El Viaje

Jamas paso por mi mente lo que el destino me tenia preparado en ese puto viaje.

EL VIAJE

Esta fue una experiencia, no muy grata, en la que tuve momentos de gozo y otros realmente bastante desagradables, Les relatare todo. para que puedan disfrutar o no, de lo me aconteció en aquellos oportunidad.

Les comento, mi nombre es Sofía, soy una chica normal ni me sobra ni me falta, morocha, altura media y de 25 años de edad.

Todo se inicio, cuando a la salida de un festival de música, nos encontramos con Santi, primo de mi novio Agustín, (hoy mi ex) y su amigo Luis.

Después de las habituales presentaciones, le comento a Santi

Oye, como has crecido, la última vez que te vi., tendrías 9 o 10 añitos-

-Así es, hace como cinco años, que no te veía –me contesta

Bueno continuamos la conversación un buen rato hasta que nos despedimos.

Días después lo encuentro a Samy, por el centro de la ciudad.

Se alegro de verme, así que lo invite a tomar un café.

Me comento que en unos días se iban a la playa con su amigo Luis, unos días

Te gustaría acompañarnos?

Con Agustín?- pregunte

No, tu sola- me respondió

No, que va a decir, Agustín.

Bueno, si cambias de opinión la invitación sigue en pie, te dejo mi teléfono.

Agradecí su gentileza y nos despedimos

Mientras me alejaba de Santi, pensé que si hubiesen sido más mayorcitos, no era mala idea, pero ir con dos pendejos de 15 o 16 años no era muy atractivo.

Unos días después, veo a mi novio con una chica abrazados, se me cerro el estomago, regrese a casa sin decirle nada, me sentía pésima.

Esa noche llamo, menos bonito, le dije de todo.

Me decía que me quería, que era una aventura sin importancia, que lo perdonara, etc etc, y todas esas cosas que dicen los hombres cuando lo pescan "in fraganti"

Le colgué, y me largue a llorar desesperadamente

Volvió a sonar el teléfono, pero sin decir hola, lo descolgué.

Esa noche, no podía dormir, pensando en todo lo que habíamos hecho en esos años, hasta que finalmente me dormí.

Por la mañana al despertarme, estaba un poco mejor, pero ese sabor amargo de sentirse engañada permanecía en mi interior

Me fui a trabajar como todos las mañanas, sin sacar de mi mente la visión de Agustín con esa chica.

Al llegar a casa, encontré sobre al mesa, el teléfono de Samy. Pensé en llamarlo, pero no me decidía, no me entusiasmaba demasiado la idea de ir con ellos unos días a la playa.

En ese ínterin, sonó el teléfono, era Agustín que estaba arrepentido y que bla,bla bla, le corte sin contestarle.

Creo que esa llamada contribuyo a aceptar la invitación de Santi, aunque no estaba totalmente decidida, pero era como una especie de venganza a ni novio.

Tome el tubo, y lo llame.

Dime, esta todavía en pie tu invitación?

-Pues si, salimos mañana jueves en la tarde, y regresamos el lunes por la mañana, aprovechando el feriado. Prepárate que te pasaremos a recoger.-dijo Samy

OK, estaré lista para mañana-

Llego el día, me pasaron a buscar, a la hora programada.

Era un auto un poco viejo, pero amplio, nos saludamos y emprendimos el itinerario.

El viaje, fue divertido, chistes, bromas cuentos de sus aventuras amorosas, realmente lo disfrute bastante.

Después de unas horas de viaje, llegamos a un paraje un tanto solitario, con algunas casas, un pequeño complejo de cabañas cerca del mar y una estación de servicio que vendían de todo un poco.

Realmente estábamos cansados, así que decidimos parar en ese lugar

Tomamos una cabaña con 2 habitaciones, a lo que me percate que mucha gracia no le hacia a los chicos.

Después del baño, me acosté cansada, estaba por dormirme, cuando oí voces de la otra habitación.

Eran los chicos que conversaban.

Mientras trataba de dormirme, trate de escuchar.

Cuando oigo que Luis la comente a Santi

  • Oye que buena que esta tu prima, me la cogeria por el culo.-

-Yo también, aunque sea la novia de mi primo.-

La conversación continúo. Oír lo que comentaban y que me podrían llegar a hacer me excitaba, al percibir como se me humedecía mi cosita, mis hábiles dedos, se dirigieron a mi raja para hacer un fabuloso trabajo.

Por la mañana fuimos a la playa, me había puesto una sintética malla, que un hilo tapaba mi culo, al llegar al lugar me quite el diminuto sostén, mis tetas quedaron a la vista de estos chicos que percibí su excitación por los bultos que se le marcaban en sus slip.

A partir de ese momento, pensé en provocarlos en una manera muy sutil, en realidad no me interesaba demasiado tener una aventura con ellos, a pesar de la excitación de esa noche.

Así que a partir de aquel momento, empecé a llevar poca ropa, que entrevean bastante. Los provocaba, pero sin dejar que me toquen. Llevaba diminutas tangas, que dejan casi desnudo mi redondo trasero.

Me miraban y notaba su reacción al casi no tener que adivinar demasiado de mi cuerpo, sino que pudiesen notar todo.

Tomaba sol y quitarme mi sostén quedando mis pechos expuestos a sus miradas llenas de deseo

Cada tanto los observaba disimuladamente y notaba como se les abultaba a través del pantalón, sus zonas genitales.

Me encantaba provocar a esos jovencitos, que solamente me observaban de una manera lujuriosa.

Nunca me imagine, como seria el desencadenamiento, lo que después ocurrió, hizo que me arrepintiera de todo lo que les estuve haciendo.

La noche del sábado decidimos ir a un lugar en el pueblo, a escuchar un poco de música y tomar algunos tragos.

Lo pasamos bien, aunque los chicos estaban bastante picados mientras que yo trate de mantenerme sobria.

Al regreso a la posada, me invitaron a pasar a su habitación, y tomar cerveza, acepte por que hasta el momento se habían comportado correctamente y no pensé en que me podría llegar a suceder, a partir de ese momento.

Las cosas se fueron desencadenándose en forma paulatina. Comenzaron a tocarme en forma disimulada, alguno que otro beso, a lo que seguí el juego, pensando en que podría manejar la situación

Las caricias se fueron transformando, en tocadas de pechos, levantadas de pollera. Si bien me excitaba la situación, nunca había tenido relación con dos hombres a la vez y además no terminaba de convencerme en verme involucrada con dos menores.

Luis se quito la ropa, quedando en calzoncillos, mostrando con evidencia la erección de su miembro. Entre los dos me abrazaron percibiendo como Luis apoyaba su bulto en mi culo.

Ya veía que la situación se estaba tornando un poco (o bastante) pesada, realmente ya no era de mi agrado, por consiguiente trate de parar sus actitudes.

  • Bueno chicos apacígüense un poco – dije

-Apaciguarnos?. Nos has hecho calentar y ahora pretendes pararnos- Contesto uno de ellos

  • Bueno yo… - conteste un poco estupefacta

En ese momento uno de ellos estaba totalmente desnudo, y con una voluminosa verga, totalmente erguida.

Negaría, si no digo que me excito, pero el ambiente realmente no era de mi satisfacción.

Reconozco que los ponía a mil, y en parte me arrepiento de haberlo hecho. Pero el tema era apalear, a lo que ocurría en ese momento.

La habitación estaba con llave, por consiguiente era difícil salir.

La mejor escapatoria seria, sobar la pija de Luis, hasta hacerlo acabar y hacer con Santi lo mismo. No se me ocurría otra cosa.

Por lo tanto para frenar el ímpetu de estos chicos sumados a la borrachera que habían adquirido la reacción podía llegar a ser violenta

Deje que me quitaran la blusa y el corpiño, apenas vieron mis tetas, sus bocas comenzaron a chuparlas, mi excitación aumentaba, pero trataba de tener el control de la situación.

Uno de ellos me subió mi falda y su mano se dirigió a mi culo

Ya Santi se había quitado los pantalones y calzoncillos, ambas vergas afloraban erguidas. Tome cada una con mis manos y empecé a agitarlas con lentitud. .Sus manos no dejaban de explorar mi cuerpo, sus bocas chupaban en forma vehemente mis pezones: La pollera había volado, y mi braga era deslizadas por mis piernas.

Continué masturbándolos, no pasó mucho tiempo cuando tomándome de los cabellos, tuve que arrodillarme, dirigiendo mí boca a una de las pijas, realmente me excito el tamaño que habían adquirido. Pensé que si la chupaba, se calmaría la situación. Así que mientras mamaba una, con mi mano masturbaba a Luis. No tardo en venirse, llenando mi boca de su calido liquido. Mientras eyaculaba el otro sobre mi cuerpo deslizándose por mis muslos.

Sentía bronca, por ser sometida de esa manera, pero por otra parte me excitaba la situación. Con esto pensé que ya estaba todo acabado.

Temblorosos, apaciguaron su ímpetu, situación que quise aprovechar para salirme de ahí.

Trate de vestirme rápidamente, para salir urgente de la habitación. Pero mi intento fue imposibilitado,

  • Donde quieres ir? - Pregunto uno de ellos

  • Bueno chicos lo han disfrutado, así que hasta mañana - dije

  • Estáis equivocada Sofía, la noche recién empieza

- Síganla uds, por que yo, me voy – Conteste en forma contundente

-La vamos a seguir, pero con vos, a las buenas o a las malas,- tú decides-

La situación había tomado un giro, que no me gustaba para nada. Tuve miedo, intente salir pero la puerta estaba con llave, grite, pero un violento cachetazo de Luis me voltio al piso, quedando un poco inconsciente.

Le grite, hijo de puta. Cuando un segundo golpe en la cara me dejo inconsciente por un rato.

No se bien que ocurrió después, pero, cuando reaccione de los golpes, me sentía inmóvil, y en una situación totalmente atípica,

Estaba volcada sobre mi lado derecho, sin poder moverme, con mis muñecas esposadas, tomadas a unos grilletes que apresaban mis tobillos

Estaba todavía semidesnuda, tenía puesta mi braga, y la blusa desabrochada.

-Hola putita, te despertases?-

Por favor saquéenme esto, y terminemos de una vez.

Las órdenes la establecemos nosotros, así que mejor que te calles o te amordazamos.

Sin decir mas nada, en forma violenta, arrancaron mis últimas prendas, quedando totalmente desnuda.

En un momento me volcaron, quedando en cuclillas, tocando mi cara al piso, mis tetas rozando el piso, y mi culo erguido, con mis dos orificios a la entera disposición de estos chavales..

  • Bueno te vamos a dar una posibilidad, si adivinas quien te coje, te dejaremos en libertad de lo contrario lo hará el otro, así hasta que sepas a quien tienes en el interior de tu conchita.

Pusieron una venda en mis ojos, en el momento que unos dedos hurgaban mis desamparados orificios.

Los dedos entraban en una forma violenta, que cada tanto me hacía pegar gritos de dolor. Los dedillos no cesaban de introducirse por mi vulva.

A lo que preguntaban de quien era la mano, que por supuesto mis respuestas jamás llegaron a descubrir. Me incitaba la situación, pero también había temor en mi interior, una mezcla difícil de explicar.

Después de jugar con mi concha, una verga se introduzco, creo que ahí mi gozo se intensifico, no me desagradaba demasiado.

El bombeo fue rápido, como así también la eyaculacion. No llegue a tener un orgasmo, que en parte me alegre, por que no quería demostrar a estos pendejos, que disfrutaba de la situación.

Cuanto menos lo pensé, unas manos toman mi cintura, mientras la segunda pija invadió mi vulva.

El vaivén era mas prolongado y las arremetidas mas lentas, sentía las bolas pegar contra mis nalgas.

Por supuesto que tampoco revelé quien era el afortunado que me cogia.

Estuvo más tiempo que el anterior, además de descargarse mucho mas, al retirar su aparato de mi raja, un chorro de leche, se deslizo por mis piernas para, sumarse a la anterior.

Terminado el acto.

Digo

Bueno chicos, ya han tenido lo que pretendía, así que por favor desátenme

  • Sofía, todavía no has acertado quien te la mete, por lo tanto quedaras así hasta que lo adivines.-

Acto seguido un dedo empezó a introducirse por mi ano.

Tuve la mala idea de pedir que por ahí no.

Pareció que eso los incentivaba aun mas, en lo que hacían a mi pobre orificio

La posición en que estaba mi esfínter y sin poder ofrecer demasiada resistencia,

debía de ser muy tentador poder penetrarlo

El dedo continúo hurgando, hasta introducirlo en su totalidad, lo hacia en una forma desenfrenada y sádica, había goce por mi parte, pero la posición de mi cuerpo y el dolor que me producía, no permitía que me complaciera plenamente. Así continuo manoseando hasta llegar a meter más de un dedo.

Por suerte ceso, para introducir su verga con vehemencia en mi castigada vulva. Esa nueva entrada y salida empezó a estimularme, el vaivén continuo, aumentaba mi excitación, sentía que pronto llegaría un orgasmo, cuando un nuevo chorro lleno mi vagina. Quede con las ganas de continuar, pero no tardo en ser nuevamente perforado, esta vez pude tener un orgasmo. Trate de contenerme, para no emitir gemidos de placer.

Quería que acabase esta situación,: Repetí nuevamente que me soltaran que me comprometía a seguir haciéndolo pero desatada. Anhelaba que no fuese tan impetuoso este accionar. Pero mis ruegos no eran escuchados.

Hubo un stop, después de la cuarta o quinta perpetración, creo que se acostaron, trate de zafar de mis ligamentos pero era imposible. La posición era cada vez más insoportable, sumándose a las ganas de orinar que tenia.

Me tumbe sobre un costado tratando de dormir, estaba muy cansada y dolorida.

No se que tiempo habría transcurrido, cuando desperté ante las voces de mis agresores: Le pedí que tenía ganas de orinar.

A lo que respondieron, que lo hiciese ahí mismo, aguante otro rato hasta que me orine encima. El calido liquido baño mis muslos. Realmente me sentía terrible, ante la situación.

Eso hizo que aprovechándose de mi estado y con la excusa de estar mojada por mi orín, en castigo lo harían por donde no quería.

Grite al sentir que unos de los dedos volvía a penetrarme por mi ano, y posteriormente dos hasta llegar a tres. Sus dedos rozaban con vehemencia y rapidez el interior de mi conducto.

Oí que uno le decía al otro, como se dilataba mi hurgado ano.

Estaba sumamente aterrada, ya que apenas lo había intentado una vez con mi novio y no fue muy placentero, no se si inconscientemente deseaba ser violentada por mi recto. Infortunada de mí, me había convertido en una muñequilla, en un fantoche de estos pendejos.

  • Bien bonita, ahora vas a ver como te entra toda en ese precioso culo.... - me dijo. Solo grite que no fuera por ahí, que me iba a doler, y que se yo que mas, inútil fueron mis reclamos.

A continuación colocó su glande entre mis posaderas y empezó a forzar la entrada suavemente, hasta que la cabeza de su enorme miembro entró por completo. Yo chillaba, el dolor era agudo, pero poco a poco mi esfínter se iba relajando. Él continuó metiendo solo la punta mientras me agarraba por las caderas. Después seguía apretando para que centímetro a centímetro se fuera introduciendo.

Sentía como esa cachiporra de carne, penetraba mi conducto en forma forzada, real mente no gozaba demasiado era mas sufrimiento y humillación lo que sentía.

Mis chillidos debían ser ensordecedores, aunque dudo que nadie, me escuchara,

Me agarró fuertemente del pelo, tiró hacia él y de un golpe me acabó de meter todo su aparato en mi dolorido culito. Creo que perdí la noción del tiempo, no sé si incluso llegué a perder el conocimiento, pero de pronto todos mis dolores y escozores desaparecieron para experimentar un gusto que desconocía. Mi espalda se arqueaba y mis caderas se movían al compás para recibir esa daga detrás de mí. De verdad que estaba viendo las estrellas

Él seguía bombeando mientras me apretaba con brutalidad mis glúteos. Mi vello se ponía de punta y un escalofrío recorría todo mi cuerpo, mi cara ardía, era una sensación extraña, pero notaba como se acercaba un orgasmo diferente, empecé a gemir fuertemente, cada vez más fuerte, hasta llegar a gritar, a insultarlos, y ese orgasmo me invadió desde la cabeza a los pies….. fue increíble.

El pendejo se corrió dentro de mí casi al mismo tiempo que yo, hasta que sus piernas no le sostuvieron y cayó sobre mi sudorosa espalda.

Su amigo velozmente tomo las riendas y sin darme un respiro introdujo su aparato con fuerza, otro grito partió de mi boca, me hacia jadear, en la forma frenética que me galopeaba, mientras cada tanto un fuerte manotazo pegaba sobre mis nalgas y decía:

  • Como te gusta, putita -

Volví a tener otro orgasmo, al momento que su semen lleno mi conducto..

Estaba totalmente cansada, había disfrutado esta nueva experiencia, pero mi cuerpo esta extenuado.

Al rato volvieron a disfrutar de mi culo, ya no aguantaba más. Mi estado era calamitoso, entre el orín, la esperma pegada y la nueva que se deslizaba por mis muslos, les suplique que me soltaran para poder bañarme y descansar que estaba destruida.

A lo que accedieron, respire, parecía que se habían apiadado de mi.

Pero cuan equivocada estaba.

Me quitaron la venda, cuando veo que uno de ellos, entra con un perro grande, a la habitación.

Siempre le tuve miedo a los perros, al verlo un sudor frió irrumpió mi organismo, hasta llegue a orinarme de nuevo al verlo.

No quería imaginar, cual seria el nuevo desenlace.

Hasta, que acercaron al perro a mi mal oliente cuerpo. No dejaba de temblar de pavura, mientras llorisqueaba ante su presencia.

Como si fuese su manjar empezó a lamerme en todas partes, degustándome como si fuera un helado. Su áspera lengua no dejaba de saborear rincón de mi cuerpo. Creo que después de lo acontecido, esto resultaba muy deleitable. A pesar de eso el temor que me producía el perro, no dejaba de abandonarme.

Advertí, en un momento, que empezaba a asomar de su capullo, su miembro rojo. A medida que me pasaba su lengua, crecía lentamente.

Hasta que en un instante comenzó a lamer mi castigaba conchita y mi ano desflorado, realmente era placentero. Creo que a pesar de mi estado, por mis labios vaginales transitaba el característico jugo.

Eso olor, debió enardecer al perro, por que aprovechando mi posición, me monto, Apenas sintió el contacto de mi cuerpo se empezó a agitar en forma alocada sintiendo como su miembro rozaba mi espalda, mientras trataba de introducirlo en algunos de mis vapuleados orificios.

Cuando oigo que Luis, exclama

- Mira como le creció la verga al perro .¡¡¡¡¡¡¡

  • Tendremos que darle una satisfacción y ayudarlo a que encuentre el ca mino correcto
  • contesto el otro

Como es de imaginar mis ruegos y suplicas, no fueron escuchadas.

Había oído de zoofilia, pero en ningún momento pensé en llegar a tener que practicarla.

Gritaba como loca, el perro seguía montado sobre mis espaldas, abrazándome con sus patas, mientras mi cuerpo exhalaba un sudor frío.

Todo continuo, hasta que el hijo de puta de Luis, coloco la cabeza del miembro del animal, en mi ano, que con lo lubricada que estaba, por las lamidas, entro sin esfuerzos y sin miramientos.. Volví a gritar y empecé a llorar por lo que me ocurría, estaba siendo violada por una bestia.

Parecía que mis lloros incentivaran al animal, que se agitaba vertiginosamente

Sus arremetidas eran cada vez más violentas, hasta arrinconarme contra la cama, era su avasallada "perrita", cogida por el culo.

Trataba de zafar del animal, pero sus patas me apresaban y el ritmo de su furiosa oscilación parecía que me desgarraba interiormente. Dada mi posición lograba ver como entraba y salía en forma vertiginosa esa masa de carne en mi culo.

Sentía que se quemaba mi interior, con el incesante roce de su voluminosa verga, en las paredes de mi canal.

El dolor se intensificaba, parecía que me reventaba, y me destrozaba por dentro,

Mis gritos inundaron la habitación, el perro estaba descarriado, parecía poseído, su baba caía en mi espalda, sus patas se aferraban cada vez mas a mi cintura, arañando mi cuerpo con sus uñas, como tratando de evitar que me escapara.

Su compás compulsivo, agitaba mi cuerpo, sacudiendo mis tetas, me sentía violentada sin compasión, y nada menos que por esta bestia.

Estaba atemorizada, pero mi mayor preocupación era que me introdujera su bulbo, al que intentaba dominar como podía.

Había adquirido un ritmo desenfrenado, era evidente que el animal, no le interesaba, ni mi angustia, ni mi dolor, sino dar rienda suelta a su bestial instinto animal, para expulsar su simiente en mi dolorida cavidad

Sentía un ardor, el dolor continuaba, resistí lo que pude, en ese momento me sentí vejada por esa bestia y por los dos hijos de puta, que disfrutaban la función.

El hecho de ser poseída por un perro de esa manera, sin mi consentimiento y sin poder liberarme, creo que llegaba a incitarme. Me sentía castigada por lo que había hecho. Mil cosas surcaban por mi mente.

El perro parecía que nunca concluiría, mantenía sus patas aprisionando mi cintura, impidiendo que se escape su trofeo, mientras aceleraba su vaivén, era un golpeteo rápido, constante, eran sus testículos golpeando. En un momento freno sus impulsos, sintiendo vibrar su miembro en mi interior, cuando un torrente de esperma invadió mi conducto, su verga permaneció un tiempo , hasta que al retirarla su semen salio de mi cavidad para esparcirse por mis piernas..

En ese momento me corrí, pero lo que creo que realmente me excitaba mas, era sentirme, prisionera y vejada en forma dolorosa podría ocurrirme por un animal.

Era una sensación extraña, pero muy excitante, algo que jamás me hubiese imaginado

Al ver mi estado, y la escena que habían vivido, las manos de los chavales estaban en su respectivas vergas agitándolas, cuando de repente, su semen baño gran parte de mi maltrecho cuerpo.

Me sentía una piltrafa humana, lloraba sin consuelo ante lo que me había acontecido.

En un momento, me liberaron de las esposas, cayendo mi cuerpo entumecido, al piso, sin fuerzas para nada,

Cuando desperté, estaba sola en la habitación, a duras penas me dirigí al baño, llene la bañera y me sumergirme en ella.

Llore desconsoladamente, no se el tiempo que permanecí, sin saber bien que hacer.

Me sentía pésimamente después de haber sido cogida y sodomizada de esa manera. Maldecía el momento que se me ocurrió venir con estos pendejos hijos de puta y además haberlos incitado.

Debía pensar en como regresar a mi casa.

EROTIKMAN