Ella fantasía, Tú una realidad 14

Estableciendo el cambio de tácticas...

Muchas veces he escuchado que el amor es un juego que hay que saber cómo jugarlo, una buena estrategia aplicada en el momento correcto puede hacer que consigas la victoria pero hay que ser pacientes y hacer que la otra parte siga tus pasos ya que no hay que perder de vista que se trata de dos personas y puedes perder así… nunca antes me había visto en esa situación porque sencillamente jamás sentí por nadie lo que sentía por ti, cierto que hace años creí (resaltando muy estúpidamente XD jaja) que había encontrado la persona a la que amar en Rebeca, pero tal y como tú me dijiste alguna vez eso no era amor, fue solo un enamoramiento muy intenso pero al fin pasajero y no era lo mismo porque lo único que veía en ella era el idealismo de todo lo que yo buscaba en realidad, eran ideas simplemente formuladas que me enloquecieron y todo eso, pero que después hallé verdaderamente en ti sin buscarlo ni notarlo antes, fuiste tú precisamente quien me dio todo eso que quería y necesitaba, aquello que me hizo cambiar, volver a ilusionarme, renovarme, curar mi dolor, salvarme, llenarme de felicidad, suspirar, emocionarme, sonreír, llorar, sufrir… contigo descubrí lo que era amar de verdad… sin embargo el destino nos separó y llegué a aceptar el hecho de dejarte ir en mi pasado olvidando ese amor enterrándolo en mi memoria porque era lo más adecuado pero justamente ese juego de la vida nos había vuelto a unir esta vez en el mismo espacio y tiempo mostrándome además que aunque muchas veces la cabeza mande lo que hacemos o las decisiones que tomemos, el corazón también tiene mucho mejor memoria y fuerza a la que es imposible callar cuando vale la pena a quien recordar y a quien buscar.

Ya había perdido algo de tiempo en mis idioteces de interpretar el papel seductor para atraerte inevitablemente de nuevo a mí sin que funcionara como esperaba, pero ahora que había conseguido empezar a construir un puente que nos volviera a acercar no desperdiciaría ni un solo minuto sin moverme cautelosamente hacia ti sin importar lo que la vida me pusiera enfrente, tal vez sería hasta divertido jugar, convencerte, tentarte o cazarte de a poco… primeramente tendría que frenar y controlar mis deseos por volver a tocarte o besarte sin tu permiso (ahhh L que mal plan) , aunque me muriera de ganas no debía hacerlo para no molestarte y perder así mi segunda oportunidad contigo; después de  haber hablado poco a poco tuviste una mucho mejor actitud hacia mí, claro que tanto Rebeca como yo nos alegramos mucho al notar ese cambio aunque ninguna te lo mencionó abiertamente (igual y te echabas para atrás jajaja :D); por otra parte, decidí también atacar por otro lado, pues aunque ya gozaba de la simpatía de toda tu familia desde hace años, me esforcé mucho más en ser completamente un encanto para tus padres, si bien era en parte como agradecimiento y por el afecto sincero que les tenía desde hace mucho, también quería asegurar más puntos a mi favor al mostrarles completamente la clase de persona que era, además que si mi plan resultaba bien al final, pensaba que sería menos probable enfrentar algún problema que muy posiblemente pudiera surgir en cuanto ellos se enteraran, no sabía a ciencia cierta lo que pensaban en ese aspecto y como no iba a preguntar para no arruinarlo antes, entonces sería mejor si me dedicaba también a convencerlos con mi actitud, igual y hasta terminarían por apoyarme.

En los cortos momentos en que estaba contigo te dejé de fastidiar continuamente insinuándote cosas muy abiertamente, haciendo comentarios ocurrentes en doble sentido, recorriéndote desvergonzadamente con la mirada o persiguiéndote a cada paso que dabas pues trataba primero de que volvieras a sentirte cómoda con mi presencia o al menos incomoda en el buen sentido ;) jaja, trataba de que platicáramos como antes de cualquier cosa y poco a poco lo fui logrando, seguías siendo un poco desconfiada, reservada, callada y evasiva pero ahora ya te permitías reír tímidamente cuando hacía algún comentario gracioso frente a alguien más, así pasaron un par de días, la tensión disminuyó bastante y cada vez que podía tener un gesto amable para ti siempre lo hacía, no esperaba mucho con eso pero sí ir ganando un poquito de terreno cada vez, a veces funcionaba pero a veces parecías no notarlo; los últimos preparativos para la boda de Beks ayudaron muchísimo ya que me permitían estar cerca de ti cuando tenías tiempo, pasada casi una semana ya nos hablábamos mucho mejor, eran platicas amables y bastante intelectuales pero no te presioné con cosas muy sentimentales y personales acerca de nuestro pasado en común (bueno no mucho jaja XD), sólo a veces soltaba alguno que otro cumplido o coqueteo muy sutil que al principio no te agradaban del todo pero después llegabas a sonreír por un segundo, los agradecías o incluso a veces parecía que los contestabas con tu mirada… aun así una parte de mí mucho más racional también se frenaba pues estaba arriesgando también demasiado, no quería salir otra vez con el corazón irreparablemente herido si fallaba porque sabía que si te perdía, también perdería todo lo que era, me estaba poniendo a prueba y apostando todo frente a ti en el juego del “todo o nada” pero lo haría con calma, te daría y me daría tiempo suficiente para avivar esa pequeña chispa que mantenía encendida, sabía que no contaba con mucho a mi favor pero de alguna manera alargaría los momentos conquistándote  a cada paso, resultó que inesperadamente contaba con varios días más, ya que según Beks, su boda sería a finales de ese mes (yeahh!!! las ventajas de nunca ver el calendario para planear las cosas jajajaj XD).

Lentamente iba descubriendo y recordando partes de la chica a la que había conocido y de la que me había enamorado perdidamente hace tanto tiempo, pero también se iba revelando la mujer en que esa chica se había convertido al paso de los años, y aunque igual que tú, yo también había cambiado un poco me seguías gustando y sorprendiendo tanto o igual que antes (está bien, mucho más :D jaja) si ya antes te admiraba y te quería por todas las enormes cualidades y talentos que tenías ahora era más grande el sentimiento, me asombraba  por la clase de persona que eras, la inteligencia de la que estabas dotada, la entrega y esfuerzo con que trabajabas a diario, a cada instante me la pasaba pensando en ti, cada vez que te veía mi mundo se estremecía y el deseo de tocarte me quemaba, cuando escuchaba tu dulce voz hacía que todo en mí vibrara, no paraba de sonreír cada vez que aparecías, mis ojos se iluminaban sin importar si alguien más podía notarlo, la respiración se paraba y el pulso se aceleraba desbocado, era alucinante y también bastante frustrante estar conviviendo tan cerca y sin poder tenerte, en las noches la única cosa que se metía en mis sueños eras tú, cada noche desde que había llegado imaginaba volver a probar tus labios, beber de tu boca como antes, perderme en la luz de tu mirada, aspirar de cerca el aroma de tu pelo, llenarme con la ternura de tu sonrisa, recorrer tu cuerpo tibio con mis manos, volver a probar tu piel tan suave, hundir mi boca en tus pechos mientras acunaras mi cara en ellos, hacer que suspiraras y respiraras aceleradamente con sólo lamer y succionar tus endurecidos pezones rozados, seguir el camino que las deliciosas curvas de tu cuerpo marcaran, saciar mi sed con el dulce néctar de tu cuerpo y alimentarme con la jugosa y tierna carne que hervía por dentro, hacer que acabaras enloqueciendo con un poderoso estallido, con todo el cuerpo palpitando de placer, el alma enteramente enamorada y yo plenamente satisfecha; era casi imposible conciliar el sueño así, ansiándote tanto y por las mañanas volverte a ver tan hermosa como siempre pero lejos de mí, sin poder ni calmar mis ansias con un abrazo o un beso (pero tenía que portarme bien ¬¬) , dolía desearte tanto y a la vez era inevitable amarte así, ya no podía seguir negándomelo ni evadiéndolo, cada minuto que pasaba contigo era para confirmar el hecho de que yo me enamoré de ti de forma sorpresiva hace tanto cuando tu aún me querías, te amé de lejos durante todos estos años mientras tú me olvidabas y lo seguía haciendo ahora que había vuelto y parecía ya no importarte como a mí.

Aun así mis esfuerzos a veces me recompensaban con ver de cerca las pequeñas muestras de las cosas que tanto me gustaban de ti y que eran la motivación necesaria para continuar mi plan, disfruté tanto esta vez ir gradualmente derrumbando tus heladas murallas, domesticando tu frialdad, haciendo que calleras en mi encanto y fueras respondiendo, quitándote las duras máscaras de protección y desnudando las capas de inteligencia calculadora con las que cubrías tus sentimientos (lástima que no podía desnudar otra cosa ;) jaja)… aun no llegaba la familiaridad del trato que antes tuvimos (me seguías llamando por mi nombre completo ¬¬) pero sentía que ya no estábamos tan lejos como cuando recién volví; pero a la vida siempre le gustó ponerme pruebas difíciles de superar para cumplir mis objetivos más ansiados, pero tal y como tu algún día me dijiste se debía a que algo bueno me esperaba y era así porque yo podía vencer esos obstáculos, y conseguir estar contigo al fin era lo que más quería sin importar nada… poco antes de ese fin de semana empecé a hacer los planes de una despedida de soltera para Beks por ser su mejor amiga (seeee fiesta salvaje!!! Yeah!!! XD jajajaja), en parte tú y Doña Helena me ayudaron con lo referente a las invitadas y otros detalles, de hecho como tú y Rebeca seguían siendo tan unidas sabías perfectamente a quien debía invitar aunque por tus ocupaciones tan agitadas no podías dedicar el mismo tiempo que yo, así que ese viernes Doña Helena me dijo que una noche antes te había pedido que le hicieras una lista de invitados y me la dieras para que yo arreglara los horarios, la fecha y cualquier otra cosa, aunque cuando regresé de correr a la mañana siguiente tú ya te habías ido y no pudiste entregármela, le pregunté a tu mamá se la habías dado a ella pero me dijo que no, que seguramente se te había olvidado y te la habías llevado, así que me dijo la dirección del hospital donde estabas haciendo tu internado, era importante tener la lista pues de lo contrario ese día te tocaba hacer guardia y entonces no regresarías hasta después del fin y para ese entonces el tiempo no sería de gran ayuda así que alguien tenía que ir a buscarte.

Ella me comentó que asistirías a una conferencia antes en el auditorio del mismo lugar y que luego tendrías un breve receso antes de comenzar tu guardia pero no sabía exactamente la hora, hicimos un cálculo aproximado y obviamente me ofrecí para ir a buscarte a lo que ella acepto encantada ( woow mis planes si funcionaron jaja :D ); como sabía que no podía ir a presentarme así como así a verte porque estarías ocupada y seguramente no te gustaría mucho la idea, además de que seguramente el acceso sería restringido decidí llegar antes de la hora calculada aunque tuviera que esperar, al llegar al área clínica que me había indicado Doña Helena, me dirigí a la enfermera detrás del escritorio quien me informó donde estabas, aunque no fue muy amable ni de mucha ayuda con sus pocas palabras ni su sutil interrogatorio, me recomendó que mejor regresara después de una hora o más pues la conferencia aun no terminaba pero aun así decidí mejor esperar y aquella mujer mucho más bajita y voluminosa que yo me dijo con tono autoritario y algo serio que entonces esperara sentada y en silencio en uno de los sillones que había antes del área de terapia y diversión infantil que ahí estaba (O_o sí me dio miedo y mejor le hice caso jaja); tomé asiento en la pequeña sala, los sillones eran blancos igual que toda la sala y contrastaba con las manchas de color de las paredes dentro de la sala de terapia, los juegos y la puerta de cristal decorada con dibujos coloridos que se encontraba al fondo del pequeño pasillo frente al escritorio de informes y de espaldas al pequeño sofá donde yo estaba sentada; para no aburrirme tomé una de las revistas que ahí se encontraban y me puse a leer (aunque no entendí nada de lo que decía :D jaja), justo después de unos minutos la sala se quedó casi en silencio excepto por los sonidos lejanos detrás de esa puerta que  llenaban el ambiente, la asistente comenzó a dormitar ahí mismo sentada mientras que yo estaba aburriéndome horriblemente y lamentando no haber llevado mi reproductor de música.

Mientras seguía torturándome tratando de leer algún aburrido párrafo de cualquiera de esaspublicaciones, aquella mujer por fin cerró los ojos durante un par de minutos y de pronto una pequeña pelota de esponja amarilla llegó botando hasta mi zapato, yo dejé la revista, me levanté de mi asiento y alcé la pelota, con el juguete en mi mano busqué de donde había venido tratando de no hacer ruido (para que no me regañaran ^_^ jaja), voltee y hallé escondidos tras la puerta de cristal unos ojitos que me observaban fijamente por lo que caminé hacia allá, sonreí y salude tiernamente a la personita que se escondía de mí; se trataba de un dulce niñito como de unos 6 años, algo delgado, vestido en una de esas batas completas de hospital con muñequitos, algo pálido y con la cabeza rapada a causa del tratamiento pero con una carita inocente y unos ojos claros muy bonitos, yo le devolví el gesto ampliamente en cuanto lo observé y le pregunté por lo bajo si aquella pelota era suya, el asintió lentamente y por tanto estiré la mano ofreciéndosela pero no la tomó y se escondió nuevamente, le volví a insistir pero siguió sin tomar el baloncito, entonces la comencé a rebotar para ofrecérsela nuevamente, el miró hacia la enfermera, luego hizo un ademán indicando silencio y se rio tímidamente, yo imité aquel movimiento mientras también me reía y le insistí acercándole la pelota pero como no la tomó, la volví a rebotar preguntando si en serio no la quería y empecé a hacer malabares con ella en una sola mano, la controlaba sin dejarla caer al suelo mientras hacía que recorriera la palma de mi mano, por mis dedos y la lanzaba a la otra mano, el chiquillo me sonrió ampliamente, me dijo un “ven” bajito y se metió a aquella sala de la que había salido, yo traté de pararlo diciendo que no pero como le debía de devolver su juguete avancé unos cuantos pasos más para quedarme en el filo de la puerta.

Traté de convencerlo diciendo que no podía entrar y le ofrecí de nuevo la pelotita para regresar a mi asiento en la sala de espera pero él me pidió que jugara con ella otra vez, traté de negarme pero al ver su cara tan tierna me convenció (me cayó muy bien ese niño :) ), por ello vigile rápidamente que no me vieran e hice otro pequeño truco, luego él se rió y me lanzó otra de color naranja, le dije que no podía quedarme a jugar con él pero me lo pidió tan tierno que no me pude negar, volví a hacer varios malabares con una sola mano mientras él se reía y aplaudía, luego fue y me tomó de la mano haciéndome pasar a aquella habitación, no tuve más remedio que entrar, le pregunté su nombre, por fin habló conmigo para contestarme y le dije el mío, me pidió que siguiera jugando, me insistió tanto con una sonrisa y un “por fa” entonces yo en serio divertida me rendí y comencé a lanzar ambas pelotas por los aires mientras hacía trucos y movimientos con mismuñecas, las golpeaba para impulsarlas con mis manos, codos, hombros y cabeza, las lanzaba y hacía que recorrieran mis brazos (también tenía habilidades de cirquero XD jajaja); sin darme cuenta pronto estuve rodeada de otros niños y niñas casi de la misma edad y en similar apariencia debido a sus padecimientos que se acercaron a mí en cuanto vieron lo que hacía, ellos se divertían igual que yo, una niña me ofreció otra bola color azul para que la lanzara, luego improvisando un juego realicé varios trucos para que todos jugaran conmigo también, ellos estaban a mi alrededor, les decía colores  o sus nombres y me arrojaban pelotas o aros pequeños que yo atrapaba, malabareaba y les devolvía en movimientos rápidos… las risas alegres de todos esos niños pronto inundaron el cuarto, entonces practiqué mis destrezas en la magia y la comedia para entretenerlos y hacerlos reír igual que yo (hasta podía hacerla de payaso :D jajaja); justo en esa pequeña fiesta infantil estaba cuando aquella enfermera entró junto contigo.

Al verte con ese look intelectual, el cabello recogido en una cola, los pantalones blancos algo ajustados, la blusa rosa que resaltaba tu piel y la bata blanca que se ajustaba ligeramente por tu cuerpo ahí mismo parada en la puerta, provocó que perdiera el ritmo en mis malabares e hiciste que las pelotas y aros que estaba lanzando por encima de mí cayeran, me golpearan ridículamente en la cabeza y casi hasta me caigo, los niños se rieron de mí y se apartaron un poco, yo te sonreí amplia y tontamente por lo penoso de la situación, la enfermera me miró directamente y me dijo algo seria: le indiqué que permaneciera sentada y en silencio… y EN LA SALA DE ESPERA- yo un poco asustada me apresuré a disculparme muy estúpidamente tratando de acomodar los juguetes, vi como trataste de contener una sonrisa divertida porque como médico a cargo tenías que permanecer en actitud seria ante esa situación, pero entonces aquella mujer se rió brevemente y me felicitó por mi acto, yo le di tímidamente las gracias con un suspiro aliviado, me giñó un ojo indicándome que lo dejaría pasar, luego me despedí sonriente de mis nuevos amiguitos mientras ella de mucho mejor humor entraba a la sala para sus chequeos, te dijo que revisaría sus signos y las tablas de los medicamentos en lo que tenías tu descanso antes de tu guardia; saliste de la sala de terapia infantil calmando a toda costa tu risa, yo te seguí, luego diste la vuelta en un pasillo, abriste la puerta hacia el cuarto donde los médicos residentes tenían sus casilleros y me pediste que entrara, luego te dije a que había venido y traté de contarte cómo fue que había pasado todo, pero me cortaste diciendo un poco más seria: no sé cómo conseguiste entrar hasta aquí, pero no puedes simplemente venir así de pronto y menos tratar de impresionarme rompiendo las reglas del hospital para jugar con mis pacientes, casi todos esos niños estándelicados, tienen varios tipos de cáncer y se están recuperando de su tratamiento, así que no deberías comportarte así sólo para tratar de agradarme con tus tonterías- al escuchar eso se borró mi tonta sonrisa y un poco más seria te dije: no lo hice por esa razón, ni siquiera lo planeaba, pero jamás usaría algo así para mi beneficio… por si no lo recuerdas, yo sé de primera mano lo horrible que es una enfermedad así para cualquier persona, y para un niño debe ser mucho peor, así que si con mis estupideces pude sacarles hoy una sonrisa y alegrarles el día no me voy a arrepentir aunque te molestes- entonces dándote cuenta del error que habías cometido al decirme algo así, tomaste mi mano inconscientemente, pusiste la otra en mi hombro, me dijiste con voz suave que tenía razón y me pediste una muy profunda y sincera disculpa.

Al ver esa generosidad y sinceridad en tu mirada mi corazón se agitó inquieto (además de estar tomando tu mano y muy cerca de ti ;) jaja) negué con la cabeza y te contesté que no había ningún problema,que lo olvidaras; justo ibas a separarte para ir por tus cosas y darme de buena gana la lista que te habían pedido pero entonces yo sin soltar tu mano te jalépor impulso, puse la mía en tu cintura mientras te atrapaba un poco entre los casilleros y te pregunté en tono bromista y de nuevo con una amplia sonrisa: oyee!!... pero al menos dime algo: sí funcionó para impresionarte??...no te vayas, mínimo cuéntame cómo me fue al agradarte- vi un ligero brillo dulce en tu mirada pero luego me hiciste un gesto deincomodidad para cubrir tu reacción ¬¬, me soltaste la mano aun con una media sonrisa y te apartaste de mi para caminar a tu casillero, lo abriste, sacaste rápido un papel doblado con la lista, me lo entregaste y dijiste que dejara mis juegos y que era mejor que ya me fuera pues tenías que trabajar además que no podía quedarme mucho tiempo, yo al divertirme con tus cambios de humor seguí la broma deteniéndote por la cintura para decirte: buuuueeno, si no quieres no me lo tienes que decir, podemos usaralgunas señas: un beso es mal, dos besos bien, que te parece???- animada por mi buen humor y casi sin poder controlar más mis ganas me iba a acercar para asaltar tus labios con los míos y fundirlos en un tierno beso, mis manos ansiaban tocarte desesperadamente, te deseaba completamente, sólo quería un segundo para tenerte y al parecer esta vez no te ibas a negar rotundamente a mí porque no te apartaste ni dijiste nada, pero entonces otra chica abrió la puerta del otro lado y para evitar tener más problemas con las normas del hospital ese día me tuve que separar rápidamente de ti.

La chica entró muy distraída leyendo un expediente, pasó de largo sin notarnos y se acercó a sacar una carpeta de piel de su casillero que estaba junto, era casi de tu misma edad, un tanto más alta, casi completamente delgada sin curvasabundantes, su piel tostada, el cabello rizado y un rostro simpático pero serio y con una mirada café muyculta, iba vestida con un uniforme azul marino de pantalón y camisa cruzada que usaban los terapeutas; justo después de que cerró la puertecita metálica volteo y por fin se dio cuenta de que estabas al lado, en cuanto te vio se acercó a ti, tomó tu rostro entre su mano y te besó como por automático… yo me quedé completamente petrificada viendo la escena que tenía en frente, sentí un profundo dolor y un enorme coraje como nunca había sentido, claro que me llené de unos terribles celos y más cuando ella al separase después de un par de segundos te dijo con voz suave aunque algo seco su tono: hola amor, perdona no te vi, estaba distraída con los resultados de radiología,vienes a comer conmigo??- tú te pasmaste y sin contestarle volteaste inmediatamente para encontrar mi mirada y ver mi reacción, luché por controlarme y no dar muestras de lo que sentí, te sonreí brevemente ocultando mis celos y mi coraje pues no iba a reclamarte, ni hacer una escena, ni portarme como idiota ante la chica (golpearla no era una opción tampoco ¬¬  eso creo jaja), ni salir corriendo del lugar llorando o echando fuego por los ojos, en cuanto ella siguió el rumbo de tu mirada se encontró con la mía, yo la sostuve y trate también de sonreírle lo más amable posible, ella se sonrojó, se apartó de ti y recuperando su trato formal hacia ti se disculpó diciendo que no sabía que estuvieras ocupada con otra nueva residente (a cierto mi ropa tenía algo de blanco :D jaja), entonces le dije con tono algo irónico que yo no era residente por lo que no había problema de que pudiera decir algo, además si eras su “amor” no tenía entonces por qué disculparse ante mí por el saludo que te dio.

Ella se relajó entonces, se rio por mi comentario, me dijo su nombre y antes de que dijera algo más la interrumpiste dirigiéndote nerviosamente a mí: ahhh… ehh… Paula también es practicante aquí, ehh es fisioterapeuta en el equipo que pusieron a mi cargo en el hospital… - luego te pusiste mucho más nerviosa al estar pensando en cómo presentarme con ella o si me decías la relación que tenías para darle formalidad, así que para ahorrarte el trabajo yo misma me presenté extendiéndole amablemente la mano, disfracé mis celos en una sonrisa y dije: pues mucho gusto, yo… bueno soy sólo una vieja amiga de la familia, de hecho vine a ver a Marce por algo que me encargó mi amiga Rebeca, su hermana, así que ahora que lo tengo ya me voy antes de que aquella enfermera termine por correrme de aquí y también para dejarlas a solas- te vi confundida, nerviosa,intranquila, parecías querer decirme algo con la mirada o esperar otra reacción de mí, vigilabas a tu chica y tampoco sabías que hacer, preferiste callar cuando ella me preguntó que si entonces había sido yo quien se puso a jugar y hacer trucos para los niños de terapia, cuando yo asentí y le conteste con una bromita que sí era yo te me quedaste mirando profundamente, entonces avanzamos hacia la puerta, yo delante de ustedes y del lado suyo, me despedí en cuanto salimos de aquella sala y ella me dijo que igual debería regresar otro día para programar una sesión de esos juegos con los niños pues les haría bien, le dije que en cuanto quisieran yo volvería encantada y luego me acerqué de lo más normal para despedirme de ti con un beso en la mejilla, pude sentir como aun estabas súper tensa y temblaste ligeramente ante mi contacto, te desee lo mejor para todo tu turno y que nos veríamos cuando volvieras, después me di la vuelta y atravesé el pasillo despidiéndome de la enfermera en el escritorio que esta vez sonrió conmigo (de todos modos me volvió a dar miedito O_o jajaja)  y terminé por salir del hospital.

Al subir a la camioneta que Don Fabián había dispuesto que usara para trasladarme mientras estuviera viviendo en la finca me recargué en el asiento, me pasé las manos por el pelo, luego golpeé el volante y di un corto grito de frustración, no podía creer lo idiota que era  mi maldita suerte, justo cuando las cosas contigo funcionaban cada vez mejor acercándonos como antes me terminaba por enterar que estabas con alguien más, que estúpida había sido al no preguntarte antes y que coraje que tú tampoco no me lo hubieras dicho, mi orgullo dolía terriblemente y  mientras me frotaba las sienes tratando de contener las punzadas en mi cabeza pensé que esta vez no iba a ponerme a lloriquear por esa razón, ninguna lágrima bajo por mi rostro… bien tenías una especie de relación sentimental con aquella chica pero no me iba a retirar del juego, no ésta vez eso no lo iba a impedir, no iba a dejarme vencer estúpidamente ni tirarme a lamentarme otra vez, me negaba a que el destino me quitara lo que yo quería, había venido de tan lejos sólo por ti y no aceptaría perderte ahora que me había reencontrado contigo después de tanto tiempo, al demonio el honor y el respeto las relaciones ajenas, yo te amaba de verdad y no iba a permitir que nadie me alejara de ti, iba a luchar por mi parte contra todo eso no importaba si era buena persona o no, esta vez no me haría a un lado como muestra de lealtad, no sería de nuevo la chica noble y buena que se queda sin nada, creía tener la ventaja de que tú alguna vez me habías querido profundamente y si de alguna manera lograbas recordarlo entonces volvería a tenerte, además yo podía estar más cerca de lo que ella estaría de ti, pensé durante todo el camino que no te reclamaría ni haría nada estúpido cuando te viera, me iba a dedicar a reconquistarte y atacar a tu corazón con todas mis armas, te daría todo lo mejor de mí y te haría caer rendida; me detuve en uno de los restaurant-bar que encontré en la ciudad para comer y mientras observaba sentada en mi lugar el canal de deportes que tenían en las pantallas del lugar pedí que me trajeran antes una cerveza bien fría, necesitaba digerir mi coraje y brindar para sellar mi declaración de guerra, después del primer trago me relajò bastante y sonreí maliciosamente hacia mis adentros al pensar en el plan de conquista que usaría del que no tendrías oportunidad de escapar.

Gracias por continuar leyendo y por sus comentarios, lamento muchísimo tardarme en subir ésta parte de la historia pero casi no tuve tiempo, de cualquier forma espero les guste y como siempre recibo gustosa sus opiniones, y ya mejor no prometo no tardarme para la próxima porque luego les quedo mal :D jeje saludos