Ella tiene gran vientre

Me enamoré de una mujer embarazada en una playa nudista en Miami.

Ella tiene gran vientre

Este año, mi amigo Brad y yo decidimos ir a la playa... Elegimos la playa nudista de Haulover Beach en Miami, la más famosa de los EEUU y una de las más populares... Tienen todo tipo de instalaciones incluyendo salvavidas nudistas, claro está.

Esta playa tiene unas dimensiones... A ambos lados la playa continua y ya no es nudista... Lo único que separa las dos playas es un letrero que dice: ‘ Puede encontrar bañistas desnudos más allá de este punto’ .

Cómo no hay ninguna valla, desde las playas convencionales se pueden ver muchas tetas y otras cosas... Por ejemplo, a Brad y a mí nos gusta mucho ver a las chicas jugar al voleibol... No hay nada mejor que ver grandes tetas rebotando.

Nos trajimos una nevera portátil llena de cervezas y hielo y unas bolsas de papas fritas... También trajimos un par de sillas de playa, una sombrilla grande, bloqueador solar y nuestra música favorita... No necesitábamos nada más.

El tráfico de mujeres era bastante fluido... Habían dos chicas delante de nosotros tumbadas tomando el sol... Estaban boca abajo con los pies hacia nosotros y con sus culos desnudos rosados ​​expuestos al sol.

Como Brad y yo hacemos a menudo, las evaluamos y elegimos la que más nos gustó... Somos amigos desde hace años y nunca elegimos a la misma chica... A menudo me preguntaba por qué... Creo que es porque siempre trato de elegir chicas guapas y dulces, mientras que Brad elige que sean putas y fáciles.

Siendo siempre el caballero que soy, le pregunté a la chica que había elegido si podía frotarle un poco de crema bronceadora en la espalda para que no se quemara... Brad estaba allí, como de costumbre, ofreciendo sus servicios a la otra chica... Las chicas se miraron, sonrieron y luego aceptaron nuestras ofertas.

Mi chica’ dijo que su nombre era Norin... La chica de Brad era Sally.

Comencé con el cuello y los hombros de Norin y luego fui bajando lentamente... Puse la crema en sus omóplatos y bajé por su columna... Le froté su espalda baja y dudé frotarle sus nalgas.

Miré a Brad y ví que sus manos estaban por todas partes... Parecía que estaba tratando de meterlas en su coño y que ella estaba tratando de cooperar... Estaba seguro de que tendría suerte antes de que terminara el día y se la follaría.

Norin sintió que me había detenido y me dijo que podía seguir, que no le importaba... Así que me puse más crema solar en las manos y comencé a frotar el culo de Norin... Tenía un buen culo.

Me tomé la libertad de pasar mi dedo por su raja del culo y ella gemió como si lo estuviera disfrutando... Fui más y más por su rajadura y justo cuando mi dedo se deslizó en su coño, entré en pánico y me detuve.

Luego comencé a frotar sus nalgas en grandes círculos con las palmas de mis palmas y pasé mis manos por ambas piernas hasta sus pies... Como por instinto, volví de nuevo a frotarle crema en la raja del culo y llegue a su coño otra vez.

Cuando le metí un dedo en la vagina, volvió a gemir y me dijo lo bien que se sentía... Así que bajé aún más y finalmente encontré su clítoris... Mientras trabajaba en su clítoris, ella se retorcía y parecía disfrutarlo tremendamente...  Se corrió... Después, Norin me lo agradeció y dijo que ese había sido su mejor corrida en meses y yo le respondí que había sido un placer, darle una corrida.

Ambos volvimos a mirar a Brad y Sally... Estaban follando allí mismo en la playa... Sally estaba gimiendo fuerte y atrayendo la atención de los bañistas que nos rodeaban... Brad dejó escapar un gran gruñido y luego se derrumbó sobre sus pechos, aplastándolos... La pobre Sally le golpeó la espalda con los puños, llamó a Brad bastardo y lo apartó de ella.

Norin se echó a reír y dijo que le parecía que Brad se había corrido antes que ella y añadió algo acerca de que todos los hombres son iguales... Y yo le recordé que ella ya se había corrido una vez y que yo no... Ella se rió y rectifico la frase.

Le dije que realmente era diferente a la mayoría de los hombres que había conocido y lo sensible y cariñosa que era en realidad... Le dije que me gusta tomar vino y cenar con una mujer, enviarles flores, notas de amor y abrirles la puerta del auto también.

Norin me sonrió y me dijo que se lo demostrara... Así que le dije que me encantaría tener la oportunidad de hacer precisamente eso por ella y ella aceptó, como si de una apuesta se tratara.

Entonces Norin se dio la vuelta para que pudiera ponerle crema bronceadora por el frente y cuando lo hizo, me quedé atónito, mis ojos se agrandaron y me quedé sin aliento... Norin estaba embarazada... Su gran barriga había estado oculta en un hoyo que había cavado antes de que llegáramos.

Intenté con todas mis fuerzas mantener la compostura, pero no estaba seguro de si se había dado cuenta... Luego me puse un poco de crema en las manos y se la froté por el vientre... Sentí que el bebé se movía... Miré sus pechos hinchados mientras respiraba y también sus pezones oscuros y duros... También miré su coño hinchado con sus labios carnosos tratando de abrirse... Luego deslicé un dedo hacia su clítoris y la vi cerrar los ojos.

Después de darle una segunda corrida y haber cubierto todo su frente con crema bronceadora, la invité a sentarse en mi silla de playa bajo la sombrilla y le ofrecí una cerveza helada. Ella dijo que no debería beber alcohol, pero tomó una de todos modos.

Brad y Sally se habían marchado juntos a alguna parte, así que me senté en la silla de playa de Brad... Norin y yo hablamos de todo... Tenía veintiocho años, era soltera y no sabía exactamente dónde estaba el padre de su hijo... Era militar y suponía que estaba en Irak con su Unidad de combate... Después de decirle que estaba embarazada, nunca más volvió a verlo... Sally era su media hermana y tenía veinticinco años... Tenían el mismo padre pero diferentes madres... Norin era enfermera titulada y estaba en su tercer trimestre de embarazo, lo que significaba que acababa de entrar en su séptimo mes.

Descubrimos que teníamos mucho en común... A los dos nos gustan los mismos programas de televisión, los mismos autores literarios y también tenemos el mismo gusto musical... Así que la invité a una cita el sábado y aceptó.

Norin habló mucho sobre su embarazo... Este era el primero... Me contó todo sobre cómo sus pechos están hinchados y sensibles todo el tiempo y cómo su coño anhela atención, también todo el tiempo.

Ella estaba agradecida de que le hubiera dado dos de los mejores orgasmos que había tenido en bastante tiempo... Le prometí que le daría varios más antes de salir de la playa y eso le gustó mucho... Así que me acerqué a ella y comencé a darle otra corrida mientras se terminaba la cerveza y eructaba haciendo que ambos nos riéramos.

Una señora que estaba tomando el sol cerca de nosotros dijo:

  • "No deberíais estar haciendo eso en público.”

  • “Señora, mi esposa está embarazada y a punto de parir... Ella tiene contracciones y dolor de espalda y esto es lo único que parece aliviar la incomodidad”, le mentí educadamente.

Luego, para mi total asombro, la mujer me respondió:

  • “Lo siento mucho... No lo sabía... Eso también me pasó a mí y recuerdo que mi esposo se negó a ayudarme el muy bastardo porque le daba vergüenza tocarme en la playa... Si no le importa, puedo ayudarla... Soy bisexual.”

  • “Me parece que esta señora se ha calentado viéndonos y quiere comerme el coño", me susurró al oído Norin.

  • “Déjala... Me gustaría ver eso", le respondí con otro susurro.

  • “Sí, gracias... Tal vez tú puedes ayudarme a correrme... El dedo de mi marido está cansado y todavía tengo ese maldito picor entre las piernas... Por cierto, mi nombre es Norin", le dijo a la señora.

La mujer sonrió y acercó su toalla a nosotros... Deslizó su dedo en el coño húmedo de Norin... Cuando se hizo cargo del masaje del clítoris a Norin, dijo:

  • "Soy Melissa, pero la mayoría de la gente me llama Meli."

Vi como Norin cerraba los ojos y luego apretó mi mano cuando se corrió por tercera vez... Tuvo una buena corrida, tal vez incluso mejor de las dos que yo le había dado.

Norin abrió los ojos después y dijo:

  • “Oh Meli, muchas gracias... Eso era exactamente lo que necesitaba... Cariño, ella es casi tan buena como tú masturbándome en público... Meli, estoy segura de que a mi esposo le encantaría pagarte por hacer eso por mí, ¿no crees, cariño?... Ven y siéntate entre nosotras y usa ambas manos al mismo tiempo", dijo guiñándome un ojo y lanzándome un beso.

Primero les ofrecí una cerveza fría a las chicas y me coloqué justo entre ellas y frente a ellas... Quería mirar sus tetas, sus coños, y también quería ver la expresión en sus caras.

Norin era una verdadera belleza y estaba seguro de que tenía la figura bonita, pero en este momento su vientre estaba agrandado por el embarazo... Llevaba una niña a la que iba a llamar Hillary en recuerdo a su abuela... Sus pechos hinchados estiraban su piel tanto como su vientre... Recuerdo que me dijo que sus pezones se estaban volviendo muy sensibles a medida que se formaban los conductos lácteos para alimentar al bebé tan pronto como pariera.

Mi dedo estaba abriendo un poco los labios de su vagina, pero no tanto como me gustaría porque estaban hinchados y húmedos por las corridas tan seguidas que ha tenido.

Tuve la impresión de que se había afeitado el coño hace poco tiempo, porque ahora su vello en el pubis no era tan intenso.

Luego dirigí mi atención a Meli... Ella era mayor que nosotros... Tendría sobre unos cuarenta y siete o cincuenta años... Era una mujer que se conserva bien para su edad y bastante liberal... Me dejaba tocar su coño en público en una playa nudista donde cualquiera podía vernos.

Su rostro estaba un poco arrugado y comenzaba a mostrar signos de su edad, pero todavía conservaba su belleza... Sus pechos se habían caido, como era de esperar con el tiempo... Sus pezones y areolas eran mucho más oscuros que los de Norin.

Meli también tenía leves estrías en los pechos debido a los partos que debió tener... Ahora su barriga estaba plana y bronceada.. Su coño estaba afeitado y tenía más estrías en la parte interna de los muslos cerca de su coño... Le pregunté:

Meli, ¿cuántos hijos tienes?... ¿Puede darnos algún consejo a mi esposa y a mí?

  • “Tengo tres hijos... Los amamanté a todos y te recomiendo que lo hagas durante el mayor tiempo posible... hacer eso, te da un vínculo que no puede obtener de otra manera... Ahora estoy divorciada... Mi esposo me cambió por una putita de secretaria que contrató... Lo mejor es que ella también lo dejó por un hombre más joven... El bastardo se lo merecía.”

  • “Meli, creo sinceramente que el que perdió fue él.”

  • “Gracias... Si queréis venir a mi casa de visita, estaré feliz de recibiros y podemos practicar sexo si os apetece...  Norin, si pensaste que mi dedo se sentía bien dentro de tu coño, deberías sentir mi lengua en tu clítoris.”

Norin le respondió:

  • "Si que me gustaría sentirlo y mi marido verlo... Cariño, ¿el viernes encajaría en nuestro horario ir a casa de Meli?

Me calenté de inmediato ante la perspectiva de ver a estas dos mujeres besándose y más... Le contesté:

"Sí, amor, podría ser y eso estaría muy bien."

Para entonces ambas mujeres dejaron de hablar y empezaron a gemir de placer cuando una oleada de orgasmos consecutivos se apoderó de ellas... Mi dedo no paraba de frotar sus clítoris hasta reventarlas a base de un orgasmo tras otro.

Sus ojos estaban cerrados, sus cabezas se balanceaban hacia adelante y hacia atrás, y sus pechos estaban agitados por la respiración pesada que estaban haciendo... Ambas se cogian de la mano y compartían de este modo su felicidad... Vi también como las dos mujeres movían sus culos en las sillas y sus tetas también... Finalmente, ambas me suplicaron que me detuviera y así lo hice.

Después de uno o dos minutos de recuperación, Meli dijo:

  • “Norin, tienes un buen masajista... No dejes que se te escape."

Norin cogió mi mano entre las suyas, me dio un apretón y le respondió:

"Yo tengo la intención de que no se me escape... Ya ves lo que hago por complacerlo y haré todo lo posible, como verás cuando vayamos a verte porque es el mejor entre un millón."

  • "Norin, te amo", le dije... Y lo decía en serio a pesar de que sólo nos conocíamos desde hacía unas pocas horas.

  • “Yo también te amo y no puedo esperar hasta que lleguemos a casa para correrte... Veo que necesitas darme un buen polvo para solucionar tu problema.”

Esa fue la primera vez que noté mi erección... Había estado demasiado inmerso en darle su placer como para siquiera pensar en el mío... Ahora, mi polla me dolía por estar tan hinchada de sangre.

Norin se agachó y empezó a masturbarme... Meli me cubrió con una toalla para no llamar demasiado la atención... Cuando disparé mi semen, la mano de Meli estaba allí para atraparlo todo... Luego vi como ambas mujeres lamían mi semen de sus dedos.

Poco más tarde, Meli nos dio un beso de despedida en los labios y nos dio su dirección y teléfono... Dijo que estaba deseando que llegara el viernes y luego recogió su toalla y lanzándonos un beso al aire, se fue.

Norin y yo nos reímos de fingir que estábamos casados, pero sentí que realmente podría suceder... No había absolutamente nada en esta mujer que no me gustara, incluido el hecho de que estaba embarazada... Quizás su embarazo era lo que más me gustaba de ella.

Norin me dijo:

  • “Sabes una cosa... Creo que podría enamorarme de ti."

Fue entonces cuando le dije en voz alta:

  • "Pues yo creo que realmente me has enamorado."

En ese momento, detrás de mí, escuché a Brad decirme:

  • “Te dejo un par de jodidas horas y te enamoras... ¡Qué diablos te pasa, tío!"

Le sonreí a Norin y le apreté la mano y luego le dije:

  • "Norin, creo que voy a disfrutar mucho contigo y no quiero perderte... Se que me vas a dar mucho placer."

  • "No lo dudes... Te necesito y conmigo harás todo lo que te apetezca... Ya me di cuenta que querías ir a casa de Winnie y te aseguro que lo vas a disfrutar... Y repetiremos eso y más cosas siempre que quieras", me respondió ella.

F i N