En el lugar menos esperado. Desenlace final

Mi vida en cuestión de meses había dado un cambio tan radical que ni yo misma me daba tiempo para asimilarlo. Después de la tarde mágica que pase junto a Esther mi boca era como un sello de silencio ya que no sabía cómo romper el hielo pero por lo visto ella si….

-Marta ha sido la tarde más especial que he pasado en mucho tiempo, te lo agradezco de verdad, no sé si puedo recompensártelo...

-Bueno Esther ha sido una tarde especial también para mí pero necesito contarte algo, no se puede decir que tenga una pareja estable pero estoy conociendo a alguien espero que no te moleste si te digo que no puede seguir lo ocurrido.

-No tranquila, al contrario, te pido perdón si te he incomodado no sé que me ha ocurrido, me he dejado llevar y la verdad desde que te conocí tampoco te quiero mentir sentí algo especial...

De momento me quede paralizada, Esther me acababa de confesar que cuando me conoció sintió algo especial y yo le había pagado de la manera más ruin que podría haberlo hecho y tuve que confesar…

-Mira Esther, lo que te voy a contar te va a parecer duro pero más duro me resulta a mí y sobre todo y ante todo decirte que espero que me perdones porque tu también me importas mucho.

-¿Qué te ocurre Marta? Me estas asustando la verdad, no pasa nada de verdad no creo que me hayas hecho nada malo.

-Mira Esther yo sé porque motivo te ha dejado Laura, ha sido por mí, estoy en un gimnasio de aquí al lado de mi casa y la conocía de vista y de las clases que ella da que suelo entrar y un día no sé como ocurrió, me dijo que tenía pareja y que no podía volver a pasar y yo me marché. Pero luego todo empezó de nuevo a complicarse y yo aunque sabía que tenía pareja como desde que la conocí me gustaba y la quería sabía que había una tercera persona que sufría y por esa parte fui bastante egoísta, hasta que te vi ese fin de semana con ella en el pub y mi mundo se derrumbó. Cuando tu saliste y nos viste discutiendo era porque le estaba reprochando que quisiera dejarte por mí, porque yo te conocía del trabajo y se la persona tan especial que eres y encima estas muy bien, con lo cual no explicaba que veía en mi y no en ti, no quería saber nada de ella y fue entonces cuando el otro día se me presento en mi casa y me dijo que te había dejado que estaba enamorada de mi y como no quería seguir haciéndote daño prefirió parar todo. Entonces después ha ocurrido todo esto entre nosotras y ya es que no puedo más, todo esto se me viene grande…

En ese momento los ojos se me inundaron de lágrimas y me senté en el sofá tapándome la cara porque la vergüenza no llegaba a más, esperaba que Esther se pusiera a gritar o reprocharme todo que también me lo merecía, pero se sentó a mi lado y me abrazo y empezó a consolarme.

-Tranquila cálmate, tú no tienes la culpa, como te conté cuando te conocí, a mi me paso lo mismo lo único que yo no llegue a conocer a la otra chavala que dejo por mí.

-Si bueno pero lo que he hecho no tiene nombre, losiento de verdad creía que la vida empezaba a sonreírme de nuevo pero lo que ha hecho ha sido hundirme más en la mierda que estaba metida.

-Bueno, no te voy a mentir, han sido 4 años maravillosos junto a Laura y he vivido buenos y malos momentos pero si los sentimientos por su parte han cambiado prefiero que las cosas estén así, y si ahora es feliz junto a ti pues que lo sea os deseo que seáis felices eso sí, ten cuidado, que lo mismo te puede pasar lo mismo que a mí. Bueno que decirte, tú la estarás conociendo y ha sabido como ha estado contigo así que como amiga tuya que me considero es mi único consejo por lo demás se feliz junto a ella.

En ese momento, se levanto, cogió sus cosas y se marchó. La verdad que aunque las palabras habían sido muy reconfortantes no ocultaba el hecho de todo lo que le había hecho pasar. Al minuto volvió a sonar la puerta y fui corriendo creyendo que se le había olvidado algo...

-Hola cariño!! He visto salir a Esther y no podía aguantar las ganas de estar más tiempo separada de ti.

-Ya le he contado todo lo nuestro, y la verdad es que me parece súper fuerte, ni un grito, ni un escándalo, como se me han saltado las lagrimas únicamente me ha dado un abrazo y me ha dicho que si soy feliz, adelante.

-La verdad que la entereza que tiene es sorprendente la verdad, pero te prometo que voy hacerte la mujer más feliz del mundo, te quiero mucho Marta.

Los días siguientes fueron pasando y pasando con una peculiaridad, que no solía coincidir en el turno con Esther y eso me parecía bastante raro, y mirando los horarios veía como estaban hecho en el cual yo entraba y ella salía y a la inversa. Entonces comprendí que aunque ella me dijo todo lo que me dijo en mi casa lo siguiente era alejarse de mí y tampoco podría recriminarle nada así que tuve que soportar sus ausencias. Cuando llegaba a mi casa y estaba con Laura la verdad es que era bastante reconfortante, me cuidaba, me mimaba, me hacia disfrutar de ella en la cama, en la ducha…un día llegue bastante estresada a casa porque había tenido varios problemas con los clientes y nada más me apetecía una ducha y estar tirada en el sofá, al meter la llave el pestillo por dentro estaba echado, me extraño y llame a la puerta y Laura salió corriendo a abrirme…

-Hola cariño!! Lo siento  por echarte el pestillo pero espera no entres...

De repente me dio medio vuelta y me puso una venda en los ojos y me susurro al oído...

-Preciosa espera un minuto en cuando te lo diga te das media vuelta y sigues el camino, te quiero mi vida.

En efecto, hice lo que me dijo pero no tenía ni idea de lo que quería hacer ahora porque la verdad es que no estaba para bromas…

-Cariño ven hacia mí, te espero….

Me di la vuelta y me quite la venda y de repente mi cara de amargada se contamino de una felicidad infinita, había un pasillo lleno de pétalos de flores con velitas a los lados y con una música súper romántica de fondo todo ello en dirección al baño, cuando llegue Laura estaba junto a la bañera desnuda esperándome con dos copas de champan y al lado de la bañera dos buenas copas de nata con fresas...

-Dios mío cariño, esto es fabuloso de verdad, venia súper estresada por el trabajo pero tú me acabas de quitar todos los males.

-Te dije que iba a hacerte la mujer más feliz del mundo y mi parte pienso cumplírtela, ahora ven y disfruta…

Me acerco hacia ella y me quito la ropa, desnudas las dos, me dio una copa de champan y brindamos, nos besamos y nos metimos en la bañera con el agua calentita. En la bañera llena de espuma nos empezamos a dar la una a la otra las fresas con la nata hasta que me lo quito y empezó a besarme de nuevo, se puso encima de mí y pegada a mi empezó a moverse y rozándose hacia que mi cuerpo se estremeciera y se excitara  pidiendo guerra.

Fuimos hacia la cama y me puse encima de ella, empecé a besarle el cuello y mientras mis manos se deslizaban por todo su cuerpo también iba bajando sintiendo como su cuerpo se movía y gemía de placer, llegue a sus senos y los besé despacio mientras ella se relamía y fui bajando hacia abajo hasta que llegue a su sexo, era maravilloso, precioso y para poder recompensárselo todo como era debido empecé a lamérselo, besárselo mientras ella llegaba al grado del placer que yo igualmente estaba llegando viéndola gemir y disfrutar al máximo.

Al día siguiente me levante súper temprano para poder hacerle el desayuno antes de irme a trabajar.

-Buenos días preciosa, ¿cómo te encuentras hoy?

-Perfectamente si estoy con la mujer a la que amo a mi lado qué más puedo pedir.

-Laura, soy la mujer más feliz del mundo y quiero que lo sepas, estoy súper agusto a tu lado y espero que esto dure para siempre.

-Cariño así será, te dije que esto que sentía por ti era distinto, yo lo sentí mucho por Esther pero lo enamorada que estoy de ti nunca lo he llegado a estar de nadie.

De repente me vino a la mente el día de la borrachera de Esther y todo lo que ocurrió esa tarde y me sentí tan mal que hasta Laura se dio cuenta...

-¿Qué te ocurre cariño? Yo se que ahora mismo te duele la situación que tienes con ella pero veras que en cuando pase un poco de tiempo podéis volver a tener una buena relación de amistad.

-Si bueno, es que en eso no estoy pensando, la verdad es que hay algo que no te he contado sobre Esther y yo. El día de la borrachera que te dije que vinieras más tarde, yo me metí en la cama con ella para dormir y tal. Y no sé cómo ocurrió te lo juro pero sentí una caricia en mi cara y me sobresalté y era ella que me estaba acariciando y me besó y yo bueno pues…. no le paré.

Laura se quedo paralizada mirándome, con cara no sé si de odio o de ganas de llorar y ya de por si me sentía mal ahora aun peor porque había herido a la mujer que adoraba en mi vida.

-Es decir que yo me fui al gimnasio sin ganas porque estaba deseando estar contigo y lo que hiciste fue follartela en nuestra cama...

-No es eso Laura, lo siento mucho, no sé lo que ocurrió me sentía mal por todo y reaccione así pero de verdad le dije que estaba conociendo a alguien que me importaba hasta que al final le conté que eras tú y que me gustaba y que quería estar contigo.

-Claro y eso fue ¿después no?, es decir, primero el polvo para probarla y luego como no te gusto le dijiste lo nuestro para ¿pasar de ella no?, eso no se hace Marta, no.

Laura se levanto y se vistió rápido y veloz cogió algunas cosas y se iba a marchar y corriendo fui para la puerta.

-Laura por favor espera, te quiero, te deseo a ti, de verdad mi amor créeme, perdóname.

-Vete a trabajar Marta, vas a llegar tarde, ya luego si tengo ganas ya hablaremos. Adiós.

Se fue, ya no pude impedírselo, de camino hacia el trabajo iba maldiciendo mi vida, la verdad es que no tenía ganas de vivir. Al llegar al trabajo me encontré con que Esther también tenía turno conmigo así que ya era la guinda que le faltaba al pastel para tener el día completo.

-Buenos días Martas ¿cómo estás?

-Bien gracias por preguntar Esther, ¿tu bien no?

-Si muchas gracias, estoy deseando terminar el turno porque he quedado con una amiga y tal para dar una vuelta y la verdad es que estoy bastante ilusionada, y Laura ¿cómo está?

-Si bueno, no sé si lo hemos dejado o no la verdad, ayer llegue súper estresada y Laura me preparo una fresas con nata en el baño, con música y velitas y los disfrute pero esta mañana hablando un poco de todo, salió tu nombre y eso y me acorde de lo que ocurrió el día de la borrachera y no pude ocultarlo y se lo he contado, y ha cogido sus cosas y se ha marchado.

-Oh! Valla le has dado en su orgullo eso sí, pero Marta no sé porque se lo has tenido que decir, según me dijiste la estabas conociendo no tenias nada serio así que en realidad tampoco ha sido unos cuernos ni nada parecido pero ella también tiende a exagerar todo.

-Ahora mismo no tengo ganas de nada, solo de estar en la cama metida y poder echar el tiempo atrás.

-Si quiere un consejo, dale un poco de tiempo, a ella nunca le ha pasado nada parecido, pero si te quiere tanto como yo creo no tardara en volver contigo.

Las palabras que Esther me dijo, resonaron en mi cabeza, por una parte quería creerla pero por otra parte sabía que la manera que se había ido no era para nada bueno.

Y lo peor es que lo que temía estaba ocurriendo, fueron pasando los días y Laura no daba señales de vida, en el gimnasio era peor aun porque entrando en las clases que ella daba hacia como si no existiera, como si mi sitio fuera ninguno, y para colmo veía como Esther reacia su vida con su nueva novia.

Un día llegaba tarde al gimnasio así que me quede hasta tarde y media hora antes del cierre me metí a ducharme porque después me daría pereza llegar a mi casa y hacerlo. En esto que escucho el murmullo de dos chicas riéndose y me asomo por la cortina y cual pudo ser mi sorpresa me vi a Laura agarrada a otra chica besándola y riéndose, empezaron a desnudarse y  de todas las duchas que estaban disponible se tuvieron que poner al lado mía. Mi corazón se destrozo en añicos en un par de segundo, la mujer de mi vida estaba con otra chica al lado de mi ducha haciendo lo que meses atrás disfruto ella conmigo. No lo pude aguantar y salí entre lágrimas en los ojos, me vestí todo lo rápido que pude mientras escuchaba el dolor de mi alma hablarme, en esto que sale Laura y me vio como me estaba vistiendo llorando  y se quedo paralizada sin saber que decir, gracias a Dios terminé, cogí mis cosas y salí corriendo de allí volviendo a maldecir mi vida y viendo como la persona que amaba disfrutaba de su cuerpo con otra que no era yo.

Como cogí vacaciones en el trabajo, pensé darme unas vacaciones que me las merecía pero no sabía adónde ir ni nada, y de repente sonó el timbre…

-¡Hola Marta! venía hablar contigo.

-Que sorpresa verte Esther, la verdad es que me pillas que quería ir a una agencia porque necesito salir de aquí.

• Mira la verdad es que lo que te voy a decir después de tanto te puede sonar a chiste pero es que desde el día que pasó eso entre nosotras no he podido dejar de pensar en ti. Como sabía que estabas con Laura no quería meterme ni nada pero como llevo observándote durante semanas creo que podrías darme una oportunidad para demostrarme que yo podría hacerte feliz.

-Gracias Esther por tu declaración pero ahora mismo prefiero estar sola, ha sido muchas emociones en unos meses.

-Bueno yo te lo digo y lo puedes tener en cuenta… Adiós Marta.

No puedo negar que las palabras que me dijo me gustaron e incluso en otra situación hubiera aceptado pero siendo sincera a mi corazón seguía enamorada de Laura y aunque me costara olvidarla tendría que hacerlo.

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-Hola Esther, que de tiempo sin verte la verdad, ¿estás bien no?

-Hola Laura, igualmente te digo, que raro que vengas por aquí, creía que dejarías en paz a Marta pero veo que no así que mi proposición ya no se la pensara, una lástima porque se merece ser feliz.

-¿De qué estás hablando? Primero hace tiempo que no veo a Marta únicamente, necesito hablar con ella sobre un tema del gimnasio, te podrías explicar...

-Mira te voy a ser sincera, acabo de decirle a Marta que me gustaría tener una relación con ella, pero la tienes tan destrozada que ha cogido vacaciones en el trabajo y pretende marcharse porque no aguanta estar aquí, solo te pediría algo que creo que me lo debes y además es muy sencillo. Si la quieres aprovecha la oportunidad.

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Pensé en darme una buena ducha para poder relajarme un poco y ya metida en la bañera volvieron a llamar a la puerta, cogí un albornoz corriendo y fui para la puerta.

-¡Hola Marta! caray llego a saber que me recibes así y vengo antes la verdad.

-Que graciosa eres, me estaba dando un baño, hoy es el día de las visitas así que creo que hasta última hora no podre bañarme.

-Mira la verdad es que vengo a disculparme por lo del otro día, no tenía ni idea que estuvieras allí. Lo que menos pretendo es hacerte daño y sé que te lo hice.

-Bueno no pasa nada, tú puedes hacer con tu vida lo que quieras y  yo no tengo nada que ver, tranquila.

-Pues no, te vuelves a equivocar porque tú tienes que ver mucho en mi vida ya que mi vida eres tú. Sé que me comporte fatal cuando me contaste lo que paso entre Esther y tu pero en realidad todavía nuestra relación no estaba consolidada así que tampoco tendría que verme cogido tan gran cabreo. He hecho muchas tonterías en la vida pero creo que ya es hora de que deje abrir mi corazón y me gustaría que fuera contigo, claro está si tú también me perdonas.

Mi corazón acababa de dar un vuelco, parecía que la suerte volvía a sonreírme y debía aprovecharla.

-Te quiero Laura y eres lo más importante que me ha pasado en la vida se que en estos meses nuestra vida ha sido a base de locura pero me alegro de verla vivido a tu lado.

-Yo también te quiero Marta, y eres la mujer más fascinante que he conocido en mi vida y quiero compartirla junto a ti.

Se acerco hacia mí y me beso de tal manera que esperaba que ese beso fuera eterno y no separarme de ella jamás, la verdad que no sabía cómo iba a ser mi vida a partir de ahora pero lo que si sabía es que iba a ser con la persona que más amaba en la vida. Y sobre todo como dice el refrán:

“disfruta del momento, antes de que sea tarde”