Enamorado de mi vecino
Les cuento como inicio una aventura que cambió mi vida al lado de mi vecino
Hola, mi nombre es Manuel Godínez, tengo 18 años, siempre he sabido que me gustan los hombres, sobre todo uno en específico, mi vecino Luis.
Empezare describiéndome, soy medio alto, mi color de piel es algo clara, con ojos café claro, me gusta hacer ejercicio por lo que gracias a ello tengo un abdomen plano seguido de una bonita cintura, además de un culo redondo que me encanta.
Mi vecino, quien tiene 29 años, esta juntado con su mujer y tienen 2 niñas, él es moreno claro, alto, la verdad es que lo he visto varias veces al gym, por lo que sé que tiene su cuerpo marcado sin exagerar por el ejercicio. Siempre me ha gustado por el hecho de ser vecinos, ya que cuando estábamos más pequeños jugábamos varios chicos del barrio, entre ellos él y yo.
Puedo hablar tres idiomas, el español, el inglés y el francés, y este último fue mi boleto de entrada para acercarme más a él.
Recuerdo perfectamente, que un sábado por la mañana tocaron a mi casa, mi madre me indico que era Luis y quería hablar conmigo, me sorprendí pues ya tenía años que no hablábamos. Fue una plática normal, pues me pidió de favor que le diera clases de francés los fines de semana, claro que no podía negarme, y acepte.
El próximo fin de semana fui a su casa, me abrió su mujer y me dijo que Luis vendría pronto pues se estaba bañando, por lo que me senté en el sillón a esperarlo, no tardo demasiado cuando el llego, traía un pantalón, y venía con el abdomen descubierto todavía mojado por la ducha, era la primera vez que lo veía así, y me encanto, estaba más guapo de lo que pensaba.
Dentro de unos minutos todo transcurrió normal, pues empezamos a estudiar, comenzamos con las clases, se puso su playera, etc. Nada fuera de lo normal. Hasta que su mujer indico que se iba al supermercado a comprar víveres y se llevaría a sus hijas para no molestarnos, (por cierto el supermercado está a casi 1 hora de distancia).
-Como se extraña jugar todos como cuando éramos jóvenes, ¿no?- me dijo el después de uno minutos.
-Sí, la verdad que si- le respondí.
-Sabes, aunque nunca lo decíamos, de todos los vecinos, tu siempre fuiste el que me caía mejor- me confeso él.
-¿Enserio?- le dijo yo sorprendido.
-Sí, la verdad contigo me sentía bien, cuando jugábamos y agarrábamos equipos siempre me iba contigo porque me sentía bien estando a tu lado- me dijo poniendo su mano en mi pierna.
-Tú también me has caído bien, a pesar que hace mucho no hablábamos- le dije, la verdad estaba nervioso no sabía cómo acabaría esto.
-Puedo hacerte una pregunta?- me dijo el
-Dime-
-¿Te gusto?- me pregunto el, la pregunta me había dejado sorprendido, y no sabía que responder, hasta que volvió a hablar.
-He notado como te me quedas viendo en la calle, cuando paso al lado tuyo y me das una miradas, no sabes cómo me gusta que hagas eso- me dijo para romper el silencio.
-Bueno, dejo aceptar que te has puesto muy bueno desde que éramos niños- no sabía que decir, la verdad estaba nervioso.
-Tú también me gustas, desde hace mucho y no quiero perder ninguna oportunidad contigo- me dijo y me beso, nos fundimos en un beso apasional, debo decir que era el mejor beso que había dado, nuestras bocas se estaban juntando y nuestras lenguas chocando unas con otras. Hasta que se quitó nuevamente su camisa, me tomo de la mano y la llevo hacia su abdomen, me volví loco me daban sensaciones que no lo creía.
-Espera, espera, ¿y tu mujer?, ¿Qué pensara?- le pregunte pensando en su familia, la verdad es que deseaba hacerlo pero tenía miedo en destruir una familia.
-Ella no se enterara de nada, además el que me gusta desde hace años eres tú, no ella- me respondí y volvió a besarme.
Definitivamente que disfrutaba el beso, pero mi calentura fue más y comencé a tocarlo, con mi mano y comencé tocando su abdomen, sus brazos, su cara, hasta que el tomo y mano y la llevo a su entrepierna, sentí que ya estaba erecta, pues la verdad que lo sentí grande, el de desabrocho el cinturón y me dijo que podía hacer todo lo que quiera.
Como seguíamos sentados en el sillón, me arrodille frente a él y comencé acariciando su miembro por encima del pantalón, dándole pequeños besos por encima, hasta que me anime y le baje el pantalón y el bóxer, fue ahí cuando pude apreciar un hermoso pene de buen tamaño bien depilado y unos buenos huevos que le cuelgan, comencé a masturbarlo con mi mano, lo hice unos minutos hasta que lo metí a mi boca, comencé a chupar ese pene, jugaba con mi lengua, la pasaba por todos lados, por su glande, pasaba por todo su tronco, en ciertos momentos jugaba con sus bolas, me las metía a la boca para chiparlas, y regresaba con el tronco, la cabeza y lo metía por completo a la boca, así estuve jugando, sabía que él lo disfrutaba pues daba pequeños gemidos, y me indico que iba por buen camino, así estuve durante varios minutos, hasta que me levanto y me volvió a besar, nos fundimos nuevamente en otro beso, me quito la playera que llevaba dejándome descubierta la parte del abdomen.
Me puso a 4 en el sillón, dejando mi culo en su cara, por encima del pantalón, comenzó a jugar con ellas, hasta que me desabrocho el pantalón, y me lo bajo, dejando así mis nalgas al aire.
-Uff, las tienes mejor que mi mujer- me dijo
-Son tuyas, siempre he deseado este momento- le conteste.
(Aclaro que no soy virgen, he tenido encuentros con amigos y mi ex)
Después de responderle, comenzó a darme nalgadas, dando pequeños besos en cada una, hasta que sin pensarlo, sentí como su lengua pasaba entre mis nalgas, era la mejor sensación que tenía, sentía perfectamente como su lengua pasaba por todo mi ano, como la metía, de ratos apartaba su cara para escupir y volver a pasar su lengua, mientras me daba buenas nalgadas, desconozco el tiempo que estuvimos así, pero si fue mucho.
Al instante se colocó un condón y comenzó a colocar la punta de su pene en mi ano, sentía como empujaba lentamente hacia adentro, yo me quejaba un poco estaba más grande que lo que pensaba, sin embargo disfrutaba, fue cuando por fin entro toda, y comenzó con el típico mete y saca, empezó con un movimiento leve, yo gemía de placer mi vecino del que estaba enamorado me estaba penetrando, así estuvimos hasta que note que acelero el movimiento, podía sentir como sus huevos chocaban con mi culo, me encantaba sentirlo, ambos gemíamos, sin llevar a ser gritos, eran más de placer. Mientras en el penetraba me acariciaba la espalda, me jalaba del pelo, etc. Todo perfecto.
Me indico que fuéramos a la cama y lo hicimos, él se tiró en ella boca arriba, y me coloque sobre el dándole la espalda, quería que viera mis nalgas desde otro ángulo, ya montado sobre él, comencé con un buen movimiento hacia adelante y atrás, dando pequeños gemidos los dos, de vez en cuento me daba nalgadas, me decía que le gustaba ver mi culo de esa manera que se veía más grande, eso solo me motivó a seguir con más movimientos, mientras que el me nalgueaba.
Me indico que me acostara yo en la cama boca arriba, por lo que obedecí y lo hice, mientras él se puso delante mío, y puso mis a sus hombros, dejando mi culo al descubierto y en buena forma para que su pene entrara fácilmente, y así fue, empezó metiendo su pene nuevamente en mí, y esta pose debo confesar que me gusto, era la primera vez que la hacía, sentía perfectamente cómo se movía dentro de mí, yo gemía de placer, me encantaba estar en esa pose, no podía pedir más, el por su parte también gemía, sus movimientos ya no eran suaves si no bruscos, mi calentura aumento al mil y comencé a masturbarme mientras él me penetraba, estaba demasiado excitado no podía más, sabía que en cualquier momento me vendría y así lo hice, mi excitación hizo que sacara más leche de lo normal, llenado mi abdomen de mi propio semen. Luis por su parte cada vez más gemía más fuerte sabía que en cualquier momento e vendría también, pero el aguanto más minutos hasta que me indico que se vendría, le pedí que me lo echara en la boca, por lo que saco su pene, se quitó el condón y se paró de pie en la cama, yo me puse de rodillas frente a él, con la cara cerca de su pene, él se masturbaba con ganas, veía como se estremecía, y como en ciertos momentos gritaba, sin sentirlo, sentí varios disparos de su leche e mi boca, llenándola por completo y un poco cayendo sobre mis labios, y boca, decidí tragarme su leche y lo hice, me dijo que iría por papel para limpiarnos, y lo hicimos.
Nos volvimos a acostar en la cama, dándonos besos de pico, me gustaba estar así con él, de esa menara aun desnudos y juntando nuestras bocas, mi sueño se había hecho realidad, y sabía que desde ese momento todo cambiaria entre los dos.
-A partir de ahora, serás mío, siempre me has gustado y no te perderé, siempre estaré para ti y te apoyare en todo- me confeso
-quiero que veas en mi a una pareja, al que amo es a ti no a mi mujer, entre los dos comenzaremos pronto una relación formal- termino de decirme y me beso, comenzamos a vestirnos pues en cualquier momento llegaría su esposa, nos fuimos al sillon de la sala y seguimos ''estudiando'' no tardo demasiado cuando su mujer y sus hijas llegaron, por mi parte me despedí de ellos y me fui en dirección a la puerta, cuando sentí que alguien me agarro del hombro.
-Recuerda lo que te dije, te amo, pasame tu número de celular para hablar y quedar para salir, al cine, a comer, lo que quieras, quiero complacerte en todo-me dijo
Le di mi numero de celular, y antes de irme me dio un beso de pico, y me fui, llegando a mi casa estaba que no me lo creía, Luis el hombre que me gustaba desde hace años, me había pedido una relación?, estaba que no lo creía.
Pasando los dia, comenzamos a salir íbamos al cine, salíamos a comer etc. Me encantaba estar con el, tuvimos uno que otro encuentro sexual con el. Sin embargo el seguía con su mujer, pasando dos meses el la dejó y de fue a un departamento en el centro de la cuidad, me pidió que me fuera con el, pero aun soy menor tengo 18 tengo estudios y mis padres no lo permitirian sabiendo que yo estuve en medio de una relación así que solo seguíamos como pareja, salíamos y cojiamos. Todo perfecto al lado de mi hombre.
Espero les haya gustado, me den sus opiniones acepto todo comentario, pronto más de mis aventuras con más personas, y con dos integrantes de mi familia (mi primo y mi papá).