En un negocio familiar

En un negocio familiar

Conozco a Maribel desde el instituto, y desde entonces somos amigas intimas contándonos todas nuestras cosas, así ella conoce mis experiencias amorosas, incluidas las lésbicas, aunque sobre estas evitaba que la contase demasiado de mis aventuras, a pesar de conocer de ella que ya tuvo alguna que otra aventurilla cuando tenia unos 12 años.

Bueno, esto fue así hasta que nos casamos y dejamos de contarnos cosas intimas de nuestra vida sexual con nuestros maridos ó amantes, aunque teníamos una estrecha relación y salíamos de vez en cuando.

Actualmente y como yo me he separado, suelo quedar con ella en el club de tenis para jugar algún que otro partido.

Llevaba casi un mes sin verla y quedamos a jugar al paddle y de entrada la note algo distinta pero no hice ningún comentario.

Después de la partida nos fuimos a ducharnos como solíamos, y no pude evitar preguntarla al verla totalmente rasurada que había pasado, que como ella que siempre me decía al verme como tenia yo mi vello pubico tan recortadito, la parecía muy escandalosa y ahora ella lo tiene totalmente rasurado y al observarlo bien de cerca estaba hecho por un profesional del tema, por lo que descarte algún problema de médicos.

Mientras nos vestíamos, se decidió a contarme que la ultima vez que fue a la depilación de sus piernas la convenció la esteticiene para darla un masaje y que de ese masaje que ese día necesitaba por estar agotadísima y que termino aceptando, la masajeo, toco, manoseo y dejo que la llevara a unos orgasmos que no se imagino que podría alcanzar. Y así al ponerse en sus manos termino dejándose convencer para que la rasurara completa y lo que aun es mejor, volvió posteriormente para recibir mas atenciones.

Yo alucinaba totalmente y no podía creerme todo lo que me contaba que la había pasado y al mismo tiempo, comprobaba como habíamos recuperado el que se sincerase conmigo con cosas tan intimas y sobretodo me ilusione más al saber que la gustaba las relaciones lésbicas.

Esa noche estuve dando vueltas a todo lo que me había contado y pensando como podría acercarme para tener alguna relación intima con ella, se me ocurrió llamarla al día siguiente y animarla para que lo escribiera y si podía la convencería para que lo publicase.

Cuando empecé a tantearla me lleve la sorpresa que no sabia nada de los relatos y menos que se publicasen, así que la propuse que la mandaría a su mail uno de mis relatos y después ella escribiría toda su experiencia y quedaríamos para decidir que hacíamos.

Quedamos en mi casa por la tarde un día de la siguiente semana, cuando llego su primer comentario fue:

"Caramba como vas de veraniega y un poco provocativa". Yo tenia una faldita roja corta y una camiseta de tirantas blanca sin sujetador que dejaba ver con facilidad mis tetas y pezones en cuanto me agachara minimamente, cosa que aun no había hecho.

"No te pases ni te la des de estrecha", la conteste, "con el calor que hace en mi apartamento voy lo mas cómoda ya lo veras en un rato, pero tú si que vas más sugerente, con esa minifalda vaquera que insinúa mucho mas que una mini ajustada como la mía y no digamos esa blusa a medio desabrochar que deja adivinar tus tetas aunque se ve que llevas sujetador", de verdad que estaba preciosa,

"Bueno, a ver si ahora voy a ser yo la provocadora, pero si llevo la ropa más corriente mía" "Si pero esa faldita vaquera, es de las que provocan más, porque si sé esta un poco pendiente de ella, en cualquier movimiento que hagas puedes mostrar más de lo que enseña una mini normal" a este comentario no hizo ninguna alusión pero en su gesto mostraba cierta conformidad con lo dicho.

De todas formas, yo seguía extrañada de que no me hubiese hecho ningún comentario del relato que la envié, así que cuando nos sentamos en el tresillo del salón me adelante y serví unas margaritas, que me encantan, sin darla opción a tomar solo refresco como acostumbra. para ir así entonándola

Una vez acomodadas en el tresillo y mientras yo me fijaba en sus piernas y muslos que enseñaba sin descaro al haberse subido su falda al sentarse, sus ojos estaban clavados en las mías y más concretamente diría en mi tanga que sin ningún pudor la estaba mostrando.

Después de un rato de conversación banal y de tomarnos la primera margarita, la pregunte que la había parecido mi relato y si la había gustado, al parecer la encanto pero confesaba que ella era incapaz de describir las cosas de esa forma y me dió unos folios con lo que había escrito sobre su experiencia, yo volví a insistir preguntándola directamente

"Pero te ha encantado solo o también te excito su lectura" un poco entrecortada todavía, me contesto

"Claro que si y no solo me excitó, me empezó a poner tan cachonda, que tuve que dejar su lectura hasta la hora de comer en la que estaba más tranquila, y cuando lo leí de nuevo comprobé que estaba mojadísima y sin darme cuenta empecé a acariciarme y proseguí sin poder parar, llegando a un orgasmo que fue el que me decidió a escribir estas hojas para ti"

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Mientras me disponía a leerlo la dije

"Toma este otro relato mío para que no te aburras, mientras leo lo que has escrito" y la deje un relato que había arreglado adecuadamente sobre mis sesiones de seducción y entrega de una amiga común y de quien ella no imaginaba que tuviese esas relaciones

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Su relato estaba escrito en plan telegrama como si no se atreviera a entrar en los detalles de todo lo que fue sintiendo, estaba claro que habría que incluir todo lo que me habia contado y que ahora se había callado, pero en si, su aventura me pareció tan excitante al saber que lo escribió para mi que me puso bastante cachonda y como termine de leerlo antes de que terminara ella de leer el mío, me dedique a observarla durante unos minutos, comprobando como mi relato la iba afectando en los gestos de su cara y en el movimiento inconscientes de sus piernas y manos.

Deje que casi lo acabase y me fui acercando a ella haciendo como que lo iba a leer y estando totalmente juntas me dijo:

"¿Esto es verdad? No me creo que Nuria, como así se llamaba nuestra amiga común, fuera capaz de todo esto"

"Pues es todo verídico, no te puedes imaginar lo viciosilla en que se ha convertido y lo que la encanta hacer tríos, ¿té esta gustando?" mientras esperaba su respuesta la puse mi mano entre las piernas y como seguía ensimismada me decidí a decirla

"Mientras terminas de leer déjame que compruebe si té esta gustando lo que hace y la hacen a Nuria"

Ella estaba tan absorta con el relato que no dijo nada y entendí su silencio como una aprobación a que siguiese, lo cual confirme que era así, porque al ir subiendo mi mano, notaba como ella iba separando las piernas hasta que llegue a su tanga, que separe e introduje un dedo en su rajita que estaba totalmente empapada

"Veo que te ha gustado, y te ha puesto muy cachonda porque lo tienes totalmente empapado"

La fui tocando suavemente mientras su cara delataba una complicidad y sumisión que me animaron a ir a por ella, empece entonces a tocar con mis dedos totalmente pringados de ella, su puntito con movimientos circulares, al ratito ella dejando caer mi relato, me dijo

"Déjame que te ayude, que así te molesta todo" y se quitó la falda, se bajo el tanga y tumbándose en el tresillo me dejo para mi una rajita rasurada, estaba claro quye esta no era la Maribel que conocía y que la habían cambiado, y sin dudar la dije

"No sabes las ganas enormes que tenia de tenerte así" acerque mi boca a su rajita y empecé a chupar y lamer por sus labios para luego dedicarme a su puntito que mi lengua como buena experta que es en eso, fue poniendo a tope, ella ya no se cortaba y gemía de placer sin importarla lo que iba diciendo antes de que llegase al orgasmo me separe y me fui hacia su boca sabiendo que ya no se resistiría a que la besase y diciéndola

"Llevo todos estos días pensando en este momento, ven y besa todo lo tuyo"

Nos juntamos los labios en un beso arrebatador que duro una eternidad, mientras me estrechaba hacia ella y sus manos me apretaban mi culo, en cuanto separamos nuestros labios me pidió que siguiera chupándola y así lo hice, me deslice hacia su rajita y me dedique a tocarla y acariciarla con mi lengua, mientras la otra mano se deslizaba por debajo de su blusa subiendo hasta el sujetador que echo hacia arriba y empecé a tocarla las tetas y los pezones, hasta que de nuevo sus gemidos empezaron a subir de nivel hasta alcanzar un orgasmo que acompañó con unos los movimientos tan fuertes que parecían convulsiones, entonces seguí con mis dedos introduciéndoselos en la rajita y la empecé a provocarla diciéndola

"Mira como te folla tu marido" ella solo decía

"Sigue, por favor sigue, no te pares"

"Sabes que estoy decidida a convertirte en otra viciosa como Nuria" continuaba diciéndola.

"Si, si hazlo que quieras" estaba claro que la tenia fuera de control y entonces moví los dedos que tenia dentro de su rajita, para que buscaran su punto interior, que no tardaron en encontrar y ahí empezó otra vez a gemir y a perder definitivamente el control y me repetía

"Soy tuya, continua, que placer, sigue" viendo como estaba la situación aproveche para preguntarla algo que tenia muchas ganas de saber, ya que sabia que mi exmarido la gustaba y tenia la duda de que se hubiesen liado.

"¿Follaste con mi marido? Contéstame",

"No, no he follado con él" seguí preguntando

"Pero algo si habéis hecho, confiesa o dejo de tocarte" ella me contesto

"No pares por favor, si me beso y me toco las tetas, solo eso" la interrumpí y la pregunte

"y tu que le hiciste"

"Solo le abrace, no hubo mas, apareciste tú y nos cortaste y no ha tenido mas oportunidades" estaba llegando a otro orgasmo y me excitaba tenerla así bajo mi control, así que deje que alcanzara otro orgasmo mientras la decía

"Y si no hubiese yo aparecido ¿habrías follado?. Me tienes que contar todo lo que te hizo y como lo haces con tu marido" solo llego a decir

"Si, seguro que habríamos follado, si te diré todo lo que tu quieras saber, pero sigue"

Después de varios orgasmos seguidos, la deje acurrucada en el tresillo mientras yo me quite el tanga diciéndola

"No sabia que fueras multiorgásmica, de verdad que me has puesto cachondisima, así que observa como me acaricio por ti cariño" y empece a acariciarme delante de ella buscando mi placer que no tarde en encontrar, dándola a ella tiempo solamente a acariciarme mis tetas.

Nos quedamos mirándonos y sin decir nada nos abrazamos estrechándonos mientras me decía

"Eres maravillosa y creo que he encontrado el verdadero placer de mi vida"

"¿Y tu marido? "la pregunte yo

"Le quiero pero esto es distinto, el solo quiere su placer, nunca me ha hecho las maravillas que he gozado contigo, solo me chupa las tetas y me folla, ah eso sí, le gusta que se la chupe. Esa es nuestra relación de siempre "

"Conmigo te vas a sentir como mujer de verdad, la conteste, no me creo todavía que estemos así ahora, después de tanto tiempo que lo he deseado y que veía que rechazabas esta relación, y que me dices de la relación con tu masajista?"

"Me encanta lo que me ha hecho descubrir y me hace gozar en mis sesiones, no creo que la deje nunca, así tengo sexo garantizado los días que yo quiera, y gracias a ella nos hemos descubierto"

Yo continué "Y seremos confidentes de nuestras aventuras, ¿te parece?

"Claro que si, me encanta que nos excitemos contándonos todo"

Después hablamos de su experiencia y quedamos que yo lo rescribiría y lo publicaría, eso si con una condición, que pondría su dirección de correo electrónico y ella tendría que contestar personalmente todos los correos que recibiese, a lo que asintió no muy convencida de adonde se metía.

El relato de su experiencia se describe mas o menos así:

Suelo ir desde hace varios años al mismo local de esteticiene para depilarme las piernas y las axilas, es un negocio familiar que llevan una madre de unos 50 años y su hija de 32 años, normalmente me atendían indistintamente según el turno que me tocara. Desde hace unos meses, la hija que se llama Bea, hacia todo lo posible para atenderme ella y así lo estaba consiguiendo, yo no veía nada extraño en ello ya que hasta cuando me depilaba las piernas no sospechaba nada anormal aunque algunas veces sus manos se apoyaran en mi tanga o alguna que otra vez sus dedos me tocaran sin querer mi rajita por encima del tanga, o al menos así lo entendía yo.

El caso es que ese Martes, me volvió a atender Bea y al preguntarme como estaba, la conteste que muy cansada que había tenido un día agotador y tenia el cuello y la espalda como si tuviese una contractura, enseguida empezó a aconsejarme que lo que me hacia falta ese día era un buen masaje que me sentaría de maravilla y que la depilación la dejáramos para otro día, al decirla que tenia invitados el fin de semana y el vestido que me iba poner dejaba mostrar las piernas, no podía estar sin la depilación, entonces me convenció diciéndome que me buscaría un hueco otro día esa semana sin ningún problema.

Como me había convencido me empecé a desnudar y cuando ya estaba en sujetador y quitándome los pantalones, me dijo

"Quítate la ropa interior así no me molestara y tampoco te la pringaré de aceite"

Lo vi lo mas adecuado, teniendo en cuenta que iba a estar boca abajo y que mi culo ya lo había visto en todas las sesiones al llevar siempre un tanga, me eche en la camilla boca abajo esperando que me cubriese el culo con una toalla pero no puso nada, y en ese momento me pareció ridículo pedirla que me pusiera una toalla, así que me tenia totalmente desnuda, entonces me dijo

"Te va a encantar y te vas a relajar lo suficiente para que otras veces pidas sesión de masajes, relájate cierra los ojos y déjame hacer"

Sin darme tiempo a decir nada ya tenia su mano y aceite en mi espalda, empezó dándome masajes lentamente por los hombros y brazos, era maravilloso la sensación que notaba en mi piel y mi cuerpo empezaba a dejarse hacer, a pesar de la mayor presión que ejercía sobre mi cuello y hombros que sentía que me estaba relajando de forma maravillosa, aunque al principio me dolía un poco la presión que ejercía.

Cuando llego a mi culo lo ignoró y siguió con mis piernas, ya había extendido aceite por todas las zonas menos por la entrepierna de los muslos que tenia bastantes juntas, y comenzó con un masaje desde los tobillos hasta los muslos sin parar de forma que en cada movimiento de aproximación a la entrepierna me la iba abriendo lentamente.

Para que no pensara que era una estrecha las separe sabiendo que mi rajita estaba totalmente a su vista, pero eso me daba ya igual, ya que estaba sometida a sus masajes y toqueteos, que como podéis imaginar en esos movimientos ya sus dedos habían tocado mi rajita, bueno y todo el vello de mi rajita, empecé a sentir sus manos por toda mi entrepierna escapándosela los dedos, me imagino que intencionadamente, por mi rajita comprobando que estaba bastante mojada por lo que siguió mas descaradamente tocando mis vellos. En ese momento me dijo

"No se como puedes ir con tanto vello que te lo hace antiestético, te voy a echar mas aceite", yo no conteste nada y solo esperaba que continuase con su masaje.

Note como me echaba un chorrito de aceite en mi culo, que se deslizaba entre mis nalgas llegando sin que ella hiciera nada, hasta mi rajita y mezclándose con los fluidos de mi rajita, que tal y como estaba ya de excitada estaba completamente mojada.

Esto lo utilizo de pretexto para pasar sus dedos por mis nalgas y empezó a masajear mi culo, sin saberlo ella me había acariciado uno de los puntos más erógenos que tengo, y reaccione separando mas las piernas y con un movimiento de incorporar el culo, que directamente consiguió que se dedicara de lleno a acariciar mi ano, lo que me llevo a un punto sin control dejándola hacer lo que quisiera y sin vacilar me introdujo un dedo que movía suavemente, transmitiéndome una sensación indescriptible de estar siendo follada. Entonces me pregunto

"¿Te molesta, quieres que quite el dedo?’ instantáneamente la respondí

"No, no lo quites por favor, continua" aunque no hacia falta contestarla ya que Bea sabia que me tenia totalmente en sus manos.

Estaba cercana a llegar a un orgasmo cuando en la misma postura y sin sacar el dedo me introdujo el pulgar en la rajita y entonces fue cuando no aguante mucho la sensación de los dos dedos llegando a tocarse interiormente y tuve un primer orgasmo que continuo con otros al seguir con esos movimientos simultáneos en mis dos aberturas.

Me dejo reponerme de tanto goce, mientras saco los dedos y siguió con masajes sobre mi culo aprovechando sus dedos en tocarme el ano cuando se aproximaban a él.. Yo estaba en la gloria y me imaginaba que ya había terminado, cuando me pregunto

"¿Te ha gustado?

"Me ha encantado, no tengo palabras para decir lo que he sentido y experimentado, eres maravillosa con tus manos"

"Date la vuelta" me pillo desprevenida y en el estado de excitación que estaba obedecí sin decir nada y me encontré boca arriba totalmente desnuda y con ganas de que hiciera lo que quisiera, me la quede mirando y de forma sorpresiva no me dio ningún rubor, al contrario estaba totalmente complacida con lo que me estaba haciendo, lo tuvo que notar porque me dijo

"Te mereces que continué con un masaje por este lado, ¿quieres?

"Si, lo deseo" entonces me echo aceite y se dedico a mis tetas experimentando otra extraordinaria sensación, ya que nunca antes habían sido tocadas de esa forma, agarrándolas suavemente para progresivamente ir apretándolas y continuando con los pezones que sujetaba con los dedos haciéndolos movimientos giratorios y poniéndome mas excitada aun si cabe, mis gemidos la delataban que me estaba haciendo gozar de nuevo.

Al rato y cuando ya creía que me iban a estallar los pezones de placer, bajo sus manos empezando a masajear el vientre y lentamente fueron bajando hacia mi rajita encontrándose antes con mis vellos con los que estuvo jugando y ensortijándolos con sus dedos en ese instante me comento

"Te lo dije antes, tengo que arreglarte estos vellos que están antieróticos, te lo voy a dejar desconocido para ti y también para tu marido claro".

Yo no dije nada ya que estaba deseando que empezara a tocarme por mi rajita mientras ella seguía jugando con mis vellos, hasta que sin pensar abrí las piernas de forma que ella interpretó que la mandaba una señal y entonces bajo sus manos que empezaron a dedicarse a mi rajita, y mientras una mano separaba los labios la otra se dedicaba a hacer caricias, moviendo sus dedos en circulo en mi puntito que no tardaron en acercarme de nuevo a un placer maravilloso y mientras aumentaba el movimiento lentamente, dejaba un dedo haciendo esos movimientos, con otros dos dedos me acariciaba la entrada de mi rajita. Esos movimientos me llevaron a un orgasmo que anuncie antes con una serie de gemidos y movimientos que la animaron a meter esos dos dedos dentro mientras el pulgar me acariciaba el punto, no sé cuanto tiempo me tuvo así pero desde luego me obsequio con bastantes orgasmos.

Mientras yo seguía tumbada sin creer lo que había pasado, se me acerco y me dijo

"Siempre que quieras te doy un masaje como el de hoy, solo intenta alternar la depilación de forma que un día sea las piernas y otro las axilas o si prefieres una sesión de depilación y otra de masaje, ¿te parece?

"Por mi fantástico" la conteste, y prosiguió

"Bueno y uno de esos días te repasare tu rajita que vamos a depilar ahora que todavía tenemos un rato", no me opuse en absoluto aunque más tarde tuve que pensar que tendría que decir a mi marido en cuanto me viese, pero en ese momento deseaba que Bea me hiciera todo lo que quisiera.

Cuando termino de depilarme me dijo

"Espera que te voy a dar una crema para que no se te irrite estos labios maravillosos que tienes" y antes de que me incorporara para ver como había quedado tenia su boca y su lengua chupándome todo y en poco tiempo me llevo de nuevo aun orgasmo que en absoluto me resistí.

No me atreví a decirla que era la primera vez que otra mujer me chupaba mi rajita hasta llevarme a unos orgasmos, bueno de hecho ese día era la primera vez que otra mujer me hacia todo lo que ella había hecho con mi cuerpo.

Cuando por fin me reincorpore, comprobé que no me había recortado el vello, sino que me había rasurado completamente y mi rajita parecía la de una niña.

Me dio la crema y después de vestirme y pagar la sesión nos despedimos pidiéndome el numero de mi móvil para llamarme en cuanto tuviera un hueco para depilarme, luego comprobé que también lo utilizo para llamarme y provocarme. La encantaba ordenarme como tenia que ir vestida los dias que tenia sesión, imaginaros con minis y sin ropa interior, con blusa casi desabrochada sin suje, en fin era una continua caja de sorpresas y siempre tenia algo que ordenarme y que me excitaba cumplir .

En el camino a mi casa fui pensando como contar a mi marido que estaba rasurada, y a pesar de no encontrar historias convincentes al final improvise y antes de meternos en la cama aparecí con el único camisón corto que tenia y sin ropa interior me acerque a él y levantándolo le dije:

"Mira cariño lo que tengo para ti", él se excitó de sobremanera y me follo como un obseso después de haberme tocado y pasada su cola por mis labios y rajita. Solo dijo

"Esta preciosa parece la de una cría" nunca me pregunto ni donde ni como lo hice, total él ya estaba complacido después de follarme.

Bueno pues eso es todo lo que paso ese día, y desde entonces mi vida ha cambiado muchísimo, he vuelto varias veces a mis sesiones maravillosas de masaje con mi nueva amiga intima Bea, y me ha dado tambíen por leer relatos de los que me estoy convirtiendo en una adicta

Pues después de varias correcciones y relecturas de Maribel, asi es como quedo el relato y me dio la aprobación para publicarlo, que espero os haya gustado y excitado un poco, a mi cuando lo vuelvo a leer todavía me sigue excitando

Ah, su correo por si alguien quiere contactar con ella, que deberá responder, es zonaranju@terra.es