En los baños de un bar

Me encuentro con un tío que está buenísimo en un bar al que voy con mis amigos. Tenemos un encontronazo en el baño...

Es la primera vez que escribo un relato así que espero que os guste.

Os voy a contar una experiencia muy morbosa y excitante que me ocurrió hace unos meses.

Para empezar, me voy a presentar. Me llamo Sergio tengo 18 años mido 1,75 y estoy delgadito; bueno, marcado o definido, con unos abdominales bastante apetecibles. Soy moreno, de ojos verdosos y una cara bonita, de niño según me dicen. En cuanto a mi polla…. Se puede decir que está bastante bien, eso creo yo, pues me mide entre 17 y 18 cms y es bastante gordita.

Bien, pues ahora que sabéis mas o menos como soy, podemos continuar.

Todo comenzó un día cuando iba a la universidad. Caminaba de camino a la facultad cuando me encontré con un tío impresionante: 1,80, moreno, ojos oscuros ,unos 21 años la típica pelusilla de estar sin afeitar de un día, piel bronceada y un cuerpo atlético. Primero le vi de espaldas y tenía un culito muy bien formado; sólo de verlo se me puso durísima, y por mi mente iban y venían unas fantasías tremendas. Pasé rápidamente por su lado y le di un pequeño empujón, me miró y me disculpé rápidamente. Así le pude ver lo hermoso que era y más o menos pude observar lo bien que se le marcaba la verga entre los pantalones ajustaditos que llevaba.

En clase no pude dejar de pensar en él. Estaba sentado al fondo, así que no tenía problemas en acariciármela, pues nadie me veía. Cuando el profesor se dio la vuelta, cogí las cosas y salí de clase directo al baño, para terminar lo que había empezado… Joder, que cacho paja me hice, creí que me moría de placer…. Y eso que sólo era una fantasía….

A la tarde quedé con mis amigos para ir a tomar unas hamburguesas. Cuando entramos en el local no pude creer lo que vi, ahí estaba el chico que vi por la mañana, sentado con un par de amigos, tomando un refresco….

Me pareció que me miraba, pero creo que fueron imaginaciones mías….

Me entró un calor tremendo solo de verle, así que les pedí a mis amigos (que, por cierto, no saben que me gustan los hombres), que me pideran lo de siempre, pues yo tenía que ir al baño.

Nada más bajar al baño (que estaban en un piso mas bajo), me remojé toda la cara en el agua. Mi verga estaba bien dura, oprimida en mis vaqueros ajustados.

Poco a poco se me iba pasando el calentón, aunque todavía la tenía algo dura, cuando, de repente, entra él en el baño. Sï, era él, y, el calor volvía a adueñarse de mi cuerpo.

Él, al verme, me dijo:

"Hombre, hola, ¿eres el chico que tropezó conmigo esta mañana no? Me llamo Jaime, que tal?"

Yo me quedé parado, se había fijado en mi!.Le repondí medio titubeando:

"sí, soy yo, disculpa, fue sin querer. YO me llamo Sergio"

El chico se sonrió y me dijo:

"tranquilo hombre.Será mejor que te refresques un poco, creo que estás bastante acalorado" y señaló hacia mi polla, que estaba bien dura y se notaba muchísimo en mis pantalones.

Me puse rojo de la vergüenza y me dijo:

"tranquilo hombre, mira" y se señaló sus pantalones.

El la tenía también durísima…¿Qué pasaba?¿Me estaba invitando a algo? Me quedé callado, pero me animé a preguntarle:

"necesitas ayuda para bajarla?".

El se comenzó a reír, y se metió en el wc. Yo creí morirme de vergüenza, como le había podido decir eso… Iba a salir del baño, cuando escucho que dice:

"pero no te vayas y entra tontorrón"

Sin dudarlo entré rápidamente al wc, y ahí estaba él, sentado en la tapa sin pantalones y con las piernas abiertas esperándome.

Me acerqué, y nuestras bocas se fundieron en un apasionado beso. Me senté encima de él y le quité la camiseta. Le comencé a besar el cuello, a chuparle las tetillas a comerle la oreja… Mi boca recorría toda la parte de arriba de su cuerpo, mientras él me iba desabrochando a mi los pantalones y quitándome la camiseta.

Pronto quedé yo también en calzoncillos. Poco a poco comencé a bajar chupándole todo: el ombligo, las ingles…hasta llegar a su polla, que estaba todavía dentro del slip. Comencé darle besitos por encima del calzoncillo, hasta k de un movimiento rápido se la saqué y comencé a chupar con muchas ganas. Era muy bonita, de unos 18 cm y bien groda y recta. Cada vez que le lamía gemía en voz baja, disfrutaba, echaba los brazos hacia atrás contra la pared del wc.

YO me comía su polla poco a poco, chupaba todo el tronco, le lamía muy bien el glande, daba buenos lametones a sus huevos, y me la metía entera hasta el fondo de la boca.

Yo estaba disfrutando como un niño con una piruleta, y pos sus gemidos el también. Tuve que pellizcarle la pierna para que se diera cuenta de que no debía gemir tan alto, sus amigos estaban arriba y los míos también.

Mi polla no podía más, estaba a mil, y él también, porque de repnte noté que se venía. Me cogió la cabeza cuando yo iba a apartarme y me hizo tragar toda su leche diciéndome:

"que no quede ni una gota golfa".

Me la tragué toda y levanté la cara, me caía un poco de leche por la comisura de los labios, y él la lamió con su lengua.

Me dijo, ahora te toca disfrutar a ti, se arrodilló y cuando creía que iba a comenzar a lamérmela, se dio la vuelta y me ofreció su culito. Le dije:

"antes me has llamado golfa, ahora me toca a mi putita", soy más macho de lo que pensabas"

Sin dudarlo ni un momento, y, por lo caliente que estaba, me la saqué del boxer y se la metí de trancazo.

Metió un grito tremendo, y tuve que taparle la boca con la mano. Empezé a movrme rítimicamente, mientras el comenzaba a disfrutar poco a poco.

Estábamos los dos moviéndonos cada vez más y más, más y más… Yo me sujetaba a los lados del wc, estaba disfrutando muchísimo, tenía unas ganas tremendas de gritar, aunque no era el lugar indicado.

Como siguiera a ese ritmo me iba a volver loco, cada vez le daba con mas fuerza, mientras mi mano seguía tapando su boca. Notaba que me mordía un poco, mezcla de dolor y placer, estábamos los dos a tope y acabé explotando. Me corrí mucho mas que cuando me hice la paja pensando en él. Solté grandes chorros de leche, y le empezaba a salir por el culito, me agaché y comencé a lamérselo, mientras él respiraba aliviado.

De repente, se oyen pisadas, y escuchamos una voz masculina diciendo:

"Jaime, ¿estás ahí?"

Me gustaría que dijerais que os parece, por favor. Espero que os haya gustado. Esta es mi dirección:

pezquenin_18@hotmail.com