En el cumpleaños de Miley Cyrus

De como un invitado se aprovecha de Miley el día de su cumpleaños, y de como ella disfruta de ello.

He de reconocer que al principio no pensaba ir a la fiesta que se organizó en Tennessee, ya que, la mayor parte de los invitados serían mucho más jóvenes que yo.

Fue entonces cuando recibí una invitación grabada para asistir por un viejo amigo de la familia; y ya que hacía cinco años que no les veía decidí ir, además llevaba demasiado tiempo encerrado en Kansas. Cogí mi maleta y me fui.

Llegué poco después; muy cansado, así que decidí buscar mi habitación y dormir un poco, me hacía falta.

-          ¿Tom?

Era una voz muy sensual de una jovencita, me resultó muy familiar. Tanto, que no tarde en darme cuenta de que se trataba de Miley!.

Llevaba unos vaqueros rotos….cortos, muy cortos  y una camiseta con un escote que dejaba muy poco a la imaginación; de hecho,  se podía ver perfectamente parte de su sujetador; vaya tetas que tiene…se me venía a la cabeza cuando ella todavía era una niña y el tiempo que pasaba encima de mí. Una parte de mi se imaginaba que pasaría si eso volviera a ocurrir ahora.

-          Vamos!, que haces ahí tirado? Emily acaba de llegar, no te apetece estar con nosotras?- Sonrió Miley

Salí lo más rápido que pude con lo puesto

-          ¿Dónde está Emily?- Pregunté extrañado…

-          Bueno, está…está de camino….aterrizará en dos horas. –Contestó tímidamente Miley

Me di cuenta de que se sentía un poco incomoda así que traté de cambiar de tema:

-          Eres tan diferente a la chica que recuerdo….

-          No soy  una  niña pequeña.- Replicaba Miley. Como crees que tengo ahora las tetas?

No me dio tiempo a contestar, cuando de repente  levanto  su camiseta señalando sus senos. Como ya dije antes eran enormes, perfectos.

La verdad es que a penas era capaz de levantar la vista ante aquella imagen, era algo que no me podría llegar a imaginar antes de llegar aquí. Intenté tomarle el pelo:

-          Pues no se……¿con relleno?.- Dije con un poco de nerviosismo.

Quizás no se lo tomó como yo pensaba y su contestación, aunque bastante obvia fue algo cortante.

-          Es que a caso no eres capaz de verlo?- Contestó ella. - Sabes perfectamente lo que busco.

Me costó bastante reaccionar,  mientras meditaba sobre su respuesta; me di cuenta de que se estaba desnudando. Dejó sus pechos al descubierto, unos tiesos y rozados pezones que me iban a llevar a la locura. Se bajó los vaqueros quedándose en tanga, un tanga de hilo azul a juego con su desaparecido sujetador. Su tanga a penas cubría y se podía avistar su coño completamente libre de vello.

Eso es algo que me encanta, me vuelve loco; era una imagen que no podía tardar en calentarme, a más no poder.

Aunque la verdad me costó bastante reaccionar, de hecho fue ella la que se acercó….me desabrochó los pantalones y mi polla salió como un resorte y la golpeo en la cara. No pareció desagradarle y rápidamente comenzó a chupármela.

Me empezó a pajear mientras me comía los huevos,  mirándome a los ojos con una cara de zorra que me ponía a mil, no pensaba que le cabría casi entera; pues 19cm no son poca cosa, volvió a mirarme y comenzó a engullirla desesperada

-          ¡Dios!, Miley!; quiero que te la tragues entera!

Empuje su cabeza contra mi polla!, lo más fuerte que pude….a medida que la apretaba, Miley jadeaba, le costaba respirar, pero a mí me daba igual, el placer que me hacía sentir era indescriptible.

De vez en cuando Miley intentaba apartarse, aunque yo intentaba impedírselo y se la clavaba hasta el fondo, ella no podía evitar las arcadas; estaba a punto de vomitarse encima, así que le deje que se apartase. Tenía lágrimas en la cara y un montón de babas y jugos gástricos por la cara.

La empuje contra el suelo y deslicé mi mano en su tanga y un dedo en su coño tremendamente húmedo. Comenzó a gemir, y con mi otra mano jugaba con sus senos.  Su coño ardía y no dude en romperle el tanga y meterle casi todo el puño  dentro, ella se movía adelante y atrás haciendo mucho más fácil los movimientos….Notaba como sus jugos se deslizaban sobre mis nudillos y estaba al borde del orgasmo.

Finalmente no aguantó más y explotó en un tremendo orgasmo, sacudiendo su cuerpo como si estuviese siendo electrocutada. No le di tiempo a que se descolocara y sin dudarlo dirigí mi polla a su coño abierto

-          ¿La quieres dentro?.- Le dije.

Ella solo pudo jadear, la imagen; su mirada ausente con lágrimas todavía en sus ojos, su maquillaje estaba corrido y su cara seguía con manchas de jugos y completamente babada. Esa imagen de ella sumisa me encendía aún más

No lo dudé y de un golpe se la metí. Estaba tan abierta de antes, que entraba con una facilidad  abismal, estaba empapada y temblando

-          Fóllame Tom!- Tartamudeaba Miley.

La embestía con fuerza mientras ella jadeaba, en ocasiones hasta le costaba gemir; lo estaba pasando en grande….ella y por supuesto yo;  ella pedía más así que a mi solo me quedaba embestirla con más fuerza, me dejé llevar un poco y le metí dos dedos por el culo. Ella saltó, pero no se quejó, así que seguí, y le metí cuatro…Miley soltó un gran gemido, se venía otro gran orgasmo.

Quité mi polla, escupí a ese dulce culo todavía virgen y comencé a empujar y ella a gritar. Estaba muy cerrado, pero le daba igual, quería sentirme dentro y yo no la iba a decepcionar.  Conseguí meter la puntita, me relaje jugando con sus pezones durísimos, cogí aire y se la clavé hasta el fondo. Entró entera, mis 19 cm moviéndose dentro de ese culo prieto. Me estaba follando a Miley Cyrus como jamás había imaginado.

Me vino a la cabeza un video de squirting que había visto en internet, así que mientras le rompía el culo lo puse en práctica….Ella ya estaba muy mojada, y eso me facilitó un poco el trabajo. Metí dos dedos en su coño y comencé a estimularla, sus tímidos gemidos se transformaron en tremendos gritos y poco después se corrió y ¡de que  manera!, parecía que estaba meandose encima, era algo muy excitante; todo su flujo repartido entre mi cuerpo y el suyo escurriéndose por sus muslos, por su abdomen…..ya no podía más

Retiré la polla de su culo, un hilillo de sangre se deslizaba de él. Le había roto el culo a Miley!

La puse de rodillas y la acerqué a mi polla, pero no reaccionaba; la golpee en la frente varias veces con la polla y tímidamente abrió la boca. Estaba tan caliente que no lo dude, le abrí la boca con mis manos, le escupí en la boca; a ella le entraron arcadas y en ese momento le metí toda la polla hasta la garganta. Comenzó a toser y a jadear, mucho más que antes,  saliva y jugos transparentes le caían de la boca y se deslizaban por la barbilla hacia sus tetas.

Empecé a follarle la boca sin piedad, metiéndosela hasta el fondo, ella se intentaba sacar para respirar, pero de lo salido que estaba no la dejé hasta que me corrí a más no poder, ella tampoco aguantó el ritmo y se vomito encima poniéndose perdida y cayéndose al suelo sin fuerzas.

Fue algo increíble; después de tanto esfuerzo me entraron ganas de mear….nunca lo había hecho y no creo que Miley se fuera a quejar después de todo lo que le había hecho. Apunté a su cara y comencé a mearle encima, me concentré en su boca; ella la abrió un poco, enseguida volvieron a entrarle arcadas y a convulsionarse.

Seguí regando ese cuerpo escultural de arriba abajo, y cuando acabé me fui, volví a la habitación dejando a Miley tirada en el campo practicamente sin poder moverse, no se lo qué pensaría ella cuando consiguió levantarse, pero yo.....yo espero repetir.