En el confesionario
El Obispo toma confesión a las religiosas.
En un convento hay gran revuelo porque al ser el día de la Santa Patrona, vendría el obispo a oficiar la misa.
Tras la llegada de Su Eminencia, y siendo recibido por la Madre Superiora y el Cura Parroco, solicita pasar a la capilla, donde se dirige al confesionario para que las religiosas cumplan el Sacramento de la Reconciliación antes de la celebración de la misa.
En la fila había 4 monjas, la primera de ellas se arrodilla y repite la fórmula de rigor "Ave María purísima!" "Sin pecado concebida, responde el clérigo, dime hija cuales son tus pecados?
Padre, yo confieso que he pecado...
Yo...
Yo... la monja no juntaba valor para decirlo...
Abre tu corazón al Sr hija!
YO MIRE EL MIEMBRO VIRIL DE UN HOMBRE PADRE... ESE ES MI PECADO
Ay hija, débil es la carne... débil es la carne que nos hace caer en tentación!
Pero fuerte el amor de Dios para perdonar!!
Reza un AVE MARIA, un PADRENUESTRO, ve a la pila bautismal y lava tus ojos con agua Bendita!! Tus pecados te son perdonados... ve con Dios!
La monjita agradece y cumple con la penitencia.
La segunda monja se arrodilla y tambien exclama "Ave María purísima!" "Sin pecado concebida, responde el clérigo, dime hija cuales son tus pecados?
Padre... yo ....
Yo confieso...
Ten fe hija y revela tu corazón al Sr...
Padre, mi pecado es que toque el miembro viril de un hombre!Ay hija, débil es la carne... débil es la carne que nos hace caer en tentación!
Pero fuerte el amor de Dios para perdonar!!
Reza un AVE MARIA, un PADRENUESTRO, ve a la pila bautismal y lava tus manos con agua Bendita!! Tus pecados te son perdonados... ve con Dios!
La monjita agradece y cumple con la penitencia.
La tercer religiosa que estaba en la fila se acerca para arrodillarse, cuando de imprevisto, la cuarta monja la toma por la espalda del hábito, la tira hacia atrás, la empuja sacándola del medio y casi "salta" al confesionario mientras recita el AVE MARIA PURISIMA!!
El prelado asombrado y extrañado por ese comportamiento, le dice a la religiosa: Hija, no entiendo tanto apuro!! Dios siempre tiene tiempo para quienes se acercan en busca de su perdón!
Y la monja lo mira y con una media sonrisa le replica...
Si, monseñor, es cierto.... pero yo no voy a hacer gárgaras con el agua Bendita, después que ella se lave el culo!