En las duchas de las piscinas públicas 3

Ya habían pasado unas semanas, desde que fui a la piscina por primera vez y descubrí todo el morbo que hay en las duchas…

Llevaba un tiempo sin ir, ya que por motivos de exámenes y demás que haceres, no pude ir, pero por fin, llegó aquel día, el día que perdí toda vergüenza.

Estaba en casa con un calentón brutal, estaba agotado del fin de exámenes, había estudiado mucho y estaba realmente cansado, pero tenía los huevos a reventar, y no por no descargarlos, ya que cuando estudio voy a paja por tema, como muchos supongo, jeje.

Tenía los huevos cargados y quería descargar para comprobar realmente que ya estaba libre y podría coger vacaciones, no sé, es una sensación extraña de explicar.

En vez de hacerme una simple paja, me puse a hacer la mochila de nadar y me fui hacía las piscinas, más excitado que nunca, tenía mucha adrenalina, todo el camino morcillón, pensé en no meterme a los vestuarios colectivos, ya que con mi polla bien gorda y casi empalmada, podría levantar sospechas, pero me daba igual.

Me cambié, me puse el bañador, tipo speedo, y me dirigí para las piscinas, pero antes de llegar a la boca que lleva a donde están las piscinas, se pasa, por las duchas, y pensé por un segundo, en ducharme directamente, en vez de nadar, y eso hice.

Dentro ya del habitáculo de las duchas, mire a los alrededores, y vi que estaban vacías, menos las duchas del fondo, tanto las de la izquierda como las de la derecha, me pareció curioso, y me metí en una al azar, con la puerta entre abierta, espiando cual voyeur, esperaba a que se quedase libre, la segunda ducha de la derecha, que es en la que siempre me metía.

Estuve un buen rato, y noté como estaban tardando más de lo normal, me pareció extraño, pero al fin vi como un chico de unos 30 años, salía de allí, nada raro, hasta el momento.

Miré que no hubiese nadie, entrando y saliendo, y me metí en la ducha que quería, a todo esto, vi como las dos duchas de enfrente, también tenían las puertas entre abiertas, por lo que decidí dejar la mía también entre abierta, y ya con el rabo duro, empiezo a mirar por el agujero de siempre..

y…¿qué había en la ducha? Nada más y nada menos que dos personas! Estaba alucinando, no daba crédito a lo que estaba viendo, estaba viendo una puta película porno, pero en vivo y en directo, en la ducha de al lado, un chico de unos 25 años, y otro de 35, les estaba viendo las caras, porque estaban alternando en una mamada cada uno, me fijé muchísimo en el de 35 ya que tenía un rabo descomunal, unos 20 cm, y bien gordo, me hubiese encantado probar esa polla, pero llegaría el momento…

A continuación, el chico más joven, se encorvó un poco poniendo el culo en pompa, y vi como el calvo, del pollón enorme, empezó a follárselo, con una mano, le agarraba de la cintura, al compás de las embestidas que le pegaba, y con la otra, le tapaba la boca, para que el jovencito inexperto no empezase a gritar como un animal cuando le desgarran, yo estaba  pajeándome como un animal, cariándome el rabo, dándome placer, hasta que el chico más joven se corrió, y acto seguido, se fue de aquella ducha, con total discreción.

Yo estaba cachondisimo, el calvo, quería más guerra, y ahora la iba a tener conmigo, se dio cuenta como había estado viendo todo el espectáculo y me empezó a mirar por el agujero, me vio y en ese momento agacho la mano, por debajo de la ducha señalando con el dedo, que se iba a meter en la mía y no sé en qué momento, aquel semental, estaba mandándome callar con el dedo, escondiendo su toalla debajo de la mía y cerrando con pestillo la puerta, os prometo que me temblaban las piernas.

Sin decir palabra, se agacho y me empezó a hacer una mamada brutal, me la habían comido ya antes, pero nunca de esta manera ni con esa excitación, parece que estaba metiendo mi rabo en un bote de gel, húmedo, mojado, vaya sensación, a la vez, que me caía aquel agua por encima… puff..

Como bien había dicho antes, quería probar aquel pollón, antes de correrme y que se acabase la magia, por lo que cual perra me puse de rodillas, pidiendo rabo, y me le metió hasta el fondo,  vaya rabo, me llenaba la boca, y eso que tengo una boca muy grande, lo estaba comiendo, como si fuese un calipo de verano, vaya sensación…

El chico, no quería que esto acabase ahí, me pregunto al oído, susurrándome, que si era activo o pasivo, y le dije que activo..

A lo cual se puso apoyado en la pared, ofreciéndome aquel culo, depilado, ya abierto, y mi rabo, entro como si lo estuviese ensartando, de golpe, el dio como un espasmo, me miro de reojo, y me medio susurro, y me asintió con la cabeza que le empezase a follar fuerte, y ahí estaba, metiendo mi rabazo, a aquel chico que acaba de conocer en la ducha de al lado, apretaba, y cuando estaba al fondo, apretaba un poco más, imagino que sabéis a lo que me refiero..

Hasta que le dije que me iba a correr, saco mi polla de su culo, se puso de rodillas, y sacaba la lengua, quería que toda mi leche, le recorriese la boca de zorra que tenía, y así se lo dí, no sé cuantos trallazos de lefa eché, pero creo que fueron unos cuantos.. Mi compañero de ducha, aquella tarde merendó de lo lindo..

Cerró la boca, se puso de pie, con la lefa cayéndole por toda la barbilla y me beso, pff fue descomunal, se limpió, y se piro de la ducha…

Ya una vez solo en mi ducha, me dispuse a ducharme a fondo, flipando de lo que acababa de suceder, eso era una maravilla…

Estaba alucinando.. Y me convertí en un asiduo de las duchas de aquellas piscinas..

Si queréis saber más historias como esta, que las hay, no dudéis en escribirme por mail o dejarme un comentario, estoy súper agradecido.