El tutor 10

Cuando crees que tienes una familia disfuncional... Siempre habrá una peor, el pasado trata de arruinar a Brandon y es el turno deo estudiante de salvar el día... Con una buena mamada y un plan descabellado.

El tutor 10

Jaque mate, idiota.

Caleb...

Ese día, era un día sábado un poco anormal a causa del día anterior, empezando por el hecho de que su madre tuvo que salir ese viernes a una serie de conferencias que tendría durante dos semanas, así que Caleb se quedaría con Brandon esos fines de semana.

Y terminando en que a su tutor le habían quitado los puntos poco más de una semana después de salir del hospital, precisamente ese mismo viernes por la tarde... Lo que no era humanamente posible, y aún así su tutor lo había logrado. En ese corto período se había recuperado lo suficiente como para quitarse las suturas sin ningún problema.

Si esto le hubiese ocurrido a otro, Caleb no se lo hubiese creído, pero luego de que esa misma noche lo follara tan fuerte que lo hizo olvidar brevemente dónde estaban, tenía serías dudas sobre si su tutor era un ser humano o si en realidad le habían inyectado algo parecido al suero del súper soldado.

Esa mañana lo había levantado más temprano de lo normal, su rostro brillaba especialmente e incluso estaba algo risueño, se notaba que Brandon tenía las energía al máximo a pesar de que lo había follado como si hubiese corrido los mil metros planos en diez segundo y estaba feliz de ser casi totalmente libre de las secuelas del altercado en el muelle, al punto de que, según les dijo su doctor, las cicatrices serían mínimas y casi inexistentes.

Simplemente era un monstruo incansable e insaciable.

Mientras que Caleb se sentía ciertamente hecho polvo, todavía esta agotado de la follada que había recibido que fácilmente podría haber ganado algún récord Guiness al golpe de cadera más rápido del mundo, si es que algo así existiera, además de que había hecho de todo para ayudar a su tutor a sanarse, había comprado toda clase de cremas y cocinado comidas altas en hierro y utilizado cuanto truco había encontrado por internet, pasando horas extras despierto y despertando mucho más temprano de lo normal...

... Olviden lo de que su tutor era un monstruo, Caleb era monstruo, por haber hecho y soportado de todo para ayudar a su tutor ha recuperarse lo más pronto posible y no haber muerto en el intento... Todavía.

Porque ciertamente no creía poder sobrevivir a lo que su tutor le tenía preparado en ese momento.

-Antes de enseñarte ha dar golpes, te enseñaré ha recibirlos, ha bloquearlos y esquivarlos -Comentó Brandon animado mientras rotaba sus hombros, Caleb soportó un bostezo que pugnaba por salir y comenzó a imitarlo-. Te enseñaré las bases y principios del bloqueó y luego tendrás que esquivar lo golpes que te lanzaré, debemos desarrollar tu instinto y tú tiempo de reacción para que puedas detener lo que sea.

Habían movido las máquinas de ejercicio para colocar una colchoneta de tres metros cuadrados lo suficientemente dura como para caminar por ella relajadamente y hasta correr, pero lo suficientemente suave como para aliviar los goles contra el suelo un poco.

Brandon le enseñó detalladamente como esquivar y bloquear cada golpe y patada que se utilizaba normalmente tanto en peleas profesionales como callejeras, repitiendo los movimientos lo suficiente como para que recordara la mayoría.

-En una pelea, normalmente las personas se dejan llevar por la adrenalina, el miedo y los nervios y olvidan todo lo que aprendieron por la intensidad de la situación y el peligro, así que para evitarlo, deberás practicar peleas lo más reales posibles. Aprender a pelear te enseñará control y dualidad que podrías usar comodamente en tu día a día -Explicó Brandon en modo tutor mientras se colocaba en una postura básica de pelea, Caleb le imitó perfectamente-. Cómo estamos comenzando me contendré, para que te sea fácil bloquearme y esquivarme.

-Por favor, eso sería genial -Acotó Caleb rápidamente-. No quiero morir tan joven, señor -Suspiró, Brandon soltó una carcajada.

En esas semanas, Caleb para su regocijo había notado claramente los cambios en su hombre. Aunque Brandon era serio por naturaleza, cada vez se le hacía más fácil reírse y conversar sobre cualquier tema por muy tonto que fuera, así como hacer gesto y caras e incluso podía tontear un poco y retosar con él, simplemente tirados por ahí sin hacer nada más que acariciar sus cabellos... Lo que lo hacía endemoniadamente más encantador y sexy, prefería mil veces este Brandon que el hombre de hielo que era al principio.

-Bien... Tranquilo, sé que lo harás bien, confío en tu destreza -Aseveró sin dudar, Caleb no pudo evitar sonrojarse como siempre lo hacía cuando su tutor lo alababa sin dudarlo-. Bueno, aquí voy.

El gesto de su tutor cambió de golpe mientras se afianzaba en su postura: Con los puños paralelos a sus mejillas y algo distanciados del cuerpo, las piernas algo flexionadas y casi en posición de correr.

Caleb sintió algo raro, era como si la atmósfera se tornará pesada solo sobre él.

Brandon estaba a un metro de distancia. Normalmente, Caleb vería claramente a cualquiera venir hacia él.

Pero su tutor de alguna forma dió un paso que se extendió todo el metro en menos de un segundo, para cuando se dio cuenta, tenía un enorme puño frente a su naríz.

Fue como si le dieran con una masa en la cara a toda velocidad.

La cabeza de Caleb fue hacia atrás de golpe y trastabilló un poco, no gemió de dolor porque su mente estaba en shock. Notó que Brandon lo observaba sorprendido y hasta aterrorizado.

Entonces todo se oscureció.

::::::

Cuando Caleb recobró la consciencia, tenía un paño fresco y húmedo en la frente, sentía la cabeza apoyada en algo mullido y duro y especialmente sentía la cara como si fuera un enorme moratón y le dolía incluso abrir los ojos, aún así se forzó ha hacerlo.

Se encontró con la preocupada mirada de su tutor.

-... No se porqué, pero siento que todo fue un desastre -Se rió cómo pudo para tratar de calmar a Brandon, pero este suspiró.

-No es gracioso -Espetó cabizbajo-. Fue mi culpa, no medí bien mi fuerza, en verdad creí que lo esquivarías, lo siento tanto Caleb, no tengo perdón, fallé estrepitosamente -Reconoció con un gesto de dolor.

-Nah, está bien, es mi culpa, no le dije porque se veía muy animado pero no estoy al cien por ciento, me estoy muriendo del sueño y estoy molido por la follada de ayer -Reveló con apenas vergüenza, pero Brandon negó con la cabeza.

-No, es mi culpa, has estado muy pendiente de mi y no tomé en cuenta cuánto te estaba costando hacerlo, perdóname por eso, cariño -Soltó mientras le acariciaba la frente.

Caleb se sentó de golpe, causándole algo de mareos el brusco movimiento, Brandon lo sujetó cuando se fue de lado.

-¿Cómo me llamaste? -Preguntó Caleb sorprendido, Brandon frunció levemente el ceño.

-Eh, cariño -Repitió su hombre está vez algo nervioso-. ¿Qué?, ¿Está mal que...?

Caleb se lanzó a sus labios, besándolo profusamente, Brandon gruñó placenteramente, uniendo sus labios con fuerza para luego enredar sus lenguas en una batalla en medio de sus dos bocas.

Entonces Caleb se separó solo cuando se quedó sin aire.

-Estás perdonado, por ese título valió la pena la paliza unilateral que me diste -Susurró Caleb, Bandon hizo un leve gesto contrariado por sus palabras.

-Estás loco Caleb -Negó con la cabeza su tutor.

-Loco por usted, señor -Asintió sin reservas de ningún tipo. Brandon se sonrojó levemente, nervioso.

-Ven idiota, que el golpe te ha afectado -Lo ayudó a levantarse-. Hoy haremos una excepción y dormirás hasta tarde. Hoy cocino yo -Indicó, y Caleb no pudo evitar gemir de anticipación pensando en el paraíso culinario que iba ha probar.

-Sí esto va ha ser así cada vez que me des la paliza de mi vida, puede que me deje encajar unos cuantos golpes extras de vez en cuando -Comentó como si nada, esta vez Brandon se rió.

La rutina entre los dos cada vez había cambiado más y más, comenzando con el hecho de que ahora dormían juntos en la habitación principal y que Brandon cocinaba en las mañanas. También entrenaban juntos en el gim... Aunque a veces esto terminaba en largas sesiones de besos porque Brandon no había estado curado y Caleb lo había tenido a pan y agua con respecto al sexo por eso, hasta la noche anterior.

Tal vez por eso fue tan salvaje esa noche.

También, Caleb de vez en cuando iba al departamento de policía por las tardes para ver a Brandon y a Roger trabajar y, porqué no, también ha conocer a los compañeros de su padre.

Porque aunque Caleb seguía odiando a su padre y su mundo, el mundo policial tambien era de Brandon, además de que quería entender porqué su padre prefirió a todo menos a él, principalmente por eso.

Así que Caleb durmió placenteramente un señor sueño bien merecido, solo despertado por Brandon para que almorzara, se sintió como un rey mientras devoraba el amplio festín que le había servido su hombre, y luego se volvió a dormir un par de horas más.

Era el día en que más vago habían sido desde que conoció a Brandon, y la verdad, más que placentero se había sentido bastante raro.

Es un fin de semana para los dos solos, idiota, sin trabajo, sin madre, y tú vas y lo desperdicias durmiendo, serás tonto -Le reprendió su consciencia, haciéndolo levantarse con ello.

Ansioso, Caleb comenzó a buscar a Brandon por la casa, descubriendo que estaba en su despacho.

La habitación usada para la oficina de Brandon estaba compuesta por un enorme ventanal a la derecha que estaba tapado por una igual de grande persiana gris claro, al fondo había una pared llena de archivadordes, una amplia mesa en el centro para revisar evidencias o darle la tutoría, y detrás de la mesa, viendo a la puerta, un escritorio de oficina que Brandon usaba para sus trabajos más personales con su laptop puesta ahí.

Brandon estaba sentado de espalda a la puerta hablando con alguien sobre los múltiples casos en los que estaba ayudando por haber estado tanto tiempo convaleciente, Caleb no se molestó por ello, de hecho, esperaba algo así, había visto de refilón la viceral necesidad de dar justicia de su tutor y debía admitir que en cierta forma le excitaba esa parte suya.

Y amaba aún más como su tutor siempre le daba espacio para estar juntos sin importar lo lleno de trabajo que estaba.

De pronto, la mente de Caleb se iluminó y una sonrisa maliciosa adornó su rostro.

-Dices que el cadáver fue conseguido a la siete de la mañana y su rigor mortis indicaba que había fallecido a las seis menos cuatro aproximadamente n-n... -Se cayó Brandon de golpe xc usando comenzó a ejecutar su plan.

Caleb casi pudo ver la sorpresa en su rostro y como apretaba el teléfono hasta casi aplastarlo para no gemir. Claro, no podía verlo porque estaba debajo de la mesa comiéndose el cabezón de la verga de Brandon bajo la ropa.

"¿Brandon?" Escuchó suavemente salir del teléfono. Caleb le arrancó de golpe la ropa, al punto de que corrió un poco la silla más adentro. El pollón de Brandon saltó como un resorte.

-E-eh, lo siento, pensaba en cómo murió, prosigue -Explicó Brandon clínicamente mientras empujaba a Caleb suave pero firmemente lejos de su polla.

Pero Caleb desvió su mano rápidamente con el antebrazo, justo como le enseñó Brandon esa misma mañana y se enchufó la cabeza del vergón de su tutor, presionándola con el paladar y simulando masticarla cuidándose de no usar los dientes.

Sintió como la mano que le empujaba, se afianzó rápidamente de sus cabellos, jalándolo hacia la base de su polla, Caleb abrió más la boca y suavemente dejó que ese pollón penetrara su garganta, comenzando ha provocarle arcadas que se ahogaban con el grosor de esa verga.

Caleb comenzó a follarse la garganta lentamente, dejándosela cavada hasta la base unos segundos, concentrándose en sentirla palpitar dentro de su garganta, especialmente la gorda cabeza que la sentía soltar precum lentamente que por su garganta, esa sensación lo tenía especialmente cachondo.

Caleb se asombraba y molestaba en partes iguales por cómo Brandon seguía hablando por teléfono como si no estuviera pasando nada, así que le apretó con algo de fuerza las pelotas y se folló la garganta como si le fuera la vida con ello, sintiéndo como ello causaba que las babas y el precum volarán por todos lados y se le salieran las lágrimas..

Para su satisfacción, escuchó como se le fue la voz a su tutor y luego estuvo algo inestable antes de recuperar la compostura.

Entonces Caleb metió su mano bajo el culo Brandon y metió un par de dedos de golpe en su ojete, está vez Brandon sí soltó un gritito bastante ronco, muy varonil, que le hizo meter sus dedos hasta hacer tope con los nudillos. El ojete de cerró como un cepo alrededor de ellos, así que comenzó ha abrirlos en su interior.

-¡Ah, mi-mierda, lo siento, me golpeé un dedo c-con la mesa -Explicó su tutor nerviosamente mientras le daba un fuerte tirón en los cabellos, que más que dolerle, le encendió-. D-demonios, creo que me lo do-doble.  A-ahora te llamo, voy a revisármelo -Colgó.

La silla chirrió estruendósamente y Caleb se fue hacia adelante con toda la polla de Brandon clavada más allá de las amígdalas.

Se encontró con la mirada enfurecida de su tutor, al punto que veía como algunas venas le saltaban en la frente y en la sien.

Se sacó lenta, muy lentamente el pollón, chupando con fuerza el enorme glande al final que hizo un chasquido al salí de su boca, Brandon entrecerró los ojos, cada vez más furioso.

-Upsy, lo siento señor, es que lo vi y no pude resistirme, he sido un niño malo -Comentó con, todo hay que decirlo, la cara de una verdadera putita viciosa mientras recogía sus babas y el precum que inhundaa toda su cara y se lo comía.

-¿Niño malo? Lo que has sido es una perra maleducada que no sabe obedecer -Gruñó Brandon mientras acariciaba su rostro-. Mmm, hace tiempo que no te castigo, siempre digo que lo haré pero se me olvida.

-Bueno, perro que ladra no muerde ¿No señor? -Indicó Caleb sonriente.

-¿Ah sí? Ya verás -Susurró siseante su tutor mientras violenta a su boca de verdad.

Caleb sentía como literalmente violaba su garganta hasta dejársela en carne viva, no sabía si era porque se lo estaba haciendo Brandon o era porque se estaba volviendo un verdadero pervertido, pero se estaba calentando cada vez más a pesar del dolor, las arcadas y la tos que le causaba. Entonces en venganza le clavó otros dos dedos en ojete a Brandon, que bufó de placer, mientras botaba levemente sobre estos.

-Veo que mi perra no solo tiene hambre, sino sed -Comentó Brandon de pronto, clavándole el vergón hasta el fondo-. Déjame que te sacie, que para eso soy tu tutor.

Caleb no entendió de qué hablaba hasta que sintió como un potente chorro de algo caliente y picante llenaba su garganta hasta ahogarlo, teniendo que tragar rápidamente.

Brandon estaba orinando directamente en su garganta.

Caleb trató de soltarse pero su tutor lo tenía atrapado con un agarre férreo.

-Ah, sí, lo necesitaba, llevaba rato aguantándome -Comunicó Brandon con un gemido mientras le enseñaba una cara de cabrón total-. ¿Te gusta?

Y solo para cuándo se lo preguntó, Caleb se dió cuenta que sí, le había encantado.

Su tutor comenzó a follarse lentamente du boca otra vez, Caleb gimió en respuesta mientras se frotaba el paquete, a punto de correrse, le clavó el pulgar y Brandon dió un leve alarido, presionando hacia abajo hasta casi meterse su mano por el culo, haciendo tope con los nudillos.

-Joder chaval, al final va ha resultar que no podré castigarte con nada porque te gusta todo -Se quejó sin quejarse de verdad su tutorientras gemía suavemente-. Coño, bastardo me tienes el culo a tope -Gimió, entonces Caleb abrió los dedos en su interior-. ¡Ah! Joder, voy a correrme.

Diciéndo esas palabras, Caleb apretó su paquete con fuerza a la vez que su boca succionaba duramente al sentir como su orgasmo lo hacía llenar sus pantalones de semen.

Caleb se enchufó solo al glande succionándolo al punto que lo sintió muchísimo más grande en su boca mientras masajeaba el tronco con las dos manos, sintió las gotas de orina que quedaban en el glande y para su sorpresa eran algo dulce con un muy ligero sabor ácido, para nada era lo que esperaba.

Brandon gimió rocamente a la vez que soltaba trallazo tras trallazo en su boca, el sabor espeso y dulce con leves toques salados explotó en su boca mientras los saboreaba hasta que casi empezaban a rebosar su boca, solo entences empezó a tragarlos, paladeando lo más que podía el semen de su hombre.

Contó casi diez trallazos.

-Ven aquí perra mala, que también quiero -Le dijo palmeando sus piernas.

Caleb se sentó sobre él con todo el shorts mojado de precum y semen y la boca llena de semen que compartió con su tutor que gimió al sentir su propio sabor, y no se separaron hasta acabarse toda la corrida.

-Delicioso tentempié... Pero prefiero el tuyo -Comentó otra vez en modo normal, a Caleb le ponía especialmente cachondo el monstruoso control de su señor, como podía ser alguien y al segundo ser otro-. Gracias, lo necesitaba.

-Lo sabía, por eso lo hice -Le dijo Caleb mientras encogía de hombros-. Tu perra siempre sabe lo que necesitas -Comentó jocoso mientras comenzaba a frotar su culo contra la polla de su tutor, listo para el segundo round.

En respuesta, Brandon comenzó a gruñir.

-Estás bien, me calmo -Suspiró, su turtor le dio un breve beso en respuesta-. Pero ¿Por qué estás tan tenso? -Inquirió sorprendió puesto que Brandon nunca le decía no al segundo round, nunca.

-Sucede que me acabo de enterar que Cameron está tratando de arrebatarme mi trabajo -Espetó serio y furioso como hace tiempo no lo veía.

-¿Qué? -Soltó sorprendido-. ¿Cómo pretende hacer eso?

-Acaba de amenazar al departamento de policía con una demanda por explotación laboral hacia mi persona por dejarme ir a una redada a pesar de ser un "simple asesor" -Explicó distraído su tutor mientras le acariciaba las mejillas-. También por hacerme tomar trabajos mientras estaba en reposo y un montón de patrañas más sino me despiden por haber puesto mi vida en peligro en el muelle sin una autorización formal  -Hizo un ademán aereado-. En una situación ideal, ya estaría despedido y Cameron estaría celebrando.

Pero el capitán no es un cobarde y que si esto va ha juicio, yo no me quedaré quieto. No me volví en su momento fiscal general solo por mi talento, casi todos los pesos pesados en el sistema judicial me deben algo o les he ayudado a encubrir algún chanchullo o descubierto algún trapo sucio o expediente negro y les he apretado la correa con ello. Créeme, en cualquier juicio el departamento ganará sin importar qué -Aseguró Brandon con una brillo de molestia en sus ojos.

-Ese bastardo... -Murmuró Caleb recordando el breve encuentro que tuvieron con Cameron cuando se dió cuánto de su error-. Lo siento, dije...

-Tranquilo, no puedo regañarte por decir la verdad -Justificó Brandon algo divertido, Caleb seguía sorprendido por la noticia.

-No entiendo ¿Por qué le tiene tanta manía su hermano menor, señor? -Preguntó antes de darse cuenta de su nuevo error-. Eh, lo siento, sé que...

-Está bien, ya te quería hablar sobre el tema pero no sabía cómo entrar en él hasta ahora -Indicó Brandon algo cabizbajo-. Caleb ¿Por qué odias a tu padre? -Preguntó de pronto, Caleb frunció el ceño.

-Bueno, básicamente porque me dejó en el olvido, él prefería vivir su vida de poli que estar con su hijo... Pero eso ya lo sabías ¿Por qué me haces decírtelo? -Inquirió sin entender nada.

-¿Sabes? Yo hubiese sido muy feliz si mi padre hubiera sido igual al tuyo -Reveló Brandon-. Si hay algo peor que un padre ausente, es un padre maltratador.

Mi padre frente al mundo era un hombre bonachón y simpático, su inteligencia le hacía ganar el respeto de todos y su personalidad le hacía toda una celebridad en su mundillo, era un economista implacable que fundó su propia empresa en su juventud en cuanto pudo y la hizo crecer como la espuma, volviendo su inicialmente pequeña empresa de seguros en una multinacional en menos de veinte años, Lionel Mayer era un hombre considerado una leyenda, tanto por su lengendaria capacidad de producir dinero, como por su flexible personalidad... Aunque claro, lo segundo era de puertas para afuera, la realidad era muy distinta en casa.

En realidad, era un hombre déspota y despectivo, totalmente implacable y que odiaba viceralmente los errores por muy insignificantes que fueran, el maldito cabrón decía siempre que la fachada lo era todo, que con ello nos ganaríamos a los débiles de corazón y el respeto de los fuertes... Así que nos tenía vigilados a mi hermano y a mí veinicuatro horas los siete días de las semanas, esperando que nos equivocáramos en cualquier cosa por más tonta que fuera.

Hablar antes de tiempo en una conversación, caminar con la espalda encorvada o tan siquiera dar pasos un poco más rápido o más lento de lo adecuado, si nuestra ropa tenía alguna arruga o si comíamos demasiado rápido o lento, si masticabamos demasiado o poco, hasta si encontraba algún cabello de nosotros en algún lado, imagina cualquier tontería y nuestro padre lo tomaba como una ofensa imperdonable.

Él no nos decía en el acto cuando nos equivocabamos, teníamos que esperar hasta el fin de semana, más concretamente el sábado, a qué nos llamara a su despacho y nos leyera la cartilla, entonces nos daba diez azotes con una bara de madera con bultos por cada "error" que cometíamos, siempre tratando de golpeanos en la espalda y el pecho, para que no se notara cuando usarámos ropa... Había veces en que nos golpeaba hasta hacernos sangrar, incluso podía azotarnos durante todo el día sí se le daba la gana, era un maldito milagro cuando no andábamos con cortes o moretones.

-¡Que maldito bastardo hijo de puta! - Exclamó Caleb sorprendido.

-Eso mismo... Mi padre nos controlaba hasta el ritmo de la respiración, nosotros estudiábamos lo que el quería y como quería, nos buscaba las novias, nos decía incluso cuando follar con ellas y nos obligaba hacerlo, nuestro padre tenía un enorme plan para nosotros, siendo yo su favorito, no solo por ser el primogénito o por mi gran capacidad cerebral, sino porque a diferencia de mi hermano, yo no le tenía miedo ni me quejaba no importaba cuán duro me golpeara, yo le odiaba con cada fibra de mi ser y mi padre me decía que ese odio me haría devorarme el mundo, que yo lograría dominarlo todo... Mi padre era un puto monstruo que se creía el rey del mundo y un santo a la vez... Era un maldito asesino a la espera de serlo -Explicó Brandon con una mirada sería, vacía, pero respiraba aceleradamente.

-¿... Qué hizo? -Preguntó Caleb al final, temiendo lo que diría.

-Nosotros no lo sabíamos, pero ese bastardo golpeaba a mamá también, en secreto, con el mismo proceder que con nosotros -Reveló con un gruñido-. Y entonces, ese malnacido al final le rompió las costillas con un golpe y estás le perforaron los pulmones, mamá llegó muerta al hospital -Terminó.

-Oh por Dios, Brandon -Comentó Caleb, en shock.

-Lionel uso todo su poder y dinero para hacer pasar la muerte de mi madre como un accidente. A según, que se había caído por las escaleras o algo así... Me dio tanta rabia y dolor que ese día sufrí una ataque de nervios que obviamente fue comunicado a mi padre... Solo que ya no me importaba nada de lo que hiciera, quería que ese maldito recibiera justicia, como fuera... En ese tiempo tenía dieciséis y ya no era un niñito, era demasiado inteligente hasta para el invencible Lionel Mayer.

Así que antes de que llegara el sábado, conseguí las pruebas necesarias para ejecutar mi plan. No fue difícil, a nuestro padre le gustaba grabar nuestros maltratos con las cámaras de la casa y guardarlo para su disfrute, el muy cabrón ni siquiera intentaba ocultarlo porque estaba absolutamente seguro de que no nos revelaríamos... Cuando llegó la hora de nuestra paliza, especialmente la mía, antes de que pudiera tan siquiera tocarme con la vara, se la arrebaté y se la partí en la cara, para luego cavarle los pedazos en un brazo y una pierna, mi hermano chillaba asustado mientras yo le reventaba todos los muebles de la habitación a nuestro padre encima.

Una vez le dejé medio muerto, le recalqué que tenía las pruebas de cada una de sus putadas contra nosotros y de la muerte de mamá, que si me fastidiaba la vida a mí o la de Cameron, alguna de las copias de seguridad que poseía caerían en manos de la policía, la prensa y de cualquiera que estuviera interesado. Esa misma noche recogí todo lo que tenía y le dije a mi hermano que se fuera conmigo.

-Entonces él se negó -Concluyó Caleb, entendiendolo todo ahora.

-Sí, no teníamos dinero propio y a él le daba miedo lo que podría pasarnos sin casa, viviendo en las calles, que alguien debía de hacerse cargo de la herencia y ese sería él, yo le recriminé que estaba loco, que nuestro padre haría lo que quisiese con él y yo no podría protegerlo, no más... Entonces él me dijo que era nuestro destino tener la gloria, costara lo que costara, ahí entendí que se había dejado lavar el cerebro por mi padre, así que simplemente me fui mientras él no para de gritarme que me quedara.

-Que hijo de puta -Murmuró Caleb-. ¿Y él sabe que tú padre mató a tu madre? -Brandon asintió-. Es oficial, mataré a esa mierda cuando lo vea.

-No, tú no debes acercarte a ese maldito -Negó Brandon rotundo-. Si se te acerca, llámame, yo me encargaré de él -Indicó su tutor, Caleb asintió con suspiró.

-Dios Brandon, no sé que decirte sobre todo lo que me has contado, a parte de que has vivido lo impensable -Susurró mientras lo abrazaba, tratando de calmar su tensión. Brandon le correspondió el abrazo.

-No estoy a favor de lo que te hizo tu padre ni lo pienso justificar, pero si te puedo decir que deberías sentirte afortunado de que tú padre, a pesar de todo, fuera una buena persona -Concluyó Brandon, dejando realmente pensativo a Caleb.

No sabía que pensar respecto a su padre, pero si sabía algo, quería ayudar a Brandon de alguna forma con su hermano.

Brandon...

El lunes...

Apenas llegó al departamento de policía, el capitán Daniel lo mandó a llamar a su oficina junto con Roger.

Al entrar, se encontraron con el capitán consultando a un par de abogado, lo que le dió mala espina.

Cuando el capitán Daniel se dió cuenta de que ya habían llegado, despachó a los señores.

-Dime que ya tienes un plan para encargarte del entrometido de tu hermano -Ese fue el saludo del Capitán que cargaba un gesto cansado, seguramente de analizar sin parar las formas de detener la pelea jurídica.

Brandon lo entendía. Si bien se notaba que el capitán no quería esto, tampoco es que era un cobarde ni mucho menos un lame botas para estar haciendo lo que a un niño se le diera la gana.

-Tengo un par de planes en mente, cada uno menos legal y moral que el anterior -Comunicó sinceramente-. ¿Que ocurrió?, ¿Por qué estaban los abogados del departamento aquí? -Indagó.

En respuesta, el capitán les pasó un papel que Roger tomó, automáticamente el hombretón soltó un gruñido.

-El cabrón ya se movió, tenemos un citatorio judicial para dentro de una semana -Explicó, a Brandon le comenzó doler la cabeza.

-No me importa ir a juicio con un mocoso como ese y trapear el piso con su jodida cara -Comunicó molesto el capitán-. Pero no importa como lo vea o trate de minimizar, esto va ha afectar castastróficamente la imagen del departamento y podría repercutir horriblemente en nuestro financiamiento o peor, podríamos comenzar a recibir demandas incluso porque alguno de nuestro policías o detectives vea mal a alguien, será una pesadilla burocrática -Explicó al fin.

-Agradezco que se esté metiendo en este problema por mí señor, pero no debió hacerlo -Agradeció Brandon al capitán sinceramente.

-No importa chico, lo vales, eres uno de nuestros mejores interrogadores y analizadores, nos ayudaste mucho como fiscal, después como fiscal general y ahora como asesor, una incontable cantidad de casos fueron cerrados gracias a ti, así que no voy a perder a un valioso activo solo porque un niño de cuna de oro tuvo un capricho -Desestimó el capitán con un gruñido.

-Yo me encargo capitán -Intervino Roger con un gruñido-. Déjeme con ese bastardo dos horas, solo dos malditas horas, para cuando termine con él no recordará ni su nombre de la paliza que le daré -Comentó Roger chocando sus puños entre sí.

-No me tientes Roger porque no respondo -Resopló Daniel-. ¿Que tienes planeado? -Le preguntó ahora a él.

-A Cameron, el daño físico o psicólogico no le hará nada, más bien lo insentivará a meterse con nosotros -Expresó Brandon en modo asesor-. Solo hay dos cosas que le importan a Cameron Mayer y es el dinero y su reputación; el flujo de dinero, que tanto gana y cómo perder menos, el cómo poder gastarlo, lo material es su vida -Explicó.

-Hombre, mientras más lo explicas, más asco me da tu hermano -Indicó Roger con una mueca de desagrado. Brandon y Daniel asintieron de acuerdo.

-Sí... Por eso considero que lo mejor es darle un golpe tanto a su dinero como a su reputación de una solo vez y lo más rápido posible antes de la citación -Indicó-... Podemos pedir una auditoría de emergencia debido a su intento de meterse con el departamento, en ese mismo momento, podría chantajear a algunos de los contadores o administradores principales para que maquillen las finanzas un poco, solo lo suficiente para que se monte un escándalo de fraude que se arreglará rápidamente como un simple error computacional que fue pasado por alto en su momento por un error en el software, será nada pero el daño estará hecho, la sospecha y la mala publicidad congelarán sus ingresos un tiempo, deteniendo su progreso un par de años como mínimo, incluso tal vez tenga que cerrar algunas sucursales. Los seguros son un arma de doble filo que depende totalmente de la confianza, sin eso, estás en quiebra -Terminó con esa frase.

Roger y el capitán lo observaron con la boca abierta.

-¡No puedes hacer eso! -Exclamaron los dos al mismo tiempo, Brandon arqueó una ceja.

-¡Brandon no puedes hacer eso, miles serán despedidos por esto si de verdad sirve! -Indicó Roger horrorizado-. Puede que el departamento salga libre y que logísticamente no sea del todo ilegal, pero es horrible.

-Estoy de acuerdo con Roger -Indicó Daniel, entrelazando las manos y colocándolas debajo de su mentón-. Además de que Helen, la madre de Caleb, trabaja en esa empresa, si haces esto, probablemente tu hermano arruinará la reputación de Helen y hará que jamás pueda volver a ejercer su carrera, al menos no en los Estados Unidos -Señaló el capitán Daniel.

-Estoy consciente de ello, pero sé que Helen es una mujer muy capáz que podrá salir ade...

-No -Soltó el capitán tanjantemente-. Idea otra cosa, le prometí a Aron cuidar de su familia por encima de todo y no pienso entregar ahora a su esposa en bandeja de plata, ni siquiera por ti -Lo miro serio-. Así que de una digo que si haces esto, te despido -Advirtió-. Y voy ha encargarme de que no consigas trabajo en ningún otro estado, estás advertido -Sentenció.

Brandon suspiró.

-Bueno... Entonces preparémonos para el juicio -Indicó simplemente.

::::::

Brandon llegó a casa con un serio dolor de hombros.

Ese día ni siquiera había estado trabajando en los casos en los que debía de estar, sino que estuvo en un larga reunión con los abogados y el capitán, tratando de recrear cualquier alegato que su hermano pudiera utilizar y crear diversas formas de anularlos y darle la vuelta en el estrado, así como también pensaron en qué forma incursionar en la demanda para minimizar los daños a la integridad del departamento.

Y en caso de ser necesario, solo por seguridad, Brandon estuvo llamando largo y tendido a cada contacto jurídico que tenía guardado.

Fue una pesadilla de día.

Maldito Cameron, eres peor que una patada en los huevos bien dada una vez al día, todos los días -Pensó malhumorado, gruñendo su camino hasta su cuarto.

Cuando llegó a la habitación, se congeló.

Frente a él, en la cama, estaba Caleb totalmente desnudo, con un jodido suspensorio gris tan delgado que no le cubría ni el alma y parecía más bien una tanga, tenía una corbata de moño puesta y su piel brillaba por el aceite que se había echado, además de que ya no tenían ni un solo pelo en el cuerpo.

Estaba increíble.

-Hoy me pidieron en el equipo que me afeitara, señor ¿Qué tal me veo? -Preguntó coqueto mientras comenzaba a sacarse el dichoso plug que ahora parecía ser el mejor amigo de Caleb.

Tampoco es que se sintiera celoso, ese plug estaba entrenando el culito de su chico, haciendo que su verga entrara más fácil cada vez.

Brandon salivó tanto que tuvo que limpiarse la barbilla con el dorso de la mano.

-Joder niño, me vas ha provocar un fetiche por los suspenso...

Su teléfono comenzó a sonar.

-Coño, ya vuelvo, n-no te muevas -Le señaló nervioso, estaba cachondo como no está en los escritos con la suculenta pinta de su estudiante.

-¡Vamos Brandon, corre que la cena se enfría! -Se carcajeó Caleb, haciendo reír a Brandon.

Descolgó el teléfono.

-¿Qué coño quieren, estoy ocu...? -Brandon se detuvo al escuchar quien estaba al otro lado de la línea.

Si antes estaba hirviendo, ahora su cuerpo explotó en calor cuando escuchó lo que le decían, al punto de que su pollón empezó a soltar precum sin parar.

-Estaremos ahí sin falta -Dijo simplemente y colgó.

Corrió al cuarto y se tiró sobre Caleb, este gimió sorprendido para luego reírse a carcajadas cuando comenzó a besar su cuello.

-Oye niño, tengo una propuesta para ti -Dijo luego de unos segundos.

Caleb lo observó curioso...

Caleb...

"Llegaré tarde hoy Brandon, Shaun me obligó a ir a los bolos, está loco" Eso fue lo que escribió y le mandó a su hombre antes de cometer está locura.

Porque en realidad había ido con Shaun al edificio ejecutivo donde trabajaba Cameron Mayer, realmente no le fue difícil descubrir dónde estaba o qué hacía, Google había hecho un excelente trabajo, al punto que le sorprendió que era jefe directo de su madre, lo significaba que era especialmente peligroso por su cercanía a ella.

Aún así, Caleb sentía que debía de hacer algo para ayudar a su tutor. Los días pasaban y Brandon llegaba cada vez más desanimado y estresado a casa, lo notaba claramente en sus sesiones de sexo, cada vez tardaba más en animarlo a tener sexo para relajar sus tensiones así como también tardaba más en correrse y era menos fogoso, la noche anterior ni siquiera tuvo ganas para ir por el segundo round, lo cual indicaba lo peligrosamente deprimido que estaba.

La mente de Brandon estaba en el desastre que ocurriría la semana siguiente, el juicio que podría poner en serios aprietos económicos y burocráticos al departamento de policía, incluso le explicó que en el peor de los casos, asuntos internos podría intervenir y eso siempre eran malas noticias, incluso Caleb era consciente de ello.

En un principio Caleb no había pensado hacer nada, pero cuando Brandon le dijo el día anterior, el jueves, que pensaba seriamente en renunciar para acabar con todo ese circo, Caleb se cansó de verlo así de deprimido.

-Recuérdame por favor por qué estamos aquí -Le preguntó Shaun a su lado, mientras ambos observaban la cima de la enorme torre ejecutiva donde seguramente estaba Cameron Mayer tomándose algún cóctel, feliz de la vida.

-Trataremos de socavar al cabrón del hermano menor de mi tutor...

-Novio -Cortó Shaun de golpe.

-Eso, novio, para que se arruiné su demanda y así Brandon no se quede sin trabajo y que tampoco atente contra mi madre por si se le da gana, lo cuál también es posible -Explicó.

-Oh, bien, pan comido -Indicó Shaun relajado, pero hasta Caleb notaba que su mejor amigo estaba algo nervioso-. Solo necesito que lo hagas hablar, yo veré como jugar con su mente, claro, si por alguna clase de milagro de mal gusto, llegamos a entrar en la oficina de una de las personas más ricas e influyentes del país -Certificó Shaun.

-No ayudas -Se quejó Caleb.

-Solo explico los hechos -Se encogió de hombros nuevamente-. Aunque no te lo negaré, eres la primera persona que hace los días tan divertidos para mí, Caleb, jamás había hecho esto y reconozco que, aunque estoy cagado, es excitante también.

-Que bien que te divierto -Comentó sarcástico, Shaun solo sonrió divertido-. Vamos -Comunicó cansado.

Sin ningún problema subieron al ascensor principal y llegaron a los últimos cinco pisos del edificio, que eran controlados por la empresa de Cameron.

Apenas las puertas se abrieron, los recibió un gran living con una recepcionista en una enorme mesa de mármol blanco y varios guardias de aspecto un poco patibulario.

-La vamos a liar -Murmuró Shaun divertido.

-Cállate y camina -Espetó Caleb mientras salían del elevador.

Con sus uniformes estudiantiles, era como si un elefante rosa estuviera cruzando por todo el lugar, todas las miradas estaban encima de ellos, tanto de la recepcionista y los guardias, como la de cualquiera que cruzara el living hacia las otras salas y oficinas.

-¿Qué desean? -Preguntó la chica amablemente a pesar de parecer confundida.

-Esto... Soy Caleb Prescott, hijo de la señora Helen de Prescott, vine ha hablar con el señor Cameron Mayer de parte de Brandon Mayer, su hermano mayor, él es mi tutor y le envió un recado de su parte conmigo -Explicó lentamente.

La recepcionista no había mostrado cambio alguno en el rostro hasta que dijo el nombre de su tutor.

-Esperen un segundo -Indicó la chica mientras manejaba el teléfono con una precisión milimétrica.

En menos de cinco minutos el elevador abrió las puertas, mostrando a un hombre tan parecido a su tutor que Caleb no entendía por qué no era tan bueno como él.

Cameron Mayer los observó a ambos con una mirada llena de asco, Caleb agarró a Shaun para que no hiciera una locura.

-Caminen -Espetó simplemente volviendo al ascensor.

Al poco llegaron al último piso del lugar, entrando por un pasillo lleno de oficinas, seguramente de los más importantes ejecutivos del lugar, para luego entrar en una enorme oficina que no se veía desde afuera y que cubría aproximadamente la cuarta parte del piso, ocupado por una enorme ventana que cruzaba toda una pared, dónde cerca de esta habían varios sofás, a un lado había un sobrio escritorio con algunas sillas y un simple librero.

Cameron se sentó en uno de los sofás y encendió un cigarro.

-Bueno, ahora que dejamos el living, ya puedes dejar de disimular venir de parte de mi hermano -Comentó antes de aspirar el humo de su cigarro-. Así que ¿Que demonios quiere la puta de mi hermano?

-Voy a matarlo -Murmuró Shaun ipsofacto.

-Tú no harás nada -Murmuró Caleb desesperado, empezando ha arrepentirse de haber traído a su mejor amigo-. No soy su puta, es mi tutor -Corrigió aguantando las ganas de estrangularlo.

-Es lo mismo -Se encogió de hombros Cameron-. El tiempo apremia niñito, tengo trabajo que hacer.

-Querrás decir vidas que arruinar -Intervino Caleb, Shaun observaba todo analiticamente-. ¿Cómo sabes que no vengo a nombre del señor Brandon? -Inquirió rápidamente. Cameron se rió.

-Mi hermano no manda niños ha hacer el trabajo de un hombre, él pelea sus guerras solo -Indicó explícitamente-. Así que suelta lo que sea que vienes a decir, admitiré que me da algo de curiosidad, pero solo un poco, así que habla antes de que llame a seguridad -Advirtió mientras respiraba el humo de su cigarro lentamente.

-¿Por qué demandaste al departamento de policía? -Preguntó de una-. Brandon ama su trabajo y lo hace muy bien, no te molesta en nada, así que...

-Sí me molesta -Intervino Cameron-. Brandon debería estar aquí, en este despacho, conmigo, no jugando al policía con la chusma.

-Tú no eres quién para decidir lo que Brandon debe de hacer o no -Refutó-. Te lo advierto, mi tutor puede parecer violento e irracional, pero es alguien calculador qué hará lo que sea para ganar, te vas ha arrepentir si vas contra él de está forma.

-¿Crees que no lo sé? -Se burló Cameron-. He vivido catorce años con tu querido "tutor" y lo conozco mejor que nadie. Tú crees que es un buen hombre porque claro, el amor y el sexo lo endulzan todo, pero te lo digo yo niño, él es más oscuro de lo que crees -Aseguró con una sonrisa torcida-. Te usará si lo ve oportuno, créeme. En este mundo, todos somos piezas en el tablero de Brandon, todos tienen un propósito tarde o temprano, y yo necesito esa clase de convicción... Y con la carrera de Brandon totalmente arruinada luego de esto, incluso si atenta contra mí, tarde o temprano volverá a lado de su hermano menor, porque su destino es gobernar con...

Shaun bostezó enormemente, cortando el monólogo de Cameron.

-Lo siento, continúa -Pidió tranquilamente.

Pero apenas Cameron fue ha hablar, Shaun volvió a bostezar, Caleb notó como el rostro del hermano menor de su tutor se tornaba rojo.

-Ah, lo siento, en verdad disculpame, pero es que escucharte me da sueño, eres la persona más aburrida que he conocido hasta ahora ¿En serio este tipejo causa tantos problemas? -Le preguntó el pelirrojo a Caleb-. Conociendo como conozco a tu tutor, ya debería de haberse desecho de este idiota.

-¿En serio?, ¿Entonces por qué crees que no lo ha hecho? -Le preguntó Caleb francamente interesado, pasando totalmente de Cameron.

-Bueno, si no lo ha hecho, significa que alguien le detuvo de darle el golpe fatal, supongo que es porque tu madre trabaja para esta rata -Señaló Shaun a Cameron sin contemplaciones.

-Llamaré a seguridad -Dijo Cameron simplemente, sacando su teléfono.

-Vamos camaroncito ¡No te molestes! Ambos sabemos cuáles son tus motivos para hacer esto -Indicó Shaun sonriente-. Estás celoso de tu hermano mayor.

-Debes de estar enfermo niño -Escupió Cameron-. No se qué pintas tú en esta ecuación pero me importa una mierda lo que di...

-Déjame decirlo de forma clara -Interrumpió Shaun-. Siempre has estado celoso de Brandon, tú patético padre lo prefería a él que a ti en su retorcido amor, tu madre seguramente se llevaba mejor con él que contigo, el pobre y miedoso Cameron -Se burló Shaun-. Estabas celosos de la fuerza de tu hermano y de su inteligencia, de cómo podía ir en contra de tu padre libremente.

-Cállate.

-Estabas celoso de como superó la muerte de tu madre y especialmente celoso de como superó a tu padre en sus juegos, odiabas cuando te protegía y mostraba lo superior que era, créeme, lo entiendo, Brandon es un hombre como pocos, incluso mejor que yo, algo que tú jamás serás por ser un jodido envidioso de mierda.

-Cállate...

-Entonces Brandon decidió abandonar el barco y tú seguramente pensantes con tu vacía mente de idiota "Brandon no está, así yo lo podré tenerlo todo, yo seré él" pero seguramente tu padre en sus últimas no paró de compararte con él, su insignificante hijo menor con su hijo de ensueño pródigo, tú te encerrarse en esta estúpida jaula de oro falso solito.

-Ca-lla-te...

-Y entonces pensaste "todo es culpa de Brandon, voy a meterlo en la misma jaula que yo" pero Brandon era un hombre poderoso, más que tú, así que no podías hacer nada. Querías tenerlo a él, que sientiera el mismo dolor que tú, pero Brandon es más, muchísimo más que tú, incluso arrastrándose en el fango es más que una maldita sabandija como....

-¡CÁLLATE! -Gritó Cameron fuera de sí agarrando a Shaun de la camisa, totalmente fuera de sí.

-Hara, hara, al fin veo algo de vida en eso ojos de pez muertos que tienes -Se burló Shaun sin soltarse, Camarón literalmente molía sus dientes de la ira.

-Brandon es mío, él me abandonó.

-Brandon te dió la oportunidad de irte con él y te negaste -Refutó Caleb.

-¡PORQUE ESTO ES MÍO! -Gritó Cameron, fuera de sí-. ¡BRANDON ES MÍO AL IGUAL QUE TODO, ÉL DEBERÍA DE SUFRIR TANTO COMO YO, ESTAR EN LA MISMA POSICIÓN QUE YO, Y HARÉ LO QUE SEA NECESARIO PARA HUNDIRLO, INCLUSO SI ES NECESARIO HUNDIR A LA MALDITA POLICÍA, AL ESTADO O AL MISMÍSIMO PRESIDENTE, BRANDON SE ARRASTRARÁ A MIS MALDITOS PIES Y ME PEDIRÁ CLEMENCIA! -Gritó.

-Eres un maldito, la supuesta demanda solo es un capricho tuyo, no es una preocupación real, que patética excusa -Expresó Shaun riéndose sarcástico, Cameron lo empujó con un gesto de asco.

-Es la mejor excusa que he logrado sacar de esos patéticos insignificantes, pero no importa puesto que el estúpido juez de turno me creerá, después de todo ¿Qué no haría alguien por su hermano explotado? -Preguntó Cameron divertido.

-Al parecer, ser inteligente -Indicó Shaun perspicazmente-. ¿Listo Caleb?

-Listo, el audio ya lo tiene Brandon -Señaló Caleb sonriente, levantando su teléfono para que Cameron viera el envío-. Ahora veamos que pensará el estúpido juez de turno cuando escuché los delirios de un niño rico -Soltó divertido.

Cameron estaban en blanco.

-Jaque mate, idiota -Celebró Shaun-. La verdad es que fue más fácil de lo que creí -Pensó en voz alta-. Aunque me divertí un poco, debo decirte camarón que eres un aburrido con mente de caracol y por eso eres un infeliz hijo de puta -Le sonrió brillantemente.

Continuará...

Hola chicos!! Como siempre, perdonen cualquier error ortográfico y de dicción que pueda tener, si este capítulo no sale en el momento que indiqué, lamento decepcionarlos un poco, probablemente la página lo quiso así.

Ahora bien...

A partir de este cap, Cameron Mayer empezará a salir más recientemente, así mismo, sé que todos pensarán "Alá, pero, la vida de estos dos ya está hecha, verdad? Qué más puedes inventarte??"

Pues bien, aunque las cosas parecen más tranquilas, hay cabos que atar, empezando con que contárselo a Helen (eso va ha ser muy gracioso), la tan ansiada explicación de Brandon sobre Sam Larren (va ha ser más pronto de lo que creéis) y Caleb mostrando que no hay límites para lo que siente por su tutor, no ni por la mitad del segundo arco, la verdad no sé cuánto tome, mi forma de diseñar la trama y los caps es bastante distinta de lo normal, así que para terminar, les daré un pequeñito spoiler que se que amarán.

Pronto habrá tensión, acción, mucho, muuucho sexo, sentimientos encontrados, corazones rotos y un asesino serial obsecionado con Caleb, feliz pajazo señores!!!