El sheriff mano dura final

Final de la misión del sheriff mano dura. spanking.

SHERIFF MANO DURA (3)

Cuando el sheriff y el alcalde corruptos fueron llevados a la cárcel, el Sheriff se dirigió al capataz.

-          SHERIFF: Usted puede marcharse para llevarle un mensaje a la viuda Carson, mañana la quiero a primera hora en la oficina del sheriff. Espero que sea obediente y venga, dígale que como me haga ir a buscarla su culo pagara las consecuencias. Qué edad tiene?

-          CAPATAZ: 62 años fue madre muy joven.

-          SHERIFF: Usted ha visto que no hago distingos de edad, sexo ni clase social para aplicar mis castigos, dígaselo así a la viuda, ella decidirá si viene por las buenas o quiere acabar en mis rodillas con el culo ardiendo.

A la mañana siguiente el sheriff espero en vano la llegada de la viuda, bastante contrariado cogió su caballo y se dirigió al rancho Carson. Cuando llego el capataz  salió a recibirlo.

-          CAPATAZ: Buenos días Sheriff

-          SHERIFF: Buenos días donde esta?

-          CAPATAZ: No está, no quiso hacerme caso, se ha marchado, afirmo que de ninguna manera le iba a dar al pueblo la satisfacción de verla detenida, ella es la dueña y señora del pueblo y esa imagen es la que debe quedar.

-          SHERIFF: Mala decisión ha tomado, es posible que deje otra imagen más humillante, que ser detenida.

El capataz le dijo que hacia una hora que había salido en dirección sur, con un carro en el que llevaba dinero y varios de sus enseres más valiosos, fruto de los largos años de extorsión y robo al que había sometido al pueblo.

Montando en su caballo, el sheriff pico espuelas saliendo a todo galope a detener a la viuda.

Casi una hora después, desde una loma pudo ver la nube de polvo que dejaba un carro que iba a buena velocidad, con la mirada busco un atajo para poder interceptarlo.

Margaret, la viuda Carson azuzaba a los caballos intentando poner la mayor distancia entre ella y el pueblo, cuando vio la figura de un hombre grande y fuerte que le bloqueaba el camino, el hombre con un par de disparos al aire consiguió que los caballos se detuvieran.

-          SHERIFF: Donde va con tanta prisa? La oficina del sheriff queda en la otra dirección y creo que usted tenía una cita allí.

-          MARGARET: No pensaría que iba a dejarme humillar siendo detenida delante de todo el pueblo.

El sheriff se acercó al carro y la ayudo a bajar.

-          SHERIFF: Veo que lleva el carro bien cargado de tesoros, está claro que le importa más su dinero que su hija y nieta.

-          MARGARET: Ellas saben cuidarse y este dinero es mío y no pienso perderlo.

-          SHERIFF: Su capataz no le dijo que pasaría si no acudía a la cita?

-          MARGARET: Decirme que? Sus amenazas de ser tratada como ellas? Ya me han dicho lo que usted se ha atrevido a hacer. Pero yo soy una señora de 62 años, podría ser su madre, no le creo capaz de tratarme así.

-          SHERIFF: Sabe que será juzgada por sus fechorías, va a pasar un largo tiempo a la sombra.

-          MARGARET: No podríamos llegar a un acuerdo? Tengo mucho dinero….

-          SHERIFF: Está intentando sobornarme? Si tenía alguna duda sobre su castigo, me la acaba de despejar, será castigada antes de que la lleve detenida al pueblo.

-          MARGARET: Aparte del dinero, sea inteligente puede salir muy beneficiado, es usted un hombre muy atractivo- dijo con una sonrisa seductora…

El sheriff sonrió, pensando, desde luego es la peor de las tres, no dudaba en ofrecerse sexualmente con tal de escapar.

-          SHERIFF: Interesante…quítese la falda.

La Sra. Carson llevaba una blusa y falda larga hasta los tobillos, sin dudarlo se desabrocho la falda quitándosela, no llevaba bragas sino uno de esos pantaloncitos interiores de tela blanca que se llevaban antiguamente. El sheriff pudo observar que aún era atractiva, tenía grandes pechos y por la abertura trasera del pantaloncito se observaban unas nalgas blancas y rotundas.

-          SHERIFF: Es usted una autentica víbora, es capaz de ofrecerse como una ramera con tal de salvar su dinero. Ya ha acumulado hasta tres motivos para que le aplique su merecido castigo, no tenga la menor duda que lo va a recibir de inmediato.

Margaret se puso muy nerviosa, veía que todos sus intentos eran baldíos y que ese animal estaba dispuesto a cumplir su amenaza de ponerla bocabajo en sus rodillas y azotarla como si de una niña se tratara…..ella que siempre había sido mimada y había recibido todos sus caprichos desde niña…..su mente se negaba a aceptarlo.

Desesperada salió corriendo, intentando escapar sin importarle lo ridícula de la imagen de correr en pantaloncitos y de no tener a donde ir…solo quería escapar del castigo.

El sheriff se sorprendió, conociendo su fama  creía que sería la más dura de las tres y veía con asombro que era la más cobarde de ellas.

Con unas rápidas zancadas la atrapo, la doblo por la cintura y sin esfuerzo la metió debajo de su brazo, ella golpeaba sus piernas pataleando y chillando como una cría.

-          MARGARET: No me pegueess!! Chillaba y lloriqueaba perdiendo la poca dignidad que le quedaba.

El Sheriff con mucha parsimonia (estaba disfrutando de la escena) la llevo en volandas hasta una piedra, se sentó y la acomodo bocabajo sobre su regazo y levanto su enorme mano….

Los chillidos se oían en todo el valle, el sheriff tuvo que reconocer su sorpresa ante el cambio que la viuda Carson había sufrido, pasando de ser una soberbia abuela madura a convertirse en una niñata que era azotada en las rodillas de su padre, así era su comportamiento.

Ayyy, ayyy,ayyy no me peguesss!!! Chillaba Margaret retorciéndose y pataleando en el regazo.

Los azotes caían sobre el maduro culito solo protegido por el liviano pantaloncito, eran fuertes y alternando cada nalga, las cuales estaban tomando un color rojo intenso.

-          SHERIFF: Que decepción pensaba que serias la más dura de las tres y eres más niña que tu nieta.

De un fuerte tirón le arranco el pantaloncito, dejándola totalmente desnuda de cintura para abajo, la dura palma de la mano del sheriff seguía castigando el blanco culo de la viuda, a cada azote sus nalgas se bamboleaban como un flan.

-          MARGARET: Para por favor!!! No me pegues maasss….lloriqueaba.

El sheriff no tuvo piedad, no la merecería y siguió azotándola durante mucho tiempo, hasta que las nalgas de la abuela pasaron del rojo al morado.

Acabado el castigo, la soltó y dijo que ya era hora de volver al pueblo, Margaret se frotaba con las dos manos su dolorido culito sintiendo que quemaba.

Fue a subirse al carro, el sheriff con un par de azotes la detuvo, le ato las manos, no viajaras ahí.

-          MARGARET: Voy a ir andando?

El sheriff rio de buena gana, viajaras aquí. Desde arriba del caballo tiro de sus brazos cruzándola bocabajo delante suyo, esta postura le permitía ver el aún hermoso culo de la viuda, aprovechando para acariciárselo según iban andando.

-          MARGARET: Por favor bájame de aquí, no puedo entrar en el pueblo así, sería la mayor humillación de mi vida.

El comentario volvió a provocar la risa del sheriff, que con un par de azotes acabo con la discusión.

La entrada en el pueblo fue apoteósica, la gente alucinaba al ver a la Señora y dueña del pueblo, la que los había hecho sufrir durante años, colgada como un fardo y con el culo desnudo terriblemente rojo, quedando muy claro el castigo que había recibido. La alegría era inmensa.

Paro el caballo delante la oficina del sheriff, cargo a la viuda en su hombro y entro, llevándola hacia los calabozos, Liz y Mary no pudieron evitar un gritito de asombro al ver como  su madre y abuela era llevada en el hombro del gigante y ver el color de sus nalgas.

A la mañana siguiente vinieron del juzgado de Tucson a por los detenidos, tuvieron que esperar un buen rato, ya que el sheriff no quiso perder la ocasión de repetir el castigo de las tres, la gente al oír sus chillidos y las palmadas sonreía con satisfacción.

FIN