El tio de las rastas

Primero de todo me presentaré: me llamo Hugo, tengo 18 años, mido 185 cms, peso 72 kg ojos marrones y pelo castaño un poco larguillo, hacia delante y desfilado y llevo un aro en el labio en el lado izquierdo. Me gusta la movidilla grunge y alternativa, y voy a muchos sitios de ese tipo y por supuesto me encantan los tios de ese estilo.

Todo empezó un viernes por la tarde, mis amigos y yo no teníamos demasiadas ganas de juerga, así que fuimos a un pub bastante guay, en plan irish tavern donde además ponen música wapa y se está muy trankilo. Además allí podemos fumarnos unos porrillos sin problemas. Pues bien, confome entramos al bar pude ir observando la cantidad de tíos que había, y que no estaban nada mal: me fijé en un par que estaban sentados a un lado pero sin importancia alguna. Total que llegamos al fondo y nos sentamos en una mesa, yo me senté con la espalda contra la pared, de manera que podía ver casi toda la sala.

Nos pedimos unas cervezas y un amigo mío empezó a liar un porro y me pidió el papel, puesto que yo era el único q llevaba. Nos fumamos un par y ya empecé a notar los efectos: un poco de mareo, risa facil, etc...

Le eché un vistazo a la gente que estaba en las mesas de alrededor, y no vi nada interesante excepto a un tío que estaba en la barra pidiendo y que me daba la espalda, con lo cual no le veía la cara, pero me quedé mirando sus rastas, ya que me encantan las rastas, yo no me veo con ellas puestas pero me gusta ver a la gente que las lleva, no se, estéticamente me molan mucho.

Se notaba que las tenía muy bien cuidadas y le llegaban como a la altura de la nuca más o menos. Eran de un color castaño aunq se notaba que alguna se la había decolorado un poco. Fui bajando la mirada me fijé en el resto del cuerpo, era alto, debía medir como yo aproximadamente y estaba delgado pero destacaban sus anchos hombros y su delgada cintura q bajo esos anchos y bajos pantalones de pana que llevaba le hacían buen culo

Se dio la vuelta con una copa en la mano y se dirigió un par de mesas más allá de la mía y se sentó con los q supuse que serían sus amigos de tal manera q yo le veía perfectamente la cara. DIOS!!!!!me pareció el tío más wapo q había visto nunca: tenía una frente amplia , unos bonitos ojos que más tarde de cerca puede comprobar que eran azules y la nariz un tanto prominente pero no demasiado.. Llevaba además un piercing en la ceja que le quedaba perfecto.

Me debí quedar embobado no se cuanto rato porque el se dio cuenta y se me quedó mirando fijamente tb. Rápidamente desvié la mirada y continue a mi bola con mis amigos pero miraba de reojo de vez en cuando y me di cuenta de que no me quitaba la vista de encima.

De repente se levantó y se acercó hacia donde estabamos nosotros sentados; para mis adentros pensé que seguro q me iba a preguntar que porque me había quedado mirandole o algo así y pensé que me iba a morir de verguenza. Total que llegó hasta nosotros y dijo - perdona, llevais papel alguno - yo repiré trankilo y le contesté que sí, que cuantos quería a lo que el me dijo que tan sólo uno.

Se lo di y me sonrió, MADRE MÍAAA!!!casi me caigo de la silla, tenia una sonrisa perfecta, blanca y bien puesta. Se alejó de nuestra mesa y yo no paré de quitarle ojo en todo el rato, a lo que el me respondía con picaronas miradas y finalmente tras un rato me guiñó un ojo. Pensaba q me iba a dar algo.

Él se levantó y vi como se dirigía al baño. Yo lo dudé un momeno pero no se si fueron los efectos de los porros o q, pero me levanté y le seguí. Entré en el baño y le ví allí, estaba meando de espaldas a mí. Sin dudarlo un segundo me puse a mear al lado suyo y me la saque, q en ese momento la tenía ya un poco empalmada. Con todo el descaro del mundo nos miramos a la cara y sonreímos, después le miré la polla: la tenía semi erecta, morena y sin circuncidar. No puede evitar kdarme mirandosela a lo q el se dio cuenta y me dijo - q pasa? te gusta?- yo me quede super cortado y no sabía q contestar...Acabó de mear y se la guardó, yo hice lo mismo y en ese momento pensé q quizás todo habían sido imaginaciones mías y se estaba riendo de mí, pero entonces me dijo -anda, venga- y se metió en una de las cabinas haciendome señas para q entrara yo tb. Pasé sin dudarlo un segundo y cerramos.

Nos quedamos mirando fijamente y nos lanzamos: nos dimos un beso super apasionado y me di cuenta de q llevaba un piercing en la lengua tb!!!, nuestas lenguas se juntaron y yo pensaba q me iba a derretir. Le quité la camiseta y pude admirar su torso, no estaba cachas,pero marcaba y tenía un poco de vello en el pecho.

Además me di cuenta de q llevaba un sol tatuado en la parte inferior de la espalda en el centro. Comencé a besarle el cuello y fui bajando x el pecho, le chupe los pezones y continué bajando x sus abdominales hasta llegar al ombligo. Recorrí con mi lengua el vello q le llegaba hasta la banda elástica de su calzoncillo pues ésta se dejaba ver x encima d sus pantalones.

Le desabroché el botón de la brague y le baje la cremallera. Le baje los pantones hasta las rodillas y pude admirar su paquete bajo bajo su boxer ajustado. Acto seguido le bajé el calzoncillo y dejé al descubierto la polla q había visto anteriormente pero esta vez estaba completamente empalmada. Debía medir unos 18 cms y se le notaban un montón las venas q la recorrían.

Se la agarré con mi mano derecha y con la lengua le chupe el liquido preseminal q tenía en la punta a causa de la excitación. Seguidamente se la lamí toda desde la punta hasta la base pasando por sus bolasss, q las tenía enormes x cierto y me la metí a la boca. Se la estaba mamando como un loco, me excite muchisimo y me la sacaba y metía de la boca a la vez q con una mano le sobaba las bolas y con la otra su culo q tal y como había sospechado antes lo tenía perfecto.

El intentaba contenerse los gemidos para no hacer ruido pero se notaba q estaba disfrutando mucho. Me puso su mano en mi cabeza y comenzo a marcarme el ritmo. Tras unos segundos, noté q se corría y me la trague toda. Con unos gemidos q no se ni como no los oyeron por todo el bar soltó toda su leche en mi boca. Tras unos segundos en los q nos quedamos respirando profundamente me puse en pie y nos dimos un profundo beso. Ahora fue el el q me quitó la camiseta y repitió lo q yo había hecho. Me hizo la mejor mamada de mi vida, me corrí en su boca y después me besó con toda mi leche en su boca todavía, fue algo increible.

Nos quedamos abrazados, sudando y tomando aliento. Me contó q se llamaba Diego, q tenía 20 años y q al igual q yo estaba en la universidad. Nos dimos los móviles y volvimos a quedar otros muchos días, pero eso ya os lo contaré en otro momento.