Enamorado Solo (5) (Final)

-This town, used to be a pretty place to stay,

A place you'd stop off from the highway,-

Pulse el botón de apagado de la alarma de mi móvil... -Mierda que tarde que es-

Me dirigí a tomar una ducha, para luego ir a preparar el desayuno...

Casi no había dormido la noche anterior, por eso me levante tarde, sin embargo no era día de escuela ni tenia nada que hacer, después de ducharme iría a preparar el desayuno.

Mientras tomaba mi ducha seguía recordando lo que había sucedido aquel día, había estado tan cerca, o bueno no pero por lo menos yo así lo sentía. Trataba de no abrir tan fuerte la ducha para no hacer mucho ruido. Tome el shampoo me puse un poco en la mano y mientras me lavaba el cabello continuaba recordando, lo había memorizado todo no se como no podía olvidarlo…

Luego de durar  un buen rato recordando mientras me bañaba me decidí a salir. -Fffff- Di un largo suspiro de satisfacción. Cerré la ducha y con la toalla comencé a secarme, viéndome al espejo me alborote un poco el cabello mientras me lo secaba, no podía borrarme la sonrisa del rostro tenía una alegría que cualquiera que me hubiese visto en ese momento hubiera pensado que acaba de ganar la lotería o algo parecido. Después de secarme completamente, fui a vestirme me puse un short de andar en casa y una franela algo desgastada ya.  Me dirigí a la cocina saque la harina del gabinete y me puse a hacer unas arepas para el desayuno. Mientras aquellas palabras aun retumbaban en mi mente…

¿Qué!? ¿Su novia!? ¿Cómo!? ¿En que momento!? ¿Por qué no me había dicho nada?...

Me molestaba que quizás no tuviera la suficiente confianza para contarme antes que tenia una novia, a menos eso creía yo, pero también me alegraba que lo que me dijo de esta fue que habían terminado.

Y ayer cuando peleamos ni yo mismo se cuanto tiempo estuve acostado en esa plaza, con el esa tarde lluviosa, llorando reprimiéndome por todo. Quizás hasta llegue a quedarme dormido.

-Aaaaaaachuu…  coño sabía que esa lluvia ayer no me haría ningún bien-

-Salud- Dijo Andrés mientras  levantaba su mano derecha a forma de saludo.

-Gracias. Jeje, ya te despertaste, trate de no hacer ruido.

--No tranquilo, en realidad me desperté hace rato.

-¿Si?

--Si, solo que…

-¿Qué?

--Sabes, anduve pensando todo lo que nos sucedió.

• Ehmmm, jeje, yo estaba recordando todo también.

--¿Todo? ¿O solo lo de anoche?

-Duh, no soy tan pervertido, ni había llegado a eso jeje.

Andrés sonrió tímidamente mirándome a la cara, entonces me acerque a él y tomándole de la mano le di un beso a forma de buenos días. El puso su otra mano en mi mejilla mientras me besaba. Luego nos separamos y nos quedamos viendo los dos a la cara.

-jeje...

--ehmmm…

…

--¿Y como amaneciste?-

-ehmmmm… Bien.

--Ya se te ha bajado un poco la hinchazón- me dijo refiriéndose a como me había dejado el cachete con lo de la pelea.

-Ehmm bueno no puedo decir lo mismo de ti…

--¡Claro, si casi me matas, no me imagine que golpearas tan fuerte!

-ehmmm… ¿Disculpa?

--No acepto esa disculpa.

-¿Por qué?

--Me tendrás que convencer de aceptarla.

-¿Cómo?

--Ingéniatelas…

-¿Así?- dije mientras me acercaba a él y le besaba.

--ehmm… nah no se…

-¿Así?- mientras que lo besaba comencé a sobarle el paquete con una mano… sentí como este reaccionaba.

Nuestra saliva se juntaba, con mi lengua buscaba la suya y la recorría, nos besamos apasionadamente.

--Bueno bueno, ya ya me convenciste- Dijo apartándose un poco

-Jejeje, vamos a ponerte una carne en el ojo para que baje la hinchazón ¿Quieres?

--¡Estas loco! Si me cae sangre en un ojo…

-No no, anda de veras funciona-

--¿Cómo sabes?

-Decía mi abuela

--Nah debe ser solo un mito, mejor me pongo hielo y ya-

-Bueno…

Busque hielo en la nevera lo puse en un paño  luego fuimos a mi cama, Andrés se recostó y yo me senté a su lado. Le puse el hielo en la cara y apenas lo hice se quejo de que se lo afincaba mucho y lo quemaba,  al final me dijo que lo haría él mismo  -jeje-. Entonces fui  a la cocina y prepare las arepas,  comimos y estuvimos un rato hablando. Cuando terminamos y nos dirigíamos a la cocina a llevar los platos al fregadero Andrés me pregunto:

--Oye y ehmmmm… ¿te duele?

-¿Qué?

--ehmmmm…

-ahhh- dije interpretándolo, no pude evitar sonrojarme-

--¿Si?

-No… bueno no mucho dije haciendo una mueca incomoda.

--ahmmmm

Era un momento incomodo para los dos, pero no íbamos a hacer como si nada hubiera pasado…

-¿Te ayudo a lavar los platos?- dijo como para romper el silencio

-Bueno, le dije mientras me sentaba frente a él en el suelo para verlo y comenzaba a recordar lo que había pasado ayer luego de que…

___

-Marcos… te amo.

-Andrés, yo también te amo…

Entonces Andrés dejo escapar una sonrisa. El sabor de la sangre que brotaba de sus labios había quedado en mi boca.

--Ah, disculpa no recordé que…- dijo al darse cuenta que saboreaba poniendo cara rara.

-No, más bien me debería disculpar yo por haberte hecho eso… lo siento de verdad.

--Ya, te dije que no importaba, tranquilo- dijo mientras posaba su suave pulgar sobre mis labios. –Vayamos arriba o sino terminaremos con una gripe de muerte.-

-Ok

Andrés tomo mi mochila completamente mojada ya, por la lluvia que no paraba todavía, se la colgó de un brazo  luego me tomo de las manos para ir adentro. Fue raro, a pesar del frio que tenía, me sonroje y sentí como un calor me recorría por todo el cuerpo. Sentir su suave mano con la mía, era algo que deseaba, y no podía evitar  sonreír como un idiota ahora que de verdad estaba sucediendo.  Entramos al ascensor, ambos formando un charco bajo nosotros de tanta agua que cargábamos. Mientras subía el ascensor Andrés se acercó a mí y me abrazo como tratando de darme calor, susurro  algunas palabras que no entendí,  yo solo seguía abrazándolo, no quería que ese momento acabara nunca, pero eran solo 12 pisos y ascensor  no podía retrasarse por nosotros, ya cuando estaba por abrirse la puerta  Andrés me dio un rápido beso y luego se separó sonriendo con complicidad. Y menos mal que lo hizo.

-¿Mijooo a ustedes que les pasó acaso no hay agua en la casa, que se fueron a bañar con la lluvia?

Andrés y yo nos quedamos petrificados viendo a mi mamá, que apareció al abrirse las puertas del ascensor.

--Ho ho hola se se señora Lisbeth- Alcanzo a decir Andrés entre el frio y la impresión.

-Bendición mami- apenas pude decir yo –Veníamos del liceo y justo nos agarró la lluvia.-

-Sí, ya me di cuenta…-

-¿Hoy no trabajas?

-Sí. Pero gracias a que un fulano se guindo a pelear en el liceo me tuve que venir antes de la hora.

Estuvo un rato viéndonos a los dos fijamente…

-Pasen- Dijo mi mamá negando con la cabeza dando un largo suspiro mientras señalaba la puerta de la casa

…

Mi mamá nos mandó a quitarnos la ropa mojada para que no pescáramos un resfriado. Luego que nos habíamos cambiado nos llamó a la sala a ambos para le contáramos que era lo que había ocurrido. Fue un buen rato el que estuvimos diciéndole a mi mamá lo que había pasado, claro disfrazando todo lo que de verdad había pasado y tuvimos que cuadrar todo, hasta como nos habíamos reconciliado tan rápido, aunque la verdad ni yo entendía muy bien que había ocurrido, pero al final mi mamá se creyó toda la historia, por suerte no nos suspendieron del liceo ni nada parecido eso de verdad que sería un problema. Más ahora que ya casi el año escolar está por terminar.

Luego de hablar ya se habían hecho más o menos las 7 de la noche y mi mamá se puso a cocinar la cena.

Al rato llego mi papá, que ya había conocido a Andrés, de vista, la vez pasada que Andrés se había quedado en casa.

Él luego de que yo cogiera los bóxers y los escondiera, entro en la habitación a saludarme, suele hacerlo siempre por lo que siempre estaba pendiente a la hora de su llegada, pero ese día pensé que había llegado más temprano y se acostó a dormir, siempre que no está mi mamá lo hace. Pero por algún motivo se le hizo tarde y por poco que me descubre.

Estuvimos hablando un rato todos de lo ocurrido y cualquier otra trivialidad. Andrés se lleva muy bien con ambos.

-Clack- se escuchó el seguro de la puerta de mi habitación al cerrarse.

-Al fin- de nuevo solos dije sonriendo con malicia.

--Ellos solo se preocupan mucho por ti…

-je- hice con un gesto de aceptación

-Ahora que lo pienso ¿a tu mamá la llamaron?

--Claro, hable con ella cuando venía en el bus

-¿y que paso?

-No le preocupó mucho, porque dice que a veces los mejores amigos tienen sus peleas, entonces le dije que venía a hablar contigo, a disculparme mejor dicho, así que me dio permiso para venir.

-¿Y para quedarte?

--Ella lo entenderá, tranquilo.

Estuvimos un rato sin decir nada, hasta que Andrés rompió el silencio preguntando.

--¿Y ahora?

-ehmmmmmm… no sé.

--Jeje, tonto- dijo mientras  se acercaba y me daba  un pico.

-Creo que deberíamos esperar… aún están despiertos.

--¿Esperar para qué?

-Bueno, para eso…

--¿Qué cosa?

-esoo!!!…

--Si si, entendí, solo jugaba contigo. Tranquilo.

-Ok, ok… Entonces, me voy a bañar…

--Bueh… veré tv mientras…

Me bañe rápidamente… Al salir vi en el espejo como me había ya bajado un poco la hinchazón en el cachete. Andrés, bueno, su cara era un desastre, el labio hinchado, un ojo morado, aún así se veía tan lindo. Apenas Salí me dedico una de esas sonrisas tímidas/eróticas que hace para luego decirme que él también se iría a bañar… Luego pensé que ¡Como no se me había ocurrido hacerlo juntos! Pero recordé que mis padres aun andaban por ahí despiertos y era mejor prevenir que lamentar… después de más o menos unos 15 minutos salió Andrés del baño y como si se hubiera bañado con agua de la fuente de la juventud o algo así se veía mucho mejor que antes, claro que no había desaparecido el golpe ni mucho menos creo que el dolor pero sí que ya no se le notaba tan demacrado.  Había salido ya vestido, triste para mí, pero bueno -apenas comienza la noche-, me decía tratando de consolarme.

--¿Jugamos Wii?- me dijo como tratando de buscar algo que hacer para hacer tiempo quizás…

-Oye que raro eso, viniendo de ti que solo te quejas de mis juegos.

--El Mario Bros, aún no conozco a alguien que no le guste  jugarlo.

-jeje, bueno, pondré ese.-

Ya serían como las 12 de la noche cuando me canse de jugar. Me levante del piso y me abalance sobre Andrés que estaba en mi cama

-He esperado mucho por esto, no pienso seguir- Conseguí a decir mientras le comía la boca desesperadamente, al mismo tiempo que iba levantando la franela que llevaba puesta.  Fue entonces cuando note que traía puesta una cadena que me parecía haber visto antes. Y si, era aquella cadena, que cuando estábamos “luchando” le arranque y la lance por su cuarto, solo que para aquel entonces no me fije que el dije que llevaba era un corazón, partido a la mitad y con la  letra A.

-Ehmm, esto…- dije mientras agarraba el dije…

-Era de mi ex, es bastante raro llevarlo ahora…

-¿Ella llevaba la otra mitad?

-Sí, pero- Dijo mientras desabrochaba la cadena – Ya eso no me importa- Diciendo esto lanzo la cadena al piso.

-Sabes es bastante raro, pero tu nombre es el masculino del de ella… los dos comienzan por A entonces. Pareciera que es para ti mismo… que enredo…

--Bueno, es que es una larga historia eso…

-mmmmm… Bueh… luego me cuentas. Ahora… ¿En que estábamos?

--En esto- Dijo mientras me besaba y comenzaba a levantar mi franela.

Yo estaba encima de él, ya ambos con el torso desnudo, podía sentir  todo el calor de su pene justo en mis nalgas, además que ya al parecer lo tenía bastante “despierto”.

Con mis manos recorría su pecho, bajaba y palpaba sus abdominales medio marcados, con mis pulgares  jugaba con sus tetillas lo cual le causaba mucho placer, gemía como un loco, tenía que advertirle a cada rato que si gemía tan fuerte terminarían escuchándonos.

Me baje el short hasta quedar completamente desnudo mientras que Andrés solo observaba como lo hacía. Después fui hasta él y también se los quite. Apenas baje su bóxer salió disparada una hermosa polla un poco más grande que la mía con un poco de bello a su alrededor, se veía que le daba bastante cuidado a decir verdad. Con un capullo grande y puntiagudo y con unas cuantas venas que recorrían todo el tronco bastante marcadas. Me volví a sentar sobre su miembro, podía sentir todo su calor ahora en mi raja. Sin bajarme me agache para morrearnos los dos de una manera salvaje. Su lengua buscaba la mía y la mía buscaba la suya y a pesar de haberse encontrado parecía que la búsqueda jamás acabaría, me encantaba como me besaba, explorando toda mi boca, aun podía sentir el sabor a menta de la pasta de dientes… -ffff-.

-Te quiero- dijo separando nuestros labios y acariciándome la mejilla mientras me miraba a los ojos. La luz que venía de la televisión se veía reflejada en sus ojos lo que lo hacía ver mucho más lindo. Con una sonrisa casi perfecta, -no perfecta gracias a mí que la había estropeado- me miraba de una forma tan tierna que no resistí la tentación de volverlo a besar.

-Yo te amo- dije separándome de nuevo de sus carnosos labios hinchados.

Él solo sonrió mientras que con sus manos iba recorriendo toda mi espalda, luego recorrió mis tetillas, las pellizco suavemente como yo hice con él, se levantó un poco y luego las lamio… no solo las lamia, las besaba, con sus labios la tiraba de ellas delicadamente, las mordisqueaba, alternando entre una y otra. Que rico lo hacía, de verdad que me gustaba, ya comprendía porque gemía tanto unos minutos antes.

Luego besándolo de nuevo lo volví a dejar acostado en la cama y entonces me anime a más y me puse de rodillas a la altura de sus tobillos.

-¿Que vas a hacer?

-Ehmmm. ¿Qué crees?

No sabía ni que cara poner cuando le dije eso.

-Pues… ¡Te voy a hacer cosquillas en los pies!!!

-Aaaah no para paraaaaa- suplicaba riéndose como loco.

Antes de que se diera cuenta me abalance sobre su pene y de una vez me lo metí completo en la boca. Tenía un olor agradable y un sabor –ffff- como describirlo, me gustaba… y mucho, desde  cómo se sentía,  la piel suave, caliente y completamente dura al mismo tiempo,  lo lamia como si fuera un helado que se estaba derritiendo…

Saboreaba cada una de las gotas saladitas que salían de él, me volvían loco. Quería más y más, entonces chupaba y chupaba, Andrés se quejó un poco. Me disculpe, en realidad ni yo sabía que hacer, ni como, pero esas gotas pre-seminales me encantaban y quería más.

Con mi mano lo masturbaba, y después lamia el capullo en busca de ese delicioso tesoro…

Andrés estaba completamente extasiado.

En un momento dado me tomo por la cabeza y empezó a poner el ritmo de la mamada.  Hasta que tomándome del pelo me separo de su pene y me dirigió hacia sus labios mientras se levantaba  haciéndome a mí caer acostado en la cama.

--Que rico ha sido eso.- logro decir entre beso y beso

-sii- dije entre gemidos

--mucho.

-métemelo por favor- le dije mientras atraía a Andrés hacia arriba quedando los dos de rodillas sobre la cama.

Si cuando le dije que se lo iba a mamar  (o le insinué esto) había quedado sorprendido ahora había quedado en shock, tenía los ojos como platos. Tartamudeando me pregunto:

-¿Es- es- estás seguro?-

-Siiii

-¿No crees que es demasiado rápido?

-¡Por favor!!! Lo he deseado desde la primera vez que te vi.

-Bueno, pero no sé, nunca lo he hecho.

-Anda por favor- dije al momento que me acostaba y  levantaba las piernas poniéndolas sobre sus hombros. (Mira que los videos porno me habían instruido bastante).

-Entonces puso pene en mi entradita y dirigiéndolo con una mano comenzó a empujar inútilmente.

-No puedo- Dijo inocentemente.

-Espera falta lubricarlo, entonces me levante y fui corriendo al baño de mi habitación tome una crema nívea que tenía y Salí corriendo de nuevo pero por andar en carreras me resbale con la baldosa del baño y termine en el suelo, sí que dolió coño. En unos segundos ya Andrés estaba frente a mi completamente desnudo aún y con un gesto de preocupación.

-¿Te paso algo?

-No, no es nada tranquilo.

-¿Qué venias a hacer?

-Buscaba esto- Dije señalando la crema aun sentado en el piso

-¿Para qué?

-Ven

Entonces se acercó y yo viendo su pene  erecto en todo su esplendor no pude darle unos cuantos lambetazos tomándolo como si de una chupeta se tratara para luego  poner crema en mi mano y untársela en sus calculaba yo 17 cm con la cabeza ya coloradita con la mamada que le había dado.

-Ahora si

--¿Listo?

-Si

--Vamos a la cama entonces

-No, no, hagámoslo aquí.

--¿En el piso del baño?

-Sí, si aquí. Túmbate

Andrés obedeciéndome se acostó en el piso, entonces fui yo quien poniéndome encima de él y ayudándome con una mano fui dirigiendo su polla, que resbalaba de mis manos a causa de la crema, hasta la entrada de mí hasta ese momento virgen culo. Ya con la punta a punto de entrar fui bajando poco a poco hasta sentirla ya irse introduciendo, fue fácil gracias a lo embadurnada en crema que estaba pero apenas introduje poco más de la cabeza comenzó un fuerte dolor.  Andrés quizás viendo mi cara, pregunto preocupado si estaba bien, yo solo asentí con la cabeza mientras apretaba los dientes y seguía introduciendo aquel  hirviente monstruo de carne dentro de mi ser.

Gemí  al sentirlo completamente adentro. Andrés a su vez cerró los ojos y se había dejado llevar al parecer.

Esperando a que el dolor cesara me incline hacia él y le plante un fuerte beso comiéndome su boca, como bebiéndome su ser, me encantaba ser suyo, sentirlo dentro mío. No creo que me hubiera sentido tan feliz antes.

Me quede un rato así abrazado a él hasta que sentí que era hora de continuar, entonces me levante sin sacarme su polla de mí, de nuevo la fui introduciendo hasta tenerla toda completa, así comencé con ese subibaja desenfrenado que me volvía loco, no solo a mí, la cara de Andrés me decía que le encantaba, no paso mucho rato y ya los dos estábamos sudando como si hubiéramos estado haciendo ejercicio, comencé a sentir su respiración acelerada, sus gemidos aumentaron en cantidad y en volumen, yo no tuve necesidad de meneármela mucho para entonces dejar todo el pecho de Andrés inundado de mi lefa, al mismo tiempo que él también se corría pero dentro de mí.

Andrés soltó un largo suspiro…

-Coño… que rico ha sido eso…

-Seeee- dije asintiendo con la cabeza e imaginando mi cara como de puta satisfecha –coño e´ su madre- , me levante sacando su polla de mí y quedando con una sensación de vacío.

Me tumbe en el piso al lado de Andrés, de forma que ambos mirábamos al techo. Yo tome su mano y el apretó levemente la mía, así estuvimos un rato sin mediar palabra alguna hasta que él se levantó para ir a ducharse… Yo me levante y en vez de ir a ducharme con él fui a tomar toda nuestra ropa que había quedado regada por mi habitación.  Al rato salió Andrés del baño, me vio a la cara y luego sonrió tímidamente. Yo hice lo mismo. Después le entregue su ropa y me puse la mía para luego acostarme en mi cama. A Andrés le tocaría dormir en una colchoneta como había sido la vez pasada pero, por supuesto que esta vez no sería así.

Ya acostados Andrés me dio un beso de buenas noches diciendo luego que me amaba y que lo disculpara por todo lo malo. Yo solo le respondí que ya eso no importaba , no hacía falta más disculpa si justo en ese momento se hallaba acostado a mi lado mirándome a la cara con la tenue luz que apenas entraba en la habitación luego de apagar la tv, y que me hacía enamorarme más de su mirada. Aquella que me había cautivado desde un principio cuando cruzamos las miradas por unas cuantas milésimas de segundos el primer día de clases.

Así fue como hoy amanecimos en la misma cama aún abrazados, me recordaba a aquellos dos abuelitos de la peli del titanic que se abrazaron en su cama antes de morir...- jejeje-…

No pude evitar sonreír  al verle dormido como un ángel…

Las 7:30am marcaba el reloj cuando me desperté y no paso mucho rato cuando escuche unos cuantos golpes en la puerta.

Me sobresalte de la cama maniobre como pude para no caerme porque me había enredado con la sabana,  llegue a la puerta y abrí de forma que mi papá no pudiera ver que Andrés dormía en mi cama.

-Buenos días.

-Bendición papi.

-¿Qué pasa que no abres la puerta completa?... Acaso…- guardo silencio.

-¿!QUE!?- dije alterado de que nos hubiera descubierto, quizás nos escuchó por la noche, o si había entrado antes, y nos había visto juntos durmiendo…- aaaaaaah- le daba mil vueltas al asunto en mi mente…

-¿Asesinaste a Andrés y lo escondiste tras de la puerta?

-Si eso hice…-. (-affffff- la imaginación de mi  papá es algo descabellada)-

-Bueno recuerda no dejar ningún rastro en la escena del crimen para antes de que lleguemos tu mamá y yo… Vamos al mercado… Con tu mamá solo Dios sabe cuando regresemos, así que tienes bastante tiempo,  tranquilo…- (mi papá y mi mamá suelen ir a hacer mercado los sábados, a veces conmigo, otras no, pasábamos casi que todo el día en ello, mi mamá es una caza ofertas y siempre andamos de supermercado en supermercado buscando los mejores precios…)

-Jejeje. Ok ok (en verdad tenía que hacer eso, no podía dejar ningún rastro de lo que había sucedido anoche) chao bendición- dije dándole un beso en la mejilla.

-Chao…-

Cerré la puerta, de nuevo pase el seguro por si acaso, entonces me dirigí hasta la cama tome mi celular de la mesa de noche y lo puse para que me despertara unas 4 horas más tarde… Entonces me volví a acostar junto a Andrés susurrándole al oído lo mucho que lo quería para luego volverme a dormir a su lado…

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Gracias por su lectura :)

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A quien pueda interesar:

A todos los que siguen esta serie de relatos de verdad disculpas por la tardanza… En la parte anterior deje un comentario sobre eso ( http://www.todorelatos.com/comentarios/77683/ ).

También les digo que esta quizás no sea la última parte de esta historia… De hecho aún hay mucho que no se ha contado… y ya varios se han dado cuenta y lo han expresado en sus comentarios.

No es la última parte de esta historia pero si de la “serie” de enamorado solo porque ya marcos no lo está… ¿O sí?

De haber una continuación no duden que les avisare (en la descripción colocare que es la continuación porque el nombre quizás no será el mismo) o también se pueden fijar en mi nombre de usuario que dudo mucho vaya a cambiar.

Como siempre, les pido que no se olviden de valorar y comentar (Va incluido criticar, preguntar y otros ar...)… y les digo que ahora también lo pueden hacer por correo (Cree un correo solo para eso) Sideshift11@gmail.com

Hasta la próxima ;D

Saludos…