En la calle

A la salida de mi nuevo empleo me vi muy bien acompañada

Por la calle

Hola otra vez!! Les contaré lo que me ocurrió a la salida de mi nuevo empleo. Para los que no me conozcan, soy Esperanza y tengo 36 años. Buen cuerpo, senos llenos y redondos y buen trasero paradito. Tengo la boca mediana con labios carnosos y ojos almendrados.

Eran alrededor de las 20 hrs y apenas estaba anocheciendo. Salí y comencé a caminar rumbo a mi auto cuando escuché una voz atrás de mí

—¿A dónde vas hermosa? ¿Te acompaño?

Voltee y vi a dos jóvenes con pinta de pandilleros que literalmente me desnudaban con la mirada. Pensé en ignorarlos, pero la verdad aún sentía la calentura de la cogida que me había puesto el vigilante en la empresa así que les respondí:

—No voy muy lejos… sólo a mi auto ¿Ustedes me cuidan?

El que había hablado puso cara de estupefacción, pero de inmediato se paró a mi lado

—Claro mamacita!! Nosotros te cuidamos!!

—Es que éstas calles son peligrosas—dije—A veces salen hombres que quieren faltarme el respeto. ¿Tú crees?

Ni tardo ni perezoso pasó su brazo sobre mis hombros y su amigo me tomó por la cintura

—Cierto!!—dijo—hay cabrones que se quieren pasar de listos en cuanto ven a una mujer tan buena como tú

Al caminar, dejó resbalar como quien no quiere la cosa su mano de mi hombro hasta que tocó mi seno derecho. Yo le tomé la mano y la apreté contra mi pecho, dándole a entender que eso era lo que yo quería.

Su amigo al notar que venía tomándome del pecho. Me agarró de una nalga y me iba acariciando…

El primero notó que no traía sostén y me apretaba el pezón, yo le tomé la mano y jalando el vestido, la metí para que me agarrara el pecho sin tela de por medio.

El segundo, me levantó el vestido y me tomó directamente del culo mientras me llevaban a lo más lejano y solo de la calle.

—mmm! Sí.. así me gusta—dije—No se detengan amores. Háganme lo que quieran…

—En serio??—Dijo el que me tenía del trasero

Como respuesta, voltee con el de mi izquierda que me venía agarrando el pecho y lo besé en los labios mientras mi mano iba a su entrepierna y le acariciaba el bulto que se había vuelto muy notorio. Inmediatamente me arrastraron hasta un local en renta que estaba vacío y me aprisionaron entre los dos. Sentía la verga dura que presionaba mi coñito y otra incluso más grande que presionaba mi trasero.

Literalmente me arrancaron el vestido y se dieron cuenta que estaba desnuda

—Eres una pinche puta!! Te gusta andar sin calzones—dijo uno… no recuerdo cual

—Sí papi… tengo muchas ganas de verga!! Me das?—dije

El primero, me apretaba los pechos y me mordía los pezones mientras que el segundo me metía mano en el coño y me introducía un dedo en el culo, haciendo que yo me sobresaltara y lo jalara hacia mí.

Yo estaba muy mojada y me puse en cuclillas para bajarles los pantalones y darles una buena mamada.

El primero tenía una verga normal aunque muy dura y el segundo tenía una belleza de garrote. Por lo menos de 28 cm de largo y 2 o 3 cm de grosor. Al verla no pude evitar mamarla como si me fuera la vida en ello.

—Mmmmm! Qué bien chupas mamacita!! Se ve que eres caliente!!—decían

Sólo se escuchaba el sonido de succión. El primero me paró y me inclinó y sin miramientos me la ensartó en el ano!!

—Agh!! Cabrón me duele!!—dije

—Te la saco?—preguntó

—Noooo!! Si me la sacas te mato!! Mmm! Párteme en dos

Se sentó en el piso conmigo aún ensartada y abriendo mi coño al segundo que tenía la verga más grande.

—La quieres mamacita?—dijo—Te la vas a comer Completita

—Sí papi!! Dame más… lléname!!

En ese momento se acercó y me la metió sin contemplaciones!! Mmmm!! Una delicia!!

—Aaah!! Sí mi vida, dame más duro, lléname de tu lechita caliente!!—dije

Me penetraban con furiosa desesperación y no tardé en estar a punto de venirme… sentía como mis intestinos se movían con uno y como mi vagina de abría con en el segundo.

—Ah! Ah! Sí! Más! Soy su putita cabrones!! Denme más verga!! Inúndenme

—Toma mi leche puta!!—me dijo el que me estaba cogiendo por el ano. Sentí los chorros de semen en mis intestinos en el momento que me venía como una perra

—Ahora la mía zorra!!—dijo el otro y me la sacó para venirse en mi cara…

Yo abrí la boca, pero ya era tarde, me estaba bañando en semen. Cayó en mi boca, ojos, pechos y cabello…

—Mmmm si papi báñame en lechita…

Mientras se venía el segundo, el primero estaba tomándome fotografías con su celular y eso me calentó aún más… Me ponía de pose mientras me fotografiaba y tenía una cara de puta satisfecha

—Estas fotos las voy a subir en internet puta ¿Alguna objeción?

—Ninguna papi… tengo más fotos que me ha tomado mi novio y si quieres te las envío

—Ok!!

Me dieron sus correos electrónicos y se fueron dejándome con la cara llena de leche. Misma que me unté en todo el rostro y los pechos.

Al llegar a casa mi novio me preguntó cómo había sido mi día y le dije que iba a tener unas buenas fotografías como las que él le gustaban.

—Ah! Estuviste portándote mal?—dijo—Ya sabes que me encanta saber que te portas como una putita… ya subí las más recientes a internet en donde cualquiera puede verlas y descargarlas

—MMM no me digas que con eso me calientas más…

Lo que no sabíamos era que estábamos comenzando con un juego mucho más fuerte de lo que pretendíamos y hasta un buen negocio se podía presentar.