En el instituto 2.

( Lo siento si esta continuación de el primer relato no es muy larga.. )

Estuve todo el fin de semana pensando en él, pero no pensando en él en plan de quererlo ni de comerle el culo todos los días, si no pensando en él porque no me dejaba en paz desde que le conocí.

El lunes transcurrió como cualquier día de instituto desde que le conocí. En los dos recreos le ví, y como era de esperar, insulto e insultos, y pensé: de no verle nunca ahora a verlo siempre.

Así pasaron todos los días hasta el viernes. El viernes no le ví, en las dos materias que tocaban después del primer recreo estuve pensando en el, que le podría haber pasado y cosas así.

Tocó la sirena para bajar al segundo recreo, y como siempre, me compré un chupa-chups y una manzana, me fui a las escaleras con mi amiga a hablar de cosas, hasta que se acabó el recreo. Subí las escaleras, y me dirigí a mi clase, antes de entrar en ella, por el camino, le vi, ¿y adivinais qué?... ME CAí, creo que fue porque comía mucha manzana o de los nervios que tenía. Sus amigos, que estaban con él, se empezaron a reír, y él me guiñó un ojo, me puse rojo y esperé a que se fuesen para que se me quitasen los nervios, levantarme bien y no volverme a caer.

Entré en clase y empezamos a dar inglés, y después de media hora le pregunté a la profesora:

• I can go to the bathroom to drink, please?

• Yes.- me dijo la profesora.

Salí de clase para ir al baño, por el camino no me encontré a nadie.. Entré en el baño y cerré la puerta. No escuché nada, a si que dudé de que hubiese alguien. Le dí al botón del grifo para que saliese agua y poder beber, me agaché y puse mi boca en el grifo, empecé a beber, noté algo en mi culo, como si me estuviesen follando vamos, me asusté y me incliné. En el espejo pude ver de que era él, me pusé blanco, me empezó a doler la barriga, mis labios y mis mejillas se pusieron rojas, y me quedé quieto con la boca abierta que de ella caían gotas de agua, y con la boca abierta. Él seguía moviendo las caderas para alante y para atrás, noté que la tenía dura. Me abrazó con sus enormes brazos y me dijo así haciendo parar de mover sus caderas:

• ¿No vas a decir nada?-. me lo dijo en susurro al oído, muy delicadamente.

No le dije nada, estaba como en shock.

Puso una mano debajo de mi mentón, subiéndola poco a poco hasta llegar a mis labios, que paso por ellos pasó la llema de sus dedos así haciendo parar que cayesen gotas de agua, me cerro la boca y me volvió a abrazar:

• A si que no vas a decir nada, eh. Aún no se tu nombre, ¿como te llamas? yo Dani.

• David..- se lo dije mirándole en el espejo y vi de que él me miraba mis mejillas rosadas.

El corazón me latía a mil, y en ese momento me vino a la mente la profesora de apoyo, la transexual; ten cuidado David, enserio.

Aún me seguía abrazando, cada vez mas fuerte, de repente me cogió por los hombros, me giró y me sentó en la encimera de los "lava-manos". Me miró a los ojos y me dió un morreo en toda regla, metía la lengua como si.. como si.. PUAJ! Como si le fuera la vida en ello, yo me aparté de él y le pegué una ostia en su perfil izquierdo, salté de la encimera para irme corriendo a clase, porque yo no quería que me jodiera la vida por lo que me dijo la profesora de apoyo.

Me lenvanté para salir corriendo y él me cogió se los pelos y me llevo hasta un W.C. cerrado, como si fuese una cabina, me empujó y me metió dentro con él. Cerró la puerta con cerrojo y me empujó contra la pared aplastándome:

• Como me vuelvas a pegar te violo aqui mismo-. me lo dijo jadeando, creo que de la ravia que tenia, no le molaría que un niño de 13 años le pegara.

• Sientate.. ¡sientate!

Bajé la tapa del bater y me senté en ella.

• Ahora me la vas a chupar, como haces con los chupa-chups que te compras en cada recreo, maricón de mierda.

Yo no se la queria chupar, no quería destrozar mi vida tal y como dijo Pepa, la de apoyo.

Miré al suelo como si no le escuchase, ese día Dani llevaba un pantalón vaquero corto, por encima de las rodillas, unas Mustang grises, una camiseta blanca con el logo de Vans y una camisa abierta de cuadros azul, guapísimo. Le podía ver esas piernas gruesas y con pelo.

• Mirame.

Le miré, fui recorriendo su cuerpo con la mirada; los pies, las piernas, su.. su.. ENORME PAQUETE, su torso y su bella cara.

• Qué...-. se lo dije atemorizado, todo lo que decia yo, lo decia en susurro.

El me sonrió y se mordió el labio inferior. Con todas las prisas del mundo se bajó la bragreta y me dijo:

• Encargate tu del resto.

Y pensé: ¿QUÉ?... ¿Qué me encargue yo del resto? Danielcillo, yo no te voy a sacar la polla, y si no te la voy a tocar, te la voy a chupar?

Entonces como no quería hacer el resto me quede quieto sin hacer nada bajando la cabeza. Como el veía de que no hacia nada cogió mi mano y la posó en su paquete.

Me quedé sorprendido, y cuando lo hizo le miré muy rápidamente a los ojos, y el me sonrió:

• Haz lo, venga, no te cortes. Si no lo haces ahora, te amargaré toda la vida con insultos y peleas.

Él aun sujetaba mi mano en su paquete, agaché la cabeza y dije:

• Buffff......- él, al escucharme hechó una risilla.

• Jejeje.

Entonces yo no tuve que hacer otra cosa que hacerlo... ¡No me quedaba otra! No podia salir de allí: tenía mi mano en su paquete, él estaba delante de la puerta para que no saliese, nadie entraba al baño para pedir socorro, y la entrada del baño estaba cerrada..

• Vale, lo haré.

• ¿Qué? no te escuchó, jajaja.

• ¡Qué lo haré!-. En mi vida había chupado un pene.

• David, piensa que es uno de esos chupa-chups que siempre te tomas, jajaja-. Creo de que él estaba más nervioso que yo, porque cada cosa que decía él, se reía él..

Me propuse metiendo primero mi mano por la bragueta, lentamente, le volví a mirar a la cara, sus ojos estaban cerrados y lamiendose los labios.

Empecé metiendo los dedos, poco a poco, y si, si que me daba asco.

• Diooo-oo-ooos.....-. dije tartamudeando. ¡La había tocado! Estaba dura, super dura, notaba que el ardor que tenía, latia y latia. Pensé que tenia vida o algo, que tenia ojos y boca...

Pensé: Ba, venga, da igual, me lanzo.

Metí la mano entera dentro de su pantalón, y poco a poco bajaba el boxer. La tenía en mis manos, me dispuse a sacarla, por fin el perro alemán que estaba dentro de su pantalón había salido.

Era larga, unos 19cm, era gruesa, pero no tanto, tendria alguna que otra vena.

Tenia mucho pelo púbico, le hacia mas masculino.

Cerré los ojos y le di una lametada por todo el tronco. Le retiré el prepucio, el capullo era rosado-lila, la puntita era roja, era preciosa..

Cerré los ojos y pensé que era uno de mis chupa-chups de sabor a fresar y me lo metí todo en la boca, empecé a chupar y a lamer. No sabia igual que uno de los chupa-chups, sabia a... a macho, a orina, semen y sudor.

Dani soltaba grititos de placer.. Seguí chupando y chupando, Dani me cogió de la cabeza y me metió todo su pene en mi boca, creía que iba a bomitar, y mis instintos, ¿sabes lo que hicieron?... No os lo imaginas... ¡¡Le mordí la polla!!

-¡¡¡¡ AAAAAAAAAAAAAAAAAAAH !!!! ¡¡HIJO DE PUTA!!-. me gritó Dani

Yo me asusté un monton, me saqué la polla de la boca, estaba sangrando, Dani se apartó de la puerta, se apoyó en la pared encogiendose y llorando como llora un hombre.

Me levanté corriendo, quité el cerrojo, abrí la puerta y salí corriendo hacia mi clase.

No pensaba lo que me esperaba en fin de semana.

Continuara..