El video
Después de quedarme sola en casa, me dispuse a grabar un video de regalo a mi amante
Por fin pude quedarme sola en casa, mis compañeras de piso habían salido y yo me encontraba sola.
Sentada en la cama estaba volviendo a leer las conversaciones por Messenger que tenía con Daniel. Esta última semana los dos habíamos estado muy explícitos en nuestras conversaciones y en las fotos que nos mandábamos. Me contaba lo que me haría cuando nos volviéramos a ver y como me iba a hacer el amor con todo lujo de detalles.
Mientras estaba leyendo la última conversación me estaba calentando bastante y mi mano se deslizo por dentro de mi leggins.
Ese momento me acorde que Daniel me había dicho muchas veces que le gustaría verme como me masturbaba o que le mandara un video.
Me levante y busque un sitio donde colocar el móvil. Estaba nerviosa y muy excitada a la vez, iba a ser la primera vez que grabara un video de esa temática
Mi corazón latía cien por hora. Por mi cabeza pasaban mil y una ideas entre ellas la de desistir en esa idea pero mi excitación podía sobre mí.
Finalmente encontré el sitio donde situar el móvil y me senté en la cama frente al objetivo imaginando que era Daniel quien estaba enfrente de mí y di a grabar.
-Hola mira lo que tengo para ti.
Baje mis manos a mis pechos que estaban debajo de una camiseta que tenía para estar por casa y sin sujetador
Mis pezones estaban totalmente erizados y el roce de solo la camiseta en ellos hacia que mi excitación subiese
Me quite la camiseta dejando mis pechos al aire y pellizque uno de mis pezones y luego el otro me imaginaba que era Daniel quien jugaba con ellos en su boca, esa mezcla de dolor y placer me hacía suspirar, empecé a amasar mis pechos me encantaba estrujarlos amasarlos, lleve uno de mis pechos a la boca quería lamerlos mientras mi otra mano estaba deslizándose a mi entrepierna libre de los leggins y con unas braguitas rojas. Empecé a frotarme por encima de la ropa, ya podía notar la humedad en ellas.
Seguía mirando fijamente a la cámara de mi móvil quería seducir a Daniel, me sentía súper coqueta y a la vez excitadísima. Ya mi mano se había introducido dentro de mi braguita y empecé a acariciar mis labios recién depilados, me encantaba el tacto de mi vulva recién depilada hacia que las sensaciones se multiplicaran. Empecé a acariciar suavemente mi clítoris que ya estaba inflamado de la excitación. Mis dedos se deslizaban entre mis labios facilitados por la humedad que ya tenía. Me quite la braguitas quería tener mis manos sin ninguna atadura, me tumbe en la cama y abrí las piernas, quería que Daniel tuviera un buen espectáculo.
Volví a llevar mi mano a mi clítoris y empecé a mover los dedos en círculos sobre el mientras con la otra mano jugaba con mis pechos, necesitaba más. Me lleve la mano a la boca y chupe mis dedos me encantaba ese sabor a sexo, primero introduje uno luego otro, me imaginaba que era la polla de Daniel entrando y saliendo de mí. De mi boca empezaron a salir palabras y gemidos.
-Que cachonda me has puesto esta semana, que cachonda diossssssss.
-Necesito tu polla.
Mis movimientos se estaban acelerando, mis dedos entraban y salían más rápido y la mano que estaba en mis pechos estaba en mi clítoris, quería tener un orgasmo extraordinario.
Una corriente recorrió mi espalda hasta lo más profundo de mi, cerré las piernas sobre mi mano quería que el placer fuera lo más duradero posible.
Una gota de sudor bajo por mi frente y una sonrisa afloro por mis cara, señal inequívoca de que había llegado al clímax mas absoluto
Me incorpore de la cama y fue por mi móvil. Mire fijamente el objetivo y le dije
-Espero que te haya gustado cariño.