El sonido del mar. (II)
Subiré relatos todos los días que pueda. Acepto sugerencias :)
Ambas caminaron en silencio ya que no sabían de qué hablar. Al llegar al auditorio Ignacia se reunió con una de sus amigas (Javiera) quien también entraba a psicología. Mientras que Josefa quedó sola, se sentó en la primera fila, en donde había un asiento desocupado.
Josefa.
Pero que engreída la tipa con la que me he encontrado, me causa repulsión se parece tanto a esa arpía que me hacía la vida imposible en mi antigua ciudad. Hasta el día de hoy no sé porque se las agarró conmigo. Cuando decía esto mis amigas me respondían “por envidia”. Meditándolo bien, quizás haya sido por eso.. Ah, odio jactarme pero bueno, siempre he tenido las mejores calificaciones, además me llevaba muy bien con los profesores y con mis compañeros.
Oh, hay un asiento desocupado en primera fila, creo que me sentaré en el.
Jose: eh, disculpa, está ocupado?- Le preguntó a un joven que estaba sentado al lado de ese asiento vacío.
Desconocido: No, ocúpalo no mas - le dice esto con una bella sonrisa.
Jose: Mm, creo que lo he visto antes, pero ¿dónde? En mis vacaciones? Mm nono, en algún torneo? No creo. Ahhhh, en misiones!. – Sebastián?
Desconocido: Si .. lo dijo dubitativo - ¡Joseeee!
Jose: vaya si hombre! Nunca pensé encontrarme contigo acá. Que felicidad. ¿cómo has estado?
La primera semana de Enero en todo el país salen jóvenes a misionar y a construir casas. Josefa y una amiga se inscribieron y les tocó un sector rural y devastado por un tsunami que afectó las costas del país. Ahí, en el voluntariado conoció a Sebastián. Un joven muy apuesto, dueño de una hermosa sonrisa y de unos ojos que te daban tranquilidad. Pese a que no compartieron mucho, ambos cada vez que se topaban en la construcción se saludaban y charlaban un poco.
Sebastián: Si po Jose, menos yo. Nunca pensé que te vendrías para acá. Niña es un gustaso verte y más aun al saber que estudiaremos lo mismo .. Estoy muy feliz, disfrutando del día a día y con unas ansias enormes de que comience luego la charla y ¿tú? – cada palabra que pronunciaba lo hacía con una enorme sonrisa dibujada en el rostro.
Jose: Que rico que estés tan bien Seba. Pucha yo feliz, hace poquito me trasladé pa acá con mi familia, ya que somos achoclonados y nos encanta vivir juntos.- terminó de decir lo último y entró el rector de la universidad a darles la bienvenida.
Ignacia.
Javi: Nachaaaa que rico verte amiga . – lo decía de una manera muy efusiva ya que no se veían de hace una semana.
Ignacia: Mejor mírame y dime como te parece que estoy jajaja. Ven tontaaa y dame un abrazo – decía esto con los brazos extendidos para abrazar a su amiga.
Javi: Heyy hey, ¿viste a ese bombon que se sentó en la primera fila?
Ignacia: Mm ¿cuál? Ese mino (hombre) de polera negra?
Javi: No po pava esa gaya (mujer) media rubia que entró cuando entraste tú.
Ignacia: ah .. no me parece ninguna maravilla – al decirlo, las últimas palabras las pronunció de manera tajante.
Javi: Creo que alguien se levantó con mañas jajajaja
Ignacia: J aja j aja como se te ocurre! Estoy de lo más feliz, solo que no me simpatiza mucho esa muñequita.
Javi: Pues a mi me parece de más estupenda. De hecho, quiero que sea mi nueva conquista – Tras escuchar esas palabras a Ignacia le hirvió la sangre.
Ignacia: Deja de hablar boberías, que ahí viene el rector.
Rector: Queridos estudiantes, bienvenidos a la universidad, a su nueva casa. Serán como unos hijos pródigos, nos encargaremos de que se sientan cómodos. Espero que disfruten día a día a sus maestros y que aprovechen cada oportunidad que les da la universidad, que aprovechen los seminarios, campamentos, acciones solidarias. Que al fin y al cabo son las cosas que enriquecen el alma. En esta universidad no solo formaremos a mujeres y hombres profesionales, sino que de acá saldrán personas íntegras, personas con una gran capacidad para liderar masas, personas con capacidades extraordinarias, personas con una gran conciencia social.
Mientras Javiera escuchaba entusiasmada la charla que daba el rector, Ignacia estaba sumida en sus pensamientos. Se cuestionaba muchas cosas, dentro de ellas estaba “la chica nueva”, la cual le intrigaba de sobremanera. Ya que su desplante, su ser despreocupado le llamaba mucho la atención.
Josefa.
Creo que Seba está mas guapo de lo que recordaba. Estoy tan feliz, ahora tengo a un conocido en la misma facultad. Además lo que dice el rector me motiva aún mas a estar en esta universidad.
Seba: Jose ¿escuchaste? ¡Hay acciones solidarias! – le decía muy entusiasmado una vez que terminó de hablar el rector.
Jose: Ay sii, eso es lo que más me encantó.
Rector: Y ahora pueden irse a sus hogares. Mañana los quiero bien despiertos y con unas ganas tremendas de aprender. Revisen su correo universitario, por ahí les informaremos en qué sección quedaron. Que tengan un muy buen año académico.
Seba: ¿te tinca si te llevo a conocer?
Jose: Mm
Seba: bueno, si quieres y tienes tiempo …
Jose: ¡Obvio que si! – le respondió con una gran sonrisa a lo que Seba se puso colorado. – Creo que podremos ser grandes amigos, este chico me simpatiza bastante.
Cuando iban caminando Josefa siente que alguien le choca el hombro a lo que se da vuelta para ver quien la había pasado a llevar y se da cuenta que había sido una muchacha, justo la misma a la que ella había chocado antes.
Ignacia.
Ay no, qué se cree ese para venir a hablar con la Jose, es que no.
Sé que chocarla no fue lo más correcto pero algo me decía que lo hiciera. Quiero que ella note mi presencia, ya que cuando nos presentamos no me prestó mucha atención.. Algo tendré que hacer para que me mire.
Javi: ¿qué onda Nacha, por qué la chocaste?
Ignacia: Poniendo cara de inocente – chocar? ¿a quién?
Javi: Ay, no te hagas, te vi.
Ignacia: son ideas tuyas no más. Vayamos a la playa?
Javi: Yaaaaaaaaaa, nos cambiamos y vamos.
Ignacia: Está bien, les enviaré un texto a las demás chicas, para ver si se suman
Ignacia texto: Hey zorronas ¿quieren ir a la playa esta tarde? Y después hacer una noche Mexicana?
Flo texto: yaaaaa, me encanta la idea. Pero aún no salgo de clases.
Teresita texto: Bueno lindas, díganme la hora y Max me va a dejar.
Cata texto: ¡dale! Las veo ahí linduras.
Ignacia: A las doce en mi casa.
Javi: ¿y? ¿qué te dijeron? – preguntaba intrigada Javiera
Ignacia: Que si po, si nunca dicen que no jajajajaj – Ambas se pusieron a reír.
Josefa.
Jose: ¿en tu auto o en el mío?
Seba: El mío no lo traje, pero si quieres lo pasamos a buscar.
Jose: J aja que eres loco, mejor vamos en el mío y tu manejas
Seba: Ehh – mirando a la carita tierna que ponía Josefa. - ¿cómo decirte que no!?
Jose: je je je je.
Salieron de la universidad, fueron al estacionamiento por el auto de Josefa, ésta se subió en la parte del copiloto y Sebastián condujo.
Jose: sé que tu manejas pero me encanta poner música mientras voy en el auto o me aburro – le decía esto mientras sintonizaba su ipod.
Seba: creo que no saco nada con decirte que no.
Jose: Pretty girl, wreckin' bar, Ra ra ra ra yeah you are! – cantaba al son de la canción moviendo las manos.
Seba: la miró asombrado y canto junto a ella - Growin' up, I'm twice the man,
Yeah yeah yeah yeah, yeah I am.
Jose: Wooow, no sabía que también te gustaba esta canción.
Seba: ¿pero como no gustarme? Amo esa música. Creo que hay muchas cosas que no sabes de mi y hay muchas cosas que no sé de ti - Le decía esto con una gran sonrisa y mirándola directo a los ojos, lo que provocó que Josefa se ruborizara.
Siguieron el camino cantando juntos, ya que cada canción que salía Seba se la sabía y la cantaba a la par con Josefa.
Jose: Eh buen sabedor de música ¿para dónde me llevais?
Seba: Es una sorpresa mi linda dama
Jose: No me gustan las sorpresas lindo – le decía mientras le hacía pucheros
Seba: Pese a que te ves muy tierna no saldrá nada de estos labios.
Jose: ¡Que injusto!
Ignacia.
Llegué a mi casa, me fui a mi cabaña para darme una ducha ya que no había alcanzado a dármela cuando llegué de la playa por la mañana.
Me la di pensando en quien habrá sido esa niña que entro al mar justo cuando iba saliendo.