El Sonido del mar. (XII)

Ay linda – le cogió la mano y caminaron así hasta llegar al jeep de Ignacia.

No lo puedo creer, ayer me provoca de una manera descomunal, y ahora está con él. Además se encontraba con la misma ropa de ayer en la noche, quizás durmió con él. No sé por qué tengo estos pensamientos, si a mí ella no me importa, no me interesa. Es sólo una más, es muy mina (linda) pero no me interesa, puedo tener a quien quiera con tan solo chistar los dedos.

Josefa.

Ay nooo, no lo puedo creer ¿por qué me pasa esto a mi? Aw, tengo un lío ENORME en mi cabeza, justo nos damos nuestro primer beso con Seba y veo que Ignacia es la mina que practica surf es que nooo ¡Esto no puede ser! Esa nena me pone mal, sí, así de simple me pone pésimo, hace que se me acelere el pulso y todo. Cuando me percaté que era ella quien salía del agua lo único que atiné a hacer fue besar a Seba, quería que me viera con él, quería saber si a ella le pasaba algo al verme así. En fin, cuando pasó por nuestro lado y saludó a Seba noté algo raro en su mirar, era como de ¿celos? No, por supuesto que no, debo estar delirando. Sí, eso es, estoy delirando, no mejor aún, estoy con los efectos del alcohol. Continuando, cuando me saludó me quedó viendo fijo a los ojos, y fue inevitable perderme en esos ojos color azul mar, son tan intensos tan lindos, ella es tan linda que me encanta.

Seba: Mi amor ¿qué pasa? – le dice esto para sacarla del transe.

Jose: Nada bonito, sólo que me duele un poco la cabeza ´¿nos podemos ir?

Seba: Pero si apenas hemos llegado.

Jose: Disculpa, pero mi cabeza está que explota.

Seba: Bueno, como quieras, todo porque no te encuentras bien.

A Seba no le gustó mucho el hecho de que Josefa quisiera irse del lugar, pero aceptó ya que ella se sentía mal, por eso, como todo un caballero la llevó hasta su casa, una vez allá la dejó hasta la puerta no sin antes despedirse de un beso en los labios, beso que mas que nada sabía a pico.

Jose fui hasta la cocina para ver si se encontraba alguien en casa, pero debido a la hora no había nadie mas que ella, se dirigió hasta su cuarto, se tiró en la cama, no sin antes volver a pensar en aquella profunda mirada que le propinó Ignacia, luego de dar tantas vueltas a aquellos pensamientos que la invadían, prendió su computador habló con amigos y de la nada le dieron ganas de buscar a Ignacia, escribe su nombre y para su sorpresa le sale de inmediato, pincha su nombre y ve su perfil, la verdad es que no podía ver mucho, ya que ella tenía todo privado, tan solo ve su foto de perfil, en la que ella se encuentra saliendo del mar con traje de baño, lo cual hacía que se viera toda su fenomenal figura. En eso revisa los amigos en común y se da cuenta que tenían varios amigos en común.

Esto dejó mucho peor a Josefa ya que ahora le daba mas vueltas, no paraba de pensar en ella, llegó a tanto su desespero que se metió en la ducha con la ropa que traía puesta, estaba realmente desconcertada. Estuvo un largo rato bajo el agua, hasta que decidió salir de ahí e ir a correr por algún lado para despejar la mente.

Ignacia.

Esta niñita me descoloca, pero como dije, tan solo la provocaré, que corto se me hizo el trayecto a casa, pasaré a saludar.

Ignacia: Ay pulga ricaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa ¿no fuiste a clases?

Pulga: No, jijiji

Ignacia: Ah, no, eso está muy mal eh.

Pulga: Haciendo pucheros – pero si mamá me dejó

Ignacia: Ay ven para acá ricaaaa

Ignacia y su hermana se quedaron un buen rato regaloneando hasta que la mamá de Ignacia la llama para que la lleve a clases, ya que no podía faltar tanto, porque no quería que se acostumbrara a holgazanear.

Ignacia: Rica, llegó la hora de decir adiós a la diversión, te iré a dejar al jardín, pero cuando te vaya a buscar haremos algo entrete ¿ya?

Pulga: Bueno

Ignacia llevó a su hermanita al jardín en que asistía.

Cuando llegó, su hermanita se bajó corriendo, olvidando la mochila, ya que había visto a Benjamín, cuando Ignacia se baja para pasarle la mochila, lo único en lo que pensaba era en no ver a Josefa, ya que verla le haría mal. Para su sorpresa no se encuentra con Josefa, sino que con otra niña, una nena bastante guapa, era alta,  cabello castaño con un poco de ondulado, piel color canela, ojos celestes, tenía un cuerpo que wow dejaba con la boca abierta a cualquier persona que la mirara y sus facciones eran perfectas. Vestía un jeans ceñido que hacía que sus curvas resaltaran, una polera a tiritas color café, y una camisa ancha, su cabello lo tenía suelto, tenía un poco de labial color rojo, usaba unos tacones. Además de mina tenía estilo.

Pulga: Mira Nachi

Igna: Mira lo que has dejado en el jeep – le entrega la mochila, y se da cuenta que Benjamín está cerca de la niña guapa.

Benjamín: Mi hermana – y señala a la niña guapa.

Niña guapa: Hola, un gusto, mi nombre es Jesús – apenas le dice esto le da un beso cerca de la comisura de los labios.

Ignacia: Un gusto, mi nombre es María Ignacia y soy la hermana de la Trini.

Jesu: Pero que hermanita mas linda que tienes – le guiñe un ojo.

Ignacia: Pulga hermosa creo que es hora de que te vayas a clases

Trini y Benjamín se fueron juntos a clases, ya que las tías los estaban esperando.

Jesu: Hey guapa ¿tienes algo que hacer?

Ignacia: No ¿por qué? – todo lo decía mirándola a los ojos, esa niña no le ganaría.

Jesu: Pues porque estoy aburrida y quiero salir por ahí ¿quieres salir conmigo?

Ignacia: Está bien, ¿en tu auto o en el mío?

Jesu: Como quieras guapa.

Ignacia: Ven – le toma la mano – vayamos en el mío.

Ambas siguieron de la mano hasta llegar al jeep de Ignacia, una vez arriba comenzaron a conversar.

Jesu: Lindo jeep y menuda hermana que te gastas, Benja no para de hablar de ella.

Ignacia: Jajajaj, pues la Pulga tampoco para de hablar de ese pequeño.

Estaban de lo mejor hablando y suena 212 de Azealia Banks a lo que tanto Jesu como Ignacia se pusieron a cantar y a bailar. Como Ignacia no sabía a donde quería ir aquella niña que recién había conocido decidió ir a la playa, una vez llegaron se bajaron del jeep y se sentaron en la arena.

Jesu: Me puedo recostar en tu regazo?

Ignacia: Obvio, ven – la acomodó.

Amabas estaban en silencio disfrutando de la compañía de la otra.

Jesu: Es raro, con suerte nos conocemos y te pedí si podía estar así, disculpa.

Ignacia: Ay gansa no te preocupes, en verda no pasa nada

Jesu: Creo que deberíamos conocernos ¿no? – se incorpora y mira esos profundos ojos color mar

Ignacia: Puede ser, puedes preguntarme lo que quieras  - le decía mientras se perdía en ese color cielo.

Jesu: Mm, ¿por qué accediste a salir conmigo si no me conocías?

Ignacia: Pues porque tu hermano es casi el novio de mi hermana.

Jesu: ajá ¿sólo por eso? – quiso seguir preguntando.

Ignacia: Mm, en verda si, pero también porque me pareciste muy mina. – La mira de una manera muy coqueta y se comienza a reír.

Jesu: Hey, no te burles de mi, malvada.

Ignacia: abrazándola – linda, de ti no me burlaría.

Jesu: ¿enserio?

Ignacia: obvio, ya ahora cuéntame de ti – dejo el abrazo para que nuevamente se miraran fijo a los ojos.

Jesu: Mm, mi nombre es María Jesús, tengo 17, estoy en cuarto medio, quiero estudiar literatura hispana, soy bilingüe, practico hockey y soy porrista ¿y tú bonita?

Ignacia: Ay pero que alta me dejaste la vara! – ambas rieron. – Pues bien, estoy en primero de psicología, hago yoga, a veces surf, en sí me gusta el deporte, cuando estaba en colegio también fui porrista, pero era la capitana, amo bailar y bueno lo demás lo tendrás que descubrir – esto último lo dijo en tono coqueto, de manera casi inconsciente se moja el labio inferior con la lengua.

Jesu: ¿de verda? Que choro, eri seca entonces

Ignacia: Se hace lo que se puede no mas gorda.

Jesu: O sea que aparte de mina eri inteligente. Me gustan así – esto lo dijo despacio.

Ignacia: ¿cómo? – se hizo como la que no había escuchado.

Jesu: Eso po, que además de mina, rica eres inteligente y es justo así como me gustan las personas – dijo esto guiñándole un ojo.

Ignacia: pero que decidida

Jesu: obvio, siempre.

Ignacia: Cuidado que soy difícil.

Jesu: Dos cosas hermosa, uno: amo los retos y dos: cualquiera moriría por estar conmigo así que no te lo pienses mucho.

Ignacia: Bueno bueno – decía mientras se acercaba peligrosamente a los labios de Jesu.

Ambas se quedaron quietas, sentían la respiración de la otra, estaban a escasos centímetros, se miraban a los ojos y se regalaban sonrisas.

Ignacia: Es hora de ir a recoger a los enanos

Jesu: Juraloooooooooooooooooooooooo, que onda lo rápido que pasó el tiempo!

Ignacia: Las fregó, es que igual, con una compañía así era obvio.

Jesu:; ay linda – le cogió la mano y caminaron así hasta llegar al jeep de Ignacia. – Me prestas tu teléfono?

Ignacia: Ten.

Jesu guardó su número en la agenda de Ignacia, se habló por whats app para poder tener su número, una vez listo le devolvió el teléfono.

Jesu: Ten preciosa.

Ignacia: Hemos llegado y aún no salen.

Josefa.

Pero que bien se siente salir a trotar, hace tiempo que no lo hacía, quizás se deba a la falta de tiempo. Tal vez el próximo fin de semana me vaya a la casa de campo que tiene mi mamá, está bastante alejada de la ciudad. O quizás vaya a ver a mis amigas, o mucho mejor, puede que hagamos algo en la casa del campo, sí, eso, una junta como la que hacíamos antes.

Josefa estaba de lo mejor trotando hasta que le da un calambre, lo que provocó que se sentara en el asfalto.

Javi: ¿Jose?

Jose: Sí, ¡Javi! Hola

Javi: ¿Cómo estay? ¿Qué te pasó?

Jose: Sólo un calambre – Señala su pantorrilla izquierda

Javi: Oh, que lata, ¿te molesta si te hago compañía?

Jose: Obvio que no. ¿y qué te trae por acá?

Javi: Mm, estaba dando un paseo ya que vivo cerca y pues te encontré.

Jose: ¿De verdad vives cerca?

Javi: Sí ¿por?

Jose: Porque yo igual, de hecho vivo a dos cuadras de acá

Javi: Jura! Yo igual.

Jose: jaja que bacán, ¡Somos vecinas!

Javi: Si, en verda mil chori que seamos vecinas, ahora podremos estudiar juntas!

Jose: Ay sí, que entrete, me gusta estudiar con gente.

Javi: Sí, a mi también. ¿Se te pasó el dolor?

Jose: Sí, menos mal. – Ambas rieron.

Javi. Ya vecinita, te dejo que tengo ene de cosas que hacer.

Jose: Si obvio, nos vemos cuando nos toque juntas.

Javi: jajaj sí .- se despiden con un beso en la mejilla.

Josefa continúa con su trote, llega a casa y se da cuenta que aún está sola, a lo que sube nuevamente a su cuarto, se da otra ducha, se pone short, prende su computador, busca a Javiera y la agrega. Luego como siente la puerta cerrarse baja las escaleras  y corre a abrazar a Benjamín.

Jose: Guatón rico ¿qué tal tu día?

Min: Bueno

Jose: ¿Quieres jugar?

Min: Yaaaaaaaaaaaaaaa

En eso, entra María Jesús y Josefa la nota algo rara, estaba como ida.

Jose: Y a ti ¿qué onda?

Jesu: Es que conocí a alguien

Jose: Cuentaaaaaaaaaaaaaaa

Jesu: Lo único que te puedo decir es que es una maravillosa persona, creo que me ha gustado.

Jose: ¿y? No me digas que  no me dirás nada mas.

Jesu: No – se rie – muere de vieja pero no de sapa hermanita.

Jose: Como quieras enana.

Jesu subió a su cuarto y Jose se quedó jugando con su hermanito.

Ignacia.

Se me había olvidado que le había pasado mi celular a la Jesu, revisaré para ver que hizo, cuando lo iba a hacer llegaron a la casa, entró con su hermanita y se dio cuenta que estaban casi todos sus familiares, así que se quedó con ellos, compartiendo y riendo. Hablaba y estaba casi colgada a su papá, ya que Ignacia siempre ha sido la favorita de su papá. Después de mucho rato riendo, Ignacia decide irse a su cabaña, toma su teléfono y se va hacia su lugar.

Cuando llega conecta el teléfono con un cargador y se da cuenta que tenía varios mensajes de whats app, los ve y una enorme sonrisa se le dibuja en el rostro.

Mensaje de la mas bonita de todas: Hola preciosa, me ha encantado conocerte ¿quedamos para otro día? Un beso.

Ignacia tan solo se reía y le responde:

Msje Ignacia: Pero obvio que si, ¿te tinca mañana tipo ocho?

Msje Jesu: Ya dale, pero esta vez en mi auto.

Msje Ignacia: Como quieras linda

Msje Jesu: Me gusta que me digas linda J

Msje Ignacia: Ah sí?  Que bien jajajaj, broma. Te dejo pendex que estoy que muero de sueño. Un beso y que tengas dulces sueños, nos vemos en unas horas más. Muac.

Le termina de enviar el mensaje, se saca su ropa, y se mete a la cama en ropa interior.

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Hellow ¿cómo están? Un beso gordo a mis fieles lectores jiji. PD: Acepto comentario y sugerencias :)