El sirviente y el príncipe azul 11

Hola chicos y chicas disculpen por no haber publicado el sábado, no tenia internet jejeje, pero no se preocupen que seguiré escribiendo y publicando así sea tarde.

Agradezco de todo corazón a los que me escribieron al facebook, al Wattpad y al mi correo, no sabia que aun tenia fans tan fieles que aun seguían mis historias y me contactaban, espero seguirme comunicando con ustedes.

También me disculpo por no haber publicado Brazaletes Misteriosos pero he cambiado de planes para el, ya se los hare saber al final de este capitulo.

Sin mas que decir disfruten este capitulo.

EL SIRVIENTE Y EL PRINCIPE AZUL 11

HISTORIA DE ALEXANDER Y JULIÁN / LA MALDAD DE AURORA.

DENTRO DEL CASTILLO VERDE

OMAR.

Asier y yo nos encontrábamos en nuestra torre, solo en ropa interior y tomados de la mano, mientras veíamos los últimos rayos del sol ocultarse tras las montañas, Asier no había dejado de estar nervioso en todo el día y yo no me había alejado de él ni un minuto, mi chico me necesitaba y no lo abandonaría.

-Mi amor me dijo sin dejar de mirar hacia afuera -Ya esta oscureciendo y aun no tenemos información de Alexander, me preocupa… es evidente que mi madre tratara de capturarnos de nuevo esta noche.

-Lo se muy bien mi vida, deberíamos buscar a nuestros aliados rojos, deben estar dentro del castillo.

-Es cierto mi cielo, vallamos a buscarlos.

Nos pusimos nuestros trajes y decidimos bajar de la torre, pero cuando salimos no esperábamos encontrarnos con lo que vimos, Aurora se había movilizado antes de tiempo y 3 de sus guardias estaban pasando por allí justo cuando bajamos, apenas nos vieron dijeron.

-Con que allí estaban, ahora mismo vendrán con nosotros y por su bien es mejor no oponer resistencia.

Estamos atrapados… No veía salida de esto, ellos eran 3 y estaban armados con espadas largas muy filosas, si intentábamos escapar nos podrían herir y poner en riesgo la vida de mi amado de cabellos dorados.

Tome fuerte la mano de Asier -Nos rendimos…

Asier me miro sorprendido -¡Mi amor! ¿Qué haces? Si nos rendimos mi madre… incluso… nos puede matar…

-Lo se amor lo tome de la barbilla -Pero en este momento, estos guardias nos pueden matar si nos oponemos Acerque su barbilla hacia a mi y nos fundimos en un tierno y cálido beso que el correspondió

Uno de los guardias nos separo bruscamente -¡ME DAN ASCO! Espero que Aurora les de el castigo que se merecen.

En su cara solo se reflejaba odio y asco hacia nosotros, igual que en la cara de los otros dos guardias, ni uno de ellos mostraba compasión hacia nosotros, nos amarraron las manos y los pies y nos pusieron una venda en los ojos a ambos, en este momento un enorme sentimiento de impotencia me invadía, el amor de mi vida estaba en peligro y yo no podía hacer absolutamente nada para rescatarlo.

* EN EL REINO ROJO*

YVONE.

Logramos salir sin problemas del reino azul y ya dentro de las fronteras del reino rojo el rey azul se encontraba a salvo, le quitamos la capucha mientras corríamos por la calles de nuestro reino en dirección al castillo, ya estaba oscureciendo por lo que no habían casi personas en los alrededores.

Llegamos al castillo siendo bien recibidos por mi hermano y rey, Marcus el cual se alegro mucho por nuestra llegada.

-Bienvenida hermana, y felicidades por haber cumplido la misión, pero ¿no se supone que ambos reyes se encontraban capturados? ¿Dónde se encuentra la reina azul?

-Bueno veras hermano… ella se debe encontrar ya en el reino amarillo…

EN EL REINO AMARILLO

KAIRA.

-Bueno su majestad, él se debe encontrar ya en el reino rojo.

El escuadrón que envié a rescatar a los reyes azules ya había regresado pero solo habían traído conmigo a la reina azul, me explicaron lo sucedido y me dijeron los motivos por los cuales habían tomado esa decisión.

-Muy bien mis guerreros, no solo son audaces sino también muy inteligentes, esa fue una decisión muy acertada Mire a la reina azul -Señora es un placer conocerla, pronto tendremos una conversación de reina a reina.

-Es una placer también joven reina, pero por favor, ya que he sido amparada en su castillo, me gustaría descansar un poco, créame, no se vive bien dentro de una prisión.

-Lo entiendo Hice sonar mi campana especial y mi mas fiel empleada entro al cuarto -Matilda, quiero que lleves a esta señora a descansar, por favor cumple todas sus ordenes y asegúrate que se mantenga a salvo, es muy importante.

-Si su majestad, será un placer.

De inmediato la reina azul salió de mi recamara escoltada por mi empleada, Matilda, se preguntaran porque digo “Empleada” y no “sirvienta” pues verán, ella se lo gano, Matilda llego a mi palacio cuando solo tenia 9 años, frecuentemente yo hablaba con ella ya que era muy cálida y llena de amor, aunque se notaba que ocultaba un dolor del pasado… llego a tal punto nuestra confianza que le di una habitación en el castillo, la volví jefa de mis sirvientas y se gana un buen salario por sus servicios, pero bueno, eso no tiene mucha importancia. Apenas salió mi semblante cambio, mire a mis guardias con un poco mas de seriedad.

-Chicos, se que deben estar cansados luego de ese viaje de rescate, pero algo me esta preocupando, tengo un pésimo presentimiento, se podría decir que es mi “sexto sentido gemelo” pero siento dentro de mi que mi hermano esta en peligro… por favor necesito que me lleven de inmediato al reino verde.

-Nuestra amada reina, nunca estaremos tan cansados como para no servirle y cumplir sus ordenes, en 5 minutos nos reabasteceremos de provisiones y volveremos para partir los 4 salieron de mi recamara en un parpadeo, me acerque a la ventana viendo en dirección al reino verde -Asier… no se que esta pasando… pero siento que es algo malo… por favor hermanito, resiste hasta que pueda llegar… no puedo perderte… una lagrima rodo por mi mejilla

EN EL REINO MULTICOLOR

JULIÁN.

Alexander y yo íbamos rápidamente en dirección hacia la casa señalada, los últimos rayos del sol ya estaban desapareciendo dando paso a el cobijo de la noche, en su hermosa cara se podía ver la preocupación que sentía, se estaba tomando muy en serio este asunto de rescatar al bebe, es cierto que es un asunto muy serio pero para Alex era aun mas serio y “personal” por lo que había pasado en su vida…

HISTORIA DEL PASADO DE ALEXANDER Y JULIÁN.

ALEXANDER.

Alexander nació hace 20 años en una pequeña aldea del muy lejano reino gris, ese reino se encontrada a 6 meses de viaje, por tierra y por mar, de la actual ubicación de nuestras historias, y digo “encontraba” porque ese reino ya no existe. Era un reino pequeño dedicado a la minería de rocas, eran un pueblo pacifico por lo cual no se concentraban en la creación de armas, y ese fue un gran error.

Alexander nació en una familia normal, tenia un padre, una madre y una hermana mayor, pero lamentablemente no conoció mucho o casi nada de ellos; cuando Alexander tenia 1 año se desato una guerra en su reino, un malvado emperador se quería apoderar del reino gris usando la fuerza, los soldados invadieron el reino apresando y matando a todos los que se oponían y entre ellos, los padres de Alexander fueron asesinados, su hermana que en ese entonces solo tenia 6 años, llena de dolor pero con mucho valor tomo a su pequeño hermano y se alejo de allí lo mas rápido que pudo. Durante varios días vagaron en la llanura, alimentándose con lo poco que había logrado sacar del reino y lo poco que encontraban en el camino, sobrevivieron hasta que llegaron a encontrarse con otro grupo de personas, un pequeño grupo de unas 20 personas que también pertenecían al reino gris y habían logrado escapar, ese grupo los acogió y los cuido durante un tiempo.

Pasaron 3 años, el grupo había viajado mucho quedándose por temporadas en algunos pueblo, pero seguían su viaje, se había vuelto nómadas, el grupo se había reducido a solo 12 personas ya que muchos se habían decidió quedar en algunos de los pueblos por donde habían pasado.

Todo había marchado relativamente “bien” para el grupo, pero en ese momento se encontraban desesperados, se habían quedado sin alimento, sus ropajes se habían vuelto harapos, no vivirían mucho si seguían así.

-“Y si… vendemos a la niña a un comerciante de esclavos”

Sugirió uno de los hombres del grupo, y en ese momento, cegados por la desesperación, los demás aceptaron la propuesta, sin que los niños superan el grupo siguió caminando hasta que encontraron lo que buscaban. Durante la noche dos hombres tomaron a la niña dormida, en ese entonces de 9 años y se la llevaron, la niña despertó y comenzó a gritar pero nadie del grupo la auxiliaría, los gritos despertaron a Alexander que en ese entonces solo tenia 4 años.

-¿Ah? despertó alertado -¿Mati? ¿Mati donde estas?

……… -Aaaaaleeeeex…… se escucho el grito a lo lejos

-¿Tilda? ¿Hermanita donde estas?

------------Aaalleeexxxx…….. Se escuchaba cada vez mas lejano

Sin que los demás del grupo lo notaran Alexander salió del campamento corriendo en la dirección hacia donde escuchaba los gritos, pero de nada sirvió, en la oscuridad de la noche el pequeño se desoriento y se perdió. Su hermana fue vendida por unas cuantas piezas de oro en el reino cercano y Alexander nunca mas volvió a ver a su hermana.

Alex siguió vagando toda la noche, llorando y buscando a su hermana, hasta que llegando el amanecer se desmayo del cansancio a la orilla de una playa, fue encontrado por una pareja de muy humildes ancianos de entre 80 y 85 años que no habían podido tener hijos a lo largo de su vida, en ese momento se encontraban visitando a unos familiares en el reino amarillo, estaban regresando a su reino cuando encontraron al joven allí tirado, la pareja lo acogió y lo llevo a su cabaña en el reino multicolor. Alexander durante mucho tiempo lloro la perdida de su hermana, pero la pareja de ancianos era muy amorosa, desbordaban en él todo el cariño que nunca le habían podido dar a un hijo y poco a poco el dolor del pequeño se fue atenuando y la felicidad volvía a su vida.

Pero eso no duro mucho, cuando el joven tenia 12 años su madre adoptiva con una avanzada edad de 90 años falleció, y poco tiempo después, cuando Alexander tenía 14 años su padre adoptivo también murió, se había quedado solo en el mundo de nuevo, sin ningún familiar a donde recurrir.

JULIÁN.

Julián por su parte nació hace 22 años, creció un ambiente totalmente normal, sus padres eran originarios del reino multicolor y él también, no tenia hermanos y había crecido sano y sin problemas, era un chico muy humilde, aunque su familia tenia mucho dinero él no presumía de eso ni se comportaba como alguien “de la clase alta” era muy noble, curioso, siempre le gustaba explorar la isla y pasar mucho tiempo en la costa, nadando o apreciando lo hermoso del horizonte.

Físicamente era de cabello negro, sus ojos eran de color gris y muy expresivos, era alto y con un cuerpo normal.

Su vida se cruza con la de Alexander un día a la edad de 16 años cuando…

COMIENZA A NARRAR JULIÁN

Paseaba tranquilamente por la orilla de la playa cercano al mercado de la costa, era un ambiente algo opuesto, por un lado estaban las tranquilas olas del mar o por otro lado estaba el bullicio de los mercaderes vendiendo sus productos, pero era muy agradable. De un momento a otro caminando por allí comencé a escuchar unos gritos y un joven rubio con un hermoso mechón azul paso corriendo a mi lado en dirección hacia la costa, llevaba en sus manos una enorme pieza de pan, mientras que desde la zona de mercaderes uno de ellos gritaba.

-“¡LADRON! ¡ATRAPENLO!

Era muy raro que alguien robara algo en nuestra pacifica isla, el mercader que había sido robado venia furioso hacia esta dirección, la verdad no se que fue lo que me impulso a hacer esto, pero saque de mi bolsa unas cuentas monedas y se las entregue al mercader.

(Nota: en el reino multicolor usaban monedas metálicas como dinero a diferencia de los demás reinos que usaban las piedras preciosas que los caracterizaban)

-Esto pagara el pan que le fue robado, y además tiene algo extra por favor deje al chico en paz.

-Grrr bah, solo me importa el dinero tomo las monedas y se marcho de nuevo a su puesto

Mire de nuevo hacia la costa… camine hacia el mercado y compre algo de mermelada al mercader mas cercano y sali corriendo hacia la costa de la isla, hacia la zona donde había visto al chico correr, yo siempre he sido muy curioso y valeroso, no me importaba que ese chico fuera un ladrón o fuera peligroso, la curiosidad por saber que motivos tenia para robar me ganaban. Camine hasta llegar a una gran formación rocosa con una cueva en medio, generalmente nadie pasaba por allí y lo sabia porque yo frecuentemente iba a ese lugar por ser tan pacifico y no veía a casi nadie en esa zona, y justo en este momento unas huellas frescas en la arena se dirigían hacia el interior de la cueva.

-¿Hola? ¿Hay alguien aquí? decía mientras entraba en ella pero nadie respondía

-Se que estas aquí… responde…

Seguí caminando hasta que no muy dentro de la cueva lo encontré respirando agitadamente y con algunas lagrimas rodando por su mejilla, tenia ropa blanca, se le veía algo sucio y descuidado.

-¿Estas bien?

No respondía, solo me miraba con una mezcla de miedo y tristeza.

-Traje algo le mostré el frasco de mermelada -Podemos compartirlo mientras me cuentas que te sucede.

-Aléjate de mi por favor Fueron las primeras palabras que le escuche decir

-No he venido a lastimarte, ya le pague al mercader el pan que robaste, no te van a perseguir, estas a salvo, solo quiero saber ¿Qué te pasa?

-¡ALEJATE! Me grito con las lagrimas en los ojos mientras me lanzaba una piedra que por suerte para mi fallo -¡ALEJATE! No quiero que seas bueno conmigo… todas las personas que son buenas conmigo mueren o desaparecen hablaba mientras lloraba -No quiero formar lazos con nadie mas ¡ALEJATE DE MI Lanzo otra piedra con mas fuerza y esta ves si me dio justo en la frente

-AAAHHhh Sentí el dolor del golpe y me desconcerté unos segundos, cuando volví a verlo en su mirada se notaba, tristeza, preocupación, arrepentimiento, se notaba arrepentido de haberme golpeado -Hey… Le iba a decir algo mas cuando note como salía sangre de mi cabeza, lo mire de nuevo y sin decir nada mas deje en el suelo el frasco de mermelada y unas cuantas monedas -No vuelvas a robar ¿ok? Pero ahora por tu culpa necesito atención de algún curandero, adiós.

Sin decir mas sali de la cueva dejándolo allí.

Pasaron varios días, mas de dos semana y no había visto mas al chico, la herida no fue grave solo me habían puesto un pequeño pañito con algunas hierbas cicatrizantes y unas vendrás para mantener eso allí, aun tenia las vendas puestas, pero creo que la herida ya había sanado casi por completo.

Me encontraba recostado sin camisa, tomando el sol encima de la formación de rocas, justo encima de la cueva donde ese chico me había lanzado piedras, estaba boca arriba con los ojos cerrados, encima de unos trapos para evitar que el calor de las rocas me quemara, estaba muy calmado hasta que note que bruscamente algo o alguien me tapaba el sol, lo cual era muy extraño ya que como he mencionado, nadie pasaba por allí, abrí los ojos y mi sorpresa fue enorme, ese chico rubio con un mechón azul se encontraba parado allí justo delante de mi, esta vez llevaba una ropa igualmente blanca pero mas limpia.

-Ho-hola. Dije sin saber que mas decir, no sabia el motivo del porque estaba allí

-Hola, me tomo mucho encontrarte, llevo todo el día buscándote, no se porque supuse que estarías aquí, y he acertado, bueno no importa, toma me entrego un saco -Allí esta el dinero que me diste, además también esta un nuevo frasco de mermelada, gracias por tu ayuda el otro día y disculpa por haberte lastimado.

Me levante quedando justo al frente de el -Oye ¿Por qué hace esto?

-Simplemente no quiero deberte nada y me quería disculpar por lo que te hice, pero ya me voy dio media vuelta y de un salto cayo en la arena

En sus ojos podía notar dolor y tristeza.

-Hey ¡ESPERA! Deje la bolsa allí junto a una canasta que yo había traído y salte detrás de él -Espera por favor, solo quiero hablar contigo.

-¿Acaso quieres morir? Me dijo sin mirarme a los ojos

-¿Qué? me asuste un poco, pero recordé sus palabras del otro día “todos los que son buenos conmigo desaparecen o mueren” -No quiero morir, quiero ayudarte.

-Eso te llevara a la muerte, siento que cargo con una… una… maldición… nuevamente comenzó a llorar mientras caía de rodillas en el arena

Definitivamente algo le pasaba a ese chico, me acerque a el y lo abrace por la espalda, al comienzo se resistía pero sus fuerzas no duraron mucho y se dejo abrazar.

-Por favor, solo quiero conocer tu historia.

-Bien, bien, te la contare para que sepas porque te debes alejar de mí, pero eso será todo ¿ok?

-Bien, me basta por ahora.

Nos levantamos y volvimos a subir al lugar donde me estaba asoleando, abrí la canasta que había traído y que dos trozos de pan y algo de agua de coco, tome la mermelada de la bolsa ignorando por completo el dinero.

-Que bueno que trajiste esta mermelada, así comeremos mejor le dije sonriendo a lo que el respondió con una sonrisa forzada

Abrí los panes llenándolos de mermelada y le serví a el un poco de agua de coco en un vaso.

-Bueno comamos mientras me cuentas.

-Pff esta bien, veras…

-Comenzó a contarme su historia con algo de tristeza, de vez en cuando algunas lagrimas salían de su rostro en especial cuando hablaba de su hermana Matilda, me conto de la muerte de sus padres y de la reciente muerte hace solo 3 semanas de sus padres adoptivos, me dijo que desde que murieron no sabia que hacer, apenas tiene 14 años, tenia hambre y por eso robo ese pan, pero no es una mala persona, después de que lo ayude consiguió un trabajo como jardinero con lo que hizo algo de dinero y me devolvió lo que le había dado para así no deberme nada.

-Y entonces… ¿por ese motivo es que no quieres acercarte a nadie? ¿Piensas que morirán como tus padres o desaparecerán como tu hermana?

-Si…

-Eres un completo idiota le dije con algo de risa

-¿Qué? me miro algo molesto

Mire hacia el mar y le dije-Puede que hayas pasado por muchos dolores y es normal que tengas miedo de volver a formar lazos con las personas, pero no puedes cerrarte para siempre, todos necesitamos a alguien a nuestro lado, todos necesitamos sentirnos queridos, lo que le paso a tus padres y a tu hermana fueron lamentables accidentes pero no por eso vas a pensar que siempre tu vida será así, eres muy joven, tienes una hermosa vida por delante, no te eches a morir por lo que haya pasado en tu pasado, debes fortalecerte cada vez mas para vivir un futuro mejor.

Cuando voltee a verlo, nuevamente estaba llorando, pase mi brazo por su hombro y lo acerque a mí, esta vez no opuso resistencia alguna, mientras lloraba me dijo.

-Yo… yo no quiero estar solo, quiero… quiero tener a muchas personas en mi vida, pero tengo miedo de que por mi culpa salgan lastimadas,

-Eso no pasara, y si pasa no será tu culpa lo abrace mas fuerte -Me llamo Julián, y quiero ser tu amigo.

Con una mano seco sus lagrimas -Soy… soy Alexander y… yo… también quiero ser tu amigo… solo espero que no… te pase nada…

-No pasara ya lo veras.

Pasó el tiempo y la relación de amistad entre Alexander y yo crecía cada vez más, nos hicimos amigos y nos veíamos muy a menudo por lo general en ese mismo lugar.

Cuando Alexander tenia 16 años y yo 18 decidimos inscribirnos en la academia de la guardia real, seriamos entrenados para ser guardias en el castillo, Alexander decía “Entrenare y seré fuerte para proteger a los que quiero” y yo le decía a él “Seré fuerte para que nada me pase y poder seguir a tu lado”

Paso el tiempo y ambos motivados por nuestros deseos nos volvimos muy buenos en la academia, éramos los mejores y en solo dos años logramos pasar cada prueba y graduarnos, de inmediato la emperatriz en persona nos recluto para su guardia especial, habíamos logrado ser muy fuertes.

ALEXANDER

Cuando nos graduamos yo tenia 18 años y Julián 20, no me arrepentía para nada de la decisión que había tomado ese día de ser su amigo, pero aun así no me gustaba tener muchos lazos con nadie mas, era amistoso y amable, si, pero no tenia intenciones de iniciar una amistad con nadie, solo necesitaba a Julián para ser feliz. Al graduarnos nuestra hermosa y misteriosa emperatriz en persona nos escogió como parte de sus guardias especiales, viviríamos en el castillo y solo seguiríamos sus órdenes.

Esa noche después de la noticia me encontraba en mi casa recogiendo todas mis pertenencias, mañana temprano debíamos ir al castillo donde nos mostrarían nuestras nuevas recamaras.

-Mmmm… mire a mi alrededor -Extrañare este lugar… Mire una foto de mis padres adoptivos -Papá… Mamá… espero que estén orgullosos de mi.

-Lo están, eso es seguro Julián había entrado a mi casa y en mi cuarto cargando unas maletas -Y yo también estoy muy orgulloso de ti, has crecido mucho física y mentalmente.

-Hola, muchas gracias, y todo esto te lo debo a ti, sin tu ayuda me hubiera convertido en algún delincuente, o quien sabe, tal vez ya estaría muerto… pero… ¿Qué haces aquí con tus maletas?

-Ya recogí todo, estoy listo para mañana, pero decidí pasar aquí la noche contigo mientras decía eso dejaba sus maletas en el suelo y se sentaba en mi cama -Tengo… algo que decirte… Me miraba con una expresión tímida y frágil

-¿Qué ocurre? ¿Paso algo malo? Me senté a su lado

-No, no es nada malo… creo… es solo que… no se como decirte esto… es muy importante… y…

Lo notaba muy nervioso y me parecía raro ya que él siempre actuaba seguro y confiado.

Lo tome de la mano y los mire a los ojos, en sus ojos notaba un brillo de alegría y nerviosismo -Sabes que puedes confiar en mi Juli, sea lo que sea, estaré aquí para ti.

En ese momento sus ojos cambiaron a una mirada de determinación, se veía decidido a hacer algo.

-Creo, que mejor… te lo muestro… Acerco sus labios a los míos dándome un suave beso, “un piquito” que solo duro unos instantes -Tu… me gustas…

En mí, un mar de emociones despertaron en un segundo, sentía miedo, duda, cariño, felicidad, tristeza, no sabia como reaccionar ante esta situación, Julián también me gustaba, era un chico demasiado hermoso y se había convertido en alguien muy cercano para mi, quería estar por siempre a su lado… pero… La cara de Julián se mostro triste debido a que yo no reaccionaba, él dejo de verme a los ojos y no decía nada, yo tampoco reaccionaba estaba en un shock de emociones que luchaban dentro de mi, no sabia como responder pero fuera lo que fuera, no iba a dejar que Julián estuviera triste por mi culpa.

Tome su barbilla con mi mano haciendo que volviera a subir su mirada y nuestras miradas se volvieron a conectar por un segundo, pero esa conexión no duro mucho, cerré mis ojos y acerque mis labios a los suyos correspondiendo su beso, pude sentir como sus emociones explotaban, temblaba suavemente mientras pasaba sus brazos por mis hombros abrazándome mientras nos uníamos en un largo e intenso beso, este era mi segundo beso ya que el primero había sido el que Julián me había dado hace unos segundos, sus suaves labios y su lengua exploraban los míos al mismo tiempo que yo había lo mismo, se sentía realmente rico y placentero.

Bajo una de sus manos hasta mi pecho el cual tocaba suavemente sobre mi camisa pero al mismo tiempo apretaba mi camisa con una frustración silenciosa, entendí lo que sentía y quería, por un momento me separe del beso y nuestras miradas chocaron de nuevo, pero esta ves solo veía gozo en su mirada combinada una su hermosa cara que se había sonrojado, le sonreí a lo que el correspondió con una sonrisa aun mas grande y brillante.

Lentamente me quite la camisa y la arroje lejos, se quedo viendo mi pecho bien formado por el duro ejercicio y entrenamiento al que era sometido en la academia, él ya lo había visto muchas veces, demasiado, ya que siempre íbamos juntos a la playa, pero nunca lo había tocado a excepción de en leves roces cuando jugábamos pero nada lujurioso. Su cara se puso más roja y no se movía.

Me recosté un poco en la cama y con una sonrisa le dije -Vamos, se que quieres tocar, hazlo.

-Jejejejeje… voy, voy Dijo con una risa tímida

Suavemente comenzó a pasar sus manos por mis abdominales recorriendo con sus dedos el camino que se formaba entre ellos, nuestras miradas no se separaban ni un segundo y nos transmitíamos el mutuo deseo. Paro de tocarme y rápidamente se quito su camisa, su cuerpo estaba tan formado como el mío por el mismo entrenamiento, lenta y tímidamente se recostó sobre mi haciendo que nuestros torsos desnudos pegaran uno contra el otro, sentía su respiración agitada en mi cara mientras sus labios rozaban suavemente los míos.

-¿Quieres…? Le dije tocando su paquete por encima de su pantalón

-Si… si quiero…

Se levanto de la cama y sin dejar de mirarme bajo su pantalón quitándoselo por completo, muchas veces lo había visto así, solo en ropa interior, pero esta vez algo era diferente, por primera vez podía ver una enorme erección que no dudo en mostrarme por completo al quitarse su ropa interior. Accidentalmente había visto su miembro mientras jugábamos, en algunas ocasiones por accidente lo jalaba de su ropa interior quitándosela y lo había visto totalmente desnudo, pero jamás lo había visto con esa erección, su pene en todo su esplendor era grande y grueso, me quede maravillado viéndolo fijamente.

Julián sonrió tímidamente mientras me decía -¿Te gusta? Jejejeje.

Me puse mas rojo si era posible -Es la primera vez que veo otro pene erecto que no sea el mío… es… es solo eso Sonreí -Ahora me toca a mi Sin levantarme de la cama baje mi pantalón y mi ropa interior mostrando mi pene totalmente erecto el cual era mas corto que el de Julián, pero mas grueso

-Te ves hermoso me dijo mientras me veía de arriba abajo

-Jejejeje cállate y ven aquí.

No necesito dos pedidas, de inmediato se subió nuevamente encima de mi buscando mis labios y fundiéndonos en un aun mas apasionado beso mientras nuestros cuerpos totalmente desnudos chocaban entre si, era la primera vez que estaba así con alguien, nunca me habían interesado mi las mujeres ni los hombres, en parte se debía por mi miedo a formar lazos, solo tenia lazos con Julián y no lo había visto de manera sexual, pero sin duda estar así, con él, era mágico y sentía que necesitaba cada vez mas de él.

Por un momento sentí como sus besos se intensificaban y se movía quedando de tan forma que se podía sentar sobre mi, sentí como con su mano tocaba mi pene y lo dirigía hacia el centro de sus nalgas, podía notarlo temblar tímidamente, por un segundo la conexión entre nuestros labios se corto y lo mire a los ojos.

-¿Seguro que quieres hacer esto?

-Si Alex… quiero que… mi primera vez… sea contigo…

Sonreí mucho y eso pareció llenarlo de mas confianza, su tímido temblor desapareció y esta vez mas decidió aun coloco la punta de mi pene en su entrada y comenzó a presionar haciendo que entrada la punta.

-Aaaggg!! Gimió de dolor

-Juli si te duele… detente… no quiero lastimarte.

-No, tranquilo… quiero seguir.

Siguió presionando mientras mi pene entraba cada vez más en él, era la primera vez que sentía algo así en mi pene, una presión y un calor sumamente agradables, yo también gemía pero del gozo que me producía esa sensación, antes de que me diera cuenta Julián estaba totalmente sentado sobre mi y mi pene se encontrada por completo dentro de él. Nuestras miradas se conectaron con un gesto de profundo placer que ambos sentíamos. Comenzó a subir y bajar nuevamente provocando en nosotros una sensación nueva y adictiva, nuestros gemidos eran intensos y sincronizados mientras ambos disfrutábamos por primera vez de este gran placer.

Coloco sus manos en mi pecho acariciándolo suavemente mientras seguía subiendo y bajando. Yo mire su pene súper erecto y botando mucho liquido, sin pensarlo dos veces lo tome y comencé a masturbarlo, nunca antes había tocado otro pene que no fuera el mío, se sentía tan nuevo y rico, eso al parecer aumento mucho su placer ya que comenzó a acelerar sus movimientos aumentando mucho también mi placer a tal punto que yo mismo comencé a mover mi pelvis ayudando a la entrada y salida de mi pene en su culo.

JULIÁN.

Nuestro placer era intenso y mi felicidad lo era aun mas, por fin estaba teniendo sexo con el chico que me gustaba desde hace mucho, al fin había perdido mi virginidad con la persona correcta, se sentía simplemente increíble.

-AAAAAA AAALLLEEEXXXX

Grite el nombre del chico que quería mientras de mi pene comenzaba a salir chorros de semen llenando por completo su pecho, Alexander arqueo su espalda y con un gemido ahogado puse sentir como comenzaba a eyacular dentro de mi. Ambos quedamos sumamente cansados y sudados, acabábamos de vivir unos momentos de intensas emociones, quedamos tan cansados que nos dormimos, desnudos… abrazados… queriéndonos mucho.

Paso el tiempo y nuestra relación se intensifico, ya éramos mas que amigos, pero no éramos novios, era algo extraño, Alexander aunque había perdido un poco el miedo de formar lazos, y había formado unos muy fuertes conmigo, decía que aun no quería convertirse en mi novio, ser mi novio y formar un futuro conmigo era algo con lo que aun no se sentía cómodo y preparado, decía que aun no era lo suficientemente fuerte como para protegerme de todo y tenia mucho miedo de perderme, y aunque me dolía un poco, entendía y aceptaba todo lo que decía, después de todo, no era un “no” era un “espérame a que este listo” por eso no perdía mis ánimos o mis ganas de estar a su lado, seguía apoyándolo en todo.

Pasaron los años y llegamos al momento actual, cuando Alexander tiene 20 años y yo 22.

DE VUELTA A LA ACTUALIDAD

JULIÁN.

Alexander y yo íbamos rápidamente en dirección hacia la casa señalada, los últimos rayos del sol ya estaban desapareciendo dando paso a el cobijo de la noche, en su hermosa cara se podía ver la preocupación que sentía, se estaba tomando muy en serio este asunto de rescatar al bebe, es cierto que es un asunto muy serio pero para Alex era aun mas serio y “personal” por lo que había pasado en su vida… perdió a sus padres, perdió a su hermana Matilda y perdió a sus padres adoptivos… no quería que otro bebe tuviera que sufrir como ha sufrido el, ni que tenga que ver morir a las persona a su alrededor, quiere que ese bebe sea feliz y juntos velaremos porque eso se cumpla, pero primero debemos rescatarlo de las garras de la terrible arpía, Miku.

EN LOS LIMITES DEL REINO AMARILLO

KAIRA

Ya estaba con mis guerreros en dirección al reino verde, habíamos tomado los mas rápidos caballos debido a que mi preocupación aumentaba cada vez mas y solo en cuestión de minutos llegaríamos, podía confiar en que la reina azul estaría a salvo en mi castillo, bajo el cuidado de Matilda nada malo le pasaría, ahora solo debía preocuparme por llegar a tiempo con mi hermano Asier y alejarlo de nuestra madre… las cosas se estaban poniendo difíciles e incluso había pensado en mover fuerzas militares para hacer que mi madre se fuera, pero eso solo causaría problemas con el reino verde y multicolor… era muy arriesgado.

-Su majestad, le veo muy pensativa Dijo el líder de mis guerreros -No se preocupe, nosotros la defenderemos de todo.

Sonreí -Gracias, se que puedo contar ustedes.

Tenía un mal presentimiento, tenia que llegar con Asier de inmediato.

EN LAS AFUERAS DEL REINO VERDE

OMAR

Los guardias de Aurora nos habían capturado y bajo la penumbra de la noche nos habían sacado del reino sin ser visto, no encontrábamos en las afueras, en el campamente de Aurora, los guardias nos habían obligado a ponernos de rodilla y nos habían quitado la venda de los ojos, a nuestro alrededor todo se mantenía “normal” los guardias de Aurora se mantenían ocupados mientras recogían todo, desarmaban el campamento, al parecer iban a irse ya. Pero lo que nos aterro es que delante de nosotros se encontraba Aurora con una mirada fría y sin sentimientos mientras miraba a Asier con odio y asco mientras decía.

-Que decepción, encontrar a mis hijos vivos debería ser una alegría para mi, pero en este estado, que mi hijo sea una aberración, sinceramente preferiría no haberte encontrado, preferiría que siguieras muerto.

-CALLESE MALDITA MUJER! Le grite a Aurora -ASIER ES UN HOMBRE MARAVILLOSO! A DIFERENCIA DE USTED… QUE ES UN DEMONIO!

-¡Cállate inútil príncipe o te mato! Me grito Aurora mientras tomaba una espada muy filosa de uno de sus guerreros -No te mato porque no quiero guerra con el reino azul, pero… Miro a Asier -Tu eres solo un sirviente del reino amarillo, tu vida no vale nada Dijo eso ultimo con una mirada fría de odio -Y ahora, yo misma, en mi debe de madre, te matare para librar a este mundo de la misma abominación que yo traje.

Diciendo eso alzo  su espada hacia Asier, yo me movía todo lo que podía intentando liberarme y salvar a mi novio, pero las cuerdas estaban muy bien amarradas, no podía soltarme, de un segundo a otro escuche.

-MUEREEEEEE

-NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO Grite sin poder hacer nada

De un momento a otro vi el hermoso cabello rubio de Asier manchado con el rojo de la sangre, de sus ojos, abiertos a más no poder, salía un mar de lágrimas mientras temblaba.

-ASSSSSSSIIIIIIIIIIIIERRRRRRR NOOOOOOOOOOOOOOO.

Bueno chicos y chicas esto ha sido todo por esta semana, nos veremos la próxima semana, los quiero mucho y espero ver sus comentarios por mis redes.

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Sobre Brazaletes Misteriosos note que al escribirlos algo me faltaba, estaba dejando muchas cosas por fuera, así que me tomare un tiempo para leer mis propios episodios y recordar que era lo que quería escribirles hace mas de 1 año cuando deje a medias mi serie, así que me tomare unas semanas mas para regresar con esa serie, pero esta serie si continuara con su entrega semanal ^_^

Si más nada que decir me despido.

Los espero y hasta la próxima ^_^