En las piernas de papa

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En las piernas papa

Hola, soy Lucia, tengo…bueno unos veinte tantos ahora, pero voy a contarles una historia de cuando era más chica, una historia bien interesante entre el mejor amigo de mama y una noche de lluvia y truenos…

Yo tenía…bueno era mayor jeje…resulta que en casa siempre estábamos mama y yo solas, a mi padre jamás lo conocí, pero mama tenía un mejor amigo que se conocían hace muchos años, prácticamente estuvo en mi vida desde siempre…si bien entre él y mi madre jamás pasaba nada, yo lo consideraba como mi padre, desde niña si mi madre viajaba por alguna razón o no podía acompañarme a ciertos actos de mi colegio, él era quien me acampanaba y me cuidaba…debo admitir que desde niña siempre lo admiraba y lo veía muy apuesto (aún lo es…), pero de a poco comenzaba a sentirme rara y conocer nuevas sensaciones…dicen los psicólogos que las mujeres experimentamos los primeros orgasmos a corta edad, por el siempre echo de tener el clítoris más sensible y casi a la vista…no sé si será eso o si es porque de chiquita ya era algo…vamos a decir traviesa, pero cada vez que me sentaba en las piernas del amigo de mana me sentía relajada, cómoda, calidad y contenida, pero por algún extraño motivo siempre buscaba como estar aún más cómoda sobre el…cada vez que me sentaba sobre sus piernas buscaba estar frente de el, mis piernas cada una hacia un lado y abrazarlo fuerte…creo que al principio fue por la falta de figura de mi verdadero padre, pero con el tiempo fui notando que era algo más…un día llegada la noche me estaba durmiendo en el sofá y el (como siempre muy dulce y atento) me alzo y me llevo a mi habitación…habrá sido que el estaba cansado, o las cervezas que se había tomado o el juego de palabra raras que había tenido con mi madre, pero note que algo de su pantalón sobre salía…no le di importancia, pero al llegar a mi habitación casi me caí de sus brazos, solo llegue a resbalarme un poco, pero fue suficiente para sentir que mi vagina y mi clítoris eran rozados por algo…la sensación me tomo muy por sorpresa, por lo que solté un pequeño quejido, el amigo de mama pensó que me había asustado porque casi me caí, por lo que me susurro:

Él: -Tranquila mi niña, todo estará bien, estoy aquí para ti…

Yo: -….okey….a.h…gracias

La verdad que me costaba mucho entender mucho que pasaba, que me pasaba y que es lo que sentía….no pude dormir esa noche tan rápido ya que no entendía bien todas estas nuevas sensaciones…eran alrededor de las 3 am y decidí ir a dormir con mi mama, ya que a lo mejor así me sentiría más tranquila y relajada….pero al llegar a la puerta de su habitación allí pude verlos a ambos besándose, moviéndose,  gimiendo y diciéndose cosas realmente locas que no entendía nada…pero todo eso me hizo sentir un calor un poco extraño en todo mi cuerpo, mi boca y mis labios estaban inquietos….me asuste un poco pensando que si me veían me iban a castigar…así que lentamente volví a mi habitación, pero sin quitar esa imagen de mi cabeza.

Al entrar a mi adolescencia todo comenzó a cambiar desde el día que por…”accidente”…lo vi desnudo en el baño, ya que había venido a ayudar a mi madre a reparar unas cosas y luego de trabajar uso la ducha y….POR DIOS, es una sensación que aun hoy no puedo sacar de mi mente y de mi cuerpo!!! Fue la primera vez que veía a un hombre desnudo…no sé si habrá sido eso o el hecho de que siempre lo vi muy atractivo, pero mi cuerpo actuaba extraño…mis piernas perdían las fuerzas, mi mente se nublaba y todo mi cuerpo temblaba de manera incontrolable, sentí un repentino calor que me invadía, no podía distinguir de donde comenzaba, pero podía darme cuenta que se esparcía por todo mi cuerpo sin parar y todo mi cuerpo cada vez estaba más y más caliente…al final solo pude volver en mi porque tenía que salir urgente a mi colegio. Al llegar la noche y estar en casa junto a mi madre y su amigo que ya no era más amigos y lo tome como mi padre y el me tomo como hija…esa noche estaban ellos muy acaramelados en la cocina hablando sobre sus planes de fin de semana romántico, entre besos y abrazos pude notar que mi padre tenía una erección, muy buena erección…y no sé, quizás fueron celos o quizás interés…pero me dirigí a la cocina y les comencé a hablar de mis intenciones de quedarme sola ese fin de semana en la casa, la verdad que no tenía ni intenciones de una fiesta ni nada, solo juntarme con mi mejor amiga y seguir experimentando como veníamos, pero claro que eso no les iba a decir…al principio se negaron, pero de a poco comencé a hablar a mi padre, de a poco, aprovechando que su erección estaba latente y que aún estaba sentado, me senté en sus piernas como cuando era niña, pidiendo por favor que la convenciera a mi madre de poderme quedar sola…quizás fue instinto, quizás las cosas que experimentábamos con mi mejor amiga o quizás la influencia de las películas porque que siempre veía a deshoras, pero comencé a mover mis caderas mientras aún estaba arriba de él, susurrando en su oído que por favor, mientras que mi respiración era irregular…usando un pantalón corto, de eso para la playa, bien en mis nalgas, remarcando mi culo, una blusa blanca semi transparente sin bracier…mis caderas pegadas a las de él, sintiendo su erección tocándome y rozándome a medida que yo movía mis caderas, mis pechos rozando el suyo, mientras mi pezones se volvían duros y como si quisieran señalarlo, como invitándolo a recorrer mi cuerpo…en un pequeño momento un gemido apenas se asomó de mi boca, recobre la cordura y volví a insistir en que me dejen sola el fin de semana junto a mi mejor amiga…pero el solo susurro en mi oído:

Él: -mi niña, no sé qué es lo que intentas hacer, pero ya para, hablare con tu madre para convencerla, pero no hagas más esto o terminara muy mal y muy adentro..

Me quede helada en algún punto por sus palabras porque me confundía un poco, pero le agradecí muy eufórica y lo abrace con más fuerzas de costumbre y decidí agregar un toco de perversión y agregue mientras movía aún más mis caderas sobre el:

Yo: -Ayy papiii mil gracias, ahora se muy bien como buscar algo cuando lo quiero…