Él y yo

Título : Él y Yo

Estoy nerviosa, esta noche llega él... él es ese apuesto moreno, de mirada penetrante y manos suaves que harían tener escalofríos hasta a la mujer más frígida del mundo...

Él ese chico atractivo, natural, y diferente a los demás...

Estoy en mi casa arreglando el salón y la cocina para su agrado... acabo de terminar de cocer el marisco...y de adornar mi acogedor saloncito con velas y cojines en el suelo, he puesto un suave incienso que pronto adueñará con su olor toda la casa , a su vez la música es sutil y relajante.

El ambiente es perfecto... he puesto la vajilla más bonita que tenía en casa... y he abierto aquel vino blanco maravilloso, que él me regalo en una ocasión, creo que ante mis nervios voy a necesitar una copita antes de vestirme.

Tengo dudas, no se que ponerme. Creo que voy a estrenar aquel conjuntito de encaje negro que me regalo mi amiga Olga, pienso que a él le gustará... este sujetador me hace un pecho bonito y alto ...mmm...estoy deseando ver como se ponen duritos, están tristes sin sus manos.

Este es un conjunto increíble...aunque ¿¿ por qué malgastar tiempo?? No voy a ponerme braguitas, esta noche invita a la seducción y la picardía.

Me dirijo a mi armario... a por aquella mini, mini, mini faldita vaquera, deseo que él no me quite la vista de mi falda en toda la noche. La camiseta de tirantes negra quedará genial con mis botas de cuero negras...

Sé que a él le gusta el pelo recogido, voy a darle el caprichito, quiero que hoy comprenda que le deseo.

Suena el timbre... ¿qué hora es? Se ha adelantado... menos mal que he sido previsora, y voy con tiempo de antelación.

Abro la puerta, y me encuentro con él , no va arreglado, ni siquiera sabe que esta noche hay una fiesta para dos preparada... él tan sólo espera encontrarse a una niñita resfriada con ganas de ver un DVD en buena compañía.

Lleva barba de tres días, y una bolsa de palomitas en la mano, me mira sorprendido y vuelve a mirarme deteniéndose en cada curva de mi cuerpo, analizando cada una de las pocas prendas que llevo puestas para esta noche.

Él entra , se sienta en uno de los cojines que están al lado de la mesa, y yo me dirijo hacía la cocina, cojo las fuentes de mariscos y las traigo a la mesa. Él no deja de sorprenderse, y antes sus preguntas no dejo de pedirle que se calle y disfrute de la cena... apenas come... sólo me mira, veo en él una carita que le delata miedo ante la falta de control sobre la noche.

Cuando hemos acabado de comer vuelvo a dirigirme a la cocina, a coger el postre. Helado de nueces, sé que no le gustan demasiado los helados, pero este creedme que le parecerá exquisito.

Termino mi helado, y harta de imaginármelo cabalgándome, me muerdo los labios y sutilmente cambio mis piernas de posición , para que él observe con sus propios ojitos , que mi coñito esta desnudito para él.

Él alucina, y sin dejarme ni siquiera sonrojarme me agarra de la cintura, me tumba en el suelo y pone rápidamente cojines bajo mi culito, de manera que quedan mis piernas bien altas. Abre mis piernas exageradamente y comienza a lamerme toda mi rajita, de abajo arriba... vuelve a repetirlo varias veces... de abajo a arriba... me encanta, tiene la lengua fría por el helado, es una sensación deliciosa.

Debe de haber notado que comienzo a estar húmeda, muy húmeda... porque cada vez lo hace las rápido... me gusta como me lame, parece un pequeño cachorro bebiendo el agua más rica el mundo.

No puedo evitar empezar a respirar más alto, y él comienza a dedicarse a mis labios, los chupa lentamente, los lame, los muerde... cada vez con más intensidad. Estoy disfrutando muchísimo.

Sin dejar de besarme todo mi coñito...sube hacia arriba y empieza a explorar mi clítoris, aaaaaaahg! Que gusto... él no puede imaginar hasta que punto estoy excitada.

Su lengua no para de jugar con mi clítoris, es una lengua traviesa que no me deja respirar ni un solo segundo, no para de chupar, y yo no paro de gemir... estoy enloqueciendo, y quiero más... él ve mi carita de loca, y empieza a chupar con mayor intensidad, mentiéndome a la vez unos cuantos deditos en mi coñito... los deditos entran y salen , con fuerza e intensidad, entran y salen con fuerza y rapidez..., entran y salen... mientras mi clítoris disfruta de su dulce y ardiente boca... que ricura.

No puedo más , creo que voy a desmayarme de placer, quiero morirme, quiero subir al cielo y bajar para poder correrme en tú boquita...aaaahg... me acabo de correr....

Él no me deja descansar ni un solo minuto,me levanta... y me da un beso apasionante, que me deja saborear mi liquido y el helado de nueces. Que dulce combinación.

Aún estoy vestida, con mi faldita subida, noto su miembro muy, muy,muy duro, justo en el grado que más me gusta... necesito palparlo y bajo mi mano inocente, a su pantalón, desabrocho un poco su pantalón y dejo escapar esa cosita que tanto me gusta. Es mi pequeño juguete, mmm... está caliente y muy rígida, que excitante.

Veo deseo en sus ojos, y con sus manos calientes, como si de fuego se tratase desabrocha mi camiseta y deja mi sujetador al descubierto... lo mira con entusiasmo, pero ya estamos muy locos, para contemplaciones. Me quita el sujetador, se agacha y comienza a tocar mis pechos, la redondez que hay en ellos, su suave textura, la gran dimensión de una talla 95... comienza a besarlos y lamerlos presa de la excitación y el deseo. Me encantar ver como se divierte con mis pechos y los mima con tanta pasión.

No puedo más, necesito probar tu dulce. Lo siento en el sofá , le quito el pantalón y ese calzoncillo blanco, que tanto me pone y comienzo a mirar su pene, como si de mi plato favorito se tratase. Que bonita, que rica, me encanta...¿sabes? estaría un poco más deliciosa con helado de nueves. ¿Te gusta? Esta frío... creo que por tu carita, esta bueno. Comienzo a lamer su pene de arriba abajo, lo miro como una cachorra abandonada y hambrienta, que come la comida de su amo. Me gusta, él comienza a poner esas caritas de gusto que de nuevo hacen que tan húmeda me ponga... comienzo a comérmelo con desesperación, arriba abajo, arriba, abajo, tengo hambre, estoy hambrienta de ti y necesito comérmelo rápido con desenfreno como si alguien me fuese a quitar mi delicioso manjar...

Crees que te vas a correr, y pronto me levantas del suelo me coges de la manos, me diriges a la cocina con prisa, me coges de la cinturita me levantas y me sientas sobre la lavadora, que raro ¿qué pretenderá él? Él le da al botón de funcionamiento, y la maquina comienza a centrifugar... que movimiento más estimulante.

De nuevo acaricias mis ingles... bajas tus manitas hasta mi coñito, compruebas que esta húmedo, muy, muy húmedo, le gusta, me acaricia de arriba abajo, metiendo tus deditos y acariciando muy lentamente mi rajita, mientras no aparta su mirada de la mía... y cuando me ve de nuevo morderme el labio, mete su pene en mi coñito... ahg! Que caliente...que sensación más linda, él me coge de la cintura y comienza a moverse. Siento que estoy en otra Galaxia, entre su movimiento y el de la lavadora, creo volar... que rico, que caliente su pene, entrando y saliendo con fuerza y entusiasmo... creo que me va a dar algo, que movimientos siento, que sensaciones más excitante, tu metes y sacas, tu sientes mi coñito mojado que no quiere dejar escapar a tu pene, porque la haces sentir en el limbo. Que linda sensación tenerte dentro de mí.

No nos faltaba mucho, para una nueva corrida... y así fue... los dos nos corrimos abrazándonos...