llegamos a su casa no me lo creía, era una puta mansión.

-No jodas esta es tu casa!! Es una puta mansión -le dije flipando- porque no me dijiste nada.

-Porque solo traigo aquí a la gente que me gusta y que no solo está conmigo por el dinero. -trás esa declaración nos empezamos a besar apasionadamente. Paramos y entramos a su casa, me cogió en brazos para llevarme a su habitación, tenía una vista increíble, pero pasaron desapercibidas.

-Estás preparado? -me pregunto.

-Si.

Se tiró a la cama y yo rápidamente me puse encima de él y nos besamos. Después empecé a bajar besándole el cuello, él viendo mis intenciones se fue desabrochando la camisa y yo fui bajando parando a chuparle los pezones.

-Estas muy cachondo- afirmé, ya que podía notar su polla contra mi cuerpo. Tenía los típicos pelillos en la pelvis que me ponían muchísimo. Se los empecé a chupar y con las manos le empecé a abrir el pantalón y se los quite. Quedándose en calzoncillos dónde se le marcaba perfectamente la polla, la cual era bastante grande. Se la saqué era enorme, tenía el tronco más gordo que el glande como a mí gusta umm, como lo voy a gozar.

-Te gusta?

-Obvio, es bastante grande, nose si la voy a aguantar.

-No te preocupes que te dilató bien el culo, al principio te dolerá, pero después lo vas a gozar. -Me guiño el ojo.

Me quite el pantalón y puse a cuatro, para que me pudiera ver el culo mientras se la chupaba y también me pudiese dar algunos azotes en el culo.

Se la empecé a chupar, pero no me cabía entera, aun así, me esforzaba para que me entrara toda, dando lugar a algunas arcadas. Le empezó a salir precum que obviamente me lo trague.

Finalmente me esforcé para que me entrará entera, mi nariz se quedó pegando a sus pelos y mi barbilla en sus huevos.

Después le empecé a chupar los huevos.

-Uff para un poco que me voy a correr - Me dijo- Trae que ahora me toca a mí darte placer. ¿Estás preparado?

-Sí, pero ten cuidado.

-Vale.

Me puso tumbado en la cama y con las piernas hacia arriba dejando mi culo depilado al aire, preparado para ser chupado y reventado.

-Ufff que culito tienes-. Me dijo y empezó a chuparlo

Como me ponía, al rato se chupo el dedo y me lo metió despacito hasta que llegó a su fin.

-Te ha gustado bebé.

-Uff sí, no me ha dolido mucho.

-Pues ahora te tocan dos.

Sacó su dedo y empezó a dilatar con dos dedos, esto ya me estaba doliendo, pero aguante. Empezó a sacarlos y meterlos, una vez que me acostumbré empezó con tres y eso sí me dolió, pero aguanté por el morbo que me daba la situación.

-Uff muy bien nene cómo aguantas. Pero ahora te viene algo más grande-Me dijo refiriéndose a su polla.

-Dale, pero con cuidado.

Empezó con su glande a meterlo,  eso ya me empezó a doler, pero él seguía y seguía hasta que la tuvo dentro entera, en ese momento tenía una mezcla de excitación y dolor.

-Uff que apretadito. Voy a empezar

-Vale, pero con cuidado

Empezó a moverla taladrandome el culo, dejándome le abierto. Algunas veces paraba y me escupía en el culo que, al tenerlo abierto, el escupitajo entraba como una pelota de baloncesto en una canasta.

El cabrón me estaba follando durísimo, se podía oir el golpe de sus huevos contra mi cuerpo generando me un gran placer, mi esfínter estaba jodido, había pasado de meterse un dedo ha meterse un polla enorme, que además no tenía ninguna compasión.

Él mientras me penetraba a cuatro, me daba azotes y me decía cosas guarras lo que me puso a 100, a los 10 minutos de que me diera por culo y de cambiar varias veces de postura, me empecé a correr de una forma nunca vista y sin tocarme.

-Ven chúpamela. Se quitó el condón y supuse que se iba a correr.

-Voy. Se la empecé a chupar hasta que noté un líquido en mi boca calentito y un poco salado. Se corrió como un toro, me lo trague todo como una buena putita. Después se la estuve chupando para limpiársela y no paré hasta que se quedó morcillona y limpia.

-Te ha gustado?

-Muchísimo, pero me duele mucho el culo, te has pasado. Le dije

-Es lo que tiene tener un pollón. Me guiño el ojo

Nos pusimos a reír los dos.

-Venga vamos a la ducha que te limpio el culote.

-Va

Nos duchamos los dos y nos besamos, me dio hasta una crema para el culo ya que me había sangrado un poco bastante (al dia  siguiente no pude casi ni anda).

Nos vestimos y me dio un calzoncillo para que le recordase y para que me pajeara pensando en él.  Me llevó hasta casa y nos dimos un beso. Y en la despedida me dijo:

-Ehh en dos semanas me voy a Nueva York  por si te quieres venir!!

-No sé ya veremos, vamos quedando y decido, un beso. Y nos dimos un beso de despedida.

Continuará…

Con esto concluye mi primer relato. Espero que os haya gustado y os ponga muy duros. La fecha de la continuación dependerá de vosotros, así que dejarme en los comentarios si os ha gustado.