En el baño
Primera mamada en el baño
Me llamo jul tengo 18, tengo el cabello negro hasta las nalga, tengo poquitos senos pero bastante culo, me gusta practicar voleibol e ir al gym, tengo los ojos negros y soy de estatura mediana, para ese entonces no tenía novio, sin embargo siempre he sido mentalmente abierta.
Estábamos en clase de física, el profesor dando su tema mientras me encuentro copiando, un compañero (el de al lado) me dice vamos al baño, a que no te atreves, de seguro te da miedo, para demostrarle que no me daba miedo y que podía ir. Pedí permiso al profesor un señor panzón y pequeño para ir al baño, bajo las escalera rápidamente, en el último primer piso hay 2 baños, uno que está por la cancha y el otro está retira, el baño viejo, allá se ha encontrado fetos, pastillas, marihuana en fin baño prohibido, apenas entro al baño me último espacio, ahí me quito los botones de mi jomper y me abro dos de la camisa de abajo dejándome con un brasier negro.
Cuando el llega y abre la puerta y me ve así, me sonríe y cierra la puerta.
Empieza a besarme por el cuello mientras sus manos van recorriendo mis brazos hasta llegar a mis senos, va bajando lentamente dándome besitos por todo el cuello hasta los senos me quita el jomper y se quita el cinturón, cabe aclarar que era virgen que aunque ya conocía todo lo teórico nunca lo había puesto en práctica, así que el me guiaba.
Se bajó el pantalón y sacó su pene totalmente erecto grande y grueso, rápidamente empecé a tocarlo por curiosidad y miro me gusto como se sentía esa babita, mientras el me chupaba los senos me sentía en la gloria nunca había sentido eso, una de sus manos baja hasta mi rodilla y ahí empieza a subir metiéndose por la falda del uniforme, abro las piernas para darle más acceso, cuela enseguida dos dedos a mi interior ya que no tengo short solo la tanga.
Empieza a darle toques a mi botoncito, lo que provoca quegoma plácidamente me agacho delante de el y saco mi lengua y la paso por la cabeza de su pena, no me gustó su salibita, pero eso no me importó me la metí en la boca y el empezó a marcar el ritmo, aunque era la primera vez que lo hacía no tuve ningún error, sentía que cada vez se le hinchaba más y me era difícil meterla toda en mi boquita, por lo que con una de mis manos le masturbaba la parte que faltaba y con la otra me tocaba los senos, el me tenía del cabello marcando el ritmo unos minutos después siento que me jala más duro y ya no se mueve con tabta bestialidad sin darme aviso de que pasaría se corrió en mi me tome toda su lechita como premio.
Ese día aprendí mucho