El súper (Ella)

Comprar excitada y acabar siendo follada por un desconocido frente a mi novio.

Me desperté por la mañana y mi novio ya se había ido a trabajar. Me había dejado una nota que decía que hoy volvería pronto. Bajé a desayunar y vi que no quedaba mucha comida a sí que fui a comprar.  De camino al supermercado, me notaba muy excitada y mojada, pero me centré en comprar. Me encontraba en el supermercado, en la zona de lácteos, pensando en que comprar.

Me fije que un hombre me miraba con intensidad y me comía con la mirada. Era alto, se le marcaban ligeramente los músculos, con barba corta. Yo llevaba puesto una minifalda, que dejaba ver parte de mi culo y una camiseta blanca ajustada, sin sujetador, algo transparente.

Nuestras miradas se cruzaron y se me cayeron de la mano los yogures que estaba sujetando. Me agache a cogerlos con la mirada clavada en los ojos del otro hombre. Vi su polla dura en sus pantalones y noté como mi tanga se mojaba ligeramente pues él me estaba insinuando con la mirada y se acercaba lentamente. Me di cuenta que seguía agachada y por seguirle el juego me incorpore lo más sensual que pude, estirando las piernas para que las pudiese contemplar bien y que luego se quedase mirando mi culo.

Acabe de hacer la compra y estaba pagando, me preguntaba si lo volvería a ver. Me monte en el coche y fui a casa. Tuve la sensación de que me seguía alguien desde que ese lanzamiento de miradas con ese hombre. Aparque y metí parte de la compra en casa, dejando la puerta entre abierta. Volví al coche y cuando me di la vuelta me le encontré de repente detrás de mí. No sabía qué hacer, mi corazón estaba a cien.

Me cogió, me dio la vuelta y me tapo la boca con una mano y con la otra me manoseaba las tetas. Apretó su polla bien marcada en mi culo y la note que estaba bien dura y era bien grande. Se acercó a mi oído y me dijo que me iba a follar como la puta que era. En ese momento un escalofrió recorrió mi cuerpo estremeciéndome de placer.

Me acorde de mi novio que en breve aparecería de un momento a otro y me intente resistir. Saco su polla, me bajo el tanga y me la metió, estaba muy dura y era bien grande. Me daba tan duro que de un empujoncito me llegaba hasta la entrada del útero, dolía pero era placentero a la vez. Me dio la vuelta, me arrancó la camiseta y me llevó en brazos sin sacar su polla de mi coño a la mesa de la cocina. Me empezó a follar muy duro y empecé a gemir como nunca, me bajo de la mesa y me puso de espaldas a él y con el tronco totalmente doblado y apoyado en la mesa, empezó a follarme muy duro.

Mi novio llegó y pasó muy sigilosamente. Se sentó en una silla y vio como el hombre me destrozaba el coño.

Al verle intenté explicarlo, pero pidió al hombre que continuara. Se desabrochó el pantalón y se estuvo masturbando mientras nos veía follar.

Estuvo follandome sin parar, yo ya no tenía voluntad, había perdido la cuenta de cuantos orgasmos había tenido ya y entonces empezó a follarme mas y mas rápido. Sabía que estaba a punto de correrse así que le pedí que me llenara mi coñito.

Seguidamente una enorme descarga de semen me llenó, sacó su polla y la lamí entera limpiándola mientras de mi coño brotaba el semen de aquel hombre.

Mi novio se acercó y le di una mamada hasta que se corrió en mi cara.

El hombre me dio su teléfono y se marchó. Mi novio me cogió en brazos ya que mis piernas no me respondían bien después de aquella follada y me llevó al sillón. Pusimos la tele y estuvimos hablando de fantasías.