En bolas en la terraza (1): David

Me hago muy buen colega de uno de los monitores del gym al que voy, y acaba invitándome a su casa a tomar el sol en su terraza junto con uno de sus compis de piso...y poco a poco me doy cuenta de que los dos tienen de todo menos vergüenza.

“¿Cuándo entenderás de una vez que ser normal no es necesariamente una virtud, si no más bien una falta de valor?”

Estamos en el año 2015, lo cuál significa que yo tenía 28 añitos. Por aquél entonces, mi aspecto físico era bastante similar al de ahora, con mis piercings y tatus, y ya llevaba 4 años corriendo y haciendo bici muy a menudo, por lo que mis piernas y culo eran ya muy admiradas por muchos tíos (y supongo que alguna que otra tía, aunque yo no me diera cuenta :P).

Por otro lado, llevaba ya 4 años apuntado al mismo gym al que sigo yendo actualmente, y desde que empecé hasta el momento en que nos situamos, mi cuerpo había ido cambiando de forma llamativa: Mis pectorales eran ya bastante grandes y marcados, mis brazos habían crecido mucho en masa muscular y mi piel blanca contribuí a que mis músculos parecieran aún más marcados, y mis espaldas se habían desarrollado bastante a fuerza de practicar las dominadas con mucha constancia, por lo que cada vez lucía con más orgullo mis camisetas de tirantes ajustaditas.

El describiros cómo mi cuerpo se había ido desarrollando no es sólo una cuestión de presumir, si no que me sirve para introduciros cómo empecé a entablar una relación de colegueo con uno de los monitores del gimnasio al que voy. Yo, obviamente, le había fichado en varias ocasiones, pues era un chico bastante atractivo: Medía en torno a 1,80, con el pelo negro y los ojos verdosos, similares a los míos, bastante moreno y con el cuerpo rasurado, y por lo general siempre sonriente y muy agradable con todos los que acudíamos al gym. No llevaba ropa que le marcara especialmente el cuerpo, pero se intuía que estaba bastante fuerte y fibrado, cosa normal teniendo en cuenta su trabajo.

Por lo general, él y yo no solíamos coincidir mucho, ya que yo solía ir por las tardes, y a esas horas, si él estaba, solía dar clases de spinning, entrenamiento funcional etc. y yo normalmente voy al gym para hacer mis rutinas en la sala de fitness. Pero cuándo ocasionalmente coincidíamos en la sala (bien porque yo fuera por la mañana o bien porque a él le tocara estar), siempre me saludaba con mucha cercanía. Más allá del típico “Hola tío” o “¿Qué pasa tío?”, solía darme alguna palmada en plan colega en el hombro, o poner la mano o el puño para que chocáramos. La verdad es que daba gusto ser recibido por él…

Cuándo llegó el verano asfixiante de Madrid, se dio mi primera conversación con él. En verano yo suelo acudir al gym con la ropa de deporte ya puesta, y me cambio al acabar, ya que suelo entrenar con camiseta deportiva de tirantes y pantalones cortos. Ese día en cuestión, hacía tanto calor, que entré en el gym sudando, y aunque me lavé bien la cara antes de ir a la sala de fitness, se me notaba congestionado por el calor.

Nada más entrar, me encontré con mi monitor favorito, que se acercó sonriente a saludarme y chocó el puño con el mío, pero esta vez fue más allá.

-Monitor: ¡Muy buenas tío! ¡Joder, ya vienes sudando y eso que ni has empezado a darle eh!

-Álex: Joder, ya te digo, es que no sabes el calor que hace en la calle…

-Monitor: Me hago una idea, no eres el primero que entra así jajaja. Por cierto, me llamo David, y aunque ya lo sabes, si me necesitas para lo que sea estoy aquí.

-Álex: Muchas gracias, David, yo soy Álex, y si, tranquilo, acudiré a ti si te necesito-“Joder, si tú supieras para lo que me gustaría acudir a ti” pensé para mí-

-David: Aunque no creo que te haga mucha falta. Hace ya tiempo que te he visto entrenar y déjame decirte que aunque te falte pulir técnica en algunas cosas, haces bastante bien los ejercicios, no haces el bestia, y le echas muchas ganas y constancia…de hecho es flipante el cambio físico que has pegado eh.

Gracias a que seguía congestionado por el calor, David no se percató (o eso pensé yo), de lo rojo que empecé a ponerme por momentos ante aquél comentario. Que un tío tan guapo se hubiera fijado específicamente en mí y en mi mejoría física, aunque fuera por simple curiosidad profesional, me hacía sentirme importante y a la vez avergonzado. Sí, aunque luego sea un chulito, la verdad es que también tengo muchas inseguridades, y siempre agradezco cuándo alguien resalta algo bueno de mí

-Álex: Joder, muchas gracias, tío, es un honor que el monitor te diga esas cosas jajaja. La verdad es que antes de empezar al gym ya llevaba unos años corriendo, he hecho incluso varias medias maratones, de ahí la resistencia física…

-David: Claro joder, ahora se entiende…eso y las pedazo piernas y glúteos que tienes eh, que esa parte casi todo el mundo se olvida de trabajarlo

Con eso último si tuve que agachar la cabeza disimuladamente porque mi nivel de rubor llegó a los límites…que ese pibón alabara mi esfuerzo físico era una cosa, pero que se hubiera fijado deliberadamente en mis piernas y culo me estaba a punto de llevar a tener pensamientos que no era el momento de tener…

-David: Jajajaja pero no te pongas rojo hombre, que es la verdad. Aquí hay mucho mazado que se machaca el tren superior y pasa de las piernas, lo cuál es una pena. Tú, en cambio, estás muy bien proporcionado. Sigue así tío, en serio. Y recuerda, aquí estoy…

-Álex: Claro que sí David…muchas gracias…voy a ponerme a ello.

No me molaba ponerme así de nervioso, pero si seguía hablando más rato con David temía acabar empalmándome…joder, por un momento cruzó por mi mente la idea de que mi culo le atrajera tanto que quisiera reventarlo en los vestuarios en ese momento…pero ¿Un poco tópico no?.

Así que empecé mi rutina del día, y la verdad es que una vez concentrado en ello, no me importó para nada que David se pasara de vez en cuándo a saludar e incluso ayudarme con algunos ejercicios en los que quería coger más peso. La verdad es que cuándo hago deporte desconecto mucho, y en ese momento volví a verle como a un colega, sin más.

Así fueron pasando los días, y durante una temporada, David y yo coincidíamos casi a diario, ya que estaba doblando turnos por vacaciones de compañeros suyos, así que a ratos estaba en la sala, y otros dando clase. La verdad es que, más allá de su físico y su sonrisa, era un chico encantador y se notaba que le flipaba su trabajo y en general el deporte, pues más de una vez le ví cambiado para clases de spinning y me fijé en que, cómo bien había supuesto, tenía un físico más que envidiable, fruto no sólo de su curro si no de su pasión por el deporte a nivel personal.

Un día en cuestión, me tocaba hacer rutina de piernas en el gym, y entre otros ejercicios, me planifiqué el hacer sentadillas con barra a la espalda sin demasiado peso. Era un ejercicio que a estas alturas ya tenía bastante dominado y no solía necesitar ayudar de nadie, pero inesperadamente me encontré con un voluntario.

-David: Anda, anda, no me seas flojo tío. Tu puedes ponerte más peso que eso, que esas piernas lo resisten de sobra

-Álex: Jajaja, no sé tío, me da un poco de palo por si me hago daño en el cuello o me caigo…que yo fuerza tendré pero lo que es equilibrio…

-David: ¿Y para qué estoy yo aquí eh? Anda, ponte más peso y yo te voy a ayudar a hacer una serie a máximas con él ¿Va?

No hubo más que hablar. Tras colocar una cantidad de peso mayor, sin llegar a la locura, David se posicionó detrás de mí y colocó sus manos en mi cintura, sin llegar a tocarme pero sí para darme la seguridad de que estaba ahí para sujetarme. Así, empecé a bajar y a sacar bien el culo hacia fuera

-David: Eso es…baja despacio y no te preocupes que estoy aquí por si no puedes subir bien…la clave es que luego subas rápido. Baja un poco más y saca un poco más el culo hombre que sé que puedes

Así lo hice, y al hacerlo…llegó la sorpresa. En realidad tenía que habérmelo esperado pero no lo hice, y obviamente al sacar más el culo, esté se topó con lo que noté que era el paquete de David. Para los que ya habéis leído mis relatos y sabéis de que palo voy en el sexo, podéis imaginaros que aquello me encendió y mucho…y si no fuera porque intentaba mantener la mente centrada en lo que hacía, creo que me habría empalmado como un burro en ese momento.

-David: Muy bien, ya te dije que podías, ahora sube lo más rápido que puedas y tranqui que yo te ayudo sujetando la barra

Así hice, y así repetimos varias sentadillas en las que cada vez que me ”sentaba” , notaba el paquetón de David contra mi culo. Él en ningún momento se inmutaba ni parecía incómodo por la situación, incluso en alguna ocasión se pegaba incluso más a mí (yo no veía ningún doble sentido a ese detalle, sólo entendía que quería ayudarme mejor), haciendo que finalmente mi polla si reaccionara y se pusiera casi a tope de empalme. Yo intenté centrarme única y exclusivamente en el ejercicio, para que mi erección bajara, ya que con el pantaloncito que llevaba sería muy difícil ocultarla una vez termináramos…y gracias a Dios lo conseguí.

Finalmente paramos, colocamos la barra en su sitio y David me felicitó

-David: ¡Muy bien campeón! Te dije que podrías, que no te vuelva yo a ver con poquito peso como antes eh nenaza-dijo guiñándome un ojo- que este culito hay que trabajarlo bien.

No esperaba para nada que culminara esa frase dándome una palmada en mi cachete derecho…la verdad es que tras lo ocurrido antes, ya no me sorprendía mucho y lo entendí sólo como un gesto de colegas.

-Álex: Muchas gracias por ayudarme David, no sólo hoy, si no todos los días que me ves en general.

-David: No hay de que joder, es mi trabajo. Y da gusto con gente que se lo toma tan en serio como tú. Estás echando un cuerpazo que cuando vayas a la piscina todas las pibitas se te deben quedar mirando.

Ante eso sólo me salió sonreír y pensar si debía limitarme a asentir o hace run comentario vacío siguiéndole el rollo, o bien dejarle un poco cortado con mi sinceridad…y cómo me suele pasar en casi todos los momentos de mi vida en que la gente da por hecho que soy hetero, opté por lo segundo.

-Álex: Bueno, las pibitas no sé si me mirarán o no, pero me importa más que se fijen los pibitos.

He de decir que he visto muchas reacciones distintas cuándo he sido tan claro con gente con la que no tengo tanta confianza: cara de sorpresa, quedarse cortados o sin palabras…pero la reacción de David era totalmente nueva, ya que se limitó a abrir los ojos mirándome fijamente, y sonrió todo lo que le daba de sí la boca.

-David: Bueno, entonces debería plantearme ir contigo a la piscina en vez de con mis compis de piso, que contigo seguro no tendré competencia jaja.

La verdad es que no pude más que reírme ante aquella salida. Siempre es agradable cuándo la gente toma las cosas con tanta naturalidad, seguro que todos me entendéis…

Los días fueron pasando, ya complicidad entre David y yo era cada vez mayor. No sólo me ayudaba en los ejercicios, y cada vez se pegaba más a mí, haciendo que mi cuerpo tuviera reacciones que no siempre podía controlar, si no que también empezamos a hablar mucho sobre nosotros mismos. Yo le conté mi vida, a lo que me dedicaba, que tenía 28 años, que era de Madrid y de ese barrio desde siempre etc. y él, por su parte, me contó que también tenía 28 años, que era de un pueblo de Barcelona y estudió su carrera en dicha ciudad, pero que desde hacía unos años se vino con uno de sus mejores a vivir a Madrid, dónde compartían piso en una zona céntrica con otro chico que se les unió tiempo después, y que se llevaban de puta madre los tres.

-David: La verdad es que da gusto convivir con Ángel y óscar, nos entendemos perfectamente, nos gustan las mismas cosas, hacemos mucha vida en común, salimos juntos de fiesta, si alguno liga nunca tenemos problema en que se traiga a la chica a casa…

-Álex: Eso es porque seguro que soléis pillar los tres ¿O me equivoco?

-David: Jajajaja, las pillas al vuelo ¿Eh? La verdad es que no nos falta éxito entre las chicas.

“Si tus dos compis se parecen mínimamente a ti, no me extraña”, pensé para mí

-David: Deberías venirte un día a nuestra terraza a tomar el sol tío, vivimos en un ático y es la mayor gozada que te puedas imaginar…estamos ahí a nuestra bola, sin que nadie nos moleste…

-Álex: Oye pues te voy a tomar la palabra eh…si tus compis están de acuerdo claro

-David: Por eso ni te preocupes, los colegas de cada uno son colegas de todos para nosotros. Y además, te va a venir muy bien ponerte al sol, que quitando el moreno de albañil ese que me llevas eres muy blanquito nen jajaja

-Álex: ¡Capullo! Jajaja, es que es cierto que no soy muy de ponerme al sol…cojo color por hacer deporte al aire libre pero poco más. Eso sí, ir con un colega ya es otra cosa

-David: Pues tío, apúntate mi número de teléfono y te aviso para la semana que viene, que pillaré unos días libres por las horas de más que he hecho estos días ¿Va?

-Álex: ¡Hecho David!-y así, apunté su número y le escribí un WhatsApp para que él tuviera el mío

Los días siguiente no paraba de fantasear con la idea de estar en bañador con aquél guaperas y poder admirarle entero…no había mañana que no me levantase palote (más que de costumbre) y cayera una buena paja pensando en él.

A esto hay que sumarle que, desde que nos dimos los teléfonos, nuestra relación se volvió más cercana y cada vez hablábamos más de nuestras cosas. David me contaba que desde niño le encantaba el deporte, y que decidió estudiar Educación Física, desde que era un adolescente. También supe que uno de sus compis, Ángel, tenía su edad y era uno de sus mejores amigos desde hace muchos años, era fisio y se vino también a Madrid a currar. Óscar, el otro compi, era el “enano” de los tres, cómo le solían llamar, no porque fuera bajito si no porque tenía sólo 22 añitos y estaba sacándose la carrera de empresariales. Desde luego, sin conocerlos, me iba haciendo un retrato mental de cada uno de ellos…

Finalmente, David me propuso quedar una tarde de los días que tenía libre, a lo que yo acepté encantado, pues me encontraba de vacaciones por entonces y no se me ocurría un plan mejor. Cogí mis toalla, mi bañador y mi crema protectora, y me encaminé en metro hasta la dirección que David me dio. Una vez allí, llamé al telefonillo, me respondió él mismo y me abrió. Cuando finalmente llegué a su piso, la puerta ya estaba entreabierta y él me estaba esperando para recibirme…y joder, ¡Vaya recibimiento!

David estaba sin camiseta, y llevaba sólo un bañador bastante cortito que le llegaba a mitad del muslo. Si de por sí era un tío bastante guapo y con facciones muy masculinas, no cabía duda que cuánta menos ropa llevaba, más ganaba físicamente: Sin ser ningún mazado, tenía un cuerpo muy definido, con brazos y piernas fuertes y unos buenos pectorales y espalda. Tal y cómo yo había observado, estaba rasurado del todo, cosa que me gustó aún más. A todo esto se le sumaba su tono de piel bastante moreno (más en comparación con el mío) que hacían resaltar más aún esos ojazos verdes. Joder…me ponía malo sólo el pensar que pasaría la tarde con semejante tío a mi lado.

-David: ¡¡Qué pasa Álex!! Bueno, no te quedes en la puerta hombre, pasa que se está de lujo en la terraza.

Tras hacerme entrar, David me hizo una rápida visita por su piso, que estaba muy muy bien, sobre todo considerando que vivían tres personas en él.

-Álex: A ver si algún día acabo viviendo en un piso así jajaja

-David: La verdad es que tuvimos mucha suerte sí, Ángel y yo sabíamos que el tema de la terraza era fundamental para ambos. Por cierto, él está también tomando el sol, ¿No te importa verdad?

-Álex: No joder, para nada, si aquí el invasor soy yo jaja.

“Y además, ¿Por qué conformarme con un pibón si puedo observar a dos”, añadí interiormente

-David: Pues ale, vente conmigo

Así David me guio hasta la terraza, y atravesé la cortina que separaba el salón de la misma. Lo que desde luego no esperaba, era el espectáculo que había detrás.

Había dos hamacas extendidas en la terraza, una de ellas  vacía salvo por una toalla (que entendí que era la de David), y la otra ocupada por un tío más o menos de la altura de David, igual de moreno que él y con el pelo negro y ojos que no podía identificar porque llevaba puestas unas gafas de sol, bastante fuerte y con un cuerpo nada desdeñable (sin llegar a estar tan definido como David), rasurado al igual que él pero…joder…desde luego no venía preparado para esto: ¡¡El tío estaba tomando el sol totalmente en bolas!!

Sí, sí, ni bañador ni ostias. Ángel estaba tumbado totalmente en pelotas en su hamaca, con su polla descansando tranquilamente. Y la sorpresa podría haber acabado allí pero no…cuándo aún me estaba reponiendo de aquello, me fijé en que David se había quitado el bañador y se había quedado también en bolas. Aunque intenté no ser descarado, no pude dejar de fijarme en que, en reposo, su rabo apuntaba maneras…

-David: Ángel tío, este es Álex, Álex, este es Ángel

Yo flipaba con la naturalidad con la que ambos tomaban la situación. Ángel se levantó de su hamaca, se quitó momentáneamente las gafas de sol y se acercó a mí sonriente, dejándome ver unos ojos marrones que hacían juego con su color de piel y pelo.

-Ángel: Un placer tío-dijo chocándome la mano, gesto que yo seguí por inercia, ya que en ese momento estaba bastante en shock-David nos ha hablado mucho de su colega del gym, si eres amigo de él tienes que ser buena gente seguro

-Álex: Gra…gracias, tío, un placer conocerte a ti…también-joder ¿En serio? ¿Dónde estaba la cámara oculta? ¿De verdad estaba viviendo aquello?

Si algo tengo es que soy bastante expresivo con la cara y la mirada, y por más que no dijera nada, debía tener tal cara de asombro en ese momento que Ángel no pudo más que empezar a reírse mirando su amigo y compañero de piso

-Ángel: David tío, Álex debe ser muy buena gente pero tu eres un poco cabrón…podrías haberle avisado antes del rollo que llevamos, que el chaval está en shock.

-David: Jajajaja, sí, reconozco que he sido un poco cabroncete, pero no quería asustarle. Bueno Álex, pues en esta terraza uno puede hacer lo que quiera desde beber y tomar el sol hasta traerse ligues…la única condición es ésta: Aquí impera el nudismo.

Joder con mi monitor del gym…a ver, entendedme, no tengo ningún problema en quedarme en bolas delante de otro tíos o incluso de tías, pero no me esperaba esto para nada. Pero bueno, ya estábamos aquí y…qué cojones…me iba a alegrar la tarde viendo a dos buenorros con el rabo al aire ¿Se podía pedir más?

-Álex: Y yo preocupado esta mañana porque no encontraba los bañadores…tiene cojones-fue lo único que se me ocurrió decir para romper el hielo

Aquello hizo reírse a los dos, y luego me dieron una palmada cariñosa en el hombro cada uno. Así que, sin más les imité, y a los pocos minutos estaba como Dios me trajo al mundo delante de mi colega y monitor de gym, y de un recién conocido. David cogió una de las hamacas y la colocó en el centro de los dos, para que extendiera mi toalla y me tumbara con ellos. Me di bien de crema protectora, y poniéndome también mis gafas de sol, me eché junto a ellos.

Sería mentir el decir que inicialmente no estaba algo incómodo, pero los dos se encargaban de darme conversación continuamente, lo cuál hizo que finalmente olvidara por completo que estaba en bolas. Luego, Ángel se levantó y trajo un tercio de cerveza para cada uno, cosa que agradecimos muchísimo. Así estuvimos aproximadamente una hora, hasta que Ángel se levantó y cogió su toalla.

-Ángel: Bueno chicos, yo tengo que ir a currar un poco, que a veces me toca hacer domicilios. Álex tío, cómo en tu casa eh, y espero verte más por aquí-dijo dándome otro cachete en el hombro y chocándola conmigo antes de irse- y tú David, a la próxima no tardes tanto en traerte colegas tan majetes a casa que ya te vale.

Así nos quedamos los dos solos en la terraza, y cómo os digo a esas alturas, estaba totalmente hecho a ver el cuerpo de David totalmente en bolas, cómo supongo que él no tenía problema ninguno en ver el mío (más teniendo en cuenta que tomaba siempre el sol así con sus compañeros de piso)

-David: Álex nen, la verdad es que debí haberte dicho antes lo de que tomábamos el sol en bolas antes de invitarte. Te quise vacilar un poco, pero entiendo que te haya dado corte.

-Álex: Jajaja, bueno tron, la verdad que si me he quedado a cuadros al principio pero oye…que tampoco hay nada de malo en esto.

-David: Debemos parecerte un poco raros ¿No?

-Álex: ¿Raros? ¿Por esto? David, yo te conté de sopetón que me molan los tíos y tú reaccionaste con toda naturalidad, el que tendría que haber hecho lo mismo era yo.

-David: No es lo mismo tío…ser gay es algo totalmente normal, pero que uno se pase el día en bolas con sus compis de piso o con colegas que vienen…

-Álex: Y ¿Quién decide que es normal y qué no? Hay una frase de una película que me encanta y dice así: “Ser normal no es necesariamente una virtud, si no más bien una falta de valor”

-David: Joder…me gusta esa mentalidad. ¿De qué película es?

-Álex: Te dejo como tarea que lo busques jaja. En serio David, lo de ser normal o anormal son prejuicios nuestros…y yo no soy la persona más indicada para tener prejuicios contra nadie porque odiaría que los tuvieran conmigo.

David volvió a sonreír todo lo que su boca daba de sí, y esta vez se levantó de su hamaca y se hecho sobre mi dándome un abrazo…lo cuál agradecí como gesto cariñoso pero joder…en el proceso noté todo su cuerpo fuerte y caliente contra el mío, y su polla rozándome el abdomen

-David: Eres un tío de puta madre Álex. Y lo qué has dicho me ha ayudado mucho…más de lo que crees.

David era un tío de lo más cercano, siempre me lo había parecido desde el principio, pero en esta ocasión había algo más que colegueo en su voz, se notaba ternura, se notaba que se sentía comprendido en algo que le rondaba la cabeza y que yo no terminaba de entender…pero evidentemente para él mis palabras habían bastado para que, lo que fuera que le tenía intranquilo, empezara a ser menos importante.

-Álex: Tú también eres un tío de puta madre de David…pero deja ya de abrazarme en bolas que tu estás muy bueno y yo no soy de piedra tío jajajaja.

David río ante mi comentario y me dio una colleja.

-David: Álex tío, deberíamos darnos más crema protectora que el sol aprieta a base de bien, ¿Te importa extendérmela bien por la espalda y las piernas?

Sin dejarme responder, David se tumbó en la hamaca, dejándome admirar su culo bastante firme al igual que sus piernas, y sus espaldas anchas y trabajadas. Cogí el bote de crema y me senté sobre él, eché un buen chorro en la espalda que le hizo estremecerse, y empecé a extenderlo lentamente, asegurándome de que no me dejaba nada. Y aquí es dónde, he de reconocer, que fui yo el que encendió la mecha en la que luego desencadenaría todo…ya que en vez de limitarme a simplemente extender la crema, comencé a masajearle, sabiendo que tengo bastantes buenas dotes para ello.

-David: Buahh nen….menudas manos tienes ¿no? No sabes la falta que me hacía un buen masaje con lo cargada que tengo la espalda por el curro

Con aquellas palabras de halago, sólo pude seguir adelante, y luego pasé a extenderle la crema por las piernas y los glúteos, y seguir con la rutina. David soltaba suspiros de placer (al fin y al cabo a todos nos gusta un masaje bien dado, más cuándo tenemos cargada la musculatura) y se dejaba hacer sin problemas

-David: Joder niño, deberías dedicarte a esto profesionalmente. Te sacarías una pasta masajeando a deportistas jaja

-Álex: Bah, no querría quitarle el curro a tu compi Ángel jajaja

-David: Ángel es un fisio cojonudo, pero madre mía que manos tienes tú para no ser profesional…para ya porque te puedo tener así la tarde entera eh

Antes de terminar, me fijé en que era tal el relax en el que David se encontraba, que había abierto muchísimo sus piernas para dejarme masajearle, y sus dos cojones asomaban por debajo de su culo…así que decidí bromear con él y, cogiendo el bote de crema, lancé un chorro directo a los mismos que luego le extendí con la mano. Obviamente, David respondí con un respingo y un suspiro que era mezcla de sorpresa y placer.

-Álex: ¿No querrás que se te queme esta zona no?

-David: Cabrón…jajaja, mírale como me mete mano y se aprovecha de mí. Anda, ahora túmbate tú, que voy a extenderte yo la crema por la espalda, que con lo blanquito que eres me da miedo que te vayas de aquí como una gamba.

Obedecí a mi monitor del gym y me tumbé en la hamaca…en ese momento me fijé en que su rabo, si bien seguía colgando, había aumentado de tamaño…vamos, que estaba morcillón. Era algo bastante lógico tras el masaje y la sobada final de huevos, el cuerpo de los tíos es así…o eso creía yo en mi inocencia

David se echó sobre mí, y empezó a extender la crema por mi cuello y espalda, igual que yo lo había hecho antes. Si bien no tenía mucha maestría para dar masajes, la verdad es que el chico se esforzaba en devolverme el favor y además…la sola sensación de ser acariciado por ese pedazo de tío, notando su cuerpo desnudo pegado al mío era ya un regalo en sí. Cuando llegó a la zona de mis glúteos y mis piernas, sus frotes se suavizaron…parecía que quería más acariciarme que masajearme, y yo simplemente me dejaba hacer.

-David: Tío, tienes incluso aún mejor culo del que parecía con la ropa deportiva…tú tienes que triunfar que no veas ¿No?

-Álex: No me quejo…pero tú no te debes quedar atrás seguro.

-David: No, no me quedo atrás-dijo mientras seguía acariciándome las piernas, subiendo cada vez más hacia mi culo-alucinarías si supieras cuantas chicas han pasado por esta terraza y lo que hemos acabado haciendo en estas mismas hamacas…y todas las veces ha sido una puta gozada, pero..

-Álex: Pero…¿Qué?-dije al notar como sus manos ya estaban totalmente posadas sobre mis cachas del culo-

-David: Al final siempre es más de lo mismo, y hay cosas que a uno le gustaría probar y no es fácil.

-Álex: Venga, que esta me la conozco…¿Quieres dar por culo a alguna chica no? Jajaja. Jodidos heteros…

-David: Qué listillo es el madrileño…ya he dado por culo a más de una tía para que lo sepas-en ese momento David apretó sus manos más fuerte contra mis cachas, y me las abrió, lo que hizo que notara como todo mi ojete quedaba expuesto-Vaya vaya, creo que aquí también tienes una zona que no querrás que se te queme ¿No?

No pude siguiera reaccionar, y antes de darme cuenta noté un chorro de crema directo sobre mi ojete, que me hizo, inconscientemente, arquear la espalda y poner el culo en pompa, además claro está, de soltar un gemido.

-David: Ya sabía yo que con trabajando tanto el culito, a ti tenía que gustarte que te la metieran-David se inclinó totalmente sobre mí, mientras sus manos seguían en mis cachas, y me dijo esas palabras al oído

-Álex: Bufff….David tío…¿Qué haces?

-David: Ya te he dicho…que estoy hasta los cojones de más de lo mismo. Hace mucho que quiero probar cosas y creo que hoy ha llegado el momento…

David empezó a jugar con sus dedos, extendiendo la crema alrededor de mi ojete, mientras continuaba sobre mí y observaba como me retorcía de gusto. Aunque hubiera querido levantarme, el peso de su cuerpo me lo impedía…y sería absurdo decir que quería levantarme, estaba en la puta gloria, pero no entendía nada…

-Álex: Ufff…diooos…joder tío…. David tú….¿Te van los tíos también?

-David: Pues no lo sé…pero hace mucho que quiero probar algo con uno, y creo que nadie mejor que tú, que no sólo tienes un culazo y me caes de puta madre, si no que además me has animado a lanzarme con tus palabras

En otra película escuché que las palabras pueden tener tanta fuerza como la magia…y sin duda las mías habían sido el hechizo que ese chico necesitaba para soltarse y lanzarse a experimentar. Pues bien, que experimentara lo que quisiera, porque a mí tampoco se me ocurría un pibón mejor con el que pasar la tarde follando.

David empezó a introducir lentamente sus dedos en mi ojete, primero uno, luego dos, así hasta tres. Los metía y sacaba alternando velocidad, y a veces jugaba en círculos con ellos. Por mi parte, yo me sentía en la puta gloria, siendo sodomizado por los dedos de mi monitor favorito, y notando su cuerpo fuerte sobre mí…pero muy especialmente su polla, que notaba totalmente dura, gorda y en todo su esplendor apoyada en mi espalda.

David: Joder…que bien entra….no sabes como me tienes de cerdo nene, te estoy dejando la espalda empapada en precum.

Joder, y era cierto, notaba como su capullo se iba frotando contra mi espalda, y como sus goterones se quedaban en ella. Mi polla, a esas alturas estaba tan dura que creo que a duras penas hubiera podido cambiarla de posición aunque tuviera la ocasión…aquél chico me estaba haciendo perder la cabeza con su follada de dedos, desde luego si preparaba así de bien a las tías, muchas se debían correr antes siquiera de empezar el polvo

-David: Dios nen que culazo tienes-dijo dándome un fuerte azote en una de las cachas-y todo rasuradito, es que ni el culo de una tía se puede comparar. Si tengo que estrenarme con un culo tiene que ser con éste fijo.

Yo seguía retorciéndome de placer sobre la toalla y soltando gemidos cada vez más fuerte, sin importarme siquiera que los vecinos pudieran oírnos, realmente me la pelaba todo, sólo quería que David me follara como no lo había hecho antes en su vida. Parece que me leyó el pensamiento, porque repentinamente, noté como mi culo se quedaba libre de sus dedos, pero al momento, algo más grande y duro empezaba a presionar en mi entrada. David se inclinó totalmente sobre mí y acercó su boca a mi oído.

-David: Suelo ser muy cañero, pero no quiero hacerte daño nen. Voy a ir despacio y si te duele paramos ¿Va?

-Álex: Buff…tú no te preocupes…estoy más que hecho a estas cosas

-David: Vaya putita estás hecha…la de rabos que habrán entrado aquí…

-Álex: Tantos o más que coños hayas taladrado tú

-David: Tú si que vas a saber lo que es que te taladren-mientras decía esto, su capullo se fue abriendo paso en mi esfínter, sin mucha dificultad dada la crema, la dilatación previa con sus dedos, y el precum abundante que no paraba de echar y que contribuía a lubricar-te voy a taladrar como un martillo neumático cabrón.

David terminó esta frase mordiéndome la nuca y hundiendo totalmente su rabo en mi interior, hasta que no té como no había apenas separación entre sus caderas y mis cachas del culo. Yo solté un gemido aún más fuerte que los anteriores, pero no había nada de dolor en él, era placer puro. Joder, no había podido ver la polla de David y no sabía lo que medía, pero me notaba totalmente lleno por él

-Álex: Ahhhhh, así, así joder, eso es…dame fuerte

-David: Claro que sí cabrón, eso es, gime bien fuerte para mí. Me encanta hacer gemir a las tías y con los tíos no va a ser menos. ¡Gime putita, gime!

David acompañaba cada frase de mete-sacas de su rabo bien potentes, sin mucha velocidad pero contundentes, y que me estaban haciendo ver el cielo. Yo no podía menos que corresponder a su petición, y lo hubiera hecho aunque no me lo hubiera pedido, porque me estaba follando como un puto dios.

-Álex: Ahh…ahhh…ahhh jodeeeer….David…David…dios, es brutal, me estás dando en el punto indicado, si si…

-David: Vaya vaya, ósea que sí era verdad…el punto G d ellos tíos está aquí ¿Eh? Y yo te estoy dando en él con mi polla ¿Verdad?.

-Álex: Si…siiiii….dioooos cabrón me tienes to loco, no pares, no pareeees

-David: ¿Qué no pare? No es que no vaya a parar, es que esto era el entrante chaval…prepárate para lo bueno.

A partir de ese momento, si los pollazos de David en mi interior eran contundentes pero a un ritmo suave, pasaron a ser igual de contundentes pero a toda velocidad. Para poder estar más cómodo y darme más rápido, me hizo ponerme a cuatro patas y me agarró con fuerza de las cachas, inclinándose ocasionalmente sobre mí para volverme a morder la nuca, lo cuál hacía que los ojos se me pusieran en blanco. Mientras, mi polla no paraba de recibir pequeñas descargas de placer, lo cual, unido a la fricción que ejercía sobre mi abdomen de lo dura que estaba, me tenía al borde del éxtasis.

-David: Estás gimiendo como las pibas cuándo se van a correr…¿No me digas que voy a conseguir que lo hagas sin tocarte siquiera?

-Álex: Joder…cabrón….¿Tú que crees? Si me estás haciendo ver las estrellas con esos pollazos

-David: Pues aquí van más…¡¡CÓRRETE BIEN FUERTE CON MI POLLA DENTRO ZORRA!!

David aceleró sus golpes de cadera hasta una velocidad como pocas veces he sentido antes, y eso finalmente precipitó en lo que estaba buscando, así que, mientras soltaba gemidos ahogados, mi polla empezó a disparar un chorro tras otro de lefa sobre mi propia toalla, hasta un total de 6.

-David: Buahh nen, que pasada…esto sí que no me lo esperaba….joder y estás contrayendo el ojete cómo si me ordeñaras cabrón….me estás poniendo malo.

David me levantó y me pegó a su cuerpo, y hundió si cabe más aún su polla en mi interior, mientras me tenía bien sujeto, lo cuál agradecí porque era tal el placer que había sentido que estaba a punto de perder el sentido. Finalmente, noté como su respiración se aceleraba en mi nuca y como su rabo se volvía aún más grande en mi interior…y así recibí el premio de mi monitor de gym, en forma de una inmensa corrida que noté como me inundaba por dentro

-David: DIOOOOOOOOS….toma preñada chaval….jodeeeer.

Sin poder aguantarnos más, los dos caímos sobre la toalla, primero yo de espaldas y él encima de mí, aunque al poco se colocó de lado y me ayudó a darme la vuelta también, mientras notaba como su rabo iba saliendo de mi culo. Por fin pude admirarlo: Era de unos 19 cm, como el mío, aunque con un grosor mayor y un capullo de considerables dimensiones. Había salido de mi culo aún pringado con algo de leche, así que decidí se run buen colega y ayudarle a limpiarse…usando mi lengua claro.

-David: Bufff….joder que vicio tienes…eso es, déjala limpita cabrón. Tu también gastas una buena herramienta eh, que pena que seas pasivo y que no te gusten las tías, porque reventarías culos y coños sin parar.

Tras reírme por sus palabras, los dos nos quedamos un rato tumbados en silencio, aunque David me acariciaba cariñosamente el pelo y yo de vez en cuando me apoyaba en sus pectorales y le daba besos en ellos.

-Álex: Bueno…¿Ha merecido la pena probar?

-David: Joder nen…no sé si todos los tíos serán cómo tú pero follarte ha sido una de las mejores experiencias de mi vida

-Álex: Y eso que no me has dejado cabalgarte, que es lo que mejor se me da…

-David: Bueno no te preocupes-dijo volviéndose a inclinar sobre mí y mirándome fijamente con sus ojazos verdes-porque esta es la primera pero no la única vez que te folle, créeme.

-Álex: Joder…y como em concentro yo ahora entrenando en el gym después de esto cabrón jajajaja.

-David: Cómo el campeón que eres…o que te crees, que no me daba cuenta de que me comías con los ojos cabroncete…y aún así, seguías como si nada.

-Álex: Me tomo el deporte muy en serio-dije guiñándole un ojo

Así continuamos, entre risas y jugueteos hasta que empezó a irse el sol, momento en el cual nos levantamos y nos limpiamos bien (aunque lo más perjudicado había sido mi toalla, para la cuál David me dio una bolsa), para luego vestirnos, él sólo con su bañador y yo con mi ropa de calle.

Cuándo salimos al salón, oímos la puerta abrirse y por ella entró un chaval de más o menos mi altura, rubio oscuro y de ojos azules, delgado aunque aparentemente definido, con barba de dos días y en conjunto, muy guapete, y que venía con libros y apuntes en la manos

-David: Óscar tío, buenas noches ¿Qué tal el estudio?

-Óscar: Buff, con este puto calor no hay quien se concentre. Estudiar en verano es una mierda

-David: Pues no haberte pasado el curso de juerga y ahora no te tocaría ir a Septiembre jajajaja

-Óscar: ¡Qué cabronazo eres!-Luego se dirigió a mí- Perdón tío, ni me he presentado, soy óscar, uno de los compis de piso de David

-Álex: Encantado Óscar-dije chocando la mano con él-yo soy Álex

-Óscar: Ah coño, su colega del gym. Nos ha hablado mucho de ti sí

En ese momento miré a David con curiosidad y él se limitó a sonreír de oreja a oreja como siempre. Joder ¿Tanto les había hablado de mí a sus compañeros de piso?

-David: Álex, esper aun momento que voy por una camiseta y a calzarme y te acerco a tu casa

-Álex: Tío no seas bobo, puedo ir en metro perfectamente

-David: No hay más que hablar, espera y punto.

Mientras David iba corriendo a su cuarto, Óscar me sonrió y se limitó decirme que no discutiera con él, que era muy cabezón. Al poco, David apareció con una camiseta de tirantes y unas deportivas, además de su bañador, y las llaves del coche en la mano. Tras despedirme de Óscar, fuimos al garaje y nos montamos en el coche de David, puso mi dirección en el GPS y al poco ya estábamos en la calle.

-Álex: Tío aparte de ser un máquina follando eres un encanto de persona…de verdad que no hacía falta que me llevaras.

-David: Oh sí, sí hacía falta créeme-dijo llevándose la mano al bañado y medio bajándoselo, dejando su rabo casi erecto al descubierto-porque el día de probar cosas no ha terminado

-Álex: Cabronazo…ósea que me querías llevar a casa sólo para…

-David: Para que me la mames mientras conduzco cómo no me lo han hecho nunca…sí, principalmente por eso…aunque también porque me caes de puta madre y te lo merecías. Y ahora-dijo agarrándose la polla-ya sabes que hacer

No había más que hablar. Es cierto que íbamos circulando por pleno Madrid, pero también era verano y apenas había coches…y en realidad me la sudaba. Si David quería comprobar si tenía los cojones bien puestos, lo iba a comprobar a base de bien. Así que, desabrochándome el cinturón, me incliné hasta poner mi cabeza en su entrepiernas, y empecé a succionar su capullo, mientras con una mano masajeaba sus huevos, y me iba tragando cada goterón de precum que manaba de su capullo.

La verdad es que el estoicismo de David era admirable, porque si bien era más que obvio que le estaba encantando (ya que su polla se puso al momento dura como un hierro), no dejó de mirar la carretera en ningún momento, y sólo reaccionó un poco cuando notó como me metía sus 19 cm hasta las pelotas, momento en el cuál soltó un gemido y usó su mano derecha para sujetarme la cabeza

-David: Joder…un culito perfecto y una boca experta…definitivamente no pude elegir mejor al primer tío con el que follar.

Yo calculé el ritmo de la mamada para que termináramos poco antes de llegar a mi casa, ya que una cosa era que desconocidos pudieran verme, y otra que algún vecino me viera en esa situación. Cuándo quedaban aproximadamente 5 minutos para llegar a mi casa, aceleré a tope el ritmo, succionando con fuerza su capullo y pajeándole, para finalmente metérmela entera en la boca e iniciar un mete-saca tan potente como el que él previamente me había dado en el culo.

-David: Cabrón…vas a sacar tu premio otra vez…ahí va…ahí va….DIOOOS, ME CORROOOO

Mi boca se vio totalmente llena por la segunda (que yo supiera) corrida del día de David, y una vez noté que ya no salía nada más, levanté mi cabeza y le enseñé mi boca bien llena de sus fluidos, antes de tragármelos.

-David: Eres un cabronazo y una putita…me flipa lo vicioso que eres. Te llevarías muy bien con estos dos también jaja.

-Álex: Pero eso es porque soy un encanto sobre todo-dije guiñándole un ojo, a lo que respondió riéndose y revolviéndome cariñosamente el pelo

Finalmente llegamos a la puerta de mi casa y David paró el coche.

-David: Álex tío, no te imaginas lo que este día ha sido para mí. Gracias a ti y tu actitud me he lanzado a hacer algo que hacía mucho que quería hacer y no me atrevía por miedo a…suena horrible decirlo…pero a que no me consideraran normal.

-Álex: David-dije haciéndole que me mirara-por desgracia hay gente que sigue y seguirá sin entender que el amor y el sexo son libres y válidos en todas sus formas mientras sean consentidos y entre adultos, pero también hay mucha gente, mucha más de la que crees que nunca te juzgará por esto…¿O acaso tú me juzgaste a mí?

-David: No…y espero que nadie lo haga nunca en mi presencia porque les reviento, que ya has visto lo fuerte que estoy levantando pesas jaja

Los dos nos reímos, pero no esperaba lo que pasó a continuación, David me atrajo hacia él, y unió sus labios a los míos, dándome un profundo y cariñoso beso. Cuando nos separamos, volvía a tener su sonrisa de niño travieso.

-David: Tenía que probar también esto ¿No?

-Álex: ¿Y qué tal ha sido?

-David. Muy agradable…aunque pinchas cabrón jajaja. Álex tío, no sabes lo que hoy has hecho por mí, de verdad

-Álex: ¿Por ayudarte a ver que quizás seas bisexual?

-David: Si…por eso, y porque ya no me asusta sentirme atraído por él.

-Álex: Atraído…¿Por quién?

-David: Por Ángel.

CONTINUARÁ

Bueno chicos, cómo siempre, un millón de gracias por llegar hasta el final. Esta historia llevaba mucho tiempo en el tintero y no sabía de que manera empezar a redactarla, y el encontrarme en plena mudanza, estando a punto de compartir piso con dos buenos amigos, ha hecho que considere que este era el momento óptimo para compartiros esta historia vivida hace años con estos tres compañeros de piso de los que siempre conservaré un gran recuerdo. Eso sí, la historia da para tanto que, por primera vez, tendrá que ser dividida en 3 partes (incluso 4), lo cual me viene genial para poder dedicar un capítulo específico a cada uno de ellos….y creedme, lo merecen.

Sé que en este capítulo ha habido mucha historia y no demasiado sexo, pero era necesario para introducir bien la situación…pero las siguientes partes lo compensarán, creedme. Espero que estos tres sinvergüenzas (desde el mas profundo cariño) se ganen vuestra simpatía tanto como se ganaron la mía.

Por último, muchas gracias por la cariñosa acogida que mi historia con Dani ha tenido entre todos vosotros, y aunque no sean mis relatos más leídos sé que seguramente si sean los que más os llegado al kokoro😉

UN FUERTE BESO Y ESPERO QUE DISFRUTÉIS POR FIN DE LA NUEVA NORMALIDAD