Elena y los cazadores

ELENA Y LOS CAZADORES

Elena había ido ese sábado al campo con su novio, habían escogido una zona de los alrededores de la ciudad con bastantes bosques, era una zona muy bonita. Estuvieron andando cerca de un bosquecillo de pinos cuando Elena sintió ganas de orinar y se dirigió un lado del bosque en un claro entre arbustos. Llegó, se bajó los pantalones del chándal y el tanga y poniéndose en cuclillas comenzó a orinar. Estaba tan distraída que no se dio cuenta como desde el otro lado llegaba un hombre también a orinar. Pero el hombre nada más pasar el primer arbusto pudo verla de espaldas viendo su culo e hizo que tuviera una erección.

Luis sacó su polla y se acercó a la chica sigilosamente, cuando ella se giró al oír un ruido tenía la verga del señor a la altura de su boca. El la cogió del pelo y la dijo que abriera la boca y que se la mamara. Elena se asustó y se resistía pero el hombre llamó a sus amigos, dos hombres más. Estos llegaron y la sujetaron de los brazos hasta que Luis logró que la chica accediera. La chica daba besos a semejante trozo de carne, no era muy larga pero si ancha como un vaso de tubo, la besaba y la lamía a lo largo de todo el tronco.

Todos estos gritos, movimientos, etc. Hicieron que Antonio llegara para ver que pasaba con su chica, cuando llegó vió a su novia mamando una verga y con otras dos en las manos masturbándolas. El al principio quiso para todo pero al final lo único que atinó a hacer fue desnudarse y quedarse a un lado acariciándose la polla muy lentamente. En el centro los tres hombres se habían desnudado y habían hecho que Elena hiciera lo mismo.

Elena era una chica morena, de estatura media, ojos marrones, labios sensuales, pechos turgentes pero no pequeños con los pezones de color café, culo redondo como una apetecible manzana y el pubis con el vello moreno en un pequeño mechón bien definido. Allí estaba ella como una pequeña zorrita mamando tres pollas, la de Luis de unos dieciséis centímetros pero gruesa como un vaso de tubo, la de Javier de unos veinte centímetros pero más estrecha y la de Fernando de la misma largura que la de Luis pero más estrecha.

Luis cuando ella hubo terminado con la mamada la tumbó en el suelo boca arriba, se puso las piernas en sus hombros y empezó a frotar su verga con el coñito de la chica hasta que logró meter la polla sin dificultad en el agujerito. Comenzó a follarla suavemente, Elena abrió más las piernas hasta quedar en la posición del misionero, con las piernas sujetaba al hombre, sus talones apretaban las nalgas de su amante. El la follaba fuertemente mientras los otros dos acercaban sus pollas a su boca para que las mantuviera bien duras.

Elena estaba tan caliente que ni se había dado cuenta del pedazo de verga que tenía dentro, estaba completamente abierta de piernas. Ya había tenido el primer orgasmo e iba a por el segundo, de vez en cuando apretaba los músculos de la vágina y apretaba la polla del hombre para después relajarlos y recibir las acometidas de él a veces Luis realizaba movimientos circulares que la daban a ella todavía más placer si cabe. En el momento que Luis sacaba la verga y eyaculaba sobre los pechos de Elena ella tenía un orgasmo que la hizo dar un desgarrador grito de placer.

Ya se había follado a uno y ahora sabía que le tocaba follarse a dos. Javier se tumbó en el suelo y los otros dos hombres cogieron en volandas a Elena, la verdad es que ella al de poco de empezar la orgía había aceptado todo pero ellos se comportaban como si ella no quisiera. Elena estaba gozando como una perra en celo. La clavaron sobre la polla de ese hombre, Javier tenía 55 años, Luis 56 y el más joven Fernando 32 años. Ella comenzó a botar sobre semejante falo mientras se inclinaba hacia delante apoyándose en el pecho del hombre que a su vez sostenía las tetas de la chica como si fueran las riendas de una yegua.

En ese momento ella notaba como una lengua comenzaba a lamerla desde la cintura por la ranura de las nalgas hasta el agujerito trasero y allí en su estrellado hoyito pasaba la lengua una y otra vez hasta que notaba como la chica estaba sumamente cachonda y comenzaba a dilatarse. Luego la introdujo un dedo y cuando el esfínter se relajaba y dilataba más un segundo dedo hasta que lo intentó con su pene, la fue penetrando metiendo y sacando primero su glande, después parte del tronco hasta que de una sola vez la penetró entera.

Se acomodó al ritmo de ella sobre la verga de Javier y así la follaba mientras sus manos acariciaban sus pechos y la besaba en el cuello y mordisqueaba el lóbulo de la oreja. El novio de la chica se acercó ofreciéndole la polla a su novia para que la mamase y ésta comenzó a mamarsela con autentica pasión. Era una zorra completamente cubierta en todos sus agujeros y todavía con el semen de Luis cayendo desde sus tetas a su ombligo. Pero la felicidad de Antonio no iba a durar mucho, llegó Luis y lo apartó diciendo que él ya tenía a la puta siempre que ahora tenía que compartirla y le metió a la chica otra vez la polla esta vez en reposo en la boca para que se la volviera a poner dura.

Ella botaba sobre Javier como una autentica amazona pero a Javier no le quedaba mucho para correrse. La avisó para que se levantara, Fernando la ayudó a levantarse de tal forma que su polla seguía dentro de su culo. Ella en el momento de levantarse le sobrevino un orgasmo y apretó la polla de Fernando que eyaculó dentro de su culo. La chica en vez de enfadarse se arrodilló a todo correr sobre el pene de Javier y recibió toda la leche en su cara y en su pelo.

Ella se quedó de rodillas e iba a levantarse cuando Luis la derribó diciéndola.

Ahora zorrita vas a ver lo que es una autentica polla en tu culo.

Ella se quedó tumbada boca abajo mientras él con las manos la indicaba que abriera ligeramente las piernas. La polla de él era una autentica barbaridad y ella le decía que no creía que entrase en su ano pero el hombre sujetándola del pelo la dijo al oído que se relajase y disfrutase porque la iba a sodomizar de todas formas. Estas palabras pusieron todavía más caliente a Elena, la verdad es que ya lo estaba en grado sumo.

Luis sujetando la polla que ahora era una autentica barra de hierro la puso a la entrada de su ano y comenzó a empujar muy lentamente, El glande quiso abrirse paso pero la chica se quejaba entonces él lo retiraba pero metiendo y sacando cada mm y con la dilatación de la follada de Fernando, al final logró meter la mitad y de un solo golpe luego introducir toda ella. La chica jadeaba mientras era follada a tope por el hombre. Estaba completamente ensartada y dilatada. El hombre la giró colocándola boca arriba y Fernando vino y se la clavó en el coño de una sola vez mientras la chica se metía toda la polla de Javier en la boca y a su vez su novio se masturbaba al lado de ella. Al de un rato en el que ella tuvo algún orgasmo más, ellos la avisaron que se iban a correr y la hicieron arrodillarse debajo de ellos. Los tres hombres y su novio se masturbaron aceleradamente para por fin eyacular sobre la chica llenándola de semen.

Al final la dieron las gracias y la dieron sus números de móvil y tomaron el suyo para algún día llamarla y volvérsela a follar. Agradecieron al novio no haberse enfadado y se fueron dejando a los dos chicos follando como locos.

Este relato es imaginario pero va dedicado a una joven parejita de Madrid que me hacen pasar muy buenos momentos. Si queréis podéis escribirme a:

Picante100@hotmail.com