En la casa de mis primas

En una ciudad, con mis primas, la mas chica se quedo conmigo viendo una pelicula y permitiendome a mi algo mas que solo ver la televisión.

Cuidado con las primas.

Estudiando y pasándolo mal pero logre entrar a la universidad. Eso implicaba cambiar de ciudad y buscar un alojamiento. En ese momento mi familia en este caso un tío por el lado materno me ofreció su casa. No estaba tan mal la cosa me ofrecieron un cuarto de servicio alejado de la casa principal que mas que un cuarto era un pequeño departamento con todos los servicios. El pero de la cuestión eran mis "primitas" que yo recordada de muy niñas pero todo podía soportase así que comenzando el semestre me mude de casa.

Mis primitas ya eran mis primas Andrea, Rosa y Ana Karen; de 18,16 y casi 15; todas ellas muy bellas. Así que además de casa tenia un buen panorama.

Ana Karen, Karen para los amigos mide 1.68 de piel blanca, ojos café claro, una nariz pequeña, labios grandes con una bella sonrisa, tiene unos senos grandes según su brasier copa C; una cintura pequeña talla 8 y un trasero pequeño pero firme y resaltado.

El sábado día de descanso me levante temprano, hice mis quehaceres en mi pequeño refugio y los que me tocaban del jardín. Era verano pero el sol no estaba y las nubes mas bien traían un poco de frió y bastante viento. Mis primas salieron corriendo muy entusiasmadas con sus padres pues iban a un festival se subieron los cuatro al coche y salieron rápidamente gritando un "Hay comida en la casa, pásensela bien".

¿Pásensela? En ese momento caí en cuenta de que Karen no los acompañaba. Al medio dia me bañe y fui a la casa por algo de comer, toque la puerta como siempre hacia y Karen abrió la puerta vestida con una blusa larga que le llegaba estirándola hasta cubrir su trasero pero que tiene la costumbre de subirse hasta su cintura y un mayon de licra todo pegado que cubría sus piernas hasta casi la altura del tobillo, que delineaba su cuerpo de forma natural resaltando sus curvas y mostrando una pequeño protuberancia con una leve hendidura a la altura de su entrepierna.

Me saludo alegremente y platicábamos de cosas comunes y corrientes como la escuela, el clima sus amigas, que mis tíos y primas fueron a una fiesta en otra ciudad y que llegaban el lunes por la madrugada, etc.; hasta que los temas de conversación se fueron agotando. Ya estábamos contando chistes cuando conté uno machista y mi prima en venganza decidió jugar cosquillas conmigo. Yo me estaba dejando ganar pero sus piernas envueltas en esa tela dejaban volar la imaginación así que entre juego y juego acariciaba sus piernas, apretaba su traserito, pasaba mi mano por encima de su conchita, tocaba sus senos levemente o con la mano abierta de vez en cuando. Pasamos una tarde divertida hasta que llego la noche nos pusimos a ver un canal de películas donde pasaron una de terror que a Karen le causaba terror y mientras mas miedo tenia mas se pegaba a mi. Al estar los dos reclinados en un sofá ella termino entre mis piernas con su lindo traserito contra mi entrepierna. Abrazándola y cómodamente recargados.

En un momento dado y sin darme cuenta Karen se quedo completamente dormida, yo creyendo que solo era un sueño ligero la moví para que se fuera a dormir pero no ella estaba muy profundamente dormida.

Muchas cosas pasaron por mi mente pero la primera fue que lleve mis manos a sus senos y los apreté levemente esperando que despertara pero no fue así, se los comencé a acariciar y a sentir como a través de la tela sobresalían dos puntitos difuminados pues traia puesto un brasier. Alce su camisa y acaricie su estomago con mis dos manos y sin pensar mucho subí una mano para sobre su brasier acariciar su pecho y baje otra para posarla sobre su entrepierna.

Lo único que logre fue que su respiración se agitara un poco. Subí mis dos manos y al palpar su brasier me di cuenta que era de los que se zafan por delante por lo cual se lo desabroche con cuidado quedando sus senos al descubierto permitiendo que mis manos los apresaran y los recorrieran. Tenia deseos de mas y no quería parar. Puse mis manos sobre su entrepierna, abrí con mis piernas sus piernas dejando desprotegida el área y con mis manos empecé a recorrer esa pequeña parte, dibujando sus labios y hundiendo mas la tela en esa hendidura que tanto me provocaba. Después de un corto tiempo note que se estaba mojando la tela y que sudaba. El olor que desprendía Karen me estaba volviendo loco.

En un momento se acomodo mejor, suspiro y respiro fuertemente como un gemido, al mismo tiempo una humedad tibia invadió la tela y un fuerte olor a mujer y a placer se propago.

Perdí mi poca razón y decidí aventurarme un poco mas. Metí una mano en el mayon y apartando su ropa interior acaricie en directo sus labios y la entrada de su vagina pero parecía que quería despertar. Un poco mas calmado aunque todavía muy excitado levante a mi prima y la lleve a su cuarto, la deje en su cama.

Le hable aunque todavía estuviera dormida y le dije que le iba a quitar el mayon para que durmiera mas cómoda; solo asintió con la cabeza, pase mis manos por debajo de sus nalgas acariciándolas furtivamente y tome el mayon del elástico y lo baje completamente.

Ella solo se dio vuelta y se acomodo mejor. Cuando ya salia del cuarto me dijo "vente conmigo que tengo miedo"

Ni tardo ni perezoso me acomode a su lado quedándome nada mas con un boxer y .....

Continuara.