El transporte
Un pequeno favor se transformara en una erótica experiencia con su suegra.
El transporte
Mi suegro murió hace muchos años dejando a mi suegra y a sus pequeños hijos desprotegidos, por lo que mi suegra tuvo que hacerse cargo de la difícil tarea de sacar adelante sola a sus dos hijas, mi esposa era la menor. Para esto mi suegra que siempre se había destacado por su buena mano en la cocina, puso un pequeño negocio de preparación de comidas para actividades y eventos.
Fue así como poco a poco y con mucho trabajo y privaciones, mi suegra saco adelante a su familia. Yo conocía a mi esposa, hace 4 años, a la edad de 26 años y desde el primer momento nos enamoramos, después de algunos meses de noviazgo nos casamos.
Mi suegra hoy día, siendo una mujer mayor aun se dedica a la misma labor, su fama ha crecido mucho por su excelente cocina y muchas veces solicitan sus servicios de hasta lugares un poco lejanos de la casa.
Fue en una de estas ocasiones en que me suegra fue contratada para realizar la preparación de una enorme cantidad de comida para un evento muy importante en otro pueblo un poco retirado del nuestro. Mi suegra debería trasladar una enorme cantidad de materiales e ingredientes para su comida, por lo que mi esposa sugirió que yo la transportara al lugar donde debía ir, de todas formas no tenia que trabajar ese fin de semana, y mi esposa me dijo que si salíamos temprano, podría regresar a casa por la noche y disfrutar con ella mientras su madre pasaba la noche en la casa donde tenia que preparar la comida. Me entusiasmo la idea, puesto que la casa que compartimos con nuestra suegra es un poco pequeña y pocas veces tenemos la oportunidad de tener gozar de total intimidad sexual, así que complacido accedí a transportar a mi suegra y su carga, pensando en la gratificación sexual que me daría mas tarde mi mujer.
Doña Ana estuvo muy agradecida de que le ayudara con el transporte. Así fue como iniciamos nuestro viaje por la mañana, me preocupaba un poco el clima, había amanecido un poco nublado parecía que iba a haber una fuerte tormenta.
Después de varias horas de viajar, llegamos hasta el lugar donde mi suegra debería permanecer, encontrándose mi suegra con la noticia que debería permanecer en un hotel puesto que en la casa estaba llena de gente por la actividad que iba a haber.
Dejándola en la entrada de un humilde hotel en el pueblo mi suegra me dijo que no me preocupara, que estaría bien, que regresara a casa, y ella nos llamaría para avisar cuando deberíamos venir a recogerla.
De nuevo inicie mi viaje de regreso a la casa, entusiasmado de la ardiente noche de sexo que me esperaba con mi esposa. El clima había cambiado, estaba cayendo una fuerte tormenta por lo que maneje un poco mas despacio, pero cual seria mi sorpresa y desilusión el río que cruzaba el pueblo se había desbordado debido a la tormenta, por lo que habían cerrado la carretera de salida del pueblo porque las aguas del rió se habían desbordando dejándola momentáneamente intransitable.
Con una gran pena, maneje de regreso al pueblo, debía avisarle a mi esposa, además como el viaje era rápido no había traído mucho dinero, donde pasaría la noche, decidí ir al hotel donde se hospedaba mi suegra, quizás ella podría prestarme el dinero para pagar una habitación esa noche.
Desde la recepción llame a mi esposa y le explique lo sucedido mientras esperaba que mi suegra bajase. Cuando mi señora suegra bajo le explique lo sucedido, entonces muy apenada me respondió
"Oh Manuel, que pena, pero no tengo suficiente dinero para poder prestarle para que pague un cuarto,"
"No se preocupe señora, esta bien, me las arreglare y dormiré en el carro," le respondí comprensivo, pensando en la dura noche que pasaría durmiendo en la incomodidad de mi auto bajo la tormenta.
Entonces mi suegra, meditando un momento trato de ayudarme, y girándose así la señora de la recepción del hotel, quien había escuchado toda la situación le dijo.
"Disculpe usted cree que sea posible que el caballero se pueda hospedar conmigo, es el esposo de mi hija y usted ya escucho la situación de lo sucedido"
La recepcionista estuvo de acuerdo en que me hospedara con mi suegra. Entonces acompañe a mi suegra a su habitación. Entramos en la habitación la cama era una tipo matrimonial, entonces mi suegra me hablo.
"Yerno creo que hay suficiente espacio en esa cama para que durmamos los dos"
Por un momento me sorprendió sus palabras, pero entonces comprendí que mi suegra me miraba como a un hijo y que me tenia la suficiente confianza para que compartiera su cama, como su familiar que era. Ambos estábamos muy cansados por lo que me recosté en la cama y empecé a quedarme dormido.
Cuando desperté, escuche el sonido de la ducha dentro del cuarto de baño, decidí salir un momento de la habitación para que mi suegra tuviera mas libertad de prepararse para dormir. Espere en la recepción durante 45 minutos, y entonces subí de nuevo a la habitación.
Cuando entre silenciosamente dentro de la habitación mire como mi suegra dormía profundamente, parecía que mi suegra tenia un mal dormir y que se movía mucho mientras lo hacia, pues las sabanas que la cubrían habían caído de la cama, dejando expuestas las piernas de mi suegra, están se encontraban un poco abiertas, dejando ver sus medias, retire rápidamente la vista por respeto, era mi suegra, debía respetarla, pero entonces me encontré de nuevo mirando fijamente entre sus maduras piernas, para tener 58 años, mi suegra se conservaba muy bien. Mirando un momento hacia mi pantalón note como empezaba a despertar mi verga.
Tratando de no pensar en eso, me quite mis pantalones y mi camisa y así en calzoncillo me acosté en la cama, tratando de dormir, y alejar mi atención del cuerpo de mi suegra.
Empezaba a quedarme dormido cuando mi suegra nuevamente se empezó a mover, girando en la cama, y sin saber como su vagina descanso directamente con la dura protuberancia frente a mis calzoncillos.
Esta situación empezó a excitarme aun más así que fingiendo dormir, moví mi mano bajando mi calzoncillo, mi enorme verga salto completamente dura contra la entrada de la vagina de mi suegra, entonces permanecí quieto otra vez.
Entonces empecé a meditar en las consecuencias de lo que estaba haciendo, que espera yo, que mi suegra despertara y viendo lo que estaba haciendo, empezara a gritar, que demonios esta haciendo?, que se enojara y quizás me odiara por el resto de mi vida, sabia que mi suegra desde hacia mas de 20 años no había estado con ningún otro hombre, se había dedicado a sus hijas y se privo de conocer a cualquier otro hombre. Entonces ahí con mi verga completamente dura permanecí quieto.
Fue entonces cuando mi suegra se movió mas cerca de mí, haciendo presión de su vagina contra mi dura verga, haciendo que mi verga se deslizara dentro de su raja.
Sentía muy caliente su vagina, sentía como si fuera a estallar, empecé lentamente a empujarlo mas profundo y luego a sacarlo un pedazo, poco a poco, despacio, mi corazón salto cuando note como mi suegra se empezó a menear, mi brazo entonces la rodeo y descanso sobre uno de sus senos, mientras mi bombeo empezó a acoplarse al ritmo de sus caderas, repentinamente mi suegra tuvo un intenso espasmo mientras se empujaba mas fuerte contra mi, sentí como alcanzaba un fuerte orgasmo, mas intenso que los que tenia mi mujer.
Continué bombeando mi verga con mas ansias, en su ahora encharcada vagina, resistiendo los deseos de expulsar mi carga en ese momento, quería prolongar el placer que estaba sintiendo, aunque sabia no resistiría mucho mas. Después de algunos minutos sentí como estaba a punto de terminar, entonces sacando mi verga, me disponía a disparar mi semen sobre mi abdomen, cuando sentí como su mano sujetaba mi verga y la ponía de nuevo en la entrada de su raja, empujándola de nuevo dentro, empecé a embestirla rápidamente, mientras ella contoneando cada vez mas rápido su vagina se acoplo a mis empujes, entonces empujándola fuertemente lo mas profundo que pude, empecé a disparar toda mi enorme carga de semen, reservada para mi esposa, dentro de la ardiente raja de mi suegra. MI suegra gimió fuertemente al sentir mi verga inundando su vagina con mi semen.
Después en silencio, mi madura suegra se movió, dándome la espalda, y fingió seguir durmiendo, comprendí lo que deseaba, todo debería quedar como si hubiese sido un sueño, como si en la realidad nada nunca hubiera sucedido entre nosotros.
La mañana siguiente cuando despertamos, el trato de mi suegra hacia mi fue el mismo de siempre, muy normal, como el que siempre hay entre una suegra y su yerno. MI suegra se alisto para ir a realizar su trabajo, mientras yo hacia conducía hacia mi casa, satisfecho de la gran noche que había tenido con mi madura suegra.
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