En mi escalera...

Uno de esos días festivos que te levantas después de un sueño bien cachondo, casi a media mañana, muy sudado y entregado a los recuerdos de esos calores de piel que estabas disfrutando y al estar despierto por completo, te das cuenta que tus dedos están hasta adentro de tu cola y con la otra mano te tocas hasta llegar al cielo…

Respiraba muy fuerte y muy seguido… derrotado por el placer y cayendo de nuevo en mis sueños…

Una hora más tarde me desperté más satisfecho oníricamente, pero muy, muy caliente, es muy simple, estoy con una necesidad muy grande de tener sexo, pero en la vida real, estoy loca por recibir penetraciones al máximo mientras jadeo con deseo… la cosa es que no tengo con quien, hace calor y un hermoso sol… a lo mejor la mar me calma…

Me lavé la cara y me puse mi bañador, el más pequeño que tengo de hombre, por que bikinis tengo chiquiticos, pero no es el lugar para que me vean tal cual soy, así que; mi speedo rojo… una camiseta grande y mis zapatillas blancas… así mismo bajé luego de una buena taza de café.

La idea era solo darme un baño y tomar un poco el sol mientras me seco… la mar estaba divina, a pesar que la brisa ya empieza a estar fría, el baño fue reconfortante y al salir me seque un poco y me puse bronceador, grave error, sentirme lubricado me vuelve a poner cachondo… pero ya era tarde, ya había derramado mucho en mis piernas y decidí continuar, estaba solo en la arena y me permití un poco más, así que metí mi mano dentro de mi speedo acariciando mi nalga hasta llegar a la entrada de mi placer, lo lubriqué y metí suavemente mi dedo dejándome soltar un suspiro divino… luego metí otro al mismo tiempo, joder que caliente me estoy poniendo, me detuve y terminé de pasarme el bronceador por el resto de mi cuerpo…

Allí me quedé solo dejando que el sol me diera color con sus últimos rayos, ya el otoño llegó y falta el invierno y más, para volver a disfrutar de algo que me vuelve loco, tomar sol…

Me quedé dormido y más o menos una hora y media después me despertó el calor, decidí que ya estaba bien y recogiendo mi toalla me puse mi camiseta y caminé hacia mi casa…

Cuando estaba como a 100 metros de llegar, a lo lejos vi al vecino del 1er piso, un hombre chileno, grande de cuerpo y muy educado y amable, que si no fuera mi vecino ya lo estaría atacando con mi loca, por que la verdad es que me fascina, sus brazos, su mirada, es un hombre maduro en sus años de oro, alrededor de los 50tas, en fin de esos hombres que hacen que mi loca interior se desate. Ya desde lo lejos levantaba su brazo saludándome..

Seguí caminando y pensando, tranquila loca interior, es tu vecino, sabes que de eso nada, acá no…

Caminé de la forma más varonil que podía y justo llegamos al mismo tiempo al portal, el venía de frente a mi y de repente me saluda más efusivamente aún y me dice; “hola vecino, que gusto, ¿disfrutando del mar? , justo cuando le iba a responder me tropecé subiendo a la acera y volé por los aires con la “suerte” de caer justo delante de él y el me sostuvo, evitó que cayera al piso o peor aún a la puerta de vidrio del edificio… lo único es que el al tratar de salvarme una de sus manos se resbaló por el bronceador que llevaba y su mano se detuvo justo en mis nalgas y allí ya no lo pude evitar más, mi grito fue de niña hermosa y mi loca se salió de mi abrazándolo por el cuello, quedé muy cerca de su cara y tuve que hacer un esfuerzo de no besarle, por lo agradecido que estaba de haberme salvado y por lo cachonda que estaba también, mientras me sonreía con vergüenza y con su mano en mi cola, me dijo; “ te salvé”, “pudiste haberte partido la cara con la puerta o peor…”

Yo mientras le escuchaba me relamía mis labios y le dije con una voz femenina que no pude evitar, “¿ que acaba de pasar? Gracias, de verdad que no se que habría pasado si no está usted acá”, “que tonto he sido…”

Todo mi cuerpo temblaba mientras ya me parecía una hora que estaba tomada por este hermoso Chileno, mi cola descansaba en su enorme mano y mis brazos no se soltaban de su cuello… el me despertó de mi sueño diciéndome; “ chucha, mira como tiemblas vecino, te pudiste haber matado, ven deja que te ayude a subir, permíteme ofrecerte algo en mi casa no puedes andar así, estás como en shock”…

Me levantó y dejó que mi brazo se quedara en su cuello, mi pollita comenzaba a ponerse feliz y mi loca estaba casi en control total, fue allí que sentí que este hombre me estaba tomando como si fuera una mujer, con su mano en mi cintura y su actitud muy cachonda y su mirada que era de lobo feroz disfrazada de buen samaritano… quizá el ya al verme descubierta le gusté, quien quita y hasta tengo esa suerte…

Llegamos a su casa, vivía solo y la casa se veía un poco desarreglada, en fin era un soltero mayor… me llevó a su sofá quitando antes un montón de ropa que había sobre el, se fue a la cocina y regresó con una jarra de agua y un vaso y me preguntó; “¿estas mejor?, ya no tiemblas tanto…, toma el agua y recuéstate acá, se que a veces la gente que pasa por un accidente así que podría haber sido fatal quedan mal”

Yo : gracias, pero ya me siento mejor y mis temblores son también por que usted siempre me ha puesto nervioso… me recuerda mucho a alguien de mi pasado.

Vecino : tranquilo que no muerdo…

Yo : No si eso no me preocupa, eso me encantaría, me preocupo por mi, soy bisexual y convivo con una loca interior que desde el primer día que le vio a usted se mojó toda y cada vez que nos encontramos en la escalera quiere salirse de mi, pero debo proteger mi entorno… y tengo una ley; la loca no sale en este pueblo y mucho menos en este edificio… pero lo que acaba de pasar fue y está siendo muy fuerte.

Decidí decirle la verdad, es la primera vez que decido decir esto, mientras le explicaba, su mirada paseaba entre el asombro y el deseo, creo que a este le va la cosa… poniendo su mano en mi rodilla me dijo; “no te preocupes, lo he sabido desde el primer día que te vi…”

Mi cara era un poema… casi a punto de llorar le pregunté; “¿pero como es posible eso?, siempre me mantengo fuerte y varonil…” el me contestó; “ desde el primer día que te vi supe que venías con esa magia interna de convivir con otra alma…, ven acá” me acercó a él para darme un abrazo y yo me colgué a su cuello cual damisela entregada y agradecida…comencé a temblar de nuevo y me apretó más a su cuerpo, el ambiente se calentaba más y más…moví mi muslo derecho sobre su pierna mientras me apretaba más, luego viéndole a la cara, muy cerca, pasé mi muslo izquierdo sobre su pierna y abriendo mi boca le besé en su mejilla con barba de tres días… sentí como su paquete me recibía duro y preciso entre mis nalgas ansiosas.

Vecino : no tienes nada que tener, tu secreto está a salvo conmigo, pero prepárate que te voy a hacer mi hembra…

Diciendo esto acercó su boca a la mía y su lengua me violó, haciéndome abrir mi boca y recibirlo con un placer explosivo, mientras me besaba sus manos ya me sostenían por mis nalgas que al sentir su calor se levantaron invitándole a aventurarse más dentro de ellas, así hizo y una de ellas se metió debajo de mi bañador hasta llegar a mi ano/coño y se introdujo poco a poco pero sin pausa, sentí sus nudillos chocar con mis nalgas mientras dentro de mi, su dedo me hacia abrir más la boca y darle más lengua a su lengua…

Le comencé a desabotonar la camisa y mientras lo hacía le acariciaba su pecho hermoso lleno de canas, mientras nos seguíamos besando cuál adolescentes cachondos, se apartó y se terminó de quitar su camisa y yo hice lo mismo con mi camiseta quedando tan solo con mi bañador… me volvió a abrazar, me besó nuevamente y me fue recostando del sofá mientras el se levantaba para quitarse su pantalón. Cuando lo hizo se quedó en calzones y pude ver su herramienta que era perfecta ni muy grande ni muy gruesa, pero su cabeza, esa si que era una obra maestra, roja enorme y que se movía al ritmo de su corazón… me traté de incorporar para comerme ese dulce fresón, pero el lo impidió con un gesto delicado y volviendo a ponerse sobre mí me besó nuevamente mientras su mano apretaba mis pechos, me beso el cuello pasando su lengua hasta mis pezones que besó, chupó y lamió… me tenía loca y en trance, siguió bajando y llegó a mi ombligo, besándole y lamiendo su entorno, metiendo luego su lengua divinamente mientras sus manos debajo de mi cintura entraban entre mi piel y mi bañador bajando este hasta mis muslos para luego volver sus manotas a mis nalgas ya desnudas y deseosas de tacto.

Se incorporó mientras yo jadeaba buscando aire de lo excitada que estaba, era una hembra enloquecida y ¿como no?… se terminó de quitar su calzón dejando su arma lista y cargada para hacerse conmigo, se agachó y mientras me terminaba de quitar mi bañador acariciaba mi pollita que estaba que explotaba, sus caricias eran divinas y al acariciar mis bolitas sus dedos jugaban con mi ano mientras yo me retorcía de placer, abrió mis piernas, colocó su cuerpo entre ellas y comenzó a besar mi ombligo de nuevo, su lengua salió de él y comenzó su viaje de retorno a mi boca pasando lentamente por mis pezones una vez más dándoles el más absoluto placer… ya sabiendo yo que se acercaba a su destino, abrí mis piernas más y subí mis caderas para facilitar la llegada de su arma a mi culo. Llegó su boca a mi boca y fue cuando sentí su enorme glande acariciar mi ano lleno de bronceador,  fue eléctrico y dejándole de besar le dije al oído con un hilo de voz, un susurro desesperado entre mis respiraciones; “ métemelo, métemelo todo ya…”

Comencé a sentir como ese enorme ariete abría uno a uno mis anillos y su lentitud fue llevándome a la gloria más exquisita, mis caderas se sumaban aún más a su movimiento haciendo que este terminara de entrar, de poseerme cual hembra frente a el… de repente y en un último movimiento entró todo haciéndome gritar de placer.

Allí quedó sobre mí inmóvil, solo sintiendo como yo apretaba mis partes dándole la bienvenida a su divino pene dentro de mi, huy que ganas tenía de sentirme así..  llena.

Buscó mi cara nuevamente y me besó comenzando a moverse dentro y fuera de mi pero sin sacarlo, sentía cada centímetro de su carne crecer aún más dentro de mi y mis manos se colgaban de su espalda dejándole mis caderas bien en alto recibiendo sus embestidas una y otra vez… ahh, ahh, que rico… “ dame así, dame más…”, “métemela más y lléname de ti…” apenas terminé de decir esto sus embestidas se volvieron más violentas y mis gritos anunciaban un muy necesitado orgasmo anal de mi parte… una y otra vez hasta que entre temblores de ambos sentí su leche caliente adentrase en lo más profundo de mi culo… que sensación tan única e incomparable, grité una vez más y sentí como yo eyaculaba envuelta en un exquisito orgasmo anal… estaba tocando el cielo... mientras yo buscaba aire donde no lo había, gemía y me retorcía de placer ante mí gran esperado orgasmo y mientras nuestros cuerpos de pegaban más aun con mi semen haciendo de pegamento entre nuestros torsos, comencé a sentir su explosión dentro de mi y el con un grito ahogado y animal me seguía penetrando a placer mientras sentía uno a uno sus trallazos dentro de mi y yo me comía su boca abierta de excitación… que placer más grande es este….

Nos quedamos abrazados el uno al otro, el sobre mí y yo aun manteniendo mis caderas en alto para evitar que se saliera su carne de mi, me fascinaba tenerla dentro toda como estaba…

En unos minutos me percaté que esta no dejaba su tamaño, estaba dura dentro de mi como desde el principio, así que decidí tomar el control… suavemente bajé mis caderas y le dije al oído, susurrándole; “ que rico está esto, que rico estás, ven, déjame que quiero hacer algo, tu solo mírame…” me levanté y fui a buscar unas servilletas de cocina para limpiarme bien y regresé para limpiarle a él, una vez limpio, me lo metí a la boca, que cosa más deliciosa, caliente y divina, me la comí toda hasta que mi nariz golpeaba su vientre peludo y con olor a hombre de verdad… allí estuve durante mucho, mucho rato, lamiendo, comiendo y besando su hermosa polla, con mi lengua recorrí cada una de sus enormes venas alrededor de esa pieza de hombre… para luego bajar a sus bolas divinas y que olían aún mejor, me las metía a la boca suavemente y las dejaba allí mientras mi lengua les masajeando con ternura y suavidad dentro de mi boca, solo se escuchaba su respiración cada vez más fuerte y sentía su mano acariciando mis muslos y como queriendo llegar a otra parte, me medio incorporé para ayudarle en su deseo, y logré que su mano llegará a mi cola que se entregó a él y a sus dedos de una manera absoluta y libre, me acariciaba con placer mientras yo seguía degustando su carne exquisita… me moví un poco más hacia el y el ayudó para que mis caderas llegarán a su cara y poder continuar no con un 69 sino con un 1069, por que esto que pasó a continuación fue el cielo en la tierra, nos comíamos nuestros miembros el uno al otro mientras nuestros cuerpos temblaban de nuevo de placer… fue la gloria, pero yo quería sentirle dentro de mi una vez más… así que con suavidad fui apartándome de el mientras seguía con su polla dura y divina en mi boca hasta ya dejarle y levantarme… le dije; “ me tengo que ir”… soy una mierda…. Jajajajaja, su cara fue un cuadro de Picasso, cubismo absoluto, ya yo levantado y completamente desnudo frente a el caminé en dirección a la cocina, quería que se levantara y me persuadiera de no irme, así fue, tal cual como lo deseaba, me tomó por detrás abrazándome y pidiéndome que no me fuera aún, mientras me abrazaba, sentía su cabezota pasear entre mis nalgas haciéndome gemir como loba en celo… el me pedía que no me fuera  que no le dejara así, mientras me besaba el cuello y lamia mis orejas… yo solo empinaba mi cola dejándole entrar un poco más entre mis nalgas, que absoluto placer el tener esa hermosa tranca detrás hurgando mi culo divinamente y ese hombre derretido de deseo hacia mi, lo había logrado, supe aumentar mi propio placer…

Sin dejar de seguir abrazado por el, volteé mi cuello buscando su boca y con mi mano abrí mis nalgas dejándole colocar su glande en la entrada de mi culo, mientras le besaba con la boca abierta y nuestras lenguas de divertían… le dije; “dale pues, métemelo una vez más, dame duro y préñame papito rico, dale duro a tu puta de la escalera que siempre estará a tu disposición, dale métemelo todo…” sentí sus manos asistir a su polla en la entrada inminente dentro de mi, y gemí buscando aire mientras sentía como entraba toda una vez más, dura y precisa a la hora de darme donde me gusta, ya dentro de mi sus manos fueron a mis caderas para comenzar a darme duro… y yo gritaba de placer con esas manos a cada lado de mi cintura. Movía mi cola al compás de sus penetraciones y el fabuloso sonido de sus caderas golpear con amor mis nalgas era súper erótico, la sinfonía de los pluf, pluf, pluf de sus caderas contra mis nalgas enamoradas y su respiración ahh, ahh, ahh mientras me metía su dura polla junto con los gemidos muy suaves y llenos de aire que dejaba salir de mi alma, en fin la sinfonía del placer absoluto…

Entregaba mi cola con frenesí hacia el para que entrará aún más y me deje coger muy profundo hasta que con mis ojos en blanco y mis piernas temblorosas llegamos ambos a la vez, el dentro de mi una vez más llenándome absolutamente toda de felicidad y yo que tan sólo me acaricié mi pollita y que esta explotó como un volcán…

Sin sacarla y luego de varias embestidas finales se quedó dentro de mi diciéndome; “ahora si quieres te puedes ir, por mi quédate y no te saco esto de dentro de ti más nunca, jamás había sentido una cola más deliciosa que la tuya es una mezcla perfecta para volverme loco…”

Lo siento amigos…

Nada de esto que acabo de relatar ocurrió, todo es una simple fantasía que tengo desde hace un año con mi vecino del 1er piso, que si es así tal cual, grande y hermoso, de 50 años y también es Chileno y muy amable conmigo…

A pesar de todo ser cierto y que el existe, no me atrevo a ser yo misma frente a el, aunque el hambre que estoy pasando en estos momentos me hace flaquear cada vez más y mucho, no se que haré la próxima vez que me lo encuentre en el portal… estoy muy loca, necesitada y hambrienta, necesito polla ya… y creo que la idea de hacerme la doncella en apuros podría funcionar…

Quien se apunta?…vamos quiero algún consejo…

Besos a todos…

Musa