En cómo me convertí en ninfómana 2

PARTE DE 2

Después de esa noche me pase todo el domingo pensando en lo que había sucedido y arrepintiéndome de ello, pero en el fondo me encanto y deseaba volver a ver a mi vecino, me tenía intranquila tenía una sensación que no me sucedía desde que era muy joven.

Además me decía para mí, si mi marido me ha puesto varias veces los cuernos y tiene alguna con quien desfogarse, porque lo mío está mal y no puedo hacerlo, con la salvedad que lo mío  ha sido solo una vez y no se va a volver a suceder.

Esto último en el fondo quería que fuese verdad pero también quería volver a sentirme deseada.

Con estos pensamientos llego el lunes y me levante con la ideo de olvidar todo lo sucedido y fue así hasta que llegue a casa y me encontré que salía Carlos mi vecino, no sabía qué hacer si volverme, tirarme sobre el o saludar como si no hubiese sucedido, decidí esto último pero deseando que él se parase junto a mí.

Pero lo que sucedió fue un triste y frio hola lo que me dijo, me sentí frustrada usada y fracasada como mujer, con lo que me hizo disfrutar ahora esta frialdad.

Al llegar a casa y desnudarme me vi en el espejo y comprendí que podía ser culpa mía que ya no era una jovencita y me había descuidad, mis pechos estaban algo caídos, pero sobre todo me sobresalía una barriga, mis piernas se veían flojas y un monte de pelos desordenados.

Me puse manos a la obra, cogí una dieta que tenía por casa que había funcionado con una familiar y llevaba años intentando empezar, deje las llaves del coche y Salí hacer la compra andando y al salir a la calle me encontré un folleto de una oferta de depilación láser y llame para hacérmelo.

Este crio iba a saber lo que se había perdido con ese desprecio, pero a la vez deseaba que me hiciese caso, por suerte hubo mucho jaleo en el trabajo y eso me soluciono los días pero no las noches según cerraba los ojos recordaba la dura polla de mi vecino como me follaba en el asiento de su coche y me encadenaba una serie de orgasmos en mi sin que yo me pudiese mover, hasta que sentí su corrida dentro de mí.

Así hasta que llego la noche del viernes que ya no soñé con mi vecino, me levante radiante feliz, volvía tener el control de mi vida, además la dieta que había empezado había empezado hacer efecto y había perdido casi dos kilos.

Todo era tan perfecto que desperté a mi marido haciéndolo una mamada muy despacio recorriendo su polla con mi lengua desde la parte de debajo de los huevos hasta la punta de su capullo que sabía un poco salado pero muy rico, incluso no me importo que se había arreglo los pelos de sus huevos y sabía que no era para mí, se la meneaba un poco con mi mano y me la metía entera en mi boca, me la sacaba y volvía a menearla mientras le chupaba sus huevos y me acercaba a su ano con la lengua, veía como se estremecía de placer, y volvía a metérmela en la boca para frenar el ritmo estaba que ardía, intento levantarme un par de veces para hacerme disfrutar a mí y le dije que me dejase que más tarde esta radiante incluso le empecé a meter un dedo por el culo que tanto le gusta, fue tanto el placer que le di que se corrió como un niño incluso le di un beso en el capullo después de haberse corrido. El intento darme placer y le dije que esta noche mejor.

Me vestí y Salí hacer unas compras como un sábado normal, en esto que voy abrir la puerta del portal y me agarran desde atrás apretándome con una mano un pecho de una forma fuerte incluso haciéndome un poco de daño pero muy placentera y con la otra mano en mi entrepierna frotándomela de arriba a bajo

Intento girarme para ver quién es y gritar y en ese giro me planta un beso en mis labios introduciendo su lengua en mi boca, no me hace falta verle para saber que es mi vecino con su sabor es suficiente, nuestras lenguas se van fundiendo en un fuerte abrazo y una lucha por dominar la boca del otro, en eso su mano se va haciendo un hueco entre mis pantalones y me va acariciando mi coño que esta todo mojado y va introduciendo un dedo en mí y con el reto de la mano va frotando mi clítoris a la vez que con la otra mano apriete y estruja de forma fuerte mi pecho, yo me siento caer se me escapan los gemidos , y me hace mirar la gente que pasa por la calle y que si uno mira hacia dentro puede ver cómo me mete mano.

El sigue despacio pero con poder masturbándome y a la vez me dice al oído, que si por las noches pienso en él, le contesto entre gemidos que sí, y luego dice que el viernes quedamos a las 11 de la noche en este mismo que vas a volver a ser mía, a la vez que su mano acelera el ritmo dentro de mí y la otra mano me aprieta fuertemente esa mezcla de dolor y placer hacen que me corra de tal forma que no puedo sujetarme lo que provoca que me caiga de rodillas cuando me suelta.

Desde el suelo veo cómo se va para su casa y me dice hasta el viernes.

Después de 5 minutos en el suelo me recompongo y me voy hacer la compra toda nerviosa y así paso todo el día hasta llegar la noche mi marido intenta compensarme lo de esta mañana y le digo que no tengo ganas, ya que mi cabeza solo puede pensar en mi vecino.

Así paso toda la semana solo pensando en él,  incluso en el trabajo se han dado cuenta que me pasa lago ya que me arreglo más me maquillo, mi compañero no aparta los ojos de mí, y pienso como sería hacerlo con él en los servicios.

El miércoles por la tarde salgo de compras a pensando en que ponerme el viernes ya que toda mi ropa interior me parecía de anciana, me voy a tienda de lencería a comprar unos pares de medias algún sujetador de encaje y unos braguitas que con trasparencias que me hagan sentir sexy y un liguero que no tenía.

En cuanto llego a casa necesito masturbarme de la excitación que me produce que mi vecino me vea con ese conjunto.

Por fin llega el viernes y me preparo para salir, me siento un poco culpable por mi marido porque le quiero pero deseo a mi vecino, además me dio una alegría cuando le dije que tenía cena, rápidamente me dijo que saldría a tomar algo con los del futbol es decir iba a ver a su amiga.

Llego la hora estoy nerviosas como una colegiala, me miro en el espejo llevo una blusas blanca con botones, y una falda por encima de las rodillas, el régimen se me empieza a notar san 5 kilos perdidos me encuentro guapa y con ganas de disfrutar.

Pero al salir de casa mi primera sorpresa mi vecino no está solo esta con varios amigos,  su primo el gordito y otro parecido a él.

El plan es sencillo es irnos a casa de uno de ellos a tomas unas copas, yo le reprocho que pensamos a mi vecino que creí que íbamos a estar a solas, y me contesta que es lo que hay si quiero voy con ellos y si no a casa que hay muchas con las que follar, hay creo que empezó mi perdición ya que me calle y me fui con él.

Llegamos a casa de su amigo Fran, y nos pusimos unas copas y unos videos musicales en la tele, no si el efecto de las copas, de las caricias o de los suaves piquitos que me estaba dando Carlos o simplemente que estaba más relajada que  me empezaba a encontrar mus a gusto y me empezaba a dejarme llevar.

Ya simplemente los picos se estaban convirtiendo en auténticos morreos y las caricias en algo más, me había desabrochado varios botones de la blusa y estaba jugando con mis pezones dejando a la vista gran parte de mis pechos lo que no perdían oportunidad sus amigos para mirar.

Le propongo irnos algún sitio más apartado mi lleva a una habitación con una cama muy grande, yo rápidamente me giro sobre el mi lanzo a besarle y a comerle los labios intentando quitarle los pantalones, en cuanto se le desabrocho me agacho para sacarle lloque tanto quería su polla y según sale me la meto entera en la boca, no me importa que no me de placer el a mí solo quiero hacerle disfrutar y tener esa polla para mi

Me recreo en chupársela de arriba abajo en saborear cada rico de ella en eso que me levanta y nos empezamos a quitar la ropa que nos falta, me tumba en la cama y siento como va lamiendo mis pies y con la lengua va subiendo por mis pantorrillas, parándose en el interior de mis muslos hasta que siento como me pega un mordisco en mi clítoris, lo que me hace gritar tanto de dolor como de placer. Siento como me come con su lengua todo mi coño, haciéndome gritar de placer y suplicándome que me folle.

Cuando se incorpora para follarme noto un par de manos tocándome mis pechos, es Fran su amigo que está desnudo junto a mí, le miro y veo que es muy atractivo con una polla no tan grande como la de Carlos  pero si gorda y un poco torcida, cuando voy a decir algo Carlos me introduce su polla en mi coño y le oigo déjate llevar, lo que aprovecha su amigo que me ve con la boca abierta para meterme su polla en mi boca

Me siento rara engañada pero a la vez satisfecha que dos chicos jóvenes para mí, pienso en el trio que me lleva proponiendo mi marido años que le estoy haciendo sin él.

Carlos sigue follándome duro haciéndome encadenar un orgasmo tras otro mientras yo chupo la polla de su amigo que cada vez que Carlos me da un empujón me entra la polla y casi los huevos en mi boca, tanto es así que no Fran no aguanta más que se corre en mi boca, lo cual me pilla desprevenida lo que hace tragarme parte de ello

Cuando se retira veo al gordito allí también desnudo que rápidamente ocupa el puesto de Fran intento cerrar la boca entonces Carlos me aprieta un pezón y de dolor la abro lo cual aprovecha para meterla, la verdad que la tiene como Fran pero dura muy poquito. Cuando termina espero a su primo para que se la chupe pero no está.

Me   alegro d ello y me concentro en el nuevo orgasmo que me viene gracias a las acometidas de Carlos, cuando en medio del orgasmo Carlos se aparta y dice primo es tu turno, Carlos va dejar que su primo me folle, cuando le miro lo que veo realmente me asusta no tiene una polla tiene una cosa enorme gordísima, realmente chille de miedo y volví a chillar cuando de un golpe me medio la mitad, pero ahí fue de dolor, luego me entere que le media 28 cm de larga, y no paro de follarme hasta que me metió casi entera, sentía como me abría, pero cuando me fui acostumbrando el placer volvió a surgir, agarre la polla de Carlos y la emplea chupar sabia deliciosa parte de sus jugos y de los míos así estuve como veinte montuosa que los dos se corrieron uno en mi coño y otro en mi boca lo cual me traje todo con placer por primera vez en mi vida

Y a su primo intente recompensarle limpiándole la polla con la boca pero me fue imposible metérmela en la boca.

Parecía mentira después de toda la vida con mi marido y solo había estado con él esa noche lo hice con 4, porque Fran y el gordito cuando termine con el primo de Carlo me follaron entre los dos turnándose quien me follaba y a quien le chupaba.

Para terminar la noche cuando sus amigos se durmieron le hice sentar a Carlos en el sofá, me puse entre sus piernas y empecé hacer una cosa que a mi marido le encanta pero me da un poco de asco hacerlo, que es empezar a chupar los huevos y el ano a Carlos, metiendo mi lengua en su culo, lo que hizo que la polla de Carlo se pusiese a mil, me introducía un huevo en mi boca luego el otro bajaba mi lengua por todo el escroto hasta el culo y otra vez hasta arribo y mientras con una mano le masturbaba y con la otra le metía un dedo e culo.

Cuando le veo que esta temblado me incorporo y meto su polla entre mis pechos les aprieto con manos y empiezo a subirlos y bajarlos con su polla en medio de ver cuando paro y le doy una chupadita en su capullo, hasta que en una de esas se corre encima de mis pechos y algo en mi cara

Lo que me hace estremecerme a mi placer al sentir el suyo.

Fue una autentica noche de locura,  que termino  a las 6 de la mañana que no sabía cómo explicárselo a mi marido esas horas de llegada

Espero que este segundo relato os haya gustado y este mejor redactado que el primero, si os gusta seguiré con las aventuras de mi mujer