Empezando en la sumisión
No pensaba que a mis 65 años pudiera disfrutar así.
Nunca pensé que a mis 65 años me podía pasar esto y sobre todo lo que disfrute.
Fui a ver al oculista por donde Vivian mis padres, cuando salí me puse a buscar donde comer, y al pasar por una tienda vi a una mujer con unos pantalones de cuero negros y unas botas altas, y una chaqueta también negra, me impresiono y me quede mirando y me entro un nerviosismo (ya que siempre que veo así una mujer, me imagino una muy segura, y yo soy bastante tímido), ella debió verme por el cristal y se volvió, y me dijo hola Pepe, me quede de podrá balbuceando, era una conocida del barrio tendría unos 45 años, yo no atinaba y colorado, y ella sonriendo me dijo, vamos a tomar algo y te tranquilizas.
Fuimos a una cafetería y me tranquilice un poco y estuvimos hablando, y de repente me dijo si me gustaba como iba vestida, me entro los siete males, la dije que si, y yo todo cortado, entonces me empezó hablar que a ella le gustaba del BDSM y que por lo que veía en mi que a mí me atraía, la dije que sí, que desde mucho me atraía pero que no lo había practicado nunca, después de explicarme muchas cosas, me tranquilice y la vi muy segura de las practicas que hacía, después de tomar el café al salir me dijo que si lo quería probar, yo no sabía que decirla, pero se fijo en mi pantalón y sonrió al comprobar que estaba empalmado, y me dijo anda vente conmigo que lo vamos a pasar muy bien y empezó andar hacia su casa, yo la seguí sin decir nada.
Al entrar en su piso, se dio la vuelta y me dijo desnúdate, yo muy nervioso lo hice y me paso al salón, estuvo dando vueltas viéndome por todos los lados, después fue a un armario y saco un antifaz y me lo puso, me puse más nervioso por no ver nada, de repente sentí sus uñas en mi espalda, brinque, pero estaba muy empalmado, me cogió una muñeca y me puso una muñequera y después las tobilleras, me llevo al centro del salón y me empezó a pasar una cuerdas por las muñequeras y las ato a algún sitio del salón, yo quede con los brazos estirados y también con las tobilleras, quede en cruz, a mi me temblaba todo y nunca había estado tan excitado, de repente sentí que se ponía detrás de mí y sentí su perfume con una intensidad que nunca lo había sentido, paso las manos por delate del cuerpo y me cogió los pezones y los apretó, yo gemí un poco, pero ese dolor me excito mucho mas, soltó una mano y me azoto el culo, mi mente se fue al azote y me dejo de doler en pezón y de repente volvió a doler, una maravilla, después me dijo vas a ser mío, yo temblaba, la escuchaba moverse y eso me ponía mas excitado, se paro delante mío y me cogió un pezón y lo aplasto un poco y me puso una pinza, uff dolió, y después me lo puso en el otro pezón, era muy excitante, empezó a pasar las uñas por mi cuerpo, yo saltaba, empozo a pasarme por el cuerpo algo que rodaba y pinchaba, empezó por el cuello, por el pecho tocando las pinzas, bajo al vientre y me lo paso por los muslo y después por la polla, yo saltaba de la impresión y de la excitación que tenia, estuvo jugando conmigo un tiempo, después se aparto y sentí algo que me pasaba por la espalda y bajaba hasta mi culo, debía ser un pequeño latigo o algo así, yo ya no podía mas, empezó a darme con el muy suavemente y después en el culo.
Me soltó, y me llevo a una mesa alta, yo iba tropezando con todo, me puso de bruces en la mesa y me ato las muñecas a las patas, y me decía ahora serás mío, me dejo un rato así, y de repente noto que me da unos azotes y mete las manos por delante y me quita las pinzas, que dolor, me quejo y me me gusta que te duelan, se me pega por un lateral y una de sus manos me aprieta el pezón, me retuerzo y siento su otra mano por mi culo, noto algo frio y su dedo intentando meterlo en el culo, y noto como me entra, dolió un poco pero con lo excitado que estaba y las palabras de ella, diciéndome ahora sí que serás mío, y giraba el dedo y lo metía yo ya me iba acostumbrado, después metió dos y los giraba, mi culo se iba abriendo cada vez más, me dejo de de martirizar los pezones y se puso detrás de mí, y sentí algo más gordo en mi ano y empezó a presionar, me empezó a doler y aguante y siguió presionando y entrándome, hasta que se pego a mí y paro, me fui acostumbrando al dolor y cuando bajo un poco empezó a follarme despacito, se me fue quitando el dolor y cuando me entraba notaba como unos calambres que me llegaban a la punta de la poya, me agarro de la caderas y me empezó a follar más duro, yo estaba que no me tenia de los excitado que estaba y ella igual la notaba suspirar y como con la excitación me daba más fuerte, era maravilloso sentirla disfrutando encima de mí, y cuando estaba más excitada metió la mano y me cogió la poya y empezó a masturbarme, yo ya temblaba y ella igual y de repente me la metió del todo a la vez que yo me corría, nunca tuve una corrida igual, se quedo un rato encima mío y la saco de mi culo y me dio un azote y me dijo te lo he roto.
Después me soltó y nos duchamos, y la dije que lo que más me queda es la sensación de pertenecer a ella, las venidas de dolor de los pezones y la intensidad con que olía su perfume.
Unos días después se fue a su puesto de trabajo en Europa, y me quede con ganas de seguir probando.
Mi correo es juan6561.yahoo.com por si alguien quiere comentarme algo o si le intereso a alguien.