El tutor 22

Al enterarse de la inminente boda de Caleb, Brandon comprende que ha esperado demasiado por algo que no va ha pasar, así que decide seguir con su vida aunque sienta que le falta algo...

El tutor 22

En mi criterio, Caleb, solo te has convertido en un prepotente, arrogante, pedante y egoísta hombre.

Brandon...

Para el momento en que la luz incidió el la andrajosa ventana de su destartalado departamento y lo comenzó a iluminar, Brandon ya se encontraba despierto.

No había podido pegar el ojo en toda la noche, y las pocas veces que lo había hecho, su sueño había sido perturbado e interrumpido por imágenes de un pasado que no deseaba recordar. A su lado, la persona causante de sus problemas, dormía tan plácidamente que Brandon tenía ganas de ahorcarlo y zarandearlo por haberle dicho todas esas cosas sin advertirle que el tema se trataba de Caleb.

Durante toda la noche, las palabras de su amigo habían estado reverberando y haciendo eco en su cerebro sin parar.

Caleb se iba a casar.

Su Caleb.

No, no mi Caleb, ya no desde hace seis años -Pensó Brandon en es momento, tratando de digerir lo indegerible- Pero ¿Qué estaba esperando de todo esto? Él no me iba a buscar, nunca lo hará, de todas formas, él me odia por sus propios motivos.

Ese pensamiento solo hizo que Brandon se mantuviera estático, con los ojos cada vez más cristalinos.

Una parte de él, la parte más rota, la que cada vez estaba más dañada, había ilusamente estado esperado, esa era la verdad detras de toda su ruina en estos años.

Él en realidad siempre había esperado por Caleb.

Pero él nunca vino.

Entonces Brandon caía en la desesperación y la depresión un poco más, creyendo que en algún momento Caleb volvería al final.

Pero eso no pasaba.

Y Brandon se resignaba a no esperarlo más... Pero esa ridícula parte suya se rehusaba a olvidarlo.

Entonces Brandon volvía a levantarse para quedar en espera, un poco más destruido, un poco más roto.

Y así el ciclo se repetía.

Un ciclo motivado por la vana esperanza de que Caleb alguna vez volvería a él, que sus sueños y sus deseos en algún momento se harían realidad, que existiera ese final feliz para la dos.

Por desgracia, eso nunca pasaría.

En la noche recién pasada, esa pequeña parte que había estado esperando ilusa y toxicamente, murió destrozada en mil pedazos ante la verdad dura y fulminante.

Él tiene a alguien ahora, indiscutiblemente alguien mucho mejor que yo -Pensó Brandon mientras se arropaba por completo, acurrucándose cerca de Roger- Yo soy ahora una mancha en su vida, en su historial... Una mancha muy negra -El disgusto lo lleno con esa conclusión.

Porque las cosas no deberían de terminar así, aunque Brandon sintiera por lo que le quedaba de vida ese sórdido dolor que permanecía y se fortalecía cada vez que pensaba en Caleb y en cómo sus perfectos momentos terminaron de esa particularmente horrible e injusta manera, Brandon deseaba al menos quedar en paz con él, porque aunque le dolía como el infierno, a la vez se sentía feliz de que Caleb hubiese encontrado el amor otra vez y reconducido su vida.

Porque después de todo, las predicciones de Brandon se habían hecho realidad. Al final, Caleb lo había abandonado, independientemente de los motivos que fueran.

Lo había abandonado para no volver.

Yo también... Debo de seguir adelante -Pensó Brandon luego de haber llegado a esa conclusión. Mientras las lágrimas resbalaban por sus mejillas- Yo también tengo que conseguir mi futuro con esta persona...

Y la persona en cuestión de pronto se volteó y lo abrazó lentamente entre las sábanas, besando su nuca levemente.

-¿Estás bien? -Le preguntó Roger en un susurro mientras lo acariciaba lentamente en los abrazos. Brandon suspiró mientras carraspeaba levemente.

-No -Reconoció Brandon-... Pero lo estaré -Susurró-, pronto lo estaré.

Roger no dijo nada más, pero el hombretón beso su nuca lentamente, calmándolo con ello reforzando así su desición.

::::::

Vestido con una chaquetilla de seda negra, una camisa aguamarina clara, una corbata azul marino con lunares negros, un pantalón de vestir y zapatos de charol oscuros. Brandon cruzó el departamento de policía de New York a paso ligero, casi trotando.

Sin cigarrillos, sin bebeidas, ni nada por el estilo.

Brandon era consciente de que sería difícil dejar esos vicios tan radicalmente como él lo estaba haciendo, pero también era cierto que en el pasado, y en realidad siempre, había sido un hombre de disciplina y muy estricto... Era tiempo de recuperar eso.

De hecho, era tiempo de recuperar todo lo que Caleb le había arrebatado con su desprecio, por lo que Brandon había tomado una desición.

No más -Pensaba sin parar a cada segundo desde que Roger le había dicho para levantarse- No más... No más...

No más lástima, no más autocompasión, no más regodearse en la perdida, no más autoflagelación, no más despecho... Absolutamente no más nada de eso.

Él era un psicólogo, después de todo... Y era total y completamente patético el cómo se había comportado todos esos años, la patética mentalidad que había cargado y con la que habia arrastrado a todos sus cercanos; sus pocos cercanos... Para Brandon era como haber despertado de una larga borrachera y ver todo lo que había hecho durante ella en medio de la resaca.

Ahora lo que debía de hacer, era mantenerse despierto y soportar la tentación.

Soportar a Caleb y todo lo que conlleva eso.

Brandon terminó de llegar a la morgue policial... Justo donde lo esperaba Roger.

-Ya llegué -Indicó rápidamente mientras terminaba su marcha algo acelerada. Roger le dió una sonrisa algo sorprendida.

-Joder, pues sí que llegaste rápido -Admitió el hombretón con una mirada algo suspicaz.

Esa mañana había terminado algo fría para los dos. Luego de levantarse, la convivencia entre ambos fue algo torpe, Roger le indicó lo poco que había avanzado en el caso el día anterior y luego se devolvió a su casa con la ropa sucia de Brandon para cambiarse mientras que había dejado a este último solo para que se arreglara.

Y Brandon sabía por experiencias anteriores que Roger había esperado que él tardara un siglo en llegar y que cuando lo hiciera al fin, cargara un cigarro en la boca o que estuviera algo bebido.

Y aunque Brandon se sentía algo estresado y ansioso porque sentía claramente la falta de la nicotina, o de un buen trago que le hiciera arder un poco la garganta, no iba a permitirse una conducta parecida otra vez aunque sufriera por ello el síndrome de la abstinencia.

No más...

Brandon lamió levemente sus labios rececos, algo ansioso.

-¿Ya viste el cadáver de la víctima y el informe final? -Preguntó tratando de distraerse de su ansiedad.

-En realidad no, estaba esperando a ver si llegabas a tiempo -Admitió Roger antes de girarse hacia la puerta-. Y debo decirte que ciertamente ganaste puntos con esto.

Brandon sonrió levemente ante sus palabras al saber que iba bien encaminado en su personal redención, aunque solo fuera un pequeño paso.

Roger era su futuro, ahora lo tenía claro, y aunque había cosas que debían de resolverse entre los dos y temas que eran aún muy incómodos de tratar, tarde o temprano las piezas de la vida juntos que planeaban, iban a encajar lentamente.

Y así, teniente y asesor, entraron a la morgue.

El día anterior, Roger realmente no había logrado nada salvo tener una larga e intensa reunión con el capitán y el presidente y dueño de la constructora, dónde se le indicó explícita e indirectamente lo que se esperaba de él, luego recogieron el cadáver con un breve informe preliminar y tomaron las evidencias, además de que él presidente les había entregado el vídeo de las cámaras de seguridad del día anterior y pasado a ese.

Por lo demás, ese día era como si fuera el primer día de investigación.

-Además nos pidieron discreción absoluta, muchas, muuuuchas veces -Terminó Roger, rodando los ojos.

-Bueno, era de esperarse -admitió Brandon-. Se está en juego uno de los proyectos más importantes del año y podría ser arruinado por esto... Incluso la economía misma podría ser afectada -Señaló-, así que lo mejor, para nuestro bienestar y el del público, es que terminemos este caso lo más rápido posible -Terminó. Roger en respuesta asintió.

La pareja entró a la morgue, donde una multitud de salas con azulejos blancos hasta el techo los saludó. En cada habitación había una larga nevera al fondo, donde se guardaban los cadáveres; las demás paredes estaban llenas con estantes y mesones que tenían los instrumentos a usar para la examinación de los cuerpos.

Y como se había hecho costumbre para la pareja policial a través de todos esos años, en la primera habitación, en la última mesa a la derecha, el forense favorito del duo, Max Strange, estaba revisando el cadáver de Michael Cromwell y tomándole algunas fotos a las múltiples heridas que tenía en el torso.

-Max ¿Qué tenemos para hoy? -Preguntó Brandon a modo de saludo. Max se limitó a cabecear levemente antes de comenzar a dar su informe de autoxia.

-Michael Cromwell, treinta y cinco años, ex director del departamento de construcción y diseño -Indicó suavemente el forense mientras les daba una carpeta que contenía fotos de la escena del crimen.

En ella, el hombre de tez trigueña, cabellos negros y ojos azules, estaba recostado totalmente en la silla de su escritorio, vestía una camisa blanca que ahora estaba totalmente teñida de rojo y rota en múltiples zonas, además de cargar un saco y pantalones de vestir negro.

-La víctima presenta un golpe en la sien, producto de un objeto contundente -Indicó Max mientras señalaba el moretón en el lado derecho de la cabeza Michael-. La marca indica que fue golpeado con un objeto de base cuadrada y muy duro, tal vez un pisapapeles o una cajita de madera -Especificó-, no fue letal, pero si logró atontar a la víctima lo suficiente para esto -Señaló el pecho entero de la víctima.

Era un visión dantesca, lo que alguna vez fue un torso bastante musculado, era ahora prácticamente un colador de carne de la enorme cantidad de heridas que habían sido inflingidas.

-Conté aproximadamente cuarenta y dos apunaladas -Enumeró Max, ganándose la elevación de cejas de Brandon y Roger.

-Quién hizo esto tenía mucho odio acumulado -Razonó Roger con un silbido.

-No puedo evitar estar de acuerdo -Admitió Max-, además de que no puedo asegurar que sea el número exacto, hay tantas apuñaladas que algunas volvieron a ser encajadas en lesiones previas, agrandándolas con ello y otras estaban tan pegas a heridas previas que rompieron el tejido entre ellas y se volvieron una sola... La persona que hizo este tenía mucho odio acumulado y una muy buena condición física -Explicó-. Además, las perforaciones redondas indican que el arma es solo punzante, seguramente de alguna clase de varilla o punzón.

-Eso es bastante específico -Indicó Brandon, deteniéndose un momento de revisar las fotos.

-Sí, y por eso no se encontró en la escena del crimen -Comentó Roger, revisando los documentos-. Al igual que el objeto que fue usado para golpear a la víctima, que al parecer concuerda con la única cosa que falta de la oficina de la víctima, un pequeño trofeo del mejor empleado que tenía la víctima.

-El asesino se llevó todo lo que tocó -Aseveró Brandon, asintiendo levemente. Max le imitó.

-También, la hora de la muerte está entre las cuatro y media o cinco de la mañana -Indicó el forense.

-Eso es prácticamente a la hora en que Caleb fue a verlo -Murmuró Brandon lentamente, congelándose unos segundos.

Eso lo colocaba como sospechoso principal.

Ambos, forense y teniente, lo observaron preocupado al saber el pasado que ambos cargaban.

-Bran...

-Estoy bien -Cortó Brandon quirúrgicamente-. De todos modos, ya había colocado a Caleb como posible sospechoso -Admitió al final. Roger lo observó sorprendido.

-T-tú, por eso ayer... -Dejó en el aire el hombretón. Brandon asistió levemente.

-En parte era por esto -Admitió.

Max paseó si mirada entre los dos unos segundos antes de seguir.

-Por lo demás, no conseguí ninguna clase de epitelial, por esa parte el cuerpo está limpio -Indicó-. Ya con esto no tengo más nada chicos -Zanjó con un suspiro.

-Asi que básicamente tenemos un cuerpo limpio, sin rastros de nada aparte de una violenta muerte, las armas del homicidio están desaparecidas y el sospechoso principal es Caleb... -Pensó Brandon en voz alta lentamente-. ¿Qué hay de las grabaciones? -Preguntó después.

Entonces, una vez las revisaron, ambos quedaron en shock.

-¿Qué rayos es esto? -Preguntó Roger luego de que el analista terminara de mostrarles lo que encontró.

Nada, los videos estaban vacíos en el periodo del homicidio.

Más concretamente, justo cuando en el video de la cámara de la entrada se mostraba a Caleb entrar y saludar al vigilante y a la recepcionista, todos, absolutamente todos los videos, se mostraba en negro y sin sonido alguno... Hasta minutos después de que Caleb encontrara a la víctima.

-Traté de recuperar algo, pero nada -Indicó el analista-. A causa de esto, ayer llamé a la vigilancia de la torre y pregunté al respecto -Indicó-, parece que inexplicablemente durante este periodo de tiempo, los videos se arruinaron y hubo un revuelo entre los vigilantes mientras trataban de arreglar el problema... Así que supongo que no serán testigos confiables en el caso -Terminó.

Un sórdido silencio llenó el salón

-Definitivamente esto será un problema -Indicó Roger.

-Ni que lo digas -Afirmó Brandon.

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Desde el instante en que Brandon puso un pie en el hall de la constructora Diamond's, se preparó mentalmente para lo que venía.

El segundo round contra Caleb.

Él tenía que admitir que el primero lo había perdido patéticamente y sin posibilidad alguna a replicar.

Pero esta vez será diferente -Pensó decidido.

En ese momento entraron a la oficina de Darren Clarkson, el jefe y dueño de la constructora.

Quién en ese momento estaba hablando con su secretaria, pero cortó la conversación una vez ambos pasaron.

-Caballeros -Saludó el hombre de traje, cabellos negros con canas grises, Tez morena y ojos negros-. Los estaba esperando, justo estaba arreglando con mi secretaria el ubicarles un espacio para los interro...

-No, no es necesario -Le interrumpió Brandon en ese momento-. Lo haremos en la oficina de la víctima -Incico.

El presidente y la secretaria lo observaron sorprendido, Roger por su parte solo suspiró.

-Eh, disculpe ¿Puedo saber por qué quiere hacer eso? -Preguntó la secretaria visiblemente incómoda ante la idea.

-Es simple, quiero agregar un plus de presión al interrogatorio -Respondió Brandon-. Las personas suelen ser muy expresivas en la escena del crimen de alguien conocido, y considerando la violencia con la que este homicidio fue realizado, seguramente conseguiré alguna reacción que nos lleve en dirección al asesino -Explicó al final.

Al terminar, de repente el presidente Darren lo observó con otros ojos, los ojos de un reconocedor.

Los ojos de un depredador de los negocios que reconoce a otro.

-Usted debe ser Brandon Mayer ¿No? -En respuesta Brandon asintió levemente-. He oído mucho de usted, especialmente sobre lo versado que está en la negociación, administración y consultoría.

Brandon sonrió levemente en respuesta.

-Lo siento, pero en mi tiempo libre asesoro a mi hermano menor, así que no puedo ayudarlo -Incicó.

-Bueno, tenía que tratar -Dijo Darren Clarkson encogiéndose de hombros-. Espero que resuelvan esto rápidamente caballeros, realmente necesitamos que esto se solucione pronto -Acotó.

-No se preocupe, de esto nos encargaremos rápidamente -Aseguró Brandon por su parte-. Por ahora, empiece a llevar a los integrantes del departamento a la oficina de la víctima... Empezando con el testigo presencial, el señor Prescott.

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La escena de crimen, la oficina de Michael Cromwell, estaba cargada de tanto silencio que podría tranquilamente haber matado a otra persona.

En un par de sillas plegables, estaban sentados Roger y Brandon.

En el medio había una pequeña mesa.

Y al otro lado estaba Caleb, observando en silencio la mesa con un serio rictus.

Brandon suspiró mientras observaba su reloj de bolsillo, llevaban así aproximadamente diez minutos.

-E-eh -Comenzó Roger algo nervioso-, Ca...

-Señor Prescott -Interrumpió Brandon con un tono monocorde-. Por favor díganos ¿Qué hizo exactamente en la mañana de ayer? -Preguntó-. Vimos en las grabaciones cuando llegó a la empresa, pero al parecer...

-¿Por qué me están interrogando en este lugar? -Preguntó Caleb de pronto-. Se nota claramente como apesta a cloro, desinfectante y sangre -Se quejó asqueado y levemente irritado.

Normalmente, las escenas del crimen no serían tocadas y limpiadas hasta que el crimen se resolviera, pero dadas las circunstancias y la presión ejercida sobre el departamento, el lugar fue limpiado profundamente en la noche.

Aunque el olor tardaría en desaparecer.

Brandon abrió la boca para responder...

-No, déjalo, es obvio que este lugar lo están usando para presionar psicólogicamente, aunque es un truco bastante bajo y barato, algo típico de ti -Señaló Caleb mientras cabeceaba en su dirección.

Ese gesto, aunque le dolió bastante a Brandon... También le molestó.

Con que esto va ha ser así ¿No? -Pensó molesto.

-Jo, se nota que me conoces ¿No Caleb? -Preguntó Brandon sarcástico, Caleb apretó la mandíbula en respuesta-. Aunque es muy valiente de tu parte cuestionar mis métodos, considerando que mi trabajo es conseguir la verdad en este caso donde por ahora, tú eres el principal sospechoso -Soltó.

Roger abrió la boca para protestar pero Brandon le apretó suavemente la pierna, congelándolo con ello.

"Estoy bajo control, tranquilo" eso significó ese gesto.

Caleb por su parte parpadeó unos segundos, como si estuviera considerando algo.

-Vamos, escupe lo que quieres decirme -Espetó Caleb molesto.

-Bien ¿Tú lo asesinaste? -Preguntó Brandon cruzándose de brazos. Caleb lo imitó.

-No.

-¿Lo mataste? -Repitió Brandon.

-He dicho que no -Espetó Caleb frunciendo el ceño.

-¿Tenías motivos para asesinarlo?

-Aparte del hecho que Michael era un imbécil del nivel de los récords Guiness, no -Explicó Caleb.

-¿A qué te refieres con ello? -Indagó Brandon.

-Él era egocéntrico, narcisista y todo un idiota. Dentro del departamento, él se metía con quién podía, cuando podía y cómo podía, tratando siempre que recursos humanos no se diera cuenta, yo era una de esas personas a las que él agredía -Incicó.

-¿Podrías darnos una idea de con quienes él se metía? -Intervino Roger por primera vez. Caleb se rió divertido.

-Eso es simple -Respondió Caleb-. Se metía con todos excepto dos personas, y eso era por ellos eran sus ojitos en todo el lugar -Acotó-, sus nombres son Ronald McCain y Alan Pike.

-Bien -Prosiguió Brandon-. Volviendo a dónde impertinentemente me interrumpiste, por favor dinos qué fue lo hiciste una vez llegaste a la empresa -Pidió. Caleb soltó un bufido mientras le lanzaba una hostil mirada.

-Llegué, saludé al vigilante y a la recepcionista, llegué a mi cubículo y realicé los retoques que le faltaban al informe que Michael me había pedido urgentemente para esa hora y salí corriendo a entregárselo... Entonces lo encontré -Explicó Caleb.

-¿Cuánto tardaste en haces esos "retoques"? -Preguntó Brandon esta vez, logrando que Caleb le diera una mirada algo confundida.

-E-eh, no sé, tal vez unos quince o veinte minutos, tal vez más, no puedo decirlo con certeza -Admitió.

-¿Notaste algo que estuviera fuera de lugar mientras hacias tu trabajo? -Preguntó Roger. Caleb se quedó pensativo unos segundos.

-... Lo único en lo que puedo pensar es en que cuando llegué, al rato los vigilantes parecían inquietos y todos se fueron a algún lugar, pero como estaba apurado, no le presté mucha atención -Señaló al final Caleb.

-Bien, puedes irte -Espetó Brandon a los segundos.

Caleb no dijo nada más, simplemente se levantó y salió casi que corriendo de ese lugar.

Apenas cerró la puerta tras de él, Brandon soltó un pesado bufido mientras se pasaba las manos por la cabeza, tratando de controlar el impulso que tenía de tirarlo todo.

-¿Estás bien? -Le preguntó Roger mientras masajeaba su pierna suavemente. Brandon asintió lentamente.

-Sí, con ganas de romperlo todo, pero sí, estoy bien -Admitió Brandon mientras arreglaba su peinado con los dedos.

-¿Qué piensas de lo que dijo? -Preguntó el hombretón mientras escribía un mensaje, seguramente era pidiéndole a la secretaria a los demás integrantes del departamento.

-Que oculta algo -Reveló Brandon-. No nos dijo toda la verdad.

-¿Estás seguro? -Preguntó Roger algo sorprendido. Brandon asintió esta vez más decidido.

-Algunas cosas no cambian con el tiempo... Y sus gestos son una de ellas -Murmuró Brandon pesadamente-. Lamento hacerte pasar por esto Roger, en verdad lo siento -Se disculpó entonces con el hombretón mientras le daba un suave beso en los labios. Roger por su parte le sonrió tranquilamente.

-Está bien, esto tenía que pasar, de todas forma -Le tranquilizó su mejor amigo... Y pareja.

Porque era su pareja ¿No?

Lo es -Pensó Brandon enseguida.

-Dile a la secretaria que deje a los amigos de la víctima de último, quiero escuchar que dicen los otros primero -Pidió una vez que recuperó la compostura totalmente.

Luego de esa pequeña confrontación con su pasado, las siguientes tres horas para Brandon fueron un no parar de escuchar cómo cada persona que entraba en la oficina, dejaba por el suelo el nombre del difunto incluso aunque estuvieran en su lugar de muerte, llegó un punto en el que Brandon concluyó que si hubiese estado en la misma posición que esos empleados, él también habría querido asesinarlo.

Al parecer la víctima era no solo un egocéntrico, narcisista e idiota, sino también homofóbico, racista, xenófobico, machista y abusador. Vamos, que él tipo era un completo y absoluto bastardo.

-¡Ese sujeto merecía lo que le pasó y más! -Exclamó muy molesta e indignada Linda Brenam, la asistente del fallecido-. Ese asqueroso bastardo siempre buscaba la forma forma de invadir mi espacio personal y tocarme de maneras indebidas, incluso cuando le pedía en múltiples formas que me dejara en paz, ese tipo siempre me daba regalos y me decía cochinadas como si fuéramos algo... Solo lo aguantaba por el prestigio de la empresa y el sueldo que ganaba -Terminó con un bufido.

-No entiendo algo -Intervino Roger-. Si el era una total basura ¿Cómo es que tenía un puesto tan alto y cómo es ninguno lo ha denunciado hasta ahora? -Soltó la pregunta que llevaba tiempo rondando en la cabeza de Brandon.

Linda Brenam bufó molesta.

-Llegó tan alto a base de robarle los proyectos a otros y de difamar a sus rivales -Reveló-. Michael Cromwell era un total patán, pero un total patán bastante inteligente, con grandes influencias y desgraciadamente era impecable en su trabajo... Aparte de que uno de sus mejores amigos es el jefe de recursos humanos y el otro es el subjefe del departamento de construcción y diseño, así que los pocos que se atrevieron a tratar de denunciarlo, terminaban despedidos por sus dos respaldos -Explicó.

-Entonces ese sujeto era un enfermedad crónica ¿No? -Preguntó Brandon. Linda asintió algo cansada.

-Pues sí lo era... O por lo menos lo iba a dejar de ser -Refutó al final-. En los pasillos se murmuraba que lo iban a destituir -Explicó-, también se decía que iban a colocar a al ingeniero Prescott en su lugar.

-¿A sí? -Preguntó Brandon ahora realmente interesado, sintiendo que había encontrado algo.

-Sí -Afirmó la asistente-, y todos lo creían porque la prueba más obvia es que el ingeniero Prescott es el jefe directo del proyecto de la torre que se está contruyendo y no Michael Cromwell -Indicó-. Incluso estuve presente en la breve reunión que hubo cuando se comenzó el proyecto, allí el presidente le indicó personalmente a Michael que solo podía guiar al ingeniero Prescott y darle algunas directivas, el resto quedaba en manos del ingeniero... Recuerdo claramente como Michael estaba rojo de la furia durante toda la reunión mientras que el ingeniero Caleb se notaba incómodo.

-¿Entonces había fricción entre los dos? -Indagó Roger. Pero sorpresivamente Linda soltó una risa

-Podría parecer eso, pero no -Refutó sorprendentemente-. Aunque el ingeniero Prescott es abiertamente gay e invitó a algunos de nosotros a su boda, no importa cuánto Michael Cromwell se metiera con él o le pidiera imposibles o hiciera comentaros estúpidos, el ingeniero nunca le prestó atención... Eso molestaba especialmente a Michael -Terminó Linda.

Brandon suspiró al entender un poco hacia dónde iba esta investigación.

-Gracias Linda, esto es todo -Incicó Roger entonces.

-No hay de qué -Incicó la mujer antes de irse.

-¿Qué piensas de todo esto? -Le preguntó el hombretón en ese momento.

-Que fácilmente todo el departamento pudo haberse puesto de acuerdo en matarlo -Incicó Brandon mientras se estiraba en la silla-. ¿Quienes faltan?

-Eh, los amigos de la víctima... Y no lo vas creer, pero Christopher Stone también -Incicó Roger, arrancándole una tenebrosa risa a Brandon con ello.

-No me sorprende, él es la maldita sombra de Caleb -Suspiró mientras se levantaba-. Necesito ir al baño un momento a... Calmarme un poco -Explicó mientras sostenía sus manos entre ellas.

Cómo había predicho, la ansiedad de no haber tomando ni fumado estaba pasándole factura. Sus manos comenzaba a temblar, tenía los labios algo rececos y empezaba a sudar. Brandon necesitaba un descanso.

-Oh bien, iré a buscar nuestro almuerzo entonces, que se acerca el mediodía -Incicó Roger mientras se acercaba y se agachaba para darle un beso-. Estoy orgulloso de ti, sé que te cuesta, pero sigue así -Le alentó. Brandon asintió.

-Tranquilo, estoy bajo control, nos vemos en un rato.

Ambos se separaron, mientras Roger fue a la cafetería del edificio, Brandon fue al baño del departamento de diseño y construcción. No pudo evitar aflojarse la corbata al sentir como lo afixiaba, él sabía que no era más que el síndrome de abstinencia dándole esa sensación, pero era mejor asegurarse.

Apenas entró, corrió al lavamanos más cercano, abrió el grifo y se bañó la cara y la cabeza con el agua, repitió el procedimiento un par de veces más, sintiendo como la ansiedad se atenuaba poco a poco. Entonces se apoyó en el lavamanos y respiró controladamente.

-Puedo hacerlo, puedo dejarlo, esto no es nada, puedo controlarlo -Murmuró quedadamente.

-¿Que puedes controlar? -Preguntaron al fondo del baño, congelando a Brandon con ello.

Caleb salió de un cubículo con el con fruncido.

¿En serio? -Pensó Brandon irónico mientras suspiraba cansado al tener que lidiar con esto.

Sin embargo, no le hizo caso a Caleb y se limitó a sacar su pañuelo para secarse.

Pero Caleb parecía querer guerra.

-Pareces algo nervioso y te tiemblan las manos levemente -Dijo suspicazmente su ex estudiante-... Parecieran los síntomas de abstinencia, pero tú no eres de los que consume drogas, asi que ¿Qué?, ¿Te volviste alcohólico, un fumador empedernido, o qué? -Preguntó Caleb divertido sin darse cuenta de que le había atinado a las dos.

-No entiendo por qué ahora te importa tanto mi vida Caleb, creí que no te interesaba saber nada de mí -Increpó Brandon mientras se disponía a peinarse.

-Y no me importa para nada -Aseguró Caleb-, solo me dio algo de curiosidad saber que tan ruin y patético te has vuelto con los años y...

Eso disparó algo en Brandon, haciendo que viera todo en rojo.

Para cuando este se dió cuenta, tenía a Caleb en piso, apretando su brazo izquierdo entre los omóplatos y el otro brazo apretado por su rodilla derecha.

Cuando Caleb trató de moverse, Brandon apretó la llave; Caleb gruñó de dolor, pero no dejó de hacer fuerza.

Esto le trajo a Brandon a la mente el principio de su relación, así que Caleb no pudo ver su amarga y nostálgica sonrisa por ello.

-No sé por qué terminamos así Caleb, tú lo eras todo para mí -Espetó Brandon... Caleb se detuvo un momento-. Yo al final respeté tu desición y me alejé y no nos hemos vuelto a ver hasta ahora... Pero si crees que por ello tienes el derecho de hablarme de esta forma, entonces estás muy equivocado -Apretó la llave rápidamente antes de que Caleb reaccionara, ganándose un gemido de dolor que en cierta forma lo dejó satisfecho.

-Mal... Dito -Murmuró Caleb adolorido.

Brandon apretó más y Caleb soltó un grito.

-Por lo que he visto hasta ahora -Continuó Brandon como si Caleb no hubiese dicho nada-. En mi criterio, Caleb, solo te has convertido en un prepotente, arrogante, pedante y egoísta hombre -Escupió cerca del rostro de Caleb luego de decir eso-, pero quiero recordarte que más que ser tu novio o tú prometido, yo fui principalmente tu tutor, y como tal exijo respeto, de lo contrario voy a tener que darte una lección ¿Quedó claro? -Preguntó Brandon, pero Caleb no respondió-. ¿Quedó claro? -Preguntó está vez apretando más duro.

-¡S-SI SEÑOR! -Gritó Caleb de dolor. Brandon aflojó su agarre.

-Bien, espero que cooperes con tu ex tutor en este caso, señorito Prescott -Terminó Brandon sarcástico antes de soltarlo, recoger su maleta e irse.

No supo por qué, pero Brandon se sintió realmente satisfecho al ver en ese momento la impotencia y humillación en los soberbios ojos de Caleb.

Caleb uno; Brandon uno...

Continuará...

Hola chicos!!!! Perdonen cualquier falta de ortografía y de dicción por favor, que se que soy un desastre pero bueno.

Antes que nada pido perdón por tardar tanto en subir este capítulo, se me había dado la oportunidad de arreglar un problema que tenía mi teléfono y eso me llevó a tener que sacar todo de él, eso me llevó casi toda la semana, y luego me dio un virus asqueroso que no le recomiendo nadie, de hecho, este capítulo lo estoy publicando recién curado, aprovechando que no he podido ir a trabajar.

Por otro lado, este va ha ser el largo actual de los caps, vale? Así podré publicar más seguido y sabrán de la historia antes de que un rayo me vuele la cabeza XD

Por otro lado, si notan que el capítulo está como faltó de algo, es simple, no está completo, esto es la mitad de lo que escribo normalmente, así que tranqui, aún falta una tercera pelea de Brandon y Caleb, que el tutor conozca Bryan (eso va ha ser divertido), que metan preso a Caleb (eso va ha ser aún más divertido) y empezar a saber sobre los otros personajes, comenzando por Cris.

Ah, y el sexo, eso nunca puede faltar.

Hasta el próximo CAP señores!!!!