En un cine x
La curiosidad me llevo a...
En un cine x.
Me llamo Arturo y os voy a contar una mi experiencia en un cine x de Barcelona, yo soy de Madrid pero estaba de visita con mis padres en Barcelona, eran las 9 de la noche y mi madre decidió que ya no tenía ganas de dar más vueltas y que se quería ir al hotel, mi padre asintió y también quería irse al hotel, yo les dije que daría una vuelta por el barrio del hotel y que luego subiría a la habitación.
Dando un paseo entre sin saberlo en un barrio lleno de prostitutas, me miraban, me pedían que me fuera con ellas, me ensañaban las tetas, no tenía casi dinero, a mis 19 años todavía no trabajaba y solo llevaba 10 euros en la cartera así que no creo que ninguna de ellas me hiciera nada por ese dinero.
La situación me puso cachondo y no sabía qué hacer, pensé en regresar al hotel y masturbarme para quitarme el calentón que llevaba encima, de pronto al girar la calle un letrero de neón anunciaba un cine X, nunca había estado en ninguno que mejor ocasión que esta para conocer un cine X y acabar con el calentón.
Me asome a la entrada, la ventanilla muy antigua estaba cerrada, di un golpe y de repente se abrió,
"cuánto vale la entrada"
"6,50 me dijo una voz de mujer mayor"
"tienes 18 años, pareces muy joven, enseña me el carnet" me grito
"saque el carnet y le di el billete de 10 euros que tenia"
Me dio un cupón y los cambios
"sesión continua cada 1:30h"
Entre a un salón, parecía que era el vestíbulo del cine, enfrente estaban los baños y un poco a la derecha la puerta de entrar a la sala de cine, estaba lleno de hombres mayores, muchos me miraban, me empecé a sentir raro, un hombre trajeado de unos 60 años no me quitaba ojo, yo me había imaginado siempre otra cosa, que estaría lleno de parejas que venían a follar y que dejaban que los demás participaran, pero eso solo era en las películas, de repente se abrió la puerta, varios hombres salieron y entraron directamente al baño, los que estaban fuera empezaron a entrar, yo espere y decidí ir al baño, tenía ganas de mear y uno no se puede relajar aguantándose la meada, al entrar al baño de caballeros, un fuerte olor a sudor me golpeo, había 3 baños de pie ocupados y 3 baños cerrados también ocupados, un hombre de los que estaba en los baños de pie se estaba masturbando, mientras hablaba con los ocupantes de los otros dos baños, yo no sabía qué hacer, tuve la idea de irme pero me quede, mientras se oían gemidos que venían de los baños cerrados, así que imagine que estaban practicando sexo dentro, estaba perdido no sabía que pensar, pero me di cuenta que mi poya se había puesto dura, me encontraba en un sitio de lo mas sórdido y me estaba poniendo cachondo, el que se estaba pajeando se corrió a la vista de los espasmos y gemidos de placer que salían de ahí, se limito a recoger su poya y al darse la vuelta y pasar por mi lado me dijo
"pipiolo si quieres mear mejor en estos, si entras ahí (señalando hacia los baños cerrados) acabaras chupándosela algún abuelo de estos"
Me quede helado, me acerque a la pila a mear, saque mi poya estaba más dura que nunca, eche una meada de campeonato y mi poya continuo igual, el de mi derecha no paraba de mirarme, podía ver mi poya en todo su esplendor ya que estaba meando un poco alejado de la pila porque me daba asco que me salpicara cualquier gota, el hombre seguía mirándome, yo eche la vista a su pila y vi claramente como se estaba tocando la poya, pero la tenia morcillona, al levantar la vista me di cuenta que era un hombre de unos 60 años de pronto acerco un poco su cara hacia a mi
"si me haces una mamada ahí dentro te doy 20 euros"
Me sacudí las últimas gotas de la meada y me recogí la poya, al principio las palabras de ese pervertido me dieron ganas de vomitar, pero al salir al hall del cine poco a poco fui recomponiendo la situación y entre a la sala, en la pantalla una chica rubia con unas tetas increíbles era atacada por varias tíos a la vez, hacía mucho calor dentro, me quede un rato de pie, no sabía qué hacer, había gente sentada por todo el cine, todos iban solos, menos las 2 primeras filas que se veían varias cabezas juntas, me senté en una fila de la mitad del cine, en esa fila no había nadie, continúe viendo la película, estaba muy cachondo, en las primeras filas de repente desaparecían cabezas, estaba claro que esa era la zona de las mamadas, me decidí a sacarme la poya para masturbarme, en ese momento note como a mi derecha alguien se acercaba a mi sitio, primero se puso cuatro butacas mas allá, cerré la bragueta de mi pantalón, me puse un poco nervioso, mire para ahí pero solo vi una sombra, continúe atento a la película y a lo que hacían los de las primeras filas, era un intercambio de mamadas, ya que las cabezas aparecían y desaparecían, el desconocido se levanto y se acerco a mí, ahora solo una butaca nos separaba, mi corazón se puso a 100, era una mezcla de morbo y asco, mire a su lado, tenía la poya fuera y se la tocaba, yo continuaba con la mía dura, pero no me atrevía a sacármela y menos con alguien tan cerca, de nuevo note que la sombra se movía, pensé que se iba, pero lejos de ser así el desconocido se sentó a mi lado ya nada nos separaba, notaba perfectamente cómo se tocaba la poya por el movimiento de su brazo, de reojo intente mirar sin que se diera cuenta, los reconocí, era el hombre que no me quitaba ojo en el hall antes de entrar, notaba su mirada clavada en mi al ver que no reaccionaba ataco
"quieres tocarme la poya"
Yo no conteste, así que volvió a la caga, me cogió la mano y la llevo a su poya
"hazme una paja y luego te la hago yo a ti"
Estaba aturdido y no hice fuerza para frenarle así que mi mano acabo encima de su poya, estaba morcillona, no sé porque pero empecé a jugar con su poya y empecé a masturbarle, el disfrutaba mucho, se le estaba poniendo más dura
"así sigue así"
De repente paso su brazo por encima de mi cuello yo no sabía que buscaba con eso pero enseguida me di cuenta, poco a poco fue empujando mi cabeza en dirección a su poya, de pronto me encontré a poco más de un palmo de ella
"haz feliz a papa, chúpasela un poquito que veras como te gusta"
Me jode decirlo pero durante un segundo dude, en ese instante me apetecía chupar una poya, algo que nunca hubiera pensado, nadie me conocía, nadie se enteraría nunca de lo que iba hacer y posiblemente me ganaría una perras, cuando estaba casi convencido el hombre se estremeció en la butaca, lo que me dio la señal de que se corría, levante la cara a tiempo, pero mi mano se lleno de leche caliente de la poya de aquel desconocido.
"lástima que no he aguantado mas para que me la chuparas un rato"
"ahora me toca a mí, yo te la chupo, ya verás cómo te gusta"
Echo la mano a mi pantalón
"sácatela que sino como voy a chupártela chaval"
Me entro de repente un arrepentimiento brutal y salí corriendo del cine.
Durante el camino hacia el hotel no hacía más que preguntarme como podía haber hecho eso y pensaba que había estado a punto de chupársela a aun viejo.
Todo cambio cuando llegue al hotel, al irme a duchar descubrí que mis calzoncillos estaban llenos de pre semen, casi me había corrido, me metí en la ducha y empecé a masturbarme, recordaba todo lo sucedido en el cine, con la mano derecha jugaba con mi ano y con la mano izquierda frotaba mi poya dura, pronto me corrí, chorros de semen cayeron por la pared de la ducha.
Me eche a dormir, al día siguiente todo parecía un mal sueño, nunca le había contado esto a nadie, así que sois los primeros en saberlo.