Ella fantasía, Tú una realidad 18
Gracias por esperar, por leer y adelante disfruten el final.
La Rueda del destino…
En la vida y el amor es como estar en una rueda de la fortuna, casi igual de impredecibles y caprichosos pues nunca sabes cuando vas a estar arriba o abajo, en un instante parece que todo esta bien, pero de pronto da un giro tan fuerte que te derriba, y cuando sientes que ya no puedes más mientras te hundes en las profundidades de un abismo, a veces te das cuenta de que aun se puede volver a la cima y disfrutar de llegar, puede que aprender la lección no sea nada fácil, o que nos parezca un proceso cruel o injusto, pero al fin y al cabo se trata de saber seguir el momento y aprender paso a paso con él, pues a veces dejamos ir lo que tenemos frente a nuestros ojos y si no lo corregimos, si no lo valoramos a tiempo, podríamos dejar pasar la oportunidad perfecta de ser felices… pues bien, ya había llegado el momento de buscar mi revancha con el destino que nos separó, de recuperar todo eso que dejé ir, se trataba de volver a pelear en los momentos decisivos, aquellos segundos donde se gana o se pierde el juego, por fin ya era tiempo de vencer los miedos, de arriesgarse por todo, de jugarse la ultima carta, ya había llegado mi tiempo de decir lo que se guardó en mis labios, y se me escapó al tiempo, y sobretodo, era tiempo de averiguar que me esperaba de tu parte.
De alguna forma desde que regresé sentí que volví a tener otra oportunidad para ver a la vida a la cara y pedirle que trajera de vuelta lo que el pasado había ocultado en un pequeño rincón, pero que no pudo borrar jamás, y ahora que después de estar insistiendo tanto y que por fin había obtenido una muestra de lo que guardaba tu corazón, me creía capaz de hacer de todo por jamás perderlo, por no dejarlo ir de nuevo; después de esa noche, de ese momento especial que habíamos tenido, yo estaba completamente en la luna, me la pase divagando todo el tiempo con aquel beso y con los miles de sentimientos que habían explotado en mí a causa de ello, y también acerca de los que pude sentir en ti, aun así tuve que calmarme bastante para no enloquecer completamente e ir tras de ti porque en lo que pasaron las festividades de año nuevo no pude volver a estar mucho tiempo completamente a solas contigo desde la fiesta, pues muchos de tus familiares que habían llegado para la boda de Rebeca, se quedaron en el rancho hasta que iniciaron los días laborales así que tuve que medirme (ni modo ¬¬ a esperar otro poco). Cuando por fin todo volvía a la normalidad, fue uno de esos días el que se convirtió en un momento crucial de toda mi vida, no se realmente como pasó todo, se sentía como una mañana normal antes de que fueras al hospital, luego en un segundo pasamos de estar platicando alegremente, de disfrutar nuestra mutua compañía mientras almorzábamos a solas y después todo cambió, pasamos de estar frente a frente mirándonos a ambos lados de la encimera de la cocina en un ambiente extrañamente habitual, con tu risa, el amor y las esperanzas mías flotando en el ambiente y luego todo se transformó en un complejo rompecabezas.
Justo cuando nos estábamos divirtiendo en medio de bromas o diciendo incoherencias, cuando también estaba pensando en cómo volver a mencionarte lo que pasó esa noche para saber lo que sentiste o mejor aun, poder besarte de nuevo de esa forma, fue el mugroso timbre de mi teléfono el que me sacó de aquellos pensamientos y cortó por un momento la plática, la llamada que recibí era de mi padre para desearme un gran año, mandar saludos a tu familia, agradecer mi ayuda con unos informes de mercados que le envié y preguntar si ya me había decidido acerca de la propuesta que me hizo hace varios días para quedarme ya en la ciudad y hacerme cargo de unos negocios, solo contesté que aun lo pensaría bien otro poco y pronto tendría mi respuesta antes de colgar con él, tú me miraste y me preguntaste casualmente si todo estaba bien, supongo que por curiosidad (ohh fue por algo de celos?? XD jajaja), como sea te dije que se trataba de mi padre, te di los saludos que había enviado, y luego, armándome poco a poco de valor, comencé a plantearte la idea primero desde el punto de vista profesional, para regresar definitivamente, te dije a grandes rasgos lo que mi padre me había propuesto, pero si eso no se daba, también había la posibilidad de que con mis estudios y experiencia podría encontrar algún otro trabajo, me detuve un segundo esperando a ver tu reacción, pero en vez de la emotividad que esperé, vi como esa postura intelectual te cubrió asustada y completamente desconcertada pues comenzaste a decir que yo no podía hacer eso así como así, porque toda mi vida estaba allá en Europa y no podía dejar lo mucho que conseguí por arriesgarme a la nada aquí, pero entonces siguiendo tu calmada lógica aunque palpitando nerviosamente por dentro, te confesé por fin que desde antes de volver, ya tenía intensiones de algo definitivo, y que ahora que había disfrutado tanto la estancia en mi país, con la gente, la ciudad, mis amigos y contigo, sentía que mi tiempo allá simplemente ya había terminado, así que ahora quería quedarme, deseaba más que nada volver y recuperar parte de mi vida como era antes, el tiempo que se nos escapó.
Pero tu no pensabas lo mismo o al menos eso fue lo que me hiciste saber con tus argumentos en contra, y sin esperarlo, comenzamos a sumergirnos en una tonta discusión sin razón, nuestras visiones tan distintas acerca de la posibilidad de querer volver al tiempo crearon mucho más tensión, la parte superficial de las oportunidades profesionales no pudieron ocultar más tiempo los motivos personales, y por fin todos esos reclamos y dolores añejos salieron a la luz cuando me atreví a decirte que la verdadera razón por la que planeaba quedarme era para recuperar una oportunidad contigo, solo porque quería estar contigo y que no podías seguir negando que tu igual querías algo similar después de lo que pasó y de la química que había ya entre nosotros; pero tu maldito orgullo, mis estúpidos impulsos irracionales, tus tontos miedos y dudas, y mi resistencia a calmarme cediendo otra vez ante tus caprichos o darte más tiempo para pensarlo, todo eso nos estorbó… los gritos y lamentos se hicieron presentes y cada uno iba cargado con su fuerte dosis de amargura o dolor, cada uno salía disparando veneno por ambos corazones tan heridos desde hace tantos años, sentía un coraje enorme de que no te atrevieras a luchar por salvar lo que un día nos unió y de lo que ahora el tiempo nos daba una nueva oportunidad (y dolió como el mismísimo infierno ¬¬), nos dijimos muchas cosas producto del enojo, los ataques directos a las deficiencias personales fueron como miles de espadas atravesando las entrañas, quemaba como el fuego vivo en la piel, el no saber del todo porque me dabas la espalda y porque en ese momento cubrías todos tus sentimientos profundos guardando tantas dudas, así que entre mi desesperación y mi ira, te hice un fuerte reclamo diciendo que eras una cobarde por no quererte arriesgar y alzando la voz entonces pedí que te decidieras de una maldita vez por todas, que diablos querías de mí… lo que salió de tus labios deshizo a pedazos mis esperanzas ya rotas, me arrancó el alma y la dejó escaparse en el vacío oscuro, pues me dijiste: lo que quiero, es recuperar la tranquilidad… quiero que ya no trates de regresar el tiempo a algo que yo había enterrado en él, que me dejes de convencer con tu amabilidad, con todas tus locuras y tu sonrisa que me hacen tambalear, que ya no hagas cosas especiales para ayudarme o hacerme sentir increíble, que dejes de ser una tentación con tus movimientos y la forma en que me ves en cada lugar en el que estoy, que dejes de producir y mover emociones en mi interior que ya no pueda entender, ya no quiero que me conquistes de a poco con tus detalles, con tus palabras, con tu mirada, oooo con esa forma que tienes de besarme, me debilita, duele… antes de que llegaras, juré que no volvería a caer y que sería fuerte, pero cada vez que te acercas, todo se cae de nuevo, los recuerdos se agitan igual que el miedo y no quiero eso… yo estaba perfectamente bien antes de tu regreso, te olvidé, ya tenía una vida y la quiero de vuelta, quiero esa estabilidad, poder pensar con claridad, seguir sola con mi rutina aburrida y mis relaciones frías sin sentido… sólo quiero continuar con la vida que me hice aquí sin ti… -
Me quedé inmóvil y callada recibiendo el terrible golpe de tus palabras, todas mis ilusiones se derrumbaban inevitablemente a mis pies y me sentí agonizar cuando todo se esfumó mientras te veía decírmelo tan decidida con lágrimas en los ojos, lo único que pude hacer después de escucharlo, fue recurrir a la ultima gota de esperanza preguntando patéticamente y con voz ausente si estabas completamente segura de que eso era lo que querías, y cuando quebrándote casi completamente en llanto solo asentiste, entonces con todo el dolor que sentí por dentro pero sin derramar una sola lágrima te dije: okpues, entonces lamento haber intentado algo más y perdón si te lastime con ello… te prometo que no volverá a pasar - luego me di la vuelta y caminé pausadamente hacia mi habitación dejándote sola atrás, en cuanto entré me derrumbé completamente sobre la cama, sentía un hueco enorme en la parte del pecho y un gran nudo en la garganta, el profundo coraje y dolor que sentía me hacían temblar un poco las manos, pero sólo un helado par de lágrimas bajaron por mis mejillas, me quedé un muy buen rato encerrada y tirada sobre la cama mirando ausente el techo repasando todo lo que había pasado en la cocina en silencio, y después de tanto dar vueltas por mi cabeza, fue ahí donde me di cuenta que ya no tenía nada más que hacer, me había jugado mi ultima carta y aun así perdí el juego así que era tiempo de retirarse, dar la vuelta para continuar con mi camino y tratar de levantarse otra vez.
Me levanté pesadamente, abrí el armario, y comencé a hacer mis maletas, de nada servía ya quedarme ni posponer más mi partida, al principio arrojé con coraje mis cosas pero la mortal calma poco a poco se apoderó de mí, con cada cosa que tomaba iba dejando un trozo de mi vida, terminé por dejar listo mi equipaje, guardé las ultimas cosas que había traído en mi maleta y estaba a punto de simplemente salir cuando encontré en el fondo de un cajón, la pequeña cajita algo arrugada que hace años había aferrado con mi mano mientras la llevaba dentro de la bolsa de mi chamarra, abrí de nuevo el paquete y al ver colgando frente a mí el pequeño dije de cristal transparente y plata en forma de corazón con líneas de signos vitales dentro (cada cosa rara que encontraba ¬¬), aquel que había comprado para ti el día en que recibí la noticia de mi traslado a Inglaterra, y que jamás te pude entregar como tampoco me pude despedir antes de irme, vi que el intenso brillo que atrapaba de los pocos rayos de sol que se colaban tras las persianas era mucho más tenue de lo que creía, no lo había sacado en años pero en ese momento recordé porque lo había guardado durante todos estos años; entonces me senté frente a una mesita que había en la habitación, tomé un par de hojas de papel y me puse a escribir, sabía que no sería capaz de verte de nuevo a los ojos y despedirme en persona de ti, pero al menos esta vez sí te dejaría de alguna forma todo lo que tenía para decirte.
Escribí uno y otro intento de una carta, pero todas las ideas, todas las palabras y todas mis emociones jugaban con mi pobre habilidad para las palabras, después de corregir el contenido de aquella nota unas cuantas veces más, el ritmo y los pensamientos comenzaron a fluir mágicamente de mi cabeza a mi mano y sobre el papel, tal vez decir las cosas mas simples era la manera mas sencilla y poco elegante que tenía para decirte las cosas, pero también parecía la opción mas honesta, escribí anunciándote mi decisión final de regresar a Londres, tal vez tenías razón y era momento de continuar cada quien con la vida que nos habíamos creado por separado, pero también te dije todo lo que tus palabras causaban a mis sentimientos, sabía que estaba cortando una parte importante en mi vida y que jamás olvidaría, pero ya estaba cansada de luchar por amores imposibles y al final quedarme sin nada, el tiempo había cobrado una factura muy cara y el destino se había salido con la suya (¬¬ maldito!!!), que más daba que ya no tuviera ningún motivo para continuar, al fin y al cabo creía que podría sobrevivir, había pasado varios años lejos y sin ti, así que seguir el resto de mi vida sin sentir el latir de mi corazón podría ser posible (¬¬ ni que fuera un órgano vital o si??), traté de decirte sin tanto drama y con toda la claridad posible lo que pasaba por mi cabeza y lo que sentía en el fondo de mi alma.
Al final de esa carta te puse: “… puede que salir huyendo de tu rechazo también te parezca cobarde, y muy probablemente lo es, pero simplemente no voy a ser capaz de quedarme en el mismo sitio sabiendo que te perdí y no voy a poder hacer nada más para remediarlo, he cometido muchos errores en el amor a lo largo de toda mi vida y eso tú mas que nadie lo sabe, pero el único error que más me arrepiento y al que desearía volver a ese momento es el haberme ido de tu vida sin decirte todo lo que cambiaste en ella, sin decirte a la cara cuanto te quiero, y ahora por alguna razón del destino, tampoco podré decírtelo de frente… me alejo definitivamente tal como prometí, porque no quiero que sigas sufriendo por mi causa o hacerte más daño sin querer, porque ya no puedo seguir esperando a que venzas ese maldito orgullo tan fuerte que tienes y me digas lo que de verdad sientes, porque a pesar de haber intentado hacer de todo para convencerte que esta vez sería diferente te negaste a verlo, y porque pese a que quise regalarte de todas las maneras posibles pruebas de mis verdaderos sentimientos, fracasé rotundamente; me voy en paz porque sé bien que intenté y peleé por lo nuestro hasta el final, y lo único que puedo pedirte es que no me odies por salir corriendo al perder, y que si algún día te acuerdas de mí, solo pienses en los buenos momentos, lamento dejarte ir y salir de tu vida así, pero cumpliré mi palabra a pesar de no querer hacerlo, me marcho deseándote sinceramente que seas feliz y que encuentres lo que buscas en la vida, y lo siento pero no podré evitar llevarte conmigo, tal vez podré continuar perfectamente mi vida aun sin motivos para hacerlo, tal vez volvamos a empezar otras etapas, tal vez encuentres a alguien más, o yo trate de buscar cariño en alguien distinto, pero por más que desee, no estoy muy segura de que alguna vez te olvidaré… como sea, siéntete tranquila y disfruta recuperar tu vida como mereces que yo por mi parte haré lo mismo. Por último te dejo todo lo que alguna vez te escribí a lo largo de este tiempo, las muchas cartas que alguna vez te hice imaginando el día en que te las daría, las canciones que alguna vez quise dedicarte, y el regalo que jamás te pude entregar la ultima vez que me fui sin verte, te dejo todo porque de esta manera te dejo también mi pasado y mi presente, es todo lo que soy y de igual forma, has con el futuro lo que desees, pon el punto final cuando lo decidas o destrúyelo si así prefieres… te deseo lo mejor del mundo y desde cualquier parte de él, tendrás siempre a alguien que no podrá dejar de amarte como nadie más podrá. Adiós mi corderito, gracias por todo. Andy”
Cuando al fin vacié mi alma y sentí que mi corazón se iba apagando resignado a dejarte, doblé por la mitad la carta y la puse frente a la carpeta en que guardaba todos los escritos que tenía de ti, volví a meter el delicado colgante en su antiguo empaque, revisé mi reloj para comprobar que a esa hora debías estar en el hospital y tomando un gran suspiro de aire caminé hacia tu cuarto, toqué levemente sólo para comprobar que no estabas en él y giré la manija para entrar, sentir tu dulce aroma flotando por todo el lugar fue como probar el daño vivo e hiriente del veneno, puse la carpeta sobre tu cama, el envejecido paquete sobre ella y mi carta a un lado, recorrí por un segundo la suavidad del edredón de tu cama comparándola sin querer con la de tu piel, y tratando de no llorar ridículamente pasé por última vez la mirada por tu habitación recordando cuando tenía un montón de posters y dibujitos como la primera vez que la vi, en eso fijé mi vista inesperadamente en el librero donde habían unos de tus viejos discos, me acerqué para comprobar que a pesar de todos los años, siempre mantuvimos muchos de nuestros gustos iguales y al ponerlos de nuevo en su lugar, moví accidentalmente un portarretratos, cuando lo tomé para recolocarlo en su sitio, me di cuenta de que se trataba de aquella foto que tomaste en tu departamento después de pasar la noche conmigo, la habías conservado a pesar de que me borraste de tu vida, sonreí levemente pensando en lo que habíamos cambiado en estos años al ver esa imagen, pero mejor la puse no recuerdo bien donde y me salí antes de quebrarme completamente al darme cuenta de que ya nada era como antes.
Al salir apresuradamente de tu habitación me dirigí a la cocina para tomar un maldito vaso de agua y calmar ese sentimentalismo inútil, pero sin esperarlo me encontré allí a Doña Helena, me saludó alegremente como siempre y traté de responder a su ánimo lo mejor que pude, me serví el vaso con agua y mientras bebía, ella me contaba de cómo les había ido esa la mañana al despedir a sus parientes y de que en el camino había hablado por teléfono con Rebeca que se encontraba súper feliz de luna de miel con Héctor (y cómo no!!! ;) jaja), pero antes de que me preguntara si quería comer algo ligero le dije que ya me tenía que ir, sin entender bien porqué lo decía me preguntó que a dónde iba o que si iba a regresar antes de la cena, pero entonces tomé asiento frente a ella y le dije lo más calmado que pude que se lo agradecía mucho pero que no lo haría pues ese mismo día ya me iba del rancho, tenía que pasar a arreglar unos asuntos a las oficinas de mi padre pero esperaba que esa misma noche me regresara a Europa definitivamente, Doña Helena guardó silencio por un segundo y me preguntó preocupada si había algún problema que me hiciera regresar tan apresuradamente, pero sólo me encogí de hombros y le dije algo desanimada que simplemente las cosas que vine a arreglar no habían resultado como esperaba así que era mejor volver, ella entonces detuvo un momento lo que estaba haciendo para la comida, se dio la vuelta para tomar asiento junto a mí y tomando mi mano me dijo que tenía la esperanza de que ésta vez me quedaría.
Yo bajé un tanto la mirada al suelo y le contesté que igualmente yo tenía esa esperanza pero que a veces simplemente no tienes lo que esperas, o que no esperas lo que obtienes, entonces ella con una breve sonrisa bastante astuta me preguntó directamente: lo dices por mi hija verdad??... por Marcela - yo al alzar la mirada completamente sorprendida de que ya lo supiera traté de explicarle todo sin ponerme a balbucear en el proceso, pero al notar como me sonrojé levemente se acercó a mas a mí, se rió y me dijo: ayyyy niña!!!!, creíste que no lo sabía, o que no me daría cuenta sólo con verte?? jaja, te conozco chiquilla y veo que tú sientes algo muy fuerte… y no sé que es lo que pasó entre ustedes, pero no crees que irte definitivamente es demasiado??- yo le dije todo lo que sentía por ti, pero al final nada funcionó como esperaba y cuando empecé a decirle que por eso irme era lo mejor para las dos, ella me cortó diciendo: a ver, déjame contarte algo: mi hija siempre fue una niña maravillosa pero también se portaba algo diferente, cuando empezó a crecer me di cuenta de que aunque se llevaba bien con los muchachos y hacía algunos amigos, jamás se interesó ni se involucró con alguno, a diferencia de Rebeca siempre mantuvo alejada su vida personal de la familia, jamás nos lo dijo pero nos dimos cuenta de que prefería estar con las chicas, al principio no quise aceptarlo porque me costó mucho trabajo, pensaba que con el tiempo cambiaría o conocería alguien y eso pasaría, a veces la presionaba y la hacía sentir muy mal, pero entonces mi marido me hizo darme cuenta de que realmente no importaba quien fuera, si al final la hacían feliz, que eso era lo único que importaba, así que comencé a aceptarlo, luego te conoció y al empezar a tener trato contigo la empecé a notar muy contenta, supe al instante que se iba enamorando de ti poco a poco, la noté tan ilusionada como con nadie había estado, pero tu parecías simplemente no hacerle mucho caso…- me quedé asimilando un poco todo lo que me decía sin decir una sola palabra.
Entonces como no la interrumpí Doña Helena continuó con su alegre y musical voz: yo no quise meterme nunca porque sé como es, pero a pesar de que solo la tratabas como amiga todo mundo notó que la traías loquita (menos yo ¬¬, que estúpida!!) , empecé a hacerme esperanzas como ya te conocía de que te fijaras en ella pues siempre me pareciste una magnifica persona y se veía que tenían mucho en común… ayyyy!!! incluso un día llegó súper feliz aquí y pensé que tal vez ya se había decidido a confesarte algo, pero unos días después Rebe nos dijo que te ibas, así que nunca supe si se dio algo más o si tu sentías lo mismo, pero poco a poco esa alegría se fue apagando, nunca nos lo dijo pero sé que estaba enamoradísima de ti, y por eso desde que te fuiste ella sufrió muchísimo, se tragó todas esas emociones a pesar de que intenté más de una vez que se abriera conmigo, ella cambió tanto con tu partida, trató de superar sus sentimientos volviéndose más fría, mas cerebral y mas precavida, sinceramente no creo que pudiera olvidarte por completo porque cuando empezó a salir de nuevo, jamás dejó que conociéramos a nadie porque ni ella mismo tomó en serio ninguna de sus relaciones y entonces volviste, vi como antes de que llegaras estaba bien nerviosa y tal vez por eso se portó tan mal contigo, pero entonces vi como la mirabas, y supe que si les ayudábamos un poquito con el tiempo renacería todo, mas ahora que estaba segura de que tu sí sentías lo mismo… por eso no entiendo porque ahora te vas así de pronto, conozco bien a mi hija y aunque tenga miedo de aceptarlo sé que ella te quiere igual o más que antes, y lo veo también en ti, veo frente a mi a la persona que la haría completamente feliz y no podría estar más de acuerdo con eso, así que no te puedo pedir nada, pero creo que deberías quedarte…- yo me quedé asombrada escuchando lo que tu madre me decía, pero no tuve más remedio que decirle que eso lo habías decidido tú, y que si me iba era porque ya estaba cansada de esperar por ti cuando todo apuntaba a separarnos, ya no podía más y no me quedaría conformándome sólo con verte a lo lejos.
Viendo ya mi decisión inamovible, Doña Helena no tuvo más remedio que desearme entonces toda la suerte del mundo aunque me dijo que presentía que no sería un adiós definitivo como yo decía, desafortunadamente no estaba Don Fabián para poder despedirme de él, le pedí a ella que me despidiera de él en cuanto lo viera y que le diera las gracias por todo, y ya luego que regresara, yo hablaría con Rebeca, me ofreció que un trabajador me llevara a donde quisiera ir, pero preferí llamar a un taxi a pesar de sus insistencias; pasé primero a dejar mis cosas a mi antigua casa, me cambié de ropa y luego salí inmediatamente para no deprimirme completamente, comencé a caminar primero hasta el parque, me quedé un rato allí meditando si lo que estaba haciendo era verdaderamente lo correcto, y sin pensarlo comencé a recordar todas las veces que había estado en ese mismo lugar, de hecho la ultima vez que pasé por ahí fue aquella vez en tu y yo que salimos a cenar (ok ¬¬ eso no me hacía nada bien, pero ni modo), pasé a comer y luego me preparé para ir a la oficina de uno de los socios de mi padre con quien trabajaría si me quedaba, sólo para avisarle de mi regreso a Europa y ver quien se encargaría del proyecto de negocios que me querían asignar, sin embargo, en ese momento no había ningún responsable del plan que pudiera atenderme pues aun no regresaban de vacaciones, decidí esperar por alguien a quien avisarle mi decisión pero como no llegaba nadie, me puse a revisar si lo que mi papá me había pedido que hiciera había salido completamente bien, así que me entretuve otro poco trabajando con mis análisis y sin querer se me hizo tarde para hacer la reserva de boletos de avión pues no quería viajar tan noche, así que al salir de la oficina decidí que como me sentía bastante desanimada me iría mejor a tratar de descansar de nuevo a mi antigua casa, después llamaría a mi padre y le comunicaría mi decisión.
Por como me sentía tal vez hubiera sido mejor sólo tomar mis cosas, dirigirme imprudentemente todo el camino hasta a subirme en el avión y largarme de una vez por todas, o también pude tomar la tentadora idea de meterme en cualquier bar que encontrara en el camino y beberme el sitio entero hasta noquearme de tanto alcohol probando mi nuevo límite, o porque no, tal vez también pude haberme desquitado del destino buscando una compañía pasajera por esa noche… pero por alguna razón no lo hice y me fui directo a lo que fue mi hogar cuando era pequeña, el aire frío que soplaba fuertemente durante todo el camino no calmaba en nada el creciente dolor de cabeza; al llegar como no tenía nada de sueño y por mas que quisiera no dejaba de pensar en ti, me puse a ordenar un poco lo que encontré fuera de su sitio pero todo estaba completamente amueblado y listo para usarse como había dispuesto mi padre para mi comodidad antes de mi llegada, encendí la tele un momento pero nada de lo que había me distrajo lo suficiente, fui al cuarto de baño a mojarme un poco la cabeza pues el dolor no cedía (mejor la hubiera puesto en remojo XD jaja), traté de no prestar demasiada atención al hecho de que como decoración, estaba colgada de su base la guitarra que mi madre me regaló y con la que alguna vez me hiciste soñar cuando tocaste con ella para mi, me fui mejor a recostar en la habitación grande, quise poner un poco de música pero sabía que si lo hacía terminaría por hundirme en la soledad irremediablemente (aunque ya estaba muy cerca), empezaba a arrepentirme seriamente de no haber ido mejor al bar, incluso aún estaba analizando seriamente la idea de salir a comprar una botella (o tal vez dos :D jaja) y regresar a beberla entera hasta ya no sentir nada más, pero ya no tenía caso, de cualquier manera el dolor interno seguiría, y era mejor que me acostumbrara a que desde ahora mis días serían igual de tristes, absurdos, patéticos y vacíos sin ti, y el alcohol no haría ninguna diferencia en ello… pero en eso alguien llamó a mi puerta.
Me extraño mucho que alguien tocara la puerta pues no había nadie que tuviera una razón para hacerlo o mucho menos alguien a quien pudiera esperar, por eso al principio no quise ir a ver quien era pensando que quizás fue alguien que tocó por error, pero al sonar de nuevo el timbre, me levanté y caminé con pesadez a abrir la puerta, no quería ver a nadie ni hablar, ni escuchar, no quería nada, y por supuesto que lo menos que me esperé fue verte ahí, un ligero nudo en el estómago producto de la impresión me invadió, te noté nerviosa, inquieta y bastante alterada, pero te veías increíblemente bien con las mejillas sonrojadas por el frío y el cabello revuelto por el aire, en cuanto me viste balbuceaste simplemente: estas aquí… no te has ido… - ( ¬¬ hubiera estado mejor un hola al menos jaja) te hice el ademán con mi mano para que pasaras, cerré la puerta tras de ti y mientras te acomodabas el pelo con la mano y te quedabas parada junto a la puerta te dije secamente: sí, aun no me voy, fui a arreglar unos asuntos a la ex oficina de papá y se me hizo tarde para tomar el vuelo, pero tranquila sólo por hoy me quedo… cumpliré lo que te dije - entonces me miraste angustiada y con ojos un tanto acuosos me dijiste: por favor no lo hagas, yo no te pedí eso …- entonces te interrumpí gritando un tanto desesperada: ya lo sé!!, tu simplemente no me pediste nada!!...ahh pero entiende, yo no puedo quedarme aquí porque ya no hay ningún motivo para hacerlo, nada que me retenga, quería que tú fueras ese motivo pero elegiste algo diferente, así que… es mejor que me vaya y trate de continuar con mi vida - entonces tus lágrimas empezaron a fluir, yo a sufrir silenciosamente viéndote así y de forma casi inaudible dijiste entre llanto: yooo… no quiero que te vayas - me pasmé un momento creyendo que había escuchado mal, o que quizás comenzaba a enloquecer más de lo normal (que era muy posible XD jaja) y solo escuchaba lo que quería escuchar.
Al ver que no respondí nada comenzaste a decir apresurada y nerviosamente sin dejar de llorar: por favor perdóname por lo que dije, soy una tonta, y también tenías razón, soy muy cobarde por no aceptar ni poder decirte que en realidad no quiero que te vayas de nuevo, tenía miedo de no ser capaz de estar sin ti y para probarme que era mas fuerte que mis sentimientos quise alejarte, pero es peor dejar que te vayas porque simplemente no voy a poder soportarlo otra vez y quedarme con todo lo que siento… me di cuenta de eso cuando llegué a casa y no te encontré, leí tu carta y parte de todo lo que me escribiste hace años, me asusté tanto pensar que ya te habías ido, llamé como loca pero estaba apagado tu móvil, te busqué donde pude y se me ocurrió que quizás podrías estar aquí y ahora que te encontré sé bien que lo que dije no es lo que quiero en realidad- con todo lo que brotaba de tu boca, no pude más que preguntarte, entonces que es lo que querías de verdad, tu me miraste con esos ojitos que me robaban el aliento y me dijiste mirando al piso: la verdad es… que quiero que te quedes aquí conmigo o irme contigo, no importa… luché tanto por no volver a enamorarme de ti, pensé que podía hacerlo, pero no, tenía miedo de volver a sufrir como antes, pero no puedo dejar de amar tus locuras, tu sonrisa, tu mirada, el cómo eres… simplemente no he podido dejar de amarte desde hace años, y por eso estoy aquí para disculparme y pedirte que no te vayas, no importa lo que tenga que hac… - al escuchar eso, una enorme sonrisa se dibujó en mi cara y tomando tu rostro entre mis manos, me acerqué para poner mis labios sobre los tuyos sólo por un segundo, sólo para comprobar que no estaba soñando, después de que me separé, alzando la mirada preguntaste tontamente que significaba eso, entonces volví a interrumpirte haciendo lo mismo y mucho mas sorprendida me dijiste mientras tus lágrimas paraban poco a poco, que por favor te dijera que significaba que me quedaba, entonces yo te sonreí, te apreté un poco contra la puerta, alcé tiernamente tu rostro para mirarte fijamente, dejé descansar mi otra mano en tu cintura y te dije: significa, que te amo, y lo he hecho desde aquel momento y durante todo este tiempo, y lo seguiré haciendo hasta que ya no respire… y si tú sientes lo mismo, sólo cállate y bésame - al escuchar eso te reíste de mi sorprendente sensibilidad para decírtelo, tal y como era mi intensión.
Y entonces sucedió, mi corazón extrañamente se detuvo y volvió a latir al mismo tiempo en cuanto tus labios se decidieron a tomar mi boca, la suavidad de aquel contacto me hizo estremecer, cerré con fuerza mis ojos tratando de detener el tiempo en mi memoria, por un segundo llegué a pensar que de verdad todo parecía un sueño, pero se sentía demasiado real la calidez de tus labios, el envolvente sabor de tu boca, la forma en que me abrazabas y yo a ti, nuestra respiración acompasada, el aroma de tu cabello y el perfume de tu piel… poco a poco el alma que se me había escapado regresó a mi, y la fuerza del deseo se apoderó de nosotros, ese beso se hizo más intenso, y la necesidad de mis manos de correr por tu cuerpo fueron más grandes, sentí como tu respiración se aceleró, y tu sangre comenzó a calentarse poco a poco cuando te apretaste contra mi cuerpo, el roce de tu candente cuerpo y las enloquecidas ganas de tomarte por fin después de tanto esperar no evitaron que las caricias fueran suaves y tiernas al igual que pasionales, ahí mismo comenzaste a deshacerte de mi ropa y te quitaste el abrigo que llevabas, dejaste caer el saco que traía puesto, y sin dejar de besarme te aferraste a mi de la forma en que más me gustaba; mientras nos dirigíamos lentamente a la habitación, repetiste que me amabas, estuve a punto de llorar de felicidad al escucharte decir eso, y tras un alegre suspiro terminé de regalarte el corazón al decirte las mismas palabras y besarte como jamás podría besar a nadie más.
Esa noche fue fantástica, simplemente mágica, tomamos lo que el destino nos regaló y detuvimos al mundo entero, era nuestro momento, era la recompensa por tanta espera y por tanto sufrir, te hice mía y yo me entregué a ti, encontré intacta a la chica que hace años me había robado la razón y disfruté plenamente conocer a la mujer que amaría para toda la vida, me tomé toda la calma para ir descubriendo las delicias de tu cuerpo, y todo quemaba en mi piel con el eléctrico toque de tus manos o el delicioso contacto de tus labios, recorrí infinitamente cada rincón de ti hasta morirme con el sabor de tu cuerpo, viví de tu pasión al beberte entera hasta hacerte enloquecer, mis manos cruzaron el umbral del paraíso con cada roce que te hacía temblar, me llevaste al infinito en las miles de explosiones que nuestro amor creaba, nuestra piel se reconocía y se encontraba en una dicha maravillosa, los sentimientos salieron en las muchas formas que encontramos para decirlos, se sacudió todo con la ligereza y el sonido ahogado de las palabras que realmente nadie comprendió del todo porque al final significaban lo mismo, al final lo único que todo decía era en cuatro letras, me dejé vencer completamente en tus brazos tras el largo combate de la seducción, y el dolor que me desgarró el alma se curó con la poderosa magia de tu mirada… el despertar, bueno simplemente fue el más dulce que haya tenido en la vida, sentir tu presencia en mi cama, y tus caricias y besos recorrer mi espalda y la nuca; me giré completamente feliz, sonreíste y dijiste con voz pastosa hola, te abracé colocándote encima de mi, te di un besito en los labios antes de contestar tu saludo, perdiéndome en la ternura de tu mirada mientras acariciabas el cabello de mi frente, luego pusiste esa sexy mirada intelectual estudiándome y riéndome te dije cuanto me gustabas con esa mirada y pregunté en que pensabas, me dijiste que pensaste en todo el tiempo que inútilmente esperaste para estar así conmigo, y que no podías creer que ibas a hacer la estupidez de dejarme ir cuando me amabas tanto, luego me hiciste la misma pregunta y simplemente respondí: pienso… en cuánto te amo, y en todas las locuras que hice por eso jajaja, pero creo que no podría querer un mejor final para mi patética historia de amor- entonces me dijiste sonriente que también era el mejor principio para NUESTRA historia y después me volviste a besar, deteniendo el tiempo, mostrándome que todo había valido la pena y escribiendo así nuestro destino.
Bien, antes que nada, lamento haber tardado más de lo que quería en subir la última parte, pero espero les haya gustado el final, traté de cumplir todas sus expectativas, sino pues ya ni modo jaja, bueno en serio recibiré como siempre sus comentarios, opiniones o críticas, y como siempre agradezco enormemente el que hayan esperado y que se hayan tomado tiempo para seguir leyendo, es un verdadero honor y significa mucho para mí. Ya que estoy en eso, agradezco enormemente a todas las personas que me acompañaron a lo largo de éste reto, jamás me había atrevido a hacer tan público lo que escribía, y por eso les doy las gracias, tal vez sólo vieron el resultado final con cada parte que subía pero, detrás de ello, esta el esfuerzo, las esperanzas de que guste, la frustración por no quedar conforme a cada paso y la constante evolución hasta llegar al resultado que quería, gracias por todos los ánimos que me dieron para seguir escribiendo, por divertir a mi lado malvado ¬¬ con lo que luego ponían jaja, a mis “fans” jaja muchas gracias jaja, es un gran empuje a mi ego y no esta nada mal XD, lamento las muchas de tonterías que llegué a poner, y todo el drama que llegué a crear, sorry por las lágrimas de quien le ganaron las emociones, pero al final realmente traté de cumplirles lo mejor que pude… como sea, aunque parezca cursi y estilo entrega de premios jajaja :D voy a agradecerles oficialmente a las siguientes personitas por haberse tomado el tiempo de comentar: KrlitaVzla (ID: 1375509) , HombreFX (ID: 853437) , Pinky NGirl (ID: 1377824) , Krizty (ID: 1337532) , Len Scene (ID: 1371240) , Payooya (ID: 1029579) , marie (ID: 1377540) , Venzlanita92 (ID: 1362600) , MakeDamnSure (ID: 1371329) , lisa (ID: 1367071) , ALEXMVU (ID: 1369323) , boavista (ID: 1363409) , yulizaaa (ID: 1378025) , centinela (ID: 1286464) , macarena20 (ID: 1378328) , Ambar (ID: 1376347) , landey (ID: 1380855) , saray (ID: 1336067) , LLUPPINNA (ID: 1365013) , absa (ID: 1360555) , Andrea332 (ID: 1385639) , inspiradah (ID: 1351982) , lili4nha3093 (ID: 1388446) , Alexandra (ID: 1382246) , Blike (ID: 1384709) , nenaless17 (ID: 1343142) , martha4 (ID: 1369313) , Lexie1221 (ID: 1369605) , karina (ID: 1255308) , airam23 (ID: 1349846) , lolis (ID: 1314947) , ovi (ID: 1388937) , Nahomy (ID: 1371862) y a BUTLER (ID: 1372445) …. Y a los demás lectores que me siguieron desde el principio o los nuevos, aunque no hayan comentado, muchas gracias sólo por leer; ahhh se me olvidaba, perdón por la espera, pero ya les dejo un correo que abrí exclusivo para ustedes, así que cualquier cosa, duda o lo que quieran decirme (incluso correos bomba ¬¬ jajaja), adelante estaré encantada de responderles, saludos, un abrazo enorme y un beso