En el sagrario
Un joven confundido, otro tratando de limpiar su culpa mediante la oracion. Un amor que por las represiones no funciona...
Esta vez no fue la excepción, como todas las veces que iba a la iglesia; si es que por misa de algún familiar muerto a pedido de mi madre o es que era por que necesitaba congraciarme con Dios y pedirle disculpas por mi "desviación sexual". Si, soy Gay...!!! Siempre iba a la iglesia a rezarle a Dios que me perdone y que me haga el favor de quitarme los pensamientos "pecaminosos", el desear tener a un hombre conmigo, que compartamos una cama, hacer el amor...
Era mas o menos sábado a las seis de la tarde, había tenido una pelea el día anterior con un chico con el que había estado saliendo un par de semanas, y con el que había tenido sexo las dos semanas que habíamos salido. La misa no empezaba aun ese día, y me fui al sagrario, que es mucho mas tranquilo si quieres estar cerca de Dios, (de seguro te oirá mas rápido). Y estaba pidiéndole un par de favores y yo a cambio me imponía de penitencia no salir con un hombre jamás, y que tendría abstinencia sexual. Cuando estoy por salir a la parte de la iglesia donde se oye la misa, veo a un muchacho precioso sentarse a unos dos metros a mi lado derecho, el se sienta y tenia la misma cara que yo. Nos miramos fugazmente y nos sonreímos así por así.
Cuando salgo del sagrario arrepentido de haber tenido esos pensamientos dentro, me doy cuenta que el chico estaba afuera sentado a dos bancas cerca mío, nos volvemos a ver y sonreímos, casi mecánicamente.
Decidí no escuchar la misa, y quizás darme por vencido de que Dios cambie mi desviación, salí... Dos cuadras mas allá me doy con la sorpresa que el chico estaba cerca, paro en la esquina y decido ser frontal y preguntarle que es lo que quería.
Hola, parece que nos conocemos? le dije cuando se acerco a mi en la esquina.
No creo, pero me llamo Julio me dijo.
Yo me llamo Pablo, y te vi en la iglesia
Si, estuve un rato
Yo también...
Me contó que el vivía cerca de la Iglesia, pero no me dijo el porque de ir a rezar al Sagrario. Cerca de allí también había un café pequeño y nos fuimos a tomar algo, total estaba anocheciendo y estaba empezando a hacer frió. En el café llevábamos mas o menos media hora cuando para despabilarnos le pregunto "¿eres gay?", su cara se enrojeció y la mía estaba haciéndose igual, lo ultimo que quería era hacerlo sentir pena, se quedo mudo por un rato interminable, a pesar de ser quizás un minuto solamente.
Discúlpame, no quería incomodarte con la pregunta... fui algo tonto
No te preocupes, la verdad es que no sabría contestarte
Solo dime, si lo eres o no, igual podemos tomar un café y ser amigos.
Si, lo que pasa es que...
Titubeaba mucho, lo que a él le pasaba, era que recién había tenido su primera experiencia con un chico, el chico con el menos se imagino y fue un dia de copas, y desde ese día como que le atraen todos los chicos. "Gracias a Dios que te atraen los hombres, con la pinta que te manejas..." me dije para mi mismo. Y sonreí de pensarlo. Le confesé que yo si lo era, convicto y confeso "gay", le pedí nos fuéramos a mi casa, que allí podríamos hablar, que no pensase que tendríamos sexo si es que íbamos, cabía la posibilidad a que si lo tuviésemos, pero solo seria decisión de los dos. El sonrió y nos subimos a un taxi, que nos dejo afuera de casa.
Ya en casa, el me dijo que lo disculpase por haberme sonreído en la iglesia, yo le dije que fue lo mejor en días, y también me dijo que el había ido a pedirle a Dios lo ayude, yo le dije que ese fue el motivo al que yo iba a la iglesia. "He descubierto que tengo la necesidad de arrepentirme de hacer lo que hago, y sentir que puedo cambiar, a pesar de que no lo haga..." El me sonreía y se ponía colorado, sentía que se ponía tenso con la conversación.
"Puedo ayudarte con tus dudas si quieres?" le dije y me acerque a él y lo bese, le estampe de esos besos, que solo das cuando pasan un año sin haber probado labios, e instintivamente el me correspondió y yo seguí haciéndolo. Cuando me di cuenta estaba sentado en sus piernas con las piernas abiertas e par en par, sobre las piernas de él. Lo seguí besando, y acariciando, y lo despoje de la parte superior de su ropa, dejando entrever una maravilloso y bien trabajado pecho, acariciaba su rostro, su piel, que me cautivaba.
También me dejo sin polo, seguíamos besándonos, me puse de pie y me puse entre sus piernas arrodillado, abrí el cierre de su pantalón y saque su verga (aunque suene trillado, el sexo oral es mejor para mi que el mismo hecho de la penetración) y estaba semi-erecta me la metí en la boca y cuando alce la mirada me excite mas de verlo con los ojos cerrados, sobandose el pecho, mientras se la mamaba, me las arreglaba para poder sacarle el pantalón, lo deje desnudo allí, postrado en mi sofá, yo seguía mamandoselo y escuchando gemidos mudos, callados, como queriendo reprimir sus placer. Sus piernas para ese momento estaban relajadas.
Me pare y me termine de quitar la ropa, al contrario de el, yo si traía una erección a mil, que cuando quedo al aire mi pieza, se la lleve a la boca, la cual en una el se la metió, parece que cerraba los ojos para dejarse llevar de la sensación, y dar al placer mayor intensidad, yo lo único que podía hacer, era mirarlo, guapo allí mamandomela.
Cuando me vuelvo a sentar con las piernas abiertas sobre su verga, al oído me dice "Penétrame tú, hazme el amor" y eso me termino de excitar mas, verlo así tan hombrecito pidiéndome que le meta guevo, que en una, sin dudarlo, lo voltee y lo arrodille en el sofá, y con su culo al aire se lo comencé a comer, ahora ya sus gemidos eran sonoros, sabia que esa experiencia era la que lo tenia con tantas dudas, el tener que sentir tanto placer con la lengua de un macho entrando en su culo, cuando estuvo bien dilatado y lubricado, se la metí, yo se lo estaba haciendo como a mi me gusta que me lo hagan, despacio, con muchos besos, con palabras dulces, eso hacia (nada de "eres mi perra, te voy a coger putita", eso si que me enferma), sus manos se aferraban al filo del mueble y su cadera se movía rítmicamente, yo entraba y salía de su culo, me la estaba pasando bien, yo le besaba el cuello, trataba de buscar su boca para besarla, "estaba haciendo el amor" con el, luego cambiamos de posición y lo senté frente a mi en el sofá y yo con sus piernas sobre mis hombros, hice llegar mi pieza tan dentro de el, que pude oír que se quejaba, yo lo estaba que lo gozaba, en un momento el con sus manos en mi cara, me jala y hace que lo bese. Me vine dentro de él, como nunca, sentía que mis descargas de leche eran largas. Nos quedamos así, quietos un rato, yo lo veía que estaba aun con su verga dura, y se la comencé a mamar, cuando se la sentí bien dura, hice la tentativa de sentarme sobre su verga, pero no quiso, me dijo que no quería tener esa experiencia. Simplemente se la mame y se vino en mi boca. Nos acomodamos en el sofá y nos quedamos abrazados mucho rato, hasta que se puso a llorar alegando que había estado mal hacerlo; que Dios nos castigaría, yo lo abrace y lo tranquilice, a pesar de que salimos dos meses, después de haber disfrutado del sexo y entregarse al amor, siempre terminaba llorando, sus remordimientos no lo dejaban en paz.
Nos dejamos de ver, y me hice una sola promesa. NO hacer ligues con gente mas confundida que yo ó simplemente No ligar en la iglesia.