En la selva con Mari la loquita
Era una chica de 20 muy abierta pero la gente decía que no estaba bien de sus facultades
- EN LA SELVA TEPIC CON MARI LA LOQUITA
En la casa que vivíamos junto había un terreno bastante grande con árboles frutales, una pequeña casa hecha con una planta chayotera que buscábamos como club y una pequeña alberca que utilizábamos pues era del mismo dueño de la casa y nos dejaba usarlo.
En una ocasión estamos ahí en la parte de atrás que daba a otra calle, por dónde iba pasando una chica de unos 20 años a la que todo mundo bromeaba pues tenía fama de estar mal de sus facultades cosa que no era cierto, simplemente era una chica muy abierta para ése tiempo y sin prejuicios. Una chica caliente…
La vimos y le llamamos haciéndole señas que nos enseñara las piernas, ella sólo se reía y levantándose la falda nos enseñaba sus bonitas piernas y algo más, ya que la subía de lado hasta la cintura, mostrándonos parte de su ropa interior, ése día la convencí de entrar al terreno y nos metimos en la casa de chayote y ahí comenzamos a jugar a que me enseñara sus nalgas, cosa que no quería pues decía que yo que le iba a enseñar entonces le propusimos juga a las cartas y el que perdiera tenía que hacer lo que el ganador decía y comenzamos a jugar cartas de castigo, llamado albures que consistía en voltear dos cartas y cada quien escogía una carta y la que saliera primero ganaba y el otro tenía que pagar, castigos consistían o en pagar con prenda o dejarse tocar alguna parte del cuerpo.
La primera jugada la ganó ella y me pidió me quitara el pantalón, quedándome sólo con la trusa y mi playera, ella me veía y se reía señalando mi paquete, le decía si quería tocarlo pero ella sólo se reía acercaba su mano a mi paquete apenas rozándolo y la retiraba riéndose y moviendo su cabeza diciendo que no, seguimos jugando y gané gané yo y le pedí se quitara el vestido quedándose con su ropa interior únicamente, ella se reía y cruzaba sus brazos sobre sus senos y cruzaba las piernas y yo se las separaba viendo cómo se marcaban sus labios vaginales en su pequeña pantaleta, eso me estaba excitando mucho y mi pene comenzó a crecer dentro de mi trusa haciendo un gran bulto y ella no dejaba de verlo.
Volví a ganar porque cuando ella escogía una yo volvía a barajar las cartas de manera que bmi número salía antes del de ella. Le dije que ahora el castigo sería que la acariciaría durante tres minutos sin que ella hiciera algo.
Comencé a acariciar sus senos, los amasaba y con mis dedos cogía sus pezones tocándolos como si fueran perillas de radio hasta que se ponían bien duros dentro de su brassier, comencé a besar su cuello pero ella se retiraba y me decía que eso era trampa y ponía de testigo a mi hermano, quien le daba la razón porque eso no estaba especificado en el castigo que le puse, seguí acariciando su cuerpo pasando mis manos por su costado hasta su cadera, pasaba mis manos por su monte de venus poniendo mi dedo medio entre sus labios vaginales acariciando su vagina que en Tepic le decían pepa jajaja.
Ella ya suspiraba agitada e involuntariamente separaba sus piernas un poco dando libre acceso a mis dedos sobre su intimidad, se la acariciaba desde el principio apretando su botoncito de placer hasta llegar a sus nalgas, que por cierto aunque no muy grandes las tenía firmes y bien paraditas.
Me puse detrás de ella y apretaba sus nalgas con mis manos las acariciaba y separaba, después la hice que se inclinara con las piernas separadas y pasaba mis dedos por su vagina que se transparentaba un poco gracias a lo húmedas que estaban sus pantaletas, se la acariciaba pasando el dorso de mi mano a todo lo largo de su vagina y por en medio de sus nalgas haciendo que sus piernas flaquearan por la excitación y lo que ella sentía por mis caricias.
Le iba a bajar sus pantaletas cuando mi hermano grito: tiempo!!! Se las dejé a media nalga.
Ella se enderezó con sus mejillas encendidas por la excitación y se acomodó sus pantaletas, sentándose y cruzando sus piernas para que no viéramos lo húmeda que estaba su vagina.
Seguimos jugando y ésta vez ella me ganó y gritaba de alegría diciendo: gané, gané ahora vas a ver jajaja y riéndose se levantó y me dijo: párate tu castigo será el mismo te puedo acariciar por tres minutos dónde yo quiera y quitarte la ropa si quiero y también te puedo besar; sentenció con una pícara sonrisa.
Me levanté según yo resignado a pagar mi castigo, ella se puso frente a mí sonriente y comenzó a besar mi cuello, para después ir bajando por mi pecho acariciando y besando mis tetillas, fue descendiendo quedando en cuclillas y desde mi perspectiva podía ver sus senos y ladeando un poco mi cabeza su vagina abierta apenas cubierta por su pequeña pantaleta saliendo algunos vellos por los lados y eso me estaba poniendo muy caliente, ya mi pene estiraba mi trusa por lo duro que estaba, asomando parte del glande por el elástico de mi calzón ella al verlo se rió viéndome a la cara y me quitó completamente mi trusa dejándome desnudo de la cintura hacia abajo.
Se le quedó viendo a mi grueso y erecto pene que al verse liberado de su encierro saltó mirando al techo, ella se rió tapando su boca y dijo: hum que bien se ve, no pensé que lo tuvieras tan grueso a tu edad!!! Y acariciando mis testículos acercó su cara oliendo mi sexo y comenzó a masturbarme primero paso su mano por todo mi pene de arriba abajo y después empuñandolo comenzó a mover su mano arriba abajo, una y otra vez, yo resoplaba con lo que me hacía y trataba de pensar en otra cosa para no venirme y poder cogérmela… paso su lengua por mis testículos y poniendo mi pene paralelo a mi cuerpo lamió todo el tronco de ida y vuelta desde la base hasta la punta, para después metérselo en la boca y poniendo sus manos en mis nalgas comenzó a mover su cabeza de adelante hacia atrás haciéndome una súper mamada, vaya si sabía hacerlo esta chica!!!
Se lo metía casi por completo, lo apretaba con sus labios y movía su cabeza hacia los lados haciendo que el glande golpee sus mejillas por dentro dándome un placer indescriptible!!
Acariciaba mis huevos sin dejar de mamar mi pene, así estuvo un buen rato hasta que ya no aguanté más y eyacule dentro de su boca, cuatro fuertes chorros llenaron su boca de esperma, la tomé de la cabeza metiéndole hasta la garganta mi miembro ocasionándole una arcada, ella me separó deteniendo mis piernas y sin sacarse mi pene de la boca dejando solo mi glande dentro siguió mamándolo y con su mano masturbaba el tronco hasta sacar todo el semen.
Se tragó lo más que pudo pero un hilillo de semen salió por la comisura de sus labios mojando su cuello, ella sacó mi pene de su boca y con sus dedos recogió lo que bajaba por su cuello y los chupó con una sonrisa viéndome a la cara como burlándose por haberme hecho venir.
Me puse la trusa, pero ella protestó dirigiéndose a mi hermano: hace trampa tiene que quitarse los calzones es parte del castigo, y tuve que quitármelos nuevamente y poniéndolos en mi silla me senté con mi escroto reposando sobre la tela de la silla y mi pene morcillón brillando la cabeza por la saliva de Mari.
Afortunadamente en el siguiente juego gané y mi pene brincó porque sabía yo que ahora sí me la cogería y haciéndole a mi hermano la señal clásica alusiva al coito, me reí diciendo: ahora sí Mari gané y me las vas a pagar!!!!
Ahora te toca pagar castigo jajaja le dije: podré acariciarte y desnudarte por quince minutos y también besarte por todas partes, juntando nuestros cuerpos, así será…
Ella con una sonrisa pícara me dice: no, eso es trampa son muchos castigos en uno
No, es el mismo con varias facetas le replique, lo mismo hiciste tú ya que nunca dijiste que me ibas a acariciar con tu boca.
Mi hermano asintió y ella no tuvo otro remedio que aceptar. Para esto yo ya estaba nuevamente con una erección fantástica de sólo pensar que si lograba excitarla lo suficiente, me la cogería ahí mismo delante de mi hermano menor!!!
La levanté de su lugar y comencé a besar su cuello mientras acariciaba sus nalgas, ella agarró mi cabeza y me besó en los labios entreabriendo su boca dando acceso va a mi lengua, en ése momento confirmé que ella estaba igual o más caliente que yo y con ganas de sexo!!!
Desabroché su brassier quedando sus senos libres y comencé a restregar mi pecho con sus senos sintiendo sus duros pezones, dejé de besarla y mientras acariciaba un seno le mamaba el otro, puse mi erecto miembro entre sus piernas rozando su vagina por encima de sus pantaletas, entonces volví a bajar mis manos hacia sus nalgas metiéndolas entre sus pantaletas, tocando en viva carne ésas delicias!!!
Las estrujaban y separaba sin dejar de besar y mamar sus senos, ella gemía y chillaba de placer aaahhh apretando mi cara hacia sus pechos, me separé de ella y volteándola de espaldas a mi, le bajé sus pantaletas dejándola completamente desnuda, le separé las piernas y haciendo que se inclinara apoyándose en su silla, me hinque y comencé a besar y lamer sus inflamados labios vaginales, así le estuve dando sexo oral, separando con mis dedos sus labios metía mi lengua en su vagina y pasaba mi dedo pulgar por su excitado clítoris que se asomaba como si fuera un pequeño pene seguí lamiendo su vagina y masturbando su clítoris hasta que doblando y cerrando sus piernas ella tenía su primer orgasmo llenando mi boca con sus fluidos!!!
Seguí lamiendo su clítoris y ella cayó de rodillas por el gozo que tenía, aproveché que quedó en 4 y colocándome detrás de ella besaba su espalda y acariciaba sus senos que colgaban de una forma muy excitante mientras pasaba mi erecto pene entre sus nalgas. Continué acariciando sus senos y el costado de su cuerpo hasta llegar a sus ricas nalgas las que amasaba pasando mis manos por todas sus nalgas bajando por sus piernas y de regreso acariciaba su vagina introduciéndole dos dedos y dándole un rico mete y saca dándole placer.
La levanté y poniendo su vestido sobre una piedra que usábamos como mesa, la acosté boca arriba y poniendo sus piernas en mis hombros, enfile mi grueso pene a la entrada de su mojadisima vagina y se lo metí de un solo empujón hasta más de la mitad haciendo que arqueara su espalda y emitiera un fuerte gemido aahgyy auch!! Puse mis manos sobre sus senos amasándolos ricamente y fui avanzando dentro de su vagina, poco a poco le fui metiendo lo que faltaba de mi grueso pene, ella movía su cabeza de un lado a otro gimiendo dejándoselo ir por completo, me quedé dentro de ella sólo moviendo mi cadera en círculos con todo mi miembro dentro de su vagina dejando mis huevos pegados a su piel entre sus nalgas.
Cuando escuchamos la voz de mi hermano diciendo que ya habían pasado los quince minutos y ambos nos echamos a reír, ella levantó su cadera invitándome a continuar embistiéndola y así lo hice acariciando sus largas piernas inicié un continuo mete y saca ante la mirada atenta de mi hermano, acariciaba sus nalgas y luego sus senos sin dejar de penetrarla una y otra vez, le sacaba más de la mitad para enseguida volver a metérselo hasta el fondo restregando mis huevos en su perineo y comencé a acelerar mis movimientos al ver qué ella se agitaba y movía más su cadera en un inminente acercamiento a otro orgasmo.
Seguí embistiéndola fuerte entrando y saliendo de su mojadisima vagina acariciando sus senos hasta que ella bajando sus piernas y rodeando mi cintura me atrajo para que se lo metiera todo y apretando mis brazos hizo un fuerte sonido gutural estallando en un rico orgasmo aahhhgg sigue, dame más…!!! Y movía su cadera de atrás hacia adelante y en círculos mientras sus fluidos mojaban abundantemente mi erguido miembro.
La dejé disfrutar su orgasmo sin moverme con todo mi pene adentro y acariciando sus ricas nalgas, cuando su respiración se fue normalizando, la volteé quedando recostada sobre su vestido en la piedra y con sus piernas colgando apenas alcanzando el suelo con la punta de sus pies, le separé las nalgas y pase mi humedecido pene por la raja de su culo una y otra vez hasta la entrada de su vagina humedeciendo su esfínter con sus jugos para después írselo metiendo nuevamente por su vagina hasta quedar mi vientre pegado a sus paradas nalgas, las cuales separé viendo su fruncido culito y como entraba y salía mi grueso pene de su rosada vagina.
Comencé nuevamente a embestirla fuertemente apretando sus nalgas, ella empezó a gemir de nuevo y mientras seguía dándole duro metí mi dedo medio en su culo entrando y saliendo al ritmo de mis embestidas vaginales, ella pujo y gimió al sentir la invasión de su ano.
Aceleré mis movimientos pues ya no tardarían en llegar mi mamá con mi tía que habían ido al centro y dándole bien duro y rápido se lo dejé ir hasta el fondo topando con su cuello uterino eyaculando copiosamente dentro de su desprotegida matriz.
Cuatro fuertes chorros inundaron su matriz de espeso y caliente esperma, mi pene brinca jubiloso dentro de su apretado canal vaginal expulsando todo lo que cargaba en mis colgantes testículos, ella al sentirlo apretó sus carnosos labios vaginales alrededor de mi grueso pene dándome un gran placer con sus contracciones!!! Me dejé caer sobre su espalda apretando sus nalgas vaciando mis huevos dentro de ella, así nos quedamos unos segundos quietos disfrutando nuestro mutuo clímax sintiendo el calor de su lubricada vagina y como sus fluidos bañaban mi pene!!!
La desmonté en cuanto mi pene se fue deslizando fuera de su vagina al disminuir de tamaño y grosor y me fui a la pequeña alberca para lavar mi pene, dejándola acostada sobre la piedra, al poco rato salió ya vestida y sin voltear a verme se salió por la parte de atrás del terreno, mi hermano me alcanzo en la alberca con mi ropa bajo el brazo y al dejarla sobre el césped con una amplia sonrisa me enseñaba el brassier de Mari que se lo quedó de recuerdo.