El trio Loera (2: El nuevo descubrimiento: Mayra)

Después de las aventuras sexuales con las mayores de las Loera, se suma a esta experiencia la más pequeña de las hermanas, la candida y exitante niña de 16 años Mayra.

EL TRIO LOERA

2.- EL NUEVO DESCUBRIMIENTO: MAYRA

Hola a todos, pues de nueva cuenta estoy con ustedes para contarles otro encuentro con las hermanas Loera; si no han leído el primer relato de la serie les sugiero que lo lean para poder comprender mejor lo que a continuación les relataré.

Habían transcurrido casi cuatro meses desde que inicié relaciones con Leti e Idalia y las cosas no podían marchar mejor. Durante ese tiempo transcurrido habíamos follado en tríos muchísimas veces y otras tantas solo en pares ya sea con Idalia o con Leti. En ese entonces nos encontrábamos a finales de Octubre y se realizaban los preparativos necesarios para organizar la ya tradicional fiesta de día de muertos, la cual se efectuaría el viernes 3 de Noviembre. Las cosas iban fenomenales casi para todos, solo había un problema con Leti e Idalia, pues justamente el día de la fiesta se llevaría a cabo también la coronación de la reina en la escuela donde estudiaba Mayra, la menor de las Loera; y puesto que ella era una de las candidatas tendría que asistir. El problema radicaba principalmente en que los papás de las Loera se encontraban en Cancún y como la chica apenas contaba con 16 años no le permitían asistir sola, por lo que alguna de las hermanas tendrían que acompañarla.

De verdad que ese era un problema que interrumpía completamente mis planes, pues tenía preparada una reunión privada para el termino de la fiesta de Día de Muertos, y aunque solo una de las hermanas acompañara a Mayra a la coronación mis planes se veían truncados pues había preparado la reunión para tres. Como las cosas no iban a mejorar decidimos afrontar el destino y entre las hermanas echaron a la suerte quien de las dos acompañaría a la pequeña Mayra a su fiesta. El destino decidió que fuera Leti y yo me dispuse a pasármela lo mejor posible en compañía de Idalia.

Los días pasaron y la fiesta por fin llegó, ese día pasé a recoger a Idalia a su casa alrededor de las 8 p.m.; cuando me encontraba en la puerta de su casa apareció ante mi vista la pequeña Mayra, de inmediato la verga se me comenzó a parar al ver a esa hembrita, de verdad que estaba hermosa. A pesar de que Mayra era cuatro años más chica que sus hermanas era más alta que ellas, tenía el cabello completamente lacio y negro, además de contar con un cuerpo muy bien definido; a pesar de no ser tan exuberante como sus hermanas si era realmente hermosa, la cinturita parecía desvanecerse entre el ceñido vestido que portaba, el escote dejaba ver el inició de dos tetas que parecían repeler la gravedad mientras la tela que cubría sus senos mostraba orgullosa dos altivos pezones en alto. El vestido que portaba era tipo noche, cubría casi en su totalidad las piernas, pero eso no impedía que se adivinaran dos largos ejemplares, perfectamente torneados según lo ceñido del vestido; el culazo de Mayra era punto aparte, perfectamente erguido, las nalgas podían apreciarse como deliciosos duraznos y ante la vista se distinguían firmes.

Tras unos segundos de tomar aire la saludé, ella cariñosamente me beso en la mejilla y me comentó que había oído hablar muy bien de mi, que sus hermanas me tenían en muy buena estima y que por lo que hablaban debía ser su mejor amigo. Entonces apareció Idalia y me dijo que ya nos podíamos marchar, subí al auto y esperé que Idalia subiera, pero fue grande mi sorpresa cuando las tres hermanas Loera tomaban lugar en mi auto, fue entonces que sorprendido les dije si necesitaban que las llevara. Leti mencionó que algo parecido y esbozó una sonrisa, por su parte Idalia me dijo que en realidad querían que las acompañáramos a la coronación, un poco molesto les dije que yo quería ir a la fiesta, pero Mayra con una voz apenas de chiquilla y casi lamentándose me dijo que las acompañara, que prometían portarse muy bien y que apenas anunciaran a la ganadora saldríamos rumbo a la fiesta.

Imposibilitado de dar una negativa a esa chiquilla que me volvía loco, acepté. Apenas llegamos al lugar donde se realizaría la coronación me di cuenta que eso era un verdadero evento de sociedad y ante ese ambiente cortante y tenso expresé mi desagrado, cosa que desembocó casi de inmediato en una sensación más que fabulosa, pues rápidamente Mayra se abrazó a mi y me dijo que ella me cuidaría. Yo sentí que el corazón se me aceleraba y que el pito se me salía de los pantalones, pues llevaba a la niña tomada de la cintura y desde mi posición tenía una excelente vista de sus tetas. Procedimos después a sentarnos en nuestra mesa correspondiente y tras 15 minutos el evento comenzó. De verdad que no me arrepiento de haber asistido a esa coronación, pues por la pasarela comenzaron a desfilar diez chiquillas impresionantes, de las cuales un par llevaban unos escotes de infarto; inclusive a una de ellas, que tenía unas tetas grandes y muy blancas, se le corrió el tirantillo que detenía el vestido y mostró a toda la audiencia una magnifica teta de pezón marrón oscuro, un verdadero encanto.

Habían pasado casi dos horas de estar en aquel lugar cuando se dio a conocer a la ganadora, afortunadamente para mi no había sido Mayra y ya podríamos marcharnos a la fiesta. Estábamos abordando el auto cuando vi algo maravilloso, cuando Mayra estaba subiendo al carro abrió las piernas bastante y pude contemplar que llevaba una tanguita negra de encaje, eso me puso tan caliente que cuando estaba saliendo del estacionamiento le di un ligero golpe a un auto de lujo, afortunadamente no había nadie que nos delatara y nos marchamos. Quince minutos más tarde estábamos llegando a la fiesta, serían las 11:30 aproximadamente y llegamos justo a tiempo, pues la fiesta estaba en su apogeo. Inmediatamente comenzamos a tomar algo, las hermanas Loera bebían, pero a Mayra solo le permitían refresco, aparentemente; pues después pude comprobar que estaba tomando bastante cerveza.

Alrededor de la 1 a.m. busqué ansioso a Idalia y Leti, les dije que sería la hora de marcharnos a nuestra fiesta privada. Las hermanas procedieron a despedirse y se fueron a buscar a Mayra, pues la idea era dejar a la pequeña en casa para de ahí enfilarnos a nuestra noche de sexo. Habían transcurrido 15 minutos y las hermanas no regresaban, fui a buscarlas y las encontré en unos sillones tratando de despertar a Mayra, quien había tomado mucho y estaba completamente dormida. Como pudimos la subimos al auto y nos fuimos, 15 minutos después estábamos bajando a Mayra en la casa Loera, la dejamos recostada en la sala; estábamos por salir rumbo al hotel cuando Idalia sugirió que mejor nos quedásemos en la casa, que a final de cuentas estaba sola y que podríamos hacer la fiesta allí.

A mi me daba igual cogerme a las Loera allí o en el hotel, por lo cual no tuve objeción. Pronto marchamos a la recamara y más pronto que inmediatamente nos encontrábamos desnudos. Estábamos los tres en la cama haciendo un rico triangulito, yo le chupaba la panocha a Leti, ella le chupaba la panocha a Idalia y ella me mamaba la verga. Estuvimos así durante 10 minutos cuando sentí que Idalia dejaba de mamar y de pronto ya la tenía montada en mi garrote; mientras disfrutaba de la panocha de Idalia continuaba chapándole la raja a Leti, mientras ésta besaba a Idalia y le jugueteaba las tetas. De pronto sentí que ya no aguantaba y le avisé a Idalia, quien inmediatamente se sacó mi verga de la raja y se la puso a Leti en la boca, Leti comenzaba a mamar mi pito cuando explote en su boca; cuando hube descargado toda mi leche en la boca de Leti, esta abrió sus labios y mostraba orgullosa toda mi leche en su interior, entonces Idalia tomo la cabeza de Leti y comenzó a besarla, después de unos segundos era Idalia quien me mostraba su boquita llena de lechita caliente.

Mientras Idalia se tragaba mi semen Leti comenzó a mamar de nuevo mi verga, al cabo de algunos minutos mi pito se encontraba totalmente empalmado. Leti comenzó a masturbarse metiendo dos dedos en su panocha mientras Idalia le chupaba los pezones. Entonces puse las piernas de Leti en mis hombros y poco a poco acerqué mi verga a su conejo hasta que Leti retiró sus manos, dirigí mi verga a su raja y se la metí de un solo golpe; conforme aceleraba mis movimientos Leti jadeaba más y más fuerte. En un momento dado volteé hacia Idalia y vi que se estaba masturbando con una botella pequeña de desodorante, la cual clavaba hasta un poco más de la mitad. Bombeando a Leti sentía como los pelos de su concha rozaban con mis testículos y eso me ponía todavía más caliente; enseguida noté que Leti estaba teniendo un orgasmo y yo sentía muy cerca mi finalización, le avisé a Leti y me dijo que no me detuviera, que quería sentir mi caliente semen en su raja. Finalmente no pude soportar más y le inundé la conche de leche, cuando saqué mi verga del interior de Leti pude ver que de su panocha escurría una mezcolanza de sus fluidos y mi semen. Entonces empecé a acariciar a Idalia y tomándola de las piernas la atraje hacia mi y hundí la cabeza para comerle una vez más la raja; estuve lamiéndole la panocha durante diez minutos hasta que termino en un muy fuerte y mojado orgasmo.

Tras unos minutos de relajamiento fui a mi coche por unos gramos de coca que tenía, cuando pasé por la sala vi a Mayra aún inconsciente y con el vestido arriscado hasta la cintura; no pude evitar contemplar como se le marca la panocha en la tanga y menos me resistir a tocarlo. En ese momento sentí que se me ponía de nuevo dura y comencé a sobarle las tetas, primero sobre el vestido y después retiré el vestido, parecía que contemplaba el paraíso, pues Mayra tenía unas tetas ciertamente más pequeñas que sus hermanas, pero eran realmente asombrosas, estaban duras y tenían unos pezones oscuros y rugosos. Cuando estaba por quitarle la tanga Leti me llamo, fui por la coca y regresé con las hermanas; Leti e Idalia no tardaron en intoxicarse y parecían fuera de sí, por lo que regresé a donde estaba Mayra. Inmediatamente retiré la tanga y comencé a acariciarle la picha, para mi sorpresa la llevaba depilada y eso me excitó mucho; después de juguetear un rato con su raja introduje mi verga erecta en su boca, la sensación era maravillosa, estuve bombeando su boca por algunos minutos y cuando vi que no reaccionaba decidí metersela en la concha.

Tomé a Mayra por la cintura y coloqué su culo un poco salido del sillón, abrí sus piernas y le acerqué mi verga a la panocha; el corazón me latía a mil solo de pensar que Mayra tal vez era virgen. Cuando le hube metido todo el pito note con cierta desilusión que no había rastro de himen, pero realmente no me importo mucho. Continué bombeando y poco a poco lograba que mi pito entrara más fácilmente, estuve bombeándola algunos minutos cuando su pequeño ano llamó mi atención, intenté introducir mi hinchada verga pero el ano no cedía, por lo que opté por regresar a su vagina. No me tomó demasiado tiempo acabar y finalmente explote en su interior, sin duda a equivocarme puedo decir que fue uno de los mejores orgasmos que he tenido. Tras terminar introduje su tanguita en su conejo para limpiarlo un poco, después se la coloqué como si nada hubiera pasado y la dejé justo como la encontré.

Después regresé donde se encontraban Leti e Idalia y miré con desilusión que se habían dormido, por lo que me recosté junto a ellas y me dormí. Cuando desperté por la mañana noté que las hermanas aún se encontraban allí, sin despertarlas me vestí dispuesto a retirarme. Cuando me vestí no podía encontrar mi chamarra, pensé que la habría dejado en el auto; justo cuando pasaba noté que mi chamarra estaba en el sillón, Mayra ya no se encontraba, supuse que se habría despertado a media noche y se fue a su habitación, tomé mi chamarra y me marche. Cuando iba camino a casa un policía me detuvo por pasarme un semáforo en rojo, estaba dispuesto a cualquier cosa pero nunca a aceptar una infracción, por lo que soborné al policía; cuando buscaba mi billetera metí la mano en una bolsa de la chamarra y lo que encontré me dejó perplejo, saqué una diminuta tanga negra semi húmeda. Con la cabeza hecha un lió le dí 100 pesos al policía y seguí mi camino, durante el cual iba pensando en lo que me había sucedido.

FIN

Si alguien quiere contactarme, felicitarme o simplemente mentarme la madre puede hacerlo a mi dirección de correo: angel_jokic@hotmail.com . Gracias.