En espera de ti 5

Te ayudo porque tú me preocupas, créeme lo que vi ayer en el apartamento de tu amiga y la tarde de hoy en casa de su madre me tiene mal, no quiero ni pensar que algún día te pase a ti algo cuando yo puedo ayudarte, respecto a si que interés tengo, ninguno, no te estoy ayudando a cambio de algo.

Muchas gracias Dayanara, perdóname si te incomode, es que nunca alguien me ayudo sin pedirme nada a cambio.

Crees que yo te pediría algo a cambio?

Claro que no, además no tengo nada que darte.

Entonces olvídate de todo eso.

Dayanara yo hare todo el oficio de casa, solo de esa manera acepto quedarme, cuando sea mayor de edad trabajare y así podre marcharme.

Me dejaras sola entonces?

Jajaja, vendré a verte y si me das trabajo pues nos veremos todos los días….

Eso es buena idea.

Por cierto cuando cumples 18?

El año próximo, mi cumpleaños fue hace dos semanas.

Que lastima que no te conocí antes te hubiera regalado un pastel de chocolate…

Mmm que rico…

Todavía se puede?

Sí, yo quiero pastel todos los días.

Jajaja… creo que ya descubrí tu debilidad.

Joder no podía ser más complicado, llegaría a la mayoría de edad hasta el año próximo, mientras tanto estaría en mi casa, sentimientos encontrados: mis días en soledad se terminaban, mis mentiras con Samantha aumentarían, arriesgando mí relación ufff estaba en grandes problemas. Platicamos mucho tiempo, estuvimos jugando piedra, papel o tijera, perdí muchas a veces a propósito solo por darme el gusto de verla sonreír, era hermosa, sus ojos negros me tenían cautivada, los días fueron pasando, cada día ganaba más espacio en mi corazón, siempre quise tener una hermanita, ella había caído en manos de la persona indicada, la consentía bastante, mi relación con Samantha estaba muy bien, claro ella no sabía que Velería vivía en mi casa.

En la universidad todo marchaba de maravilla, cada día me enamoraba mas de mi carrera, teníamos tareas en grupo, por suerte nos dejaron hacer los grupos a nuestra conveniencia así que todos éramos muy cercanos.

Claudia, Adriana, Fernando y Roberto, este último no era de mi agrado, pero por ser el novio de Adriana no quedaba más que aceptarlo, decidimos en donde nos reuniríamos,  todos decidieron que en mi casa sería mejor ya que había suficiente espacio, no me causaba gracia esta decisión, tener a ese bicho en mi casa me enfadaba, quedamos que el día siguiente empezaríamos, era nuestro último curso así que no despedimos, llegue a casa muy molesta…

Te pasa algo hermanita? (así me llamaba Valeria).

No, solo tengo muchas tareas.

Segura?

Mira mañana vendrán unos compañeros, tenemos un tarea grupal, entre el grupo hay un chico que no es de mi agrado, me molesta que él entre a mi casa.

Lo siento mucho, pero no estés así, todo estará bien.

Eso espero.

Quieres que me quede en la habitación para que ellos no me miren aquí?

Que dices Valeria, claro que no, tu eres mi hermanita, que tiene de malo que ellos te vean?

Bueno yo pensé.

No pienses cositas que no son eh, esta también es tu casa….

Te quiero mucho Dayanara..

Y yo a ti.

Aquella noche fui a la cama pensando que dirían mis compañeros al ver a Valeria en mi casa, todos sabían que yo vivía sola pues no era de este país, me quede profundamente dormida.

Al fin llegaba el otro día, con lluvia pero allí estaba,  la hora de nuestra reunión llego, la primera en llegar fue Claudia, Valeria ahora se sentía más a gusto con ella, tuvieron una pequeña charla, alguien tocaba el timbre, era Adriana y el novio, los hice pasar.

Claudia: pensé que ya no vendrían?

Adriana: esta tormenta por poco no nos deja salir…

Solo falta Fernando y damos por iniciada la tarea, por cierto les presento a mi hermanita Valeria.

Hola Valeria yo soy Adriana y el es mi novio Roberto.

Mucho gusto…

Roberto: de verdad es tu hermanita?

Así es….

Roberto: qué raro no se parecen….

Ya lo decía este imbécil no debió entrar a mi casa.

Pues sí que lo somos, aunque no tengamos ningún parecido, hay algún problema con eso?

Roberto: uy que genio, no pasa nada.

Estúpido ojala no abriera mas la boca en toda la reunión, Fernando apareció así que iniciamos nuestra tarea, durante mucho tiempo Roberto no quitaba los ojos sobre Valeria, eso me tenía más que enfadada, a ella la veía bastante incómoda, por alguna razón desde que lo vio estaba muy nerviosa, mientras Claudia explicaba como seria la presentación Valeria salió apresurada del estudio, todos nos quedamos asombrados excepto el que tenía una sonrisa de oreja a oreja, quería terminar rápido y preguntarle que le pasaba.

Roberto: definitivamente no es tu hermanita, su falta de educación lo dice todo, por qué no nos cuentas de donde la sacaste?

Y crees que yo te voy a dar explicaciones?

Claudia: chicos sigamos con la tarea que se nos hace tarde.

Ese infeliz me tenía a punto de explotar, ya sabía yo que no era nada bueno tenerlo en mi casa, fue un alivio cuando finalizamos, pero este hijo de puta parece que no tenía suficiente.

Roberto: chao cuñadita mira que tu “hermanita” esta guapísima…

La sangre me hervía, quería reventar a patadas a esta porquería, pero en fin qué bueno que se marchaba, pues estaba desesperada por saber que le pasaba a Valeria, fui rápidamente a su habitación, se negaba a abrir la puerta, al final termine convenciéndola.

Valeria, por qué lloras?

Quiero irme de esta casa Dayanara...

Pero por qué?

Por nada, solo creo que este lugar no es para mí, debo volver con papá…

Con tu padre? Pero nena ese hombre te trata mal, Valeria necesito saber qué te pasa?

No me pasa nada, solo quiero irme….

Ok, si eso es lo que quieres adelante…..

Gracias, me iré a ahora mismo….

Como quieras, solo recuerda que puedes venir cuando quieras, te quiero mucho Valeria.

Salí de aquella habitación, fui directamente a la mía, no sabía el por qué de su reacción, se marcharía, otra vez sola, otra vez ella a merced de su padre, otra vez en esa vida, fuck no pensé que me pondría así, una enorme tristeza me invadía, algo dentro de mi me decía que me estaba dando por vencida demasiado pronto, me levante de mi cama….

Valeria necesito que me digas por qué has tomado esta decisión? Valeria?? Donde estas?

La busque por toda la casa mas no la encontré, se había marchado, sin despedirse, quise salir a buscarla pero quizá era lo mejor, al menos me quedaba tranquila pues fue su decisión, llego la hora de la cena, ni siquiera me asome a la mesa, las horas fueron pasando y me derrumbe, me sentía estúpida lloraba como una niña, llame a Claudia, mi amiga al escucharme así no tardo en llegar a mi casa…

Qué te pasa Dayanara?

Me pasa que ella se fue, estoy demasiado preocupada Clau, mucho….

Valeria se fue? Pero por qué?

No lo sé, no me dio explicación solo me dijo que quería marcharse.

Dayanara no estés así, mira velo de esta manera, te has quitado un problema de encima, al final ella era un problema, tu no la echaste, tú la estabas apoyando pero ella decidió marcharse, sus razones tendrá, ahora bien toma en cuenta este consejo, no la busques, ella sabe dónde encontrarte si se decide a volver.

Pero Claudia… y si le pasa algo?

A ver Dayanara, ella es menor de edad cierto, pero tampoco es una boba, ella sabe que cosas no debe hacer, que mejor ejemplo que lo que le pasó a su amiga…

Tienes razón, ya dejare de pensar en eso.

Estaba decidida a cerrar esa página, mi amiga tenía razón ella lo decidió, agradecí mucho a Claudia su compañía, luego que ella se marcho hable con Samantha, ella noto mi tristeza, le dije que extrañaba a mi familia, guarde la esperanza que Valeria volvería esa misma noche, ni siquiera fui en mi cama, me quede en sillón, a eso de mis 11 no pude mas, decidí ir al mismo parque donde la encontré a lo mejor estaría allí, estuve unos minutos dando vueltas por ese lugar, no había un alma, pensé muchas veces en ir a su casa, pero recordar lo que me había dicho su padre me detuvo,  volví a casa, trate de dormir pero fue en vano, el siguiente día decidí no salir, quería  que me encontrara en casa si volvía, fue el día mas largo y angustiante de mi vida, no volvió y así fueron pasando los días, tenía más de una semana de no saber de ella, algunos días fueron desesperantes, otros donde estuve más tranquila, parece que nunca más la volvería a ver.

Tres semana habían pasado, aquel día tuvimos una pequeña gira en el bello canal de panamá, al finalizar la actividad decidimos reunirnos todos en un restaurante, éramos cerca de 24 decidimos unir varias mesas para quedar juntos, todos hacían bromas, yo la estaba pasando de lo mejor, las meseras se encaminaban hacia nuestra mesa con nuestras ordenes.

Jimena era el nombre de la chica mas engreída del salón, su padre era un político muy reconocido en este país, desde mi primer día en la universidad supe que entre ella y yo habría problemas, su altanería sobrepasaba los limites, estaba platicando con Claudia y me perdí la escena, de repente los gritos de Jimena llamo nuestra atención….

Jimena: eres una estúpida, por que no te fijas….

Mesara: señorita yo, lo siento mucho…

Jimena: ahora lo vas a sentir más idiota…..

Jimena abofeteo a la chica,  estaba a punto de levantarme, pero Claudia me detuvo.

Jimena: mira nada más como han quedado mis botas, inútil… límpialo…

La chica tenia la mirada en el piso, se inclino para limpiar las botas de Jimena, pero las cosas no quedaron allí, ella tomo el vaso de refresco y lo derramo sobre la cabeza de la mesera, todos reían como si les causara placer aquella escena, no me importo nada, rápidamente fui a levantar a la chica, mi sorpresa fue tan grande al ver de quien se trataba.

Jimena: y tu por qué te metes? Acaso limpiaras tu mis botas?

Oblígame… y ya veremos quien termina lamiendo botas….

Todo quedo en silencio, tome de la mano a Valeria y Salí de aquel lugar, ella lloraba amargamente, no sabía que decirle, no tenia palabras, estaba furiosa ni siquiera debí hacerle caso a Claudia, debí actuar en el momento indicado y le hubiera evitado esta humillación.

Valeria no llores, mira tienes suerte que solo haz conocido mi lado bueno, ahora mismo estoy demasiado furiosa, si sigues así regresare a ese mismo lugar y hare que esa hija de puta limpie el piso con su lengua…..

Ella no decía una palabra, lloraba mucho, me decidí a regresar y hacerle pagara a Jimena lo que hizo, mientras conducía….

Dayanara no lo hagas, no vale la pena, te ruego que no hagas nada, déjame aquí si…

Dejarte… y a donde iras? Esa mujer pedirá que te echen…

Me buscare otro empleo….

Valeria, donde vives, volviste acaso con tu padre?

No, donde mi padre nunca volveré….

Mira ahora mismo te llevo a mi casa, jamás debiste marcharte aquel día, Valeria por favor no quiero que sufras mas, anda pequeña dime qué quieres volver a mi casa…..

Lo siento mucho, no puedo…

Pues no te dejare ir, no quiero que algo así se vuelva a repetir, mira solo unos meses mientras te consigues un empleo mejor si…

Solo asintió, llegamos a casa, prepare un té para que se calmara, me sentía tan mal por lo que había pasado en el restaurante, maldita sea por qué existe gente así, siempre me preguntaba por que existían ricos y pobres? Ojala estas cosas se solucionaran por arte de magia, o todos ricos o todos pobres, el caso de Valeria era muy complicado, aun si fuera mayor de edad no tenía la preparación necesaria para tener un buen empleo,  ahora me doy cuenta que he estado cometiendo un grave error, tenerla solo en casa no solucionaba el problema, lo que tenía que hacer es prepararla, enseñarle todo lo que yo sabía, refinarla, claro… hace unos días era una prostituta, hoy una mesera, había sido humillada, pero la vida siempre nos da revancha, tenía mucho pero mucho tiempo pare convertirla en toda una dama de sociedad…..