En el bosque [3]
Nuestra última escapada, esta vez mucho mas tranquila.
Adri y yo continuabamos haciendo nuestras cosas cada vez que nos veiamos, aun que el verano se acababa y con el, nuestro gran tiempo libre. En una de esas tardes, la ultima nos despedimos por todo lo alto.
Habia venido a verme a mi pueblo y nos fuimos a dar un paseo solos hasta llegar a una zona muy tranquila, sin carreteras, sin coches, sin gente... solo el murmullo del agua del rio corriendo. Empezo a besarme, con desespero y consiguió arrinconarme contra un arbol, empezo por mis pechos, acariciandolos con suavidad y maña, besandolos de vez en cuando y fue bajando la mano hasta llegar a mi coño y lo acaricio con firmeza, apretandome un poco toda la zona, mientras me besaba el cuello a la par. En ese momento decidimos tumbarnos en la hierba, al estar alta nos cubriria y nadie podría descubrirnos.
Nada mas tumbarnos le agarre el pene por encima del pantalon.
-¿De quien es este paquetote?- Le pregunte con una mirada pícara
Adri se limito a mirarme y a sonreir para despues empezar a besarme el cuello mientras yo sacaba al exterior esa maravillosa polla y empece a hacerle una paja mientras le mordia el lóbulo de la oreja. Empezo a respirar agitadamente y a gemir, me apretaba con mas fuerza las tetas.
-Para, para, para- Se empezo a poner nervioso, al fin y al cabo nunca nos habiamos corrido uno delante del otro aun que nos faltara poco.
Pare y nos miramos, el empezo a quitarme los pantalones y me empezo a masturbar, mientras me lamia los pezones, los chupaba y mordia con sensualidad, yo cada vez estaba mas excitada y empece a gemir, cada vez mas hasta que al final, empece a convulsionar, me arquee y en un gran grito de placer me quede inmovil por unos instantes, analizando lo que acababa de pasar.
Tras esto, supe que tenia que compensar a Adri asi que me abalance sobre su polla y empece a lamerla, primero la punta, luego el glande y terminando en los huevos, grandes como su miembro. Me la meti en la boca intentando chuparla hasta el fondo, aun con arcadas mientras el gemia sin contros y me sugetaba la cabeza con delicadeza.
-D-Dios, eres genial Al-dara- Dijo entre gemidos.
Yo me limite a mirarle con la ferocidad del leon al observar a su presa una vez la tiene enttre las zarpas pero sin que haya muerto.
Iba a correrse en cualquier momento asi que me separo la cabeza y empezo a marturbarse el, en cuestión de segundos tres enormes chorros de semen salieron disparados a las hierbas.
-Mira lo que has echo- Me dijo con cierta picardia
-Aun encima diras que no te gusto... Pues lo disimulabas bien eh
-Mira que eres putita eh
-No te lo imaginas.
Tras esto nos quedamos abrazados un rato en silencio. Tampoco teniamos nada que decir.
Al irse me dio un beso sueva en los labios, cargado de sentimiento. FFue como si algo entre nosotros nos avisara de que se habia acabado, antes de que pasase.
Y asi fue, esa misma noche discutimos y se acabo todo, para siempre.
(Siento haber tardado tanto en subir el capitulo pero he tenido el ordenador estropeado. Con este capitulo finaliza este relato, espero que os haya gustado y muchas gracias por seguirlo desde el principio y por todo el apoyo que me habeis dado, sois geniales.)