En misión

Como ya les he contado, soy el cabo Chávez, del guardacostas, un joven de 20 añitos, con orientación sexual ya decididamente homo.

Mi opción, antes dudosa la definí en el barco, gracias a Tadeo y a Nicola, dos velludos osos que me dieron lo que mi cuerpo deseaba.

A fuer de sinceros, diré que me dieron por el culo una semana, DÍA a DÍA, mañana tarde y noche.

Pasé esos 7 días como una dama, bien servida, no solo en comida y bebida.

Si bien dicen que lo bueno, si breve dos veces bueno, esa semana necesita una segunda, y porque no una tercera o una cuarta.

Ya en el cuartel, la primera noche, solo, me revolvía en el camastro, necesitaba algo que ustedes imaginan que era, ahogaba mis sollozos en la almohada.

Durante la práctica de tiro, tengo excelente pulso, varios blancos seguidos y el oficial Duncan se acercó a observarme.

Lindo macho él, aunque rubio, de cabello castaño claro, ojos celestes, metro ochenta y cinco, ochenta kilos, aspecto de macho, carilindo.

En tanto me corregía algún, para el, defectos de posición, me arrimó bastante el bulto en tiro de pie. No me aparté ni un ápice, en lo mas mínimo, era agradabilísimo sentir su contacto, aunque fuera intrascendente la acción para el.

Cuando salíamos de la práctica, el me señala, me hace seña de que lo siga.

-Cabo Chávez, tira usted de manera excelente, con precisión. Además que se relaciona bien con el medio civil. Las referencias suyas que nos dio el personal del barco que custodió, indican que se adapta perfecto al medio civil. Deseo saber como anda en tiro sorpresa, es decir si decide rápidamente el blanco a abatir sin herir inocentes en derredor. Lo probaré en la casa que al efecto tiene la Institución. Será tiro nocturno.

Esta noche a las 22:00 allí, preséntese sin arma, le daré una Pistola Five-seveN, de 20 tiros, evaluará usted si se adapta al arma. Es todo retírese.-

Llegué en punto, las diez de la noche clavadas en mi reloj, el puntual también, llegamos juntos casi.

Me entregó el arma, los cargadores a mi cintura, entramos, automáticamente se inició la secuencia, aparecieron imágenes sorpresivas de ora inocentes ora de delincuentes. Me fue perfecto, no herré una, no eliminé inocente alguno.

-Perfecto cabo, preséntese mañana a las 08:00 en la oficina del Prefecto, allí le comunicaremos la misión, si acepta saldremos a la brevedad.-

Correctamente uniformado, me presente a la 08:00. Estaba el oficial Duncan y el Prefecto sentados, saludé y me indicaron que me sentara.

-Cabo, la misión es infiltrarse entre los contrabandistas, de modo que sean ustedes considerados dos mas de ellos, deberán mimetizarse con el ambiente delictivo, hagan lo que hagan tendrán inmunidad federal, esta misión se hace en conjunto con el MECOSUR y anuencia de los del norte. Solo yo sé quienes son ustedes dos, nadie mas sabe. Aplicaremos estrategia sin tiempo. De modo que no sabemos cuando finaliza su accionar encubierto. No usaran sus armas reglamentarias. Se les proveerá la que gusten elegir. Se les darán las tarjetas de crédito y de efectivo. Si acepta Chávez informe al oficial a las 12:00, caso contrario olvide todo lo aquí expresado. Es todo, retírese.

Me fui a la cuadra, me di un baño, en tanto meditaba mi decisión. En principio me entusiasma. Soy soltero, mis padres fallecieron apenas egresé de la escuela de suboficiales, parientes pocos y distantes. Solo me trato con un primo de mi edad, que cuando lo fui a visitar me entró a toquetear en la noche y me cogió. Buena pija la de Fernando, el primer macho que me inició, dos veces me la metió y de allí quedé dudando si era o homo o bisexual. Los marineros del barco me definieron, aunque alguna hembra profesional del sexo me atrae, prefiero machos en la cama.

A las 12:00 le diré al oficial que acepto la misión.

Estaba el oficial Duncan en su oficina, entré y saludé.

-Siéntese Chávez, usted dirá.-

-Señor en principio acepto la misión.-

-Estoy contento de que usted sea mi compañero en esta, habla guaraní a la perfección, también se maneja en portugués. Dispara las armas de modo excelente. Se adapta al medio civil. Yo manejo algo de guaraní y portugués. Mi inglés es perfecto. El Prefecto me seleccionó y yo a usted. Espero sus preguntas.-

-El objeto de la misión me quedó claro, la táctica es lo que ignoro señor.-

-El Prefecto la expresó claramente, seremos dos mas de ellos, la entrada en la organización es el detalle táctico a que se refiere usted.-

-Si señor a eso me refería, a como nos infiltraremos.-

-No hay plan especifico, viviremos en la zona de las tres fronteras, observaremos la situación e improvisaremos. Solo nos comunicaremos con el Prefecto desde teléfonos públicos, si por alguna causa caemos en manos de la justicia local, debemos dejar que los acontecimientos sucedan, solo y solo cuando nuestra revelación no perjudique al otro, se podrá usar la palabra clave con los jefes de zona de seguridad del SIDE, la palabra es

"zona" nada mas que "zona" el jefe sabrá de inmediato que hacer. Con las tarjetas percibiremos sueldo y gastos, sin límite, creo que usted sabrá usar los fondos públicos de modo adecuado a la misión. Memorice los teléfonos del Prefecto. Solo háblele cuando se lo ordené yo, o si el hacho es de urgencia. No hable con su familia, sé que es huérfano, no se le conoce novia. Yo también soy soltero y mi familia está habituada a mis desapariciones. Esta es la segunda encubierta que tengo en mi haber. Partiremos a Posadas en breve, de paso conoceremos gente y comentarios.-

-Tiene usted señor pensado si seremos desconocidos o viajaremos como amigos.-

-Mejor como íntimos amigos, nos permitirá contactarnos mejor, olvide el señor, la documentación dice que somos comerciantes, los nombres son los mismos, entendiste Jorge.-

-Si Duncan, ¿o lo llamo Francisco?.-

-Si, mejor Paco, y tuteame, vamos ya a retirar las armas, tendremos portación por si la gilada nos palpa, en la sala de armas elegí la que gustes, allí te llenan la tarjeta de portación-

Elegimos los dos la Pistola Five-seveN. Nos entregaron la tarjeta, Paco ya tenía las de crédito y efectivo.

-Firmá a quien dejas tu seguro de vida, después mejor venite a mi departamento así vamos congeniando. Nos vemos en la guardia, ni menciones a que vamos.-

Mientras veía el formulario, pensé que el único que merecía el seguro era mi ex amante y primo Fernando. Después de todo es un buen tipo y me conoce íntimamente.

Fui de allí a la cuadra, vacié mis cosas en la bolsa y me dirigí a la guardia.

El estaba ya llamando un taxi, en el viaje me hizo seña de que no habláramos del tema.

En el departamento. Me señaló la habitación de huéspedes, acomodé mis escasas pertenencias y me fui a dar una ducha, el se estaba secando ya.

Observe su esbelto cuerpo, definidos los músculos, buen lomo, como estaba de espaldas no le pude ver el pene, pero si sus espléndidas nalgas, el vello imperceptible pues es rubio, morrudito pero sin grasa, bien torneadas las gambas. Estuve a punto de tocárselas, pero me contuve. Mi pija acusó recibo de la escena y cobró vida propia.

-Date una ducha fría Jorge, que te estás excitando.-

Me metí al chorro, el mismo cerró la caliente y abrió la fría.

-Si te sigo viendo terminaré como vos, bañate y almorcemos abajo, frente a la plaza hay mesas afuera, podremos hablar sin ser oídos.-

El liquido frió calmó mi deseo. Bien lavado, salí y me sequé.

El estaba aun afeitándose, cuando me dio espacio lo hice yo.

Nos vestimos en silencio y fuimos a comer.

-Estás bueno de físico Jorge, no se te conoce novia, por como se te paró la pija se nota que no haces asco a los hombres.-

-No pude ver la tuya Paco, de modo que no se tus gustos.-

-Jorge, creo ser bisexual. Si, se me paró también a mí. De momento vayamos a cómpranos ropa acorde, nada exagerado, debemos tener pocas maletas. Para la Institución estamos de licencia. Debemos usar la nueva ropa, apenas la tengamos apta, sacamos pasaje a Posadas.-

Recorrimos los comercios de Florida, elegimos ropa acorde a la mesopotamia, liviana toda.

En tanto elegíamos mallas pude verlo de nuevo enterito, el también se deleitó mirándome el slip y demás.

-Este te cae bien Jorge, buenas nalgas – me pellizcó – son como manzanitas, ya hemos de hacerles los honores debidos.-

-Gracias Paco, son tuyas. ¿Cómo pagamos?.-

-Cada uno paga con su tarjeta, salvo las comidas, siempre cada uno lo suyo, apurate Jorge, ya tenemos todo, vamos para hacernos una siestita.-

-¿Juntos?.-

-Quiero comer mis manzanas, vamos ya Jorge.-